-Los órganos de todo el mundo trepidarán hoy con los briosos acordes del "Castillo fuerte es nuestro Dios" de Martín Lutero, y todavía resonará en nuestros oídos el eco de los martillazos del fraile agustino clavando en la puerta de la capilla de Wittenberg sus 95 tesis. Gracias a Dios por aquel despertar ¡necesitamos otro hoy día!