México Independencia y excomunión

OSO

Jesucristo es mi Pastor
29 Octubre 1999
63.033
7.014
Es un hecho conocido que el cura Miguel Hidalgo y Costilla, de profesión sacerdote católico es considerado pilar de la Independencia de México, es sabido tambien que fue excomulgado con todo tipo de maldiciones (sin exagerar); la ICR lo excomulgó sin embargo algunos católicos del foro explicarn que "jamás fue excomulgado", argumento que hitoriadores no comparten con ellos.

La idea de excomunión jamás fue maldecir a nadie, ni anatemizar a nadie. pablo entrega al creyente al diablo apra que destruya su cuerpo, pero jamás para que sea hechado al infierno ni sea maldecido.

El maldecir y anatemizar, al duro estilo Trento no es una práctica cristiana sino signo de rencor, odio, y animadversión contra quien no piensa como ellos.

Es nuestro deber cristiano amar a amigos y enemigos y no hacer ascepción de personas, pongo a su consideación estos lamentables hechos con la idea de que no traten de encubrir algunos éstos lamentables hechos por un lado y por otro que no me vuelvan a llamar mentiroso por denunciarlos.

http://usuarios.lycos.es/aime/excomunion.html


DECRETO DE EXCOMUNIÓN CONTRA EL CURA MIGUEL HIDALGO




Decreto lanzado por el obispo Manuel Abad y Queipo. Obispo de Michoacán de 1810 a 1815.


"Por autoridad del Dios Omnipotente, El Padre, El Hijo y El Espíritu Santo y de los santos cánones, y de las virtudes celestiales, ángeles, arcángeles, tronos, dominaciones, papas, querubines y serafines: de todos los santos inocentes, quienes a la vista del santo cordero se encuentran dignos de cantar la nueva canción, y de los santos mártires y santos confesores, y de las santas vírgenes, y de los santos, juntamente con todos los santos y electos de Dios:

Sea condenado Miguel Hidalgo y Costilla, excura del pueblo de Dolores.

Lo excomulgamos y anatemizamos, y de los umbrales de la iglesia del todo poderoso Dios, lo secuestramos para que pueda ser atormentado eternamente por indecibles sufrimientos, justamente con Dathán y Habirán y todos aquellos que le dicen al señor Dios: ¡Vete de nosotros, porque no queremos ninguno de tus caminos! Y así como el fuego es extinguido por el agua, que se aparte de él la luz por siempre jamáz. Que el Hijo, quien sufrió por nosotros, lo maldiga. Que el Espíritu Santo, que nos fue dado a nosotros en el bautismo, lo maldiga. Que la Santa Cruz a la cual Cristo, por nuestra salvación, ascendió victorioso sobre sus enemigos, lo maldiga. Que la santa y eterna madre de Dios, lo maldiga. Que San Miguel, el abogado de los santos, lo maldiga. Que todos los ángeles, los principados y arcángeles, los principados y las potestades y todos los ejércitos celestiales, lo maldigan. Que sea San Juan el precursor, San Pablo y San Juan Evangelista, y San Andrés y todos los demás apóstoles de Cristo juntos, lo maldigan.

Y que el resto de sus discípulos y los cuatro evangelistas, quienes por su predicación convirtieron al mundo universal, y la santa y admirable compañía de mártires y confesores, quienes por su santa obra se encuentran aceptables al Dios omnipotente, lo maldigan. Que el Cristo de la santa Vírgen lo condene. Que todos los santos, desde el principio del mundo y todas las edades, que se encuentran ser amados de Dios, lo condenen. Y que el cielo y la tierra y todo lo que hay en ellos, lo condenen.

Sea condenado Miguel Hidalgo y Costilla, en dondequiera que esté, en la casa o en el campo, en el camino o en las veredas, en los bosques o en el agua, y aún en la iglesia. Que sea maldito en la vida o en la muerte, en el comer o en el beber; en el ayuno o en la sed, en el dormir, en la vigilia y andando, estando de pie o sentado; estando acostado o andando, mintiendo o cantando, y en toda sangría. Que sea maldito en su pelo, que sea maldito en su cerebro, que sea maldito en la corona de su cabeza y en sus sienes; en su frente y en sus oídos, en sus cejas y en sus mejillas, en sus quijadas y en sus narices, en sus dientes anteriores y en sus molares, en sus labios y en su garganta, en sus hombros y en sus muñecas, en sus brazos, en sus manos y en sus dedos.

