buen dia para todos mis hermanos...que Dios los bendiga!
Las Sagradas Escrituras nos dicen:
Si alguno enseña otra cosa, y no se conforma a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad, está envanecido, nada sabe, y delira acerca de cuestiones y contiendas de palabras, de las cuales nacen envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas, disputas necias de hombres corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de ganancia; apártate de los tales. (1ª Timoteo 6:3-5).
Espero que estas líneas no lastimen ninguno de sus sentimientos, sino antes engrandezca sus conocimientos.
¿Conoce realmente las tradiciones de ésta fiesta?
Era noche buena. Los niños habían hecho el pesebre y esperaban ansiosos la venida de Papá Noel cargado de regalos. Al amanecer del día 25 de diciembre encontraron una gran cantidad de paquetes con juguetes y dulces debajo de un flamante árbol de Navidad. Sus padres les aseguraban que todo aquello lo había traído Papá Noel durante la noche mientras ellos dormían.
¿Acaso dudaban los niños de lo que sus padres les decían? ¡Claro que no! Lo daban por hecho. ¿A usted no le sucedió lo mismo? Muy pocos se han detenido a pensar por qué creen lo que creen, por qué observan determinadas costumbres. La mayoría de nosotros aprendimos a aceptar todo sin vacilar. ¿Por qué sucede esto? ¿Por instinto ovejuno? No exactamente.
Por naturaleza tenemos la tendencia a hacer lo mismo que hacen los demás aunque estén equivocados. Las ovejas siguen el rebaño hasta el degolladero. Pero los humanos debemos fijarnos hacia dónde vamos.
La Navidad y su origen
La historia nos dice que al aceptar el emperador Constantino la doctrina de Jesús, de ahí en adelante empezó a cristianizar muchas festividades paganas.
Consultando algunas enciclopedias con relación al origen de esta fiesta, nos dicen que era conocida no con el nombre de Navidad, sino como "SATURNALIAS", celebrada por los romanos paganos, de los días 17 al 24 de diciembre y el 25 el nacimiento del dios sol.
LA ENCICLOPEDIA QUILLET dice: "La Navidad no figuraba entre las primeras fiestas de la iglesia antes del siglo V. El primer lugar donde se menciona una fecha de nacimiento de Jesucristo es en Egipto. San Clemente de Alejandría se asombró de que algunos teólogos egipcios hablaban no solamente del año, sino también del día en que ocurrió el nacimiento de Jesús, que suponían ser el 20 de mayo. Más tarde se creyó que Cristo había venido al mundo el 19 o 20 de abril o 6 de enero. La primera mención cierta del 25 de diciembre, aparece en el calendario de Filocalus en el año 254".
LA ENCICLOPEDIA BARSA dice lo siguiente: "Esta celebración se generalizó desde el siglo IV. Como no se conoce la fecha precisa del nacimiento de Jesús, la Iglesia Católica adoptó finalmente el 25 de diciembre y cristianizó festividades paganas, que en diversos pueblos se celebraban como la fiesta del sol y los carnavales de Saturno".
EN LA ENCICLOPEDIA HISPANO-AMERICANA, en el artículo de Carnavales dice así: "La fiesta del carnaval es muy anterior al cristianismo, su origen es indudablemente pagano..., los pueblos cristianos se apoderaron de muchos ritos, costumbres y fiestas paganas... En Grecia y en Roma se celebraban los bacanales o fiestas en honor a Baco, las saturnalias en honor a Saturno y la lupercales que se celebraban en el mes de enero en honor del dios Pan".
El verdadero origen de la Navidad
Hemos visto, pues, que la Navidad llegó al mundo por medio de la Iglesia Católica y que ella la recibió del paganismo. Ahora bien, ¿de donde la sacaron los paganos? ¿Cuál fue su verdadero origen?
