Desde hace tiempo quería escribir este tema.
Para empezar, les recomiendo ver este video:
Ese video me puso en qué pensar. ¿El Jesús Eucarístico de los romanistas realmente es el verdadero Jesús de la Biblia? Yo creo que no. Muchos cristianos piensan que la tradición cristiana de la comunión es la misma que la tradición católica de la Eucaristía. Pero esto no es así. La Eucaristía (es decir, Transubstanciación), es un término católico para la comunión cuando el pan y el vino realmente se convierten en el cuerpo y la sangre de Jesucristo, por lo tanto, cuando se toman, el participante supuestamente experimenta la presencia de Dios. Estos elementos transformados se colocan en lo que se llama una custodia y luego pueden ser adorados como si adoraran a Dios mismo. Las implicaciones están ligadas a la salvación.
Con la Eucaristía, la salvación se vuelve sacramental (participación en un ritual) en oposición a la justificación por la fe en Cristo solamente. Si bien esta experiencia mística llamada Eucaristía no se puede sostener a través de las Escrituras, parece haber un aumento del interés de los cristianos evangélicos hacia esta práctica.
Es evidente que, en el catolicismo romano, el Jesús Sacramentado se adora como si fuera Dios mismo. Ahora bien, ¿esto es verdad?, la respuesta es NO. Con la adoración del Jesús Eucarístico estamos ante otro caso de Idolatría. En la Biblia no encontramos ni un solo ejemplo de los primeros cristianos adorando al “Jesús Eucarístico”. De hecho, el concepto de transubstanciación no tiene respaldo en la Escritura. La misma Biblia nos advierte sobre Cristos falsos:
“Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos. Ya os lo he dicho antes. Así que, si os dijeren: Mirad, está en el desierto, no salgáis; o mirad, está en los aposentos, no lo creáis.” (Mateo 24:24-26)
Ojo: Vean lo que dice ese verso. Ese verso dice que no debemos creer si alguien dice que Cristo está en el desierto o EN LOS APOSENTOS (un cuarto o una habitación). El Jesús Eucarístico de los romanistas cae perfectamente en esa categoría y por eso, los que somos cristianos no debemos creer en ese Jesús. Está claro que los romanistas están adorando a un Jesús falso.
Volviendo al tema de la idolatría, para Dios Padre es importantísimo que tengamos muy claro que a Él no le agradan las imágenes y las esculturas que interfieren la relación entre Él y Su pueblo, representen lo que representen. ¡¡ SI NI SIQUIERA DESEA QUE SE HAGAN IMÁGENES DE ÉL MISMO !! Él desea que nuestro servicio religioso sea regido por el poder de la fe, no por el poder de la imaginación.
No existe UN SOLO texto bíblico que indique que para adorar a Dios es necesario hacerlo a través de una imagen. Es mas, Dios mismo nos prohíbe hacernos imágenes de Él, ya que nos advierte que prevaricaríamos debido a que nunca lo hemos visto. Las imágenes y estatuas actúan como "muletas espirituales" que un verdadero hijo de Dios no necesita, ya que no mira con los ojos que tiene en la cabeza sino que ve la majestuosidad de Dios Padre Todopoderoso con los ojos espirituales que tiene en el corazón.
Definitivamente el católico romano que se postra ante ese “Jesús Sacramentado” está cometiendo un acto de idolatría como si se arrodillara y rindiera culto ante una piedra o un árbol y Dios ha dejado claro que está prohibido hacer imágenes incluso de Él mismo:
“Guardad, pues, mucho vuestras almas; pues ninguna figura visteis el día que Jehová habló con vosotros de en medio del fuego; para que no os corrompáis y hagáis para vosotros escultura, imagen de figura alguna, efigie de varón o hembra.” (Deuteronomio 4:15-16)
Los católicos eliminaron el segundo mandamiento que prohíbe el culto a imágenes y dividieron el décimo mandamiento en dos partes para tener 10 mandamientos otra vez. ¿Por qué eliminaron el segundo mandamiento?
Entonces está claro que este asunto del Jesús Eucarístico Católico y el tema del culto a las imágenes son puntos que demuestran que la ICAR NO es la Iglesia que Cristo fundó.
Bendiciones en Cristo.
