No podéis servir a Dios y a las riquezas. (Mateo 6:24)
Seguro que como yo, os habréis preguntado decenas de veces el motivo por el cual la Iglesia hoy, carece de poder evangelizador.
Habréis cuestionado e indagado cuál es el motivo, sin obtener respuestas.
Quizá se halle en el origen y meta que hoy en día, esa iglesia tiene: EL DINERO
Basamos nuestra fuerza y nuestro poder, no en Dios y en la oración, sino en el dinero:
Porque........¿qué hacemos cuando ofrecemos el diezmo?.....¿quizá estamos comprando el poder de Dios?..........¿estamos pagando al pastor para que haga nuestro trabajo?......¿estamos pagando equipamientos para grandes eventos evangelísticos?
¿Acaso no leemos el Nuevo Testamento, para ver que la Iglesia JAMÁS funcionó así?
Para el colmo de los males, estamos ofreciendo "prosperidad económica" a cambio de decisiones de fe..............estamos "comprando" feligreses.
¡¡¡ ALTO !!!
Quizá deberíamos pararnos y mirar las sendas antiguas, quizá el Espíritu está hablando hoy a la Iglesia:
Y escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios, dice esto:
Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo. Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergúenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas. Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete. He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo. Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. (Ap 3:14-22)
El Señor viene a por Su Esposa, sin arruga y sin mancha...............pero no recogerá a una ramera que trabaja por y para el DINERO.
Dios busca nuestro amor, nuestra intimidad con Él, no nuestro dinero.
¡¡¡ Despierta Iglesia, aquí viene el Esposo !!!
Maripaz
Seguro que como yo, os habréis preguntado decenas de veces el motivo por el cual la Iglesia hoy, carece de poder evangelizador.
Habréis cuestionado e indagado cuál es el motivo, sin obtener respuestas.
Quizá se halle en el origen y meta que hoy en día, esa iglesia tiene: EL DINERO
Basamos nuestra fuerza y nuestro poder, no en Dios y en la oración, sino en el dinero:
Porque........¿qué hacemos cuando ofrecemos el diezmo?.....¿quizá estamos comprando el poder de Dios?..........¿estamos pagando al pastor para que haga nuestro trabajo?......¿estamos pagando equipamientos para grandes eventos evangelísticos?
¿Acaso no leemos el Nuevo Testamento, para ver que la Iglesia JAMÁS funcionó así?
Para el colmo de los males, estamos ofreciendo "prosperidad económica" a cambio de decisiones de fe..............estamos "comprando" feligreses.
¡¡¡ ALTO !!!
Quizá deberíamos pararnos y mirar las sendas antiguas, quizá el Espíritu está hablando hoy a la Iglesia:
Y escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios, dice esto:
Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo. Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergúenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas. Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete. He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo. Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. (Ap 3:14-22)
El Señor viene a por Su Esposa, sin arruga y sin mancha...............pero no recogerá a una ramera que trabaja por y para el DINERO.
Dios busca nuestro amor, nuestra intimidad con Él, no nuestro dinero.
¡¡¡ Despierta Iglesia, aquí viene el Esposo !!!
Maripaz