Sabía Usted, que el originador de la fecha 25 de diciembre fue el bisnieto de Noé llamado Nimrod? ¿También que fue fundador de la ciudad de Babel y el primer hombre que los Babilonios y asirios consideraban un dios?
¿Sabia usted, que la fecha del 25 de diciembre no existe en ninguna parte de la Biblia y en que ninguna parte de ella se menciona el cumpleaños de Jesús, porque los verdaderos cristianos jamás celebraron los cumpleaños?
¿Sabía Usted, que los babilonios y asirios fueron los primeros en celebrar un cumpleaños el 25 de diciembre en esta tierra y fue para celebrar el nacimiento del legendario niño-dios Tamuz, supuesto hijo de Nimrod?
La historia nos dice que Ninus el primer rey de Nínive, fue Nimrod, el bisnieto de Noé. Nínive significa “la habitación de Ninus” y la Biblia nos dice que fue Nimrod quién construyó Nínive. Génesis 10:11 “De esta tierra salió para Asiria, y edificó Nínive, Rehobot, Cala”
Nimrod fue el primer rey que unificó al mundo después del diluvio en ciudades. Bajo su supervisión la torre de Babel, en desafío a Dios fue construida y también las antiguas ciudades de los Babilonios y Asirios, Génesis 10:10-12.
Nimrod el primer rey de Nínive fue el primer mortal a quien se le deificó a su muerte, y fue el actual padre de los dioses. Esta creencia pagana de que los reyes fueran deificados a su muerte fue adoptada desde Mesopotamia a Egipto y desde allí a Norte y Sudamérica.
Autoridades de Mitología y Arqueología aseguran lo que la Biblia revela, que fue en Babilonia donde toda la idolatría tuvo su origen y que los dioses de los Asirios, Egipcios, Hindúes, Griegos, Romanos y Mejicanos derivaron de la astrología.
Así todos estos dioses antiguos fueron solamente procedencia de un dios, el sol el que rige el Zodíaco.
Según la creencia de los babilónicos y los asirios, Nimrod el bisnieto de Noé, había muerto en plena juventud, dejando a su reina Semiramis. Al morir Nimrod, su espíritu voló al sol el que tomó posesión de él y llegó a ser inmortal. Así él llegó a ser Bel-saman o “Señor del Cielo” o dios sol. Semiramis según la creencia quedó embarazada. Esta proclamo a sus súbditos que siendo ella una virgen; el espíritu de Nimrod había bajado a ella y había entrado a su matriz a través de un rayo de sol. Esto dio por resultado el nacimiento del legendario dios niño llamado Tamuz, cuyo nacimiento ocurrió el 25 de diciembre.
Tamuz no solo fue adorado por los paganos bajo diferentes nombres, sino también por el pueblo de Dios, el antiguo Israel. Ezequiel 8:14 “Y me llevó a la entrada de la puerta de la casa de Jehová, que está al norte; y he aquí mujeres que estaban allí sentadas endechando a Tamuz”. Para los primeros habitantes del mundo después del diluvio, Nimrod el primer rey de Babel, su reina Semiramis y el milagroso nacimiento de su hijo Tamuz (hijo del sol) constituyeron la primera trinidad pagana.
Según la filosofía pagana cuando Semiramis murió, al igual que su esposo su espíritu voló a la luna y tomó posesión de ella y llegó a ser la diosa de la luna; la madre de los dioses y la Reina del cielo. Y cuando su hijo dios Tamuz murió, los paganos también aseguraban que su espíritu voló a la estrella del Este (Venus) y que en primavera aparecía toda la familia unida: Nimrod, Semiramis y Tamuz.
Así fue como en los siglos cuarto y quinto, mientras los paganos del mundo romano se convertían en masa al “cristianismo” llevando consigo sus antiguas creencias y costumbres paganas y disimulándolas bajo nombres cristianos, se popularizó también la idea de “la madre y el hijo”, especialmente en época de Navidad. Las tarjetas de Navidad, los villancicos y las escenas del pesebre reflejan este mismo tema.
