Re: ¿ Por que algunas cristianas no se tapan la cabeza para orar ?
Re: ¿ Por que algunas cristianas no se tapan la cabeza para orar ?
Pienso que no hace falta inspiración del Espíritu para ver lo ridículo de asunto. Basta con sentido común. ¿En qué cabeza cabe que Dios ande enredado en semejantes detalles? ¿Y por qué se ha de referir solo a la mujer cuando los hombre tienen el mismo tipo de cabeza y de pelo? ¿Es que el pelo de la mujer echa chispas y por eso se lo tiene que tapar?
Estimada Marta
Así como usted lo ve el tema, especialmente expuesto por "el vigilante" (que como usted dice, ni siquiera vigila lo que escribe)... es en realidad, como usted dice: "ridículo" el asunto...
Pero sin embargo no lo es a los ojos de Dios... primero, como usted también lo ha dicho; Dios le dio a la mujer un velo, que es su cabello... (eso no es ridículo) y se lo dio como señal de autoridad (no superioridad... entiéndalo bien esto)... el problema es que algunos no saben nada de éste tema como deben saberlo, y exponen sin sentido alguno.
Su duda:
"¿Y por qué se ha de referir solo a la mujer cuando los hombre tienen el mismo tipo de cabeza y de pelo?"
Es la Palabra de Dios, la que nos dice que existe diferencia entre el cabello de la mujer y del hombre: "
La misma naturaleza ¿no os enseña que al hombre sea deshonesto criar cabello?
Por el contrario, a la mujer criar el cabello le es honroso; porque en lugar de velo le es dado el cabello" (1 Cor. 11:14,15) esta diferencia -dice la Palabra de Dios- que la imprime la naturaleza: "
La misma naturaleza ¿no os enseña"; por tanto, aunque algunos no le crean a Dios, sería absurdo no aceptar lo que la naturaleza nos enseña;... además, como es la naturaleza la que nos enseña de ésta diferencia entre el cabello del hombre y el de la mujer; entonces hemos de entender que lo que Dios ha establecido (el cabello de la mujer como velo) es de orden universal, es decir, abarca no solo a las cristianas, sino a toda mujer: "
Mas quiero que sepáis, que Cristo es la cabeza de todo varón; y el varón es la cabeza de la mujer; y Dios la cabeza de Cristo" (vers. 3)
Ahora el asunto es... ¿que nos enseña la naturaleza? .... Esto es lo que la naturaleza nos enseña y por tanto es innegable la diferencia que existe entre el cabello del hombre versus el de la mujer:
Pablo dice: “
La misma naturaleza ¿no os enseña que al hombre sea deshonroso criar cabello? Por el contrario, a la mujer criar el cabello le es honroso; PORQUE EN LUGAR DE VELO LE ES DADO EL CABELLO” (1 Cor. 11:14,15)
La naturaleza (del ser humano) nos enseña que la mujer puede y debe lucir honrosamente su cabello, porque el organismo de la mujer, o más bien, las glándulas encargadas de alimentar el cabello de la mujer, son más firmes o capacitadas que las del varón;…
El motivo por lo que los hombres son más propensos a la calvicie que la mujer, se debe a una combinación de hormonas (andrógenos), herencia, edad y la producción de una enzima llamada 5-alfa reductasa, que al combinarse con la testosterona presente en el folículo piloso, la cambia químicamente (dehidrotestosterona). El folículo piloso tiene receptores sensibles a esta hormona y esa combinación produce el cese en el crecimiento del cabello.
“
Naturalmente” vemos a la mayoría de las mujeres (la excepción confirma la regla) llegar a una avanzada edad con su cabello largo, y con su frente o cabeza aún “
cubierta” de cabello sin complicaciones;… lo que no pasa con el varón… quien… con demasiada frecuencia a muy temprana edad, comienza a mostrar una incipiente calvicie (pelada... como el caso de Julio Parada), llegando incluso a la ancianidad con casi nada de cabello.
Por lo tanto la naturaleza misma, nos enseña que el varón debe cortarse el cabello; usarlo siempre corto facilitará que las hormonas o glándulas que alimentan su cabello se desgasten menos y puedan lucir su cabello hasta una avanzada edad sin mayores problemas. Los varones que usan el cabello largo, con mucha mayor facilidad y a muy corto plazo irán quedando calvos; pues a sus ya debilitadas glándulas u hormonas con que han sido dotados
por la naturaleza, les exigen un trabajo mayor del normal;… no es igual, alimentar dos centímetros de cabello que alimentar quince, veinte o más centímetros. De modo que alimentar un cabello más largo de lo que nos aconseja la naturaleza, es señal de debilidad y desgaste prematuro de las hormonas encargadas de alimentar el cabello del varón, y más pronto quedaremos calvos: “
La misma naturaleza ¿no os enseña que al hombre le es deshonroso criar cabello?” (1 Cor. 11:14)
Por el contrario, la mujer, dotada maravillosamente por
la naturaleza para alimentar cuanto cabello quiera dejarse crecer, lucirá honrosa su cabellera aún hasta la ancianidad;… ¿o vemos por casualidad a las mujeres, ya calvas a los treinta, cuarenta o setenta años? Sin embargo, la honra más grande que acompañará a la mujer que se deja crecer su cabello obedeciendo a la Palabra de Dios, es por un lado, lucir el velo que Dios le ha dado, y por otro, pregonar la autoridad de su marido sobre ella.
En consecuencia, la naturaleza, que será siempre la misma, nos enseña en definitiva que la mujer debe usar
su cabello largo, y el varón
su cabello corto, tal como lo enseña 1 Corintios 11.
Dios le bendiga