Robespengler
Para empezar, les recomiendo ver este video:
Ese video me puso en qué pensar. ¿El Jesús Eucarístico de los romanistas realmente es el verdadero Jesús de la Biblia? Yo creo que no. Muchos cristianos piensan que la tradición cristiana de la comunión es la misma que la tradición católica de la Eucaristía. Pero esto no es así. La Eucaristía (es decir, Transubstanciación), es un término católico para la comunión cuando el pan y el vino realmente se convierten en el cuerpo y la sangre de Jesucristo, por lo tanto, cuando se toman, el participante supuestamente experimenta la presencia de Dios. Estos elementos transformados se colocan en lo que se llama una custodia y luego pueden ser adorados como si adoraran a Dios mismo. Las implicaciones están ligadas a la salvación.
Con la Eucaristía, la salvación se vuelve sacramental (participación en un ritual) en oposición a la justificación por la fe en Cristo solamente. Si bien esta experiencia mística llamada Eucaristía no se puede sostener a través de las Escrituras, parece haber un aumento del interés de los cristianos evangélicos hacia esta práctica.
Es evidente que, en el catolicismo romano, el Jesús Sacramentado se adora como si fuera Dios mismo. Ahora bien, ¿esto es verdad?, la respuesta es NO. Con la adoración del Jesús Eucarístico estamos ante otro caso de Idolatría. En la Biblia no encontramos ni un solo ejemplo de los primeros cristianos adorando al “Jesús Eucarístico”. De hecho, el concepto de transubstanciación no tiene respaldo en la Escritura. La misma Biblia nos advierte sobre Cristos falsos:
“Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos. Ya os lo he dicho antes. Así que, si os dijeren: Mirad, está en el desierto, no salgáis; o mirad, está en los aposentos, no lo creáis.” (Mateo 24:24-26)
Ojo: Vean lo que dice ese verso. Ese verso dice que no debemos creer si alguien dice que Cristo está en el desierto o EN LOS APOSENTOS (un cuarto o una habitación). El Jesús Eucarístico de los romanistas cae perfectamente en esa categoría y por eso, los que somos cristianos no debemos creer en ese Jesús. Está claro que los romanistas están adorando a un Jesús falso.
Volviendo al tema de la idolatría, para Dios Padre es importantísimo que tengamos muy claro que a Él no le agradan las imágenes y las esculturas que interfieren la relación entre Él y Su pueblo, representen lo que representen. ¡¡ SI NI SIQUIERA DESEA QUE SE HAGAN IMÁGENES DE ÉL MISMO !! Él desea que nuestro servicio religioso sea regido por el poder de la fe, no por el poder de la imaginación.
No existe UN SOLO texto bíblico que indique que para adorar a Dios es necesario hacerlo a través de una imagen. Es mas, Dios mismo nos prohíbe hacernos imágenes de Él, ya que nos advierte que prevaricaríamos debido a que nunca lo hemos visto. Las imágenes y estatuas actúan como "muletas espirituales" que un verdadero hijo de Dios no necesita, ya que no mira con los ojos que tiene en la cabeza sino que ve la majestuosidad de Dios Padre Todopoderoso con los ojos espirituales que tiene en el corazón.
Definitivamente el católico romano que se postra ante ese “Jesús Sacramentado” está cometiendo un acto de idolatría como si se arrodillara y rindiera culto ante una piedra o un árbol y Dios ha dejado claro que está prohibido hacer imágenes incluso de Él mismo:
“Guardad, pues, mucho vuestras almas; pues ninguna figura visteis el día que Jehová habló con vosotros de en medio del fuego; para que no os corrompáis y hagáis para vosotros escultura, imagen de figura alguna, efigie de varón o hembra.” (Deuteronomio 4:15-16)
Los católicos eliminaron el segundo mandamiento que prohíbe el culto a imágenes y dividieron el décimo mandamiento en dos partes para tener 10 mandamientos otra vez. ¿Por qué eliminaron el segundo mandamiento?
Entonces está claro que este asunto del Jesús Eucarístico Católico y el tema del culto a las imágenes son puntos que demuestran que la ICAR NO es la Iglesia que Cristo fundó.
Bendiciones en Cristo.
Robespengler