Quienes fuimos criados en este mundo babilónico, quienes hemos escuchado y aceptado estas cosas durante toda la vida, hemos aprendido a venerarlas como algo sagrado. Jamás dudamos. Jamás nos detuvimos a investigar si estas costumbres tenían su origen en la Biblia o en la idolatría pagana.
Nos asombramos al conocer la verdad y, desgraciadamente, hay quienes se ofenden ante la verdad escueta. Pero Dios ordena a sus ministros fieles: “Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta y anuncia a mi pueblo su rebelión” (Isaías 58.1). Increíble como parezca, estos son hechos reales en la historia y en la Biblia.
El verdadero origen de la Navidad está en la antigua Babilonia. ¡Está envuelto en la apostasía organizada que ha mantenido engañado al mundo desde hace muchos siglos! En Egipto siempre se creyó que el hijo de Isis (nombre egipcio de la “reina del cielo”) nació un 25 de diciembre. Los paganos en todo el mundo conocido celebraron esta fecha siglos antes del nacimiento de Jesucristo.
Jesús el verdadero Mesías, no nació un 25 de diciembre. Los apóstoles y la Iglesia primitiva jamás celebraron el natalicio de Cristo en esa fecha ni en ninguna otra. No existe en la Biblia mandato ni instrucción alguna para hacerlo. Así fue como los “misterios caldeos”, inventados por la esposa de Nimrod nos fueron legados - con nuevos nombres cristianos por las religiones paganas.
Origen Del Árbol De Navidad
¿Se ha preguntado usted, Alguna vez que tiene que ver el árbol de la navidad con el nacimiento de Jesús? ¿O porqué se usan arbolitos de pinos? ¿O porqué se colocan ornamentos en ellos. Por supuesto que nada de esto tiene que ver con el nacimiento del Amado Salvador sino con el nacimiento del mesías pagano: el niño dios Tamuz. Otro nombre que los babilonios daban a Tamuz era Baal-Bereth que significa “Señor del Pino” (Lord of the Fir Tree).
Según los babilonios, Nimrod había sido cortado o asesinado en el vigor de su juventud, en todo su poder y gloria. Su muerte debía ser vengada por la encarnación de su hijo Tamuz nacido el 25 de diciembre. Nimrod el gran dios sol de los babilonios fue simbolizado como un inmenso árbol despojado de todas sus ramas, y cortado casi al suelo. Pero la gran serpiente el símbolo del restaurador de vida Aesculapius, se enrolla alrededor del tronco muerto, allí, a su lado, brota un árbol joven, un árbol completamente diferente, que está destinado a nunca ser cortado por el poder del enemigo. Este árbol es la palmera y llega a ser el símbolo de Tamuz, el mesías pagano, símbolo de victoria. Esto explica la costumbre pagana de colgar las cabezas de sus enemigos en sus sagrados árboles. Porque esto no solamente explicaba un signo de victoria, sino también de venganza no solo de Nimrod, sino también de Tamuz porque según la mitología babilónica ambos habían sido muertos cuando eran jóvenes y llenos de vigor.
Fue en la espesa selva del norte de Europa, que comenzó la costumbre de decorar el árbol de navidad.
En el siglo octavo un monje católico llamado Bonifacio, persuadió a los pueblos paganos que vivían en lo que ahora es Alemania, que dejaran de adornar y adorar al sagrado roble en honor al dios Odin (moderno santa Claus) y que adornaran el pino (Fir Tree) en honor del niño Jesús.
¿Honra a Cristo realmente?
Ahora veamos un argumento utilizado con frecuencia para justificar la observancia de la Navidad.
Hay quienes insisten en que a pesar de tener sus raíces en una costumbre pagana, ahora no se observa la Navidad para honrar a un falso dios, el dios Sol, sino para honrar a Jesucristo.
