Originalmente enviado por: OSO
Dios les bendiga Aracely y Gabaon.
¡"bástate mi gracia"! le recuera Dios a Pablo, pues en esa tu debilidad es que Jesús puede hacer la obra, para que no sea "tu" obra, sino Su obra, y tuyo el fruto.
Tremendo el capítulo 7 de la carta a los romanos. Para fortuna nuestra se escribió tambien el capítulo 8; leámolos con un poco mas de detenimiento; creo que nos hace falta, siempre recordarlo.
El "bástate" es un ya basta Pablo...deja de mortificarte y permiteme ser quien haga lo que debo hacer.
Es un golpe tremendo hermanos...un golpe a nuestro ego; reconocer que pecamos, reconocer que no podmos salir por nuestros propios medios y reconocer que dependemos siempre y en todas formas posibles...como prisioneros en el amor de Cristo.
Querer pero no poder...porque ¿que es peor? caer y ser levantado o resisitir con nuestras propias fuerzas al pecado como si pudiésemos de algun modo. Imagina que cualquiera de nosotros pudiese vencer el pecado, en vano murió Jesús, pero El venció el pecado...y la muerte y venció toda potestad y todo edicto contrario a nosotros.
El dilema no es como "vencer" el pecado, pues es Jesús el vencedor, sino mas bien como poder vencer en Jesús aquello que conocemos como pecado.
Podriamos abstenernos, darle la vuelta a algo...pero ¿eso es realmente vencer? ¿no será mas bien aplazar las cosas? No dejarnos vencer por el mal, sino vencer el mal con el bien...¿y como es eso? Empezando por reconocer que nustro mas grande bien, es Jesús, si el es por nosotros ¿quien contra nosotros? y en ese "quien", nos incluye a nosotros mismos.
He aqui una de las claves del cristianismo, si, de "esa forma de doctrina" de la cuq enos habla Pablo (Ro 6:17): No poner nuestra confianza en nosotros mismos ni en nadie mas sino en Jesús y reconocer como reconoció el profeta "conozco, ho Jehová, que el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina ordenar sus pasos" (Jer 10:23), pues como señala la escritura "no puede el hombre recibir nada, sino le fuere dado del cielo", pues nuestra competencia porviene de Dios (2Cor 3:15).
Y esto de que pro-viene ¿que significa sino que primeramente nos fue dada. Una competencia total que solo es posible en Cristo Jesús: "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece". Nuevamente "eta forma de doctrina" nos lleva a depender mas y mas de El..."preso en el Señor"...no hay otro comino, ni otra salida.
Y en esto es glorificado El, en que es Su gracia y Su paciencia, la que actua en nosotros no para "mortificarnos", "flajelarnos", "castigarnos" ni autocompadecernos, deprimirnos, ni entristecernos, ni dudemos, sino para que realmente crucifiquemos nuestra mente y cuerpo y todo nuestro ser en la cruz y esto por el poder de Dios y no por nuestra propia competencia.
Esto es un escándalo. Esta "forma de doctrina" es la antítesis de cualquier otra religión, la doctrina de la gracia el hombre no lo soporta. No lo puede creer, tiene que hacer algo, su conciencia lo acusa, debe hacer algo y pronto...duda, se esfuerza...y tamben lamentablemente cae. Y no digo que no es bueno que se esfuerce alguien, pero que se esfuerc een el Señor y para el Señor, no en sus propias fuerzas, sus propias metas, objetivos, y demas maneras de "ayudar" en la obra expiatoria que Cristo Jesús hizo y consumó en la cruz del Calvario.
El Señor en su amor, vuelve a mostrarle el camino al pecador y le levanta...y así, hasta tocar fondo y reconocer de una buena vez que "no es por obras", "no es del que corre", "ni del que se apresura"...es por la sola vountad de Dios que nosotros empezamos a reconocer, comprender, creer y vivir que la unica forma de vencer la ley del pecado de Ro 7, es con la ley de Cristo de Romanos 8, que es conforme al Espiritu. Conforme a "esta forma de doctrina"
...estamos, en tanto un saludo con osculo santo.