Que sea condenado en su boca, en su pecho y en su corazón y en todas las vísceras de su cuerpo. Que sea condenado en sus venas y en sus muslos, en sus caderas, en sus rodillas, en sus piernas, pies y en las uñas de sus pies. Que sea maldito en todas las junturas y articulaciones de su cuerpo, desde arriba de su cabeza hasta la planta de su pie; que no haya nada bueno en él. Que el hijo del Dios viviente, con toda la gloria de su majestad, lo maldiga. Y que el cielo, con todos los poderes que en él se mueven, se levanten contra él.

Que lo maldigan y condenen. ¡Amén! Así sea. ¡Amén!






El proceso degradatorio se llevó a cabo el 29 de julio de 1811 en una de las salas del Hospital Real de Chihuahua, y consistió en rasparle la piel de la cabeza, que había sido consagrada, como cristiano y sacerdote, con el santo crisma.

También le arrancaron la yema de los pulgares e índices de las manos que habían sido consagradas el día de la ordenación.

Después lo entregaron al gobierno español para que lo fusilaran, sin ninguna de las prerrogativas y beneficios eclesiásticos, en que antes se amparaba cualquier reo.


Obispo Manuel Abad y Queipo, fue nombrado obispo por la regencia, y nunca fue presentado por el Papa; además, por ser hijo natural no podía ser sacerdote ni obispo, según las leyes eclesiásticas de aquella época. Sin embargo, bien aceptaron la excomunión dictada por él. Manuel Abad y Queipo era obispo de Michoacán, y permaneció en su cargo hasta 1815, en que salió para España.



http://www.jornada.unam.mx/2003/09/15/005n1pol.php?origen=politica.php&fly=1
La Jornada
La verdadera historia de México no se ha escrito, dijo en 1985 la jerarquía religiosa

Se cumplieron 18 años del intento de la Iglesia católica de rehabilitar a Hidalgo

Buscó aclarar los verdaderos motivos de su excomunión ''Que sea maldito en el vivir y en el morir'', reza una parte del edicto emitido en contra del cura de Dolores

JOSE ANTONIO ROMAN

El pasado día 12 se cumplieron 18 años de que la Iglesia católica, por primera vez en forma oficial mediante una misa, pretendiera ''rehabilitar'' la memoria del cura Miguel Hidalgo, aclarar los verdaderos motivos de su excomunión, al inicio del movimiento de Independencia, y precisar algunos pasajes de la historia nacional en los que han pesado más los prejuicios que los hechos objetivos.

En ese entonces (1985) se conmemoró el 175 aniversario del inicio de la Independencia, y la jerarquía católica decidió no quedar al margen. En aquella ocasión, en forma sorpresiva, los obispos elaboraron un documento titulado Independencia, proceso, tarea y meta, donde pedían a los mexicanos una relectura de la historia ''para poder tomar conciencia de nuestra integración nacional, superar viejos prejuicios y lograr la reconciliación''.

Con este documento, la jerarquía eclesiástica pretendía expresar una posición ''nacionalista'', que contrastaba con sus posturas y actitudes asumidas en otras épocas de la historia. Pero también, ese 12 de septiembre realizaron una misa en el mismo atrio de la iglesia de Dolores.

A esa liturgia asistieron 31 obispos y 122 sacerdotes de todo el país. En esa misma fecha se dio a conocer un dictamen sobre la excomunión del cura Hidalgo, el cual asienta que no se le aplicó por haber iniciado la lucha independentista, sino por los ataques a la libertad y vida de clérigos y religiosos, y que como se confesó y fue absuelto, con su muerte cristiana cesaron todos los efectos. Habían transcurrido 174 años de haber sido excomulgado.

Misa de rehabilitación

Tanto el documento como la misa de rehabilitación del cura Hidalgo se planearon meses antes en Guadalajara, durante la 36 Asamblea Plenaria del Episcopado Mexicano. La propuesta de festejar la Independencia fue planteada por la región pastoral del Bajío, e incluía la celebración de un ciclo de conferencias y simposios ''para iluminar con la verdad ese acontecimiento'' de la historia nacional. En la idea original se sugería realizar el acto el día 20 de septiembre.

La intención de la jerarquía se sintetiza en las siguientes líneas, que incluyen parte del diálogo que sobre el tema sostuvieron los obispos durante una plenaria de su asamblea, de acuerdo con el acta que se elabora en cada una de las sesiones, con la aclaración de que no se mencionan los nombres de los participantes:

-Parece muy laudable la propuesta, pero Ƒtambién se va a celebrar el aniversario de la Revolución? ƑSi no, qué parecería?

-El programa debe tener en cuenta que el 15 de septiembre es la celebración de la juventud en la Basílica y en todas las parroquias. Se pide que haya participantes como representantes en la celebración de la Basílica.

-Ante esto, yo mejor propongo que sea el 12 en lugar del 20, además de que (ese día) tiene relación con la Virgen de Guadalupe. (Propuesta que finalmente ganaría en la votación de los obispos).