¿Que nos dice la palabra de Dios al respecto? “No caigas en la trampa detrás de ellos [los pueblos paganos] no consultes a sus dioses ni averigües como les daban culto dichos pueblos, para hacer tú lo mismo. Tú no harás lo mismo con el Señor, tu Dios, porque ellos hacían a sus dioses cosas que detesta y abomina el Señor” (Deuteronomio 12.30-31, Nueva Biblia Española).
Asimismo, el profeta Jeremías nos advierte con respecto a las costumbres tradicionales de la sociedad que nos rodea: “Dice el Señor: No imitéis la conducta de los paganos… Los ritos de esos pueblos son falsos” (Jeremías 10.2-3, Nueva Biblia Española).
De nuevo, Jesús dijo: “Pues en vano me honran, enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres” (Mateo 15.9). La observancia de la Navidad es un mandamiento de hombres y esto lo ha prohibido Dios. Jesucristo dijo además: “Así habéis invalidado el mandamiento de Dios por vuestra tradición” (Mateo 15.6).
Esto es precisamente lo que hacen hoy millones de personas. Desechan el mandamiento de Dios. Su mandamiento con respecto a la celebración de costumbres paganas para honrar o adorar a Dios es clarísimo: “Tú no harás lo mismo con el Señor, tu Dios”. Sin embargo, la mayoría de la personas toman a la ligera este mandamiento y lo invalidan siguiendo la tradición de los hombres al observar la Navidad.
¡No nos equivoquemos! Dios nos permite desobedecer. Nos permite seguir las costumbres de los hombres. Nos permite pecar. Pero también nos advierte que habrá un día de juicio en el que ¡segaremos lo que hayamos sembrado! Jesucristo fue la Palabra viviente y personal de Dios, y la Biblia es la Palabra de Dios escrita. ¡Por esas palabras seremos juzgados para toda la eternidad! No debemos hacer caso omiso de ellas ni tomarlas a la ligera.
bien hermanos...que Dios les bendiga...
-fuentes:http://www.elevangelioeterno.com/site/v4/la_navidad.html
Las Sagradas Escrituras nos dicen:
Si alguno enseña otra cosa, y no se conforma a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad, está envanecido, nada sabe, y delira acerca de cuestiones y contiendas de palabras, de las cuales nacen envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas, disputas necias de hombres corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de ganancia; apártate de los tales. (1ª Timoteo 6:3-5).
Espero que estas líneas no lastimen ninguno de sus sentimientos, sino antes engrandezca sus conocimientos.
¿Conoce realmente las tradiciones de ésta fiesta?
Era noche buena. Los niños habían hecho el pesebre y esperaban ansiosos la venida de Papá Noel cargado de regalos. Al amanecer del día 25 de diciembre encontraron una gran cantidad de paquetes con juguetes y dulces debajo de un flamante árbol de Navidad. Sus padres les aseguraban que todo aquello lo había traído Papá Noel durante la noche mientras ellos dormían.
¿Acaso dudaban los niños de lo que sus padres les decían? ¡Claro que no! Lo daban por hecho. ¿A usted no le sucedió lo mismo? Muy pocos se han detenido a pensar por qué creen lo que creen, por qué observan determinadas costumbres. La mayoría de nosotros aprendimos a aceptar todo sin vacilar. ¿Por qué sucede esto? ¿Por instinto ovejuno? No exactamente.
Por naturaleza tenemos la tendencia a hacer lo mismo que hacen los demás aunque estén equivocados. Las ovejas siguen el rebaño hasta el degolladero. Pero los humanos debemos fijarnos hacia dónde vamos.
La Navidad y su origen
La historia nos dice que al aceptar el emperador Constantino la doctrina de Jesús, de ahí en adelante empezó a cristianizar muchas festividades paganas.
Consultando algunas enciclopedias con relación al origen de esta fiesta, nos dicen que era conocida no con el nombre de Navidad, sino como "SATURNALIAS", celebrada por los romanos paganos, de los días 17 al 24 de diciembre y el 25 el nacimiento del dios sol.
