|| EL FALSO PROFETA MAHOMA ORDENÓ LA CONQUISTA GLOBAL MEDIANTE LA YIHAD ISLÁMICA:
TE UNES AL ISLAM O TE MUERES
El mensaje de Mahoma no dejaba lugar a la ambigüedad para los musulmanes: no se trataba sólo de gobernar una ciudad, apoderarse de un estado o conformarse con un solo país.
Su visión se extendía mucho más allá de estos límites y articuló inequívocamente su misión de trascender continentes. El mandato de Mahoma era muy claro: su objetivo era nada menos que una conquista islámica global.
El Islam es un movimiento global, cuyo objetivo es someter a todos los seres humanos vivos del planeta a su aplastante régimen totalitario, como nunca antes se había visto.
El objetivo del Islam es obligar a todos los pueblos del mundo a someterse. "Sumisión" es el significado de la palabra "Islam". A los ojos del Islam, si el mundo quiere tener paz, entonces tiene que someterse al dominio islámico.
En palabras de Mahoma: "Se me ha ordenado luchar contra el pueblo hasta que digan: 'Nadie tiene derecho a ser adorado excepto Alá'. Y si ellos lo dicen, oren como nuestras oraciones, enfrenten nuestra Qibla y masacren como nosotros masacramos, entonces su sangre y sus propiedades serán sagradas para nosotros, y no interferiremos con ellos..." (Bujari 8:387)
Este impulso no es simplemente la base de las campañas terroristas modernas contra los infieles occidentales (e hindúes y budistas), sino también la indiferencia generalizada mostrada por los musulmanes en todo el mundo ante la violencia, que es un flagrante facilitador.
Ningún otro movimiento en la historia, ni siquiera el fascismo o el comunismo, ha estado tan decidido a conquistar el mundo e imponer un control tan completo y detallado sobre la vida cotidiana de todos los habitantes del planeta. El Islam cuenta con un plan multifacético para lograr este objetivo y su implementación está teniendo cada vez más éxito en todo el mundo.
Es hora de que todos los no musulmanes reconozcan y rechacen el Islam, que tiene como mandamiento central borrar al infiel (ese eres TÚ) de la faz de la tierra.
El problema (que también) no es que los palestinos hayan sido educados en el odio y exterminio de los judíos, de los infieles, y en considerar a las mujeres poco más que ganado: el problema es que esos patrones se repiten también entre las comunidades musulmanas occidentales.
¿Qué debe albergar la cabeza de alguien que exhibe y celebra orgulloso los cuerpos de civiles torturados, masacrados por los terroristas?