Re: ¿QUIENES VAN A SER SALVOS?
No he podido leer todo el tema y todos los mensajes, pero leyrndo los ultimos me entra una duda. Acaso, yo, como las muchisimas personas en el mundo que comparten mi idea y mi no-religion, somos seres diferentes a vosotros cristianos y creyentes? Me parece un tanto absurdo. Se supone, basandome en lo que se de religion, que todos, indistintamente, somos "hijos de Dios" (no se si es el termino adecuado, pido perdón).
Pd. Quiero reiterar como ya hecho en mas mensajes mios, que estoy en este foro por pura información e intercambio de opiniones. No vengo ni a insultar ni mucho menos para molestar.
Saludos.
Hola, gracias por participar, espero que esto te ayude a ampliar tu conocimiento:
Hijos cristianos de Dios. Como manifiesta Juan 1:11,*12, solo algunos de la nación de Israel, los que ejercieron fe en Cristo Jesús, recibieron la “autoridad de llegar a ser hijos de Dios”. El sacrificio de rescate de Cristo permitió que este “resto” judío (Ro 9:27; 11:5) dejara de estar bajo el pacto de la Ley, que, aunque era bueno y perfecto, los condenaba como pecadores, como esclavos bajo la custodia del pecado. De manera que Cristo los libertó para que pudieran recibir “la adopción de hijos” y llegar a ser ‘herederos gracias a Dios’. (Gál 4:1-7; compárese con Gál 3:19-26.)
Las personas de las naciones que antes estaban “sin Dios en el mundo” (Ef 2:12) también se reconciliaron con Él al ejercer fe en Cristo, y de este modo entraron en una relación de hijos. (Ro 9:8, 25,*26; Gál 3:26-29.)
Al igual que Israel, estos cristianos forman un pueblo que está bajo un pacto, pues se les introduce en el “nuevo pacto” validado por la aplicación de la sangre derramada de Cristo. (Lu 22:20; Heb 9:15.) Sin embargo, Dios mantiene una relación individual con los cristianos al aceptarlos en este pacto. Debido a que escuchan las buenas nuevas y ejercen fe, se les llama para que sean coherederos con el Hijo de Dios (Ro 8:17; Heb 3:1), Dios los ‘declara justos’ sobre la base de su fe en el rescate (Ro 5:1,*2) y, por consiguiente, ‘se les produce por la palabra de la verdad’ (Snt 1:18), de manera que ‘nacen de nuevo’ como cristianos bautizados, ungidos o engendrados por el espíritu de Dios como sus hijos. (Jn 3:3; 1Pe 1:3,*4.) Ellos han recibido, no*un espíritu de esclavitud, tal como el que resultó de la transgresión de Adán, sino un “espíritu de adopción como hijos, espíritu por el cual clamamos: ‘¡Abba, Padre!’”. El término “Abba” es un tratamiento íntimo y cariñoso. (Ro 8:14-17) Gracias a la superioridad del papel de Cristo como mediador y a su sacerdocio, así como a la bondad inmerecida que Dios expresa por medio de aquel, la condición de hijos de estos cristianos ungidos por espíritu es una relación con Dios más íntima que la del Israel carnal. (Heb 4:14-16; 7:19-25; 12:18-24.)
Saludos.