LA ENCICLOPEDIA QUILLET dice: "La Navidad no figuraba entre las primeras fiestas de la iglesia antes del siglo V. El primer lugar donde se menciona una fecha de nacimiento de Jesucristo es en Egipto. San Clemente de Alejandría se asombró de que algunos teólogos egipcios hablaban no solamente del año, sino también del día en que ocurrió el nacimiento de Jesús, que suponían ser el 20 de mayo. Más tarde se creyó que Cristo había venido al mundo el 19 o 20 de abril o 6 de enero. La primera mención cierta del 25 de diciembre, aparece en el calendario de Filocalus en el año 254".
LA ENCICLOPEDIA BARSA dice lo siguiente: "Esta celebración se generalizó desde el siglo IV. Como no se conoce la fecha precisa del nacimiento de Jesús, la Iglesia Católica adoptó finalmente el 25 de diciembre y cristianizó festividades paganas, que en diversos pueblos se celebraban como la fiesta del sol y los carnavales de Saturno".
EN LA ENCICLOPEDIA HISPANO-AMERICANA, en el artículo de Carnavales dice así: "La fiesta del carnaval es muy anterior al cristianismo, su origen es indudablemente pagano..., los pueblos cristianos se apoderaron de muchos ritos, costumbres y fiestas paganas... En Grecia y en Roma se celebraban los bacanales o fiestas en honor a Baco, las saturnalias en honor a Saturno y la lupercales que se celebraban en el mes de enero en honor del dios Pan".
El verdadero origen de la Navidad
Hemos visto, pues, que la Navidad llegó al mundo por medio de la Iglesia Católica y que ella la recibió del paganismo. Ahora bien, ¿de donde la sacaron los paganos? ¿Cuál fue su verdadero origen?
Sabía Usted, que el originador de la fecha 25 de diciembre fue el bisnieto de Noé llamado Nimrod? ¿También que fue fundador de la ciudad de Babel y el primer hombre que los Babilonios y asirios consideraban un dios?
¿Sabia usted, que la fecha del 25 de diciembre no existe en ninguna parte de la Biblia y en que ninguna parte de ella se menciona el cumpleaños de Jesús, porque los verdaderos cristianos jamás celebraron los cumpleaños?
¿Sabía Usted, que los babilonios y asirios fueron los primeros en celebrar un cumpleaños el 25 de diciembre en esta tierra y fue para celebrar el nacimiento del legendario niño-dios Tamuz, supuesto hijo de Nimrod?
La historia nos dice que Ninus el primer rey de Nínive, fue Nimrod, el bisnieto de Noé. Nínive significa “la habitación de Ninus” y la Biblia nos dice que fue Nimrod quién construyó Nínive. Génesis 10:11 “De esta tierra salió para Asiria, y edificó Nínive, Rehobot, Cala”
Nimrod fue el primer rey que unificó al mundo después del diluvio en ciudades. Bajo su supervisión la torre de Babel, en desafío a Dios fue construida y también las antiguas ciudades de los Babilonios y Asirios, Génesis 10:10-12.
Nimrod el primer rey de Nínive fue el primer mortal a quien se le deificó a su muerte, y fue el actual padre de los dioses. Esta creencia pagana de que los reyes fueran deificados a su muerte fue adoptada desde Mesopotamia a Egipto y desde allí a Norte y Sudamérica.
Autoridades de Mitología y Arqueología aseguran lo que la Biblia revela, que fue en Babilonia donde toda la idolatría tuvo su origen y que los dioses de los Asirios, Egipcios, Hindúes, Griegos, Romanos y Mejicanos derivaron de la astrología.
Así todos estos dioses antiguos fueron solamente procedencia de un dios, el sol el que rige el Zodíaco.
