Re: ¿SON LOS ESCRITOS DE ELENA PALABRA DE DIOS?
Estimado Dieght. Saludos cordiales.
Tú dices: Tristemente tienes toda la razon, es imposible que los que han sido totalmente alienados de la razon por las sectas.
Respondo: Dieght, al parecer has reconocido en este foro que provienes de los “Testigos”, considerados aquí como “secta”. Por lo tanto, podemos pensar que cuando dices: “es imposible que los que han sido totalmente alienados de la razon por las sectas”, te refieres a ti mismo y a los de tu grupo. ¿Es así?
Tú dices: “Sean un minimo razonables”
Respondo: Leyendo tus intervenciones, me parece que esto es así.
Tú dices: sin darse cuenta estan a años luz del cristianismo verdadero
Respondo: Para mi el cristianismo verdadero es seguir los pasos del Señor, hacer su voluntad (vivir como Él vivió), y predicar con palabras y hechos el mensaje que nos ordenó hacer, esto no por nosotros sino por que Él (Dios), pone el querer y hacer por su buena voluntad”.
Me gustaría saber ¿qué es para ti el Cristianismo Verdadero?
Tú escribes: “que como dice Santiago es: Sant 3:17*Pero la sabiduría de arriba es primeramente casta, luego pacífica, razonable, lista para obedecer, llena de misericordia y buenos frutos, sin hacer distinciones por parcialidad, sin ser hipócrita. 18*Además, en cuanto al fruto de la justicia, su semilla se siembra en condiciones pacíficas para los que están haciendo la paz.”
Estimado Dieght. ¿Por qué no has seleccionado las siguientes palabras? “lista para obedecer”; “sin hacer distinciones por parcialidad, sin ser hipócrita”.
¿Acaso no te gusta obedecer lo que dice la Palabra del Señor?
¿Acaso haces distinciones por parcialidad?
¿Acaso eres hipócrita?
Tú dices:”Estos hermanos en su arrogancia pensando ser los unicos y elegidos cristianos verdaderos, tratan con desden y menosprecio todo el que no cree en sus doctrinas completamente cargadas de fanatismo irrazonable.”
Respondo: Es LAMENTABLE tu juicio que es totalmente equivocado, ni lo uno ni lo otro. No tratamos ni con desdén ni menospreciamos al que no cree en el mensaje del Señor, además, debes saber que las doctrinas no están cargadas de fanatismo irrazonable, de allí que presumo que no comprendas el versículo que dice: “Jesús les respondió y dijo: Mi doctrina no es mía, sino de aquel que me envió. El que quiera hacer la voluntad de Dios, conocerá si la doctrina es de Dios, o si yo hablo por mi propia cuenta” Juan 7.16, 17
Precisamente de esa doctrina es la que debemos hablar y perseverar.
Tú dices: Por mas argumentos que se les den, solo alcanzan a ver enemigos y siervos de satanas en todos los que no crean como ellos creen, Dios les de la luz y buen juicio de los que adolecen.
Respondo: He leído tus argumentos, los he copiado y te has enojado conmigo por hacerlo, te comento que los encuentro errados y carente de juicio y luz. ¿No será que tú adoleces de ese buen juicio y luz que es tan manifiesto en tus escritos?
¿Piensas que por gritar y gritar, tus argumentos serán más creíbles y verdaderos?
Nota: En este foro, escribir con letras mayúsculas y a gran tamaño equivale a gritar.
Veamos quienes son los gritones: Elías y los Profetas de Baal
1 Reyes 18:17-40
Cuando Elías se fue a encontrarse con el rey Acab, Acab le dijo, "Así que tú eres el que trajo todo este desastre sobre Israel."
Elías respondió, "Yo no traje este desastre. Sino que fue por causa tuya y de tus parientes. Ustedes dejaron los mandamientos de Dios y adoraron los ídolos de Baal. Manda, pues, a todos los israelitas a reunirse conmigo en el monte Carmelo. Y traiga a los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal y a los cuatrocientos profetas de Asera que comen a la mesa de la reina Jezabel."
Por tanto, Acab llamó a todos los israelitas y reunió a todos los profetas en el monte Carmelo.
Entonces Elías se acercó a la gente y dijo, "¿Hasta cuándo van a estar indecisos entre dos opiniones? Si Dios es el verdadero Dios, síganlo. Pero si Baal es dios, entonces síganlo a él." Pero la gente no respondió ni una sola palabra.
También Elías dijo, "Yo soy el único profeta de Dios que queda, pero hay todavía cuatrocientos cincuenta profetas de Baal. Pues, traigan dos becerros. Los profetas de Baal pueden escoger uno y cortarlo en pedazos y ponerlo sobre la leña en el altar, pero sin encender fuego. Yo, por mi parte, haré lo mismo con el otro becerro. Entonces los profetas de Baal llamarán el nombre de su dios, y yo llamaré el nombre de Dios. El dios que responda enviando fuego, ese es el Dios verdadero."
"Bien dicho," respondió toda la gente.
Y Elías dijo a los profetas de Baal, "Ya que hay tantos de ustedes, escojan primero. Preparen el becerro y llamen el nombre de su dios, pero no enciendan fuego."
Así pues, ellos prepararon el becerro y lo pusieron sobre el altar. Luego ellos llamaron el nombre de Baal toda la mañana, gritando, "O Baal, contéstanos." Pero no recibieron respuesta. Y ellos saltaban alrededor del altar que habían hecho.
Al mediodía, Elías se burlaba de ellos. "Griten más fuerte, porque es un dios. Quizás esta meditando, o está haciendo sus necesidades, o esta de viaje. ¡Tal vez esté dormido y hay que despertarlo!" Por tanto, ellos gritaban más fuerte, y según su costumbre, se cortaban con cuchillos y espadas hasta quedar bañados en sangre. Ellos siguieron así toda la tarde hasta la hora del sacrificio de la tarde. Pero no hubo ninguna respuesta. Nadie contestó.
Entonces Elías llamó a la gente, "Acérquense a mí." Y toda la gente se acercó. Elías tomó doce piedras, uno para cada tribu de Israel, y con ellas, edificó de nuevo el altar de Dios que había sido derrumbado. Después, excavó una zanja alrededor del altar. Después, puso la leña sobre el altar, cortó el becerro en pedazos, y lo puso sobre la leña.
Entonces Elías dijo, "Llenen cuatro cántaros de agua, y derrámenla sobre el sacrificio y la leña.”
Luego dijo, "Háganlo de nuevo." Y ellos lo hicieron. "Háganlo una vez más." dijo. Y ellos lo hicieron la tercera vez. Y el agua corrió del altar y llenó la zanja también.
Cuando llegó la hora de ofrecer el sacrificio de la tarde, Elías se acercó y oró, "O Dios de Abraham, Isaac, y Jacob, demuestra que tú eres el Dios de Israel. Y que yo soy tu siervo, y que he hecho todo esto por mandato tuyo. Respóndeme, O Dios. Respóndeme de manera que esta gente sepa que tú eres Dios. Y haga que sus corazones vuelvan a ti." De repente, el fuego de Dios cayó y consumió el becerro, la leña, las piedras, el polvo y hasta lamió el agua de la zanja.
Al ver esto, toda la gente se postró en tierra y dijeron, "¡Dios es el verdadero Dios! ¡Dios es el verdadero Dios!"
Bendiciones.
Luego todo Israel será salvo.