Re: ¿Por que predican los TJ? ¿Por amor, obligación o interés?
Por lo que he entendido desde que voy conociendo a los testigos, ellos predican por obligación. Lo que obviamente descarta "ipso facto" las otras dos opciones que tu propones.
Ellos creen -al igual que el "adquirir conocimiento"- que predicar es parte de la salvación de ellos, es decir, mientras prediquen y adquieran conocimiento (intelectual de las Escrituras) ellos "aseguran" así su salvación.
Y en cuanto a las horas que ""predican"", (lo pongo en doble comillas), no sabía que las contabilizaban; pero lo que si se, es que para contarlas, amañan el procedimiento.
Primero, ellos, al salir a las calles e ir de casa en casa le llaman "predicar"... Lo que está nada más lejos de la realidad;... te explico... Si ellos salen dos horas a "predicar"... quizás, escasamente (eso es variable), predicarán unos veinte minutos... ¿donde quedan los otros cien minutos?.
Para salir a "predicar", parten caminando parsimoniosamente, es decir "a paso de tortuga", y... al primer paso hacia el ir a "predicar"... ¡comienza la conversa!... ¡¡¡se van todo el camino conversando!!!!.. especialmente las mujeres... los hombres, conversan menos, porque generalmente son huraños y enojones... así es que poco platican... las mujeres parecen cotorras...
Luego, golpean en la casa asignada, ¡toc..toc..toc..! (golpes muy leves).. y siguen con la amena y profunda conversación... de modas,... de la casa, ...del vecino... del hermano... de recetas etc. etc. etc. en ésto; cinco minutos hasta llegar a la primera casa más otros cinco de espera, hasta volver a golpear en la casa... ya llevamos diez minutos... Vuelven a golpear... y sigue la interesantísima conversación ... cinco minutos más... (sin inquietarse mayormente por que les habrán, el asunto es que ellas, mientras esperan... están ""predicando"" por tanto, ya llevan quince a veinte minutos "contabilizados" para las horas exigidas de "predicación".... Luego, dan una última mirada inquisidora hacia la casa en cuestión.. y se retiran..tan parsimoniosamente como llegaron... y así... sigue el círculo vicioso... así... hasta completar las dos horas programadas de ""predicación""...
En total, si se visitaron veinte casas, en dos o tres les abrieron de malas ganas, en tres casas no había nadie; y en el resto, simplemente no les quisieron abrir.
Resumen, en esas dos o tres casas que sí les atendieron, tenemos los veinte minutos de real ejercicio de lo que ellos llaman predicar.... los otros cien minutos... conversa...conversa... conversa... conversa y etc. etc. de conversa...
Lo cierto estimado David, es que lo poco que hacen de su peculiar forma de predicar, es por obligación (por ser salvos ellos mismos)
Dios te bendiga
Estimado DavidPaz y bendición a todos.
Este epígrafe no lleva la intención de generalizar, pues seria ilógico y deshonesto hacerlo.
Sin embargo, creo que la gran mayoría de ellos, no lo hace con el sentido único de salvar a otras personas. Detrás de las horas entregadas mensualmente existen otras razones, y creo que se podrían demostrar de manera evidente.
Aquí si espero a los TJ. !Bien llegados sean!
David
Por lo que he entendido desde que voy conociendo a los testigos, ellos predican por obligación. Lo que obviamente descarta "ipso facto" las otras dos opciones que tu propones.
Ellos creen -al igual que el "adquirir conocimiento"- que predicar es parte de la salvación de ellos, es decir, mientras prediquen y adquieran conocimiento (intelectual de las Escrituras) ellos "aseguran" así su salvación.
Y en cuanto a las horas que ""predican"", (lo pongo en doble comillas), no sabía que las contabilizaban; pero lo que si se, es que para contarlas, amañan el procedimiento.
Primero, ellos, al salir a las calles e ir de casa en casa le llaman "predicar"... Lo que está nada más lejos de la realidad;... te explico... Si ellos salen dos horas a "predicar"... quizás, escasamente (eso es variable), predicarán unos veinte minutos... ¿donde quedan los otros cien minutos?.
Para salir a "predicar", parten caminando parsimoniosamente, es decir "a paso de tortuga", y... al primer paso hacia el ir a "predicar"... ¡comienza la conversa!... ¡¡¡se van todo el camino conversando!!!!.. especialmente las mujeres... los hombres, conversan menos, porque generalmente son huraños y enojones... así es que poco platican... las mujeres parecen cotorras...
Luego, golpean en la casa asignada, ¡toc..toc..toc..! (golpes muy leves).. y siguen con la amena y profunda conversación... de modas,... de la casa, ...del vecino... del hermano... de recetas etc. etc. etc. en ésto; cinco minutos hasta llegar a la primera casa más otros cinco de espera, hasta volver a golpear en la casa... ya llevamos diez minutos... Vuelven a golpear... y sigue la interesantísima conversación ... cinco minutos más... (sin inquietarse mayormente por que les habrán, el asunto es que ellas, mientras esperan... están ""predicando"" por tanto, ya llevan quince a veinte minutos "contabilizados" para las horas exigidas de "predicación".... Luego, dan una última mirada inquisidora hacia la casa en cuestión.. y se retiran..tan parsimoniosamente como llegaron... y así... sigue el círculo vicioso... así... hasta completar las dos horas programadas de ""predicación""...
En total, si se visitaron veinte casas, en dos o tres les abrieron de malas ganas, en tres casas no había nadie; y en el resto, simplemente no les quisieron abrir.
Resumen, en esas dos o tres casas que sí les atendieron, tenemos los veinte minutos de real ejercicio de lo que ellos llaman predicar.... los otros cien minutos... conversa...conversa... conversa... conversa y etc. etc. de conversa...
Lo cierto estimado David, es que lo poco que hacen de su peculiar forma de predicar, es por obligación (por ser salvos ellos mismos)
Dios te bendiga