Según la creencia de los babilónicos y los asirios, Nimrod el bisnieto de Noé, había muerto en plena juventud, dejando a su reina Semiramis. Al morir Nimrod, su espíritu voló al sol el que tomó posesión de él y llegó a ser inmortal. Así él llegó a ser Bel-saman o “Señor del Cielo” o dios sol. Semiramis según la creencia quedó embarazada. Esta proclamo a sus súbditos que siendo ella una virgen; el espíritu de Nimrod había bajado a ella y había entrado a su matriz a través de un rayo de sol. Esto dio por resultado el nacimiento del legendario dios niño llamado Tamuz, cuyo nacimiento ocurrió el 25 de diciembre.
Tamuz no solo fue adorado por los paganos bajo diferentes nombres, sino también por el pueblo de Dios, el antiguo Israel. Ezequiel 8:14 “Y me llevó a la entrada de la puerta de la casa de Jehová, que está al norte; y he aquí mujeres que estaban allí sentadas endechando a Tamuz”. Para los primeros habitantes del mundo después del diluvio, Nimrod el primer rey de Babel, su reina Semiramis y el milagroso nacimiento de su hijo Tamuz (hijo del sol) constituyeron la primera trinidad pagana.
Según la filosofía pagana cuando Semiramis murió, al igual que su esposo su espíritu voló a la luna y tomó posesión de ella y llegó a ser la diosa de la luna; la madre de los dioses y la Reina del cielo. Y cuando su hijo dios Tamuz murió, los paganos también aseguraban que su espíritu voló a la estrella del Este (Venus) y que en primavera aparecía toda la familia unida: Nimrod, Semiramis y Tamuz.
Así fue como en los siglos cuarto y quinto, mientras los paganos del mundo romano se convertían en masa al “cristianismo” llevando consigo sus antiguas creencias y costumbres paganas y disimulándolas bajo nombres cristianos, se popularizó también la idea de “la madre y el hijo”, especialmente en época de Navidad. Las tarjetas de Navidad, los villancicos y las escenas del pesebre reflejan este mismo tema.
Quienes fuimos criados en este mundo babilónico, quienes hemos escuchado y aceptado estas cosas durante toda la vida, hemos aprendido a venerarlas como algo sagrado. Jamás dudamos. Jamás nos detuvimos a investigar si estas costumbres tenían su origen en la Biblia o en la idolatría pagana.
Nos asombramos al conocer la verdad y, desgraciadamente, hay quienes se ofenden ante la verdad escueta. Pero Dios ordena a sus ministros fieles: “Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta y anuncia a mi pueblo su rebelión” (Isaías 58.1). Increíble como parezca, estos son hechos reales en la historia y en la Biblia.
El verdadero origen de la Navidad está en la antigua Babilonia. ¡Está envuelto en la apostasía organizada que ha mantenido engañado al mundo desde hace muchos siglos! En Egipto siempre se creyó que el hijo de Isis (nombre egipcio de la “reina del cielo”) nació un 25 de diciembre. Los paganos en todo el mundo conocido celebraron esta fecha siglos antes del nacimiento de Jesucristo.
Jesús el verdadero Mesías, no nació un 25 de diciembre. Los apóstoles y la Iglesia primitiva jamás celebraron el natalicio de Cristo en esa fecha ni en ninguna otra. No existe en la Biblia mandato ni instrucción alguna para hacerlo. Así fue como los “misterios caldeos”, inventados por la esposa de Nimrod nos fueron legados - con nuevos nombres cristianos por las religiones paganas.
Origen Del Árbol De Navidad
¿Se ha preguntado usted, Alguna vez que tiene que ver el árbol de la navidad con el nacimiento de Jesús? ¿O porqué se usan arbolitos de pinos? ¿O porqué se colocan ornamentos en ellos. Por supuesto que nada de esto tiene que ver con el nacimiento del Amado Salvador sino con el nacimiento del mesías pagano: el niño dios Tamuz. Otro nombre que los babilonios daban a Tamuz era Baal-Bereth que significa “Señor del Pino” (Lord of the Fir Tree).