-La verdadera historia de México no se ha escrito. La Independencia fue posterior. Se celebra la iniciación, no la consumación.

-Mucho se tiene que aclarar en la historia; mucho se tiene que admitir en la realidad. Por otra parte, tenemos ejemplo del Papa (Juan Pablo II) rehabilitando a Galileo. Algo parecido puede hacerse con Hidalgo. Es una ocasión laudable y en ella se puede manifestar el auténtico patriotismo de los obispos.

-La región del Bajío puede coordinar con la secretaría general y el Consejo de Presidencia ese evento. Valdría la pena sacar ya un documento de pastoral social. Es mejor adelantarse.

-Además, se debe tratar que en el simposio de conferencias se puedan tratar esos asuntos de la historia de México que no se han escrito. También nosotros debemos dar nuestra versión y rescribir la historia.

''Malas interpretaciones''

En la homilía, leída por el entonces arzobispo primado de México, cardenal Ernesto Corripio Ahumada, ante unos 3 mil fieles, se afirmaba que ''los obispos de la Iglesia de México hemos querido venir con nuestro pueblo a este lugar para encontrarnos con nuestras raíces, con nuestros orígenes como pueblo, como sociedad, como patria, como nación libre soberana e independiente''.

Más adelante, el cardenal se adelantó a lo que él llamó ''malas interpretaciones''. Y dijo: ''Nuestra presencia aquí, pues, no responde a un sentimiento nacionalista pasajero; tampoco se trata de un oportunismo que quisiera aprovechar las circunstancias actuales para hacer acto de presencia en el panorama nacional. Menos aún se trata de una justificación histórica, ya que es bien sabido de todos que cada quien interpreta la historia según su punto de vista y al final resultan inútiles las explicaciones y casi imposibles las coincidencias... Hemos venido a recordar los logros y los fracasos de nuestros ancestros''.

Al referirse a las autoridades y la Independencia de México, Corripio dijo que el pueblo se estaba cansando de sus dirigentes religiosos y civiles, y que a eso se debían la indiferencia, la corrupción y la violencia presentes en la sociedad.

Durante la misa al aire libre hizo una apretada síntesis de la historia de México, hasta llegar a la época en que Hidalgo hizo tañer las campanas para convocar al pueblo a la lucha por una patria libre e independiente. Al recordar la ejecución del cura, Corripio se preguntó: ''ƑCuál sería el juicio de los hombres de hoy si en este momento comenzara una gesta semejante a la que estamos conmemorando?''

''Que sea condenado en su pecho y en su corazón...''

Sin duda es una muy buena pregunta para todos, para el gobierno, pero sobre todo para la Iglesia. Más aún si recordamos la parte del edicto de excomunión en contra de Hidalgo donde dice: ''Que sea condenado donde quiera que esté, en la casa o en el campo: en los caminos o en las veredas; en las selvas y en el agua, o aun en la Iglesia: que sea maldito en el vivir y en el morir. Que sea maldito en el interior y exteriormente. Que sea maldito en su pelo. Que sea maldito en el cerebro. Que sea maldito en la corona de su cabeza y en sus sienes, en su frente y en sus oídos. Que sea condenado en su pecho, en su corazón, en sus manos, en sus dedos, en sus venas, en sus músculos, en sus piernas, pies y uñas de los pies. Ojalá que el Cristo de la Santa Virgen lo condene''.



http://www.jornada.unam.mx/2009/09/02/index.php?section=opinion&article=020a1pol
La excomunión de Hidalgo como simulación histórica
Bernardo Barranco V.
¿Usted se imagina que la Iglesia católica, dos siglos después de la Independencia, refrende el edicto de excomunión sobre el cura Miguel Hidalgo? Imagine las consecuencias políticas que portaría el hecho de que la jerarquía confirmara, en este bicentenario, la excomunión al Padre de la Patria: impensable. Sería no sólo una postura políticamente incorrecta, sino que se alejaría de la posición que asumió una década después de haber degradado su investidura sacerdotal. En efecto, la propia Iglesia, poco después de haberse consumado prácticamente la Independencia, avaló un decreto del 19 de julio de 1823 que declaró como beneméritos de la patria en Heroico Grado a Miguel Hidalgo, Ignacio Allende, Juan Aldama, Mariano Abasolo y José María Morelos, entre otros, ordenando que sus restos fueran exhumados “y que éstos fueran trasladados a una caja, que se conduciría a la capital”. Esa caja fue llevada a la catedral el 17 de septiembre de ese mismo año. Entonces, la Iglesia organizó una procesión solemne por toda la ciudad en honor a los caudillos y sus restos fueron depositados en una bóveda