Según los babilonios, Nimrod había sido cortado o asesinado en el vigor de su juventud, en todo su poder y gloria. Su muerte debía ser vengada por la encarnación de su hijo Tamuz nacido el 25 de diciembre. Nimrod el gran dios sol de los babilonios fue simbolizado como un inmenso árbol despojado de todas sus ramas, y cortado casi al suelo. Pero la gran serpiente el símbolo del restaurador de vida Aesculapius, se enrolla alrededor del tronco muerto, allí, a su lado, brota un árbol joven, un árbol completamente diferente, que está destinado a nunca ser cortado por el poder del enemigo. Este árbol es la palmera y llega a ser el símbolo de Tamuz, el mesías pagano, símbolo de victoria. Esto explica la costumbre pagana de colgar las cabezas de sus enemigos en sus sagrados árboles. Porque esto no solamente explicaba un signo de victoria, sino también de venganza no solo de Nimrod, sino también de Tamuz porque según la mitología babilónica ambos habían sido muertos cuando eran jóvenes y llenos de vigor.
Fue en la espesa selva del norte de Europa, que comenzó la costumbre de decorar el árbol de navidad.
En el siglo octavo un monje católico llamado Bonifacio, persuadió a los pueblos paganos que vivían en lo que ahora es Alemania, que dejaran de adornar y adorar al sagrado roble en honor al dios Odin (moderno santa Claus) y que adornaran el pino (Fir Tree) en honor del niño Jesús.
¿Honra a Cristo realmente?
Ahora veamos un argumento utilizado con frecuencia para justificar la observancia de la Navidad.
Hay quienes insisten en que a pesar de tener sus raíces en una costumbre pagana, ahora no se observa la Navidad para honrar a un falso dios, el dios Sol, sino para honrar a Jesucristo.
¿Que nos dice la palabra de Dios al respecto? “No caigas en la trampa detrás de ellos [los pueblos paganos] no consultes a sus dioses ni averigües como les daban culto dichos pueblos, para hacer tú lo mismo. Tú no harás lo mismo con el Señor, tu Dios, porque ellos hacían a sus dioses cosas que detesta y abomina el Señor” (Deuteronomio 12.30-31, Nueva Biblia Española).
Asimismo, el profeta Jeremías nos advierte con respecto a las costumbres tradicionales de la sociedad que nos rodea: “Dice el Señor: No imitéis la conducta de los paganos… Los ritos de esos pueblos son falsos” (Jeremías 10.2-3, Nueva Biblia Española).
De nuevo, Jesús dijo: “Pues en vano me honran, enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres” (Mateo 15.9). La observancia de la Navidad es un mandamiento de hombres y esto lo ha prohibido Dios. Jesucristo dijo además: “Así habéis invalidado el mandamiento de Dios por vuestra tradición” (Mateo 15.6).
Esto es precisamente lo que hacen hoy millones de personas. Desechan el mandamiento de Dios. Su mandamiento con respecto a la celebración de costumbres paganas para honrar o adorar a Dios es clarísimo: “Tú no harás lo mismo con el Señor, tu Dios”. Sin embargo, la mayoría de la personas toman a la ligera este mandamiento y lo invalidan siguiendo la tradición de los hombres al observar la Navidad.
¡No nos equivoquemos! Dios nos permite desobedecer. Nos permite seguir las costumbres de los hombres. Nos permite pecar. Pero también nos advierte que habrá un día de juicio en el que ¡segaremos lo que hayamos sembrado! Jesucristo fue la Palabra viviente y personal de Dios, y la Biblia es la Palabra de Dios escrita. ¡Por esas palabras seremos juzgados para toda la eternidad! No debemos hacer caso omiso de ellas ni tomarlas a la ligera.
bien hermanos...que Dios les bendiga...
-fuentes:http://www.elevangelioeterno.com/site/v4/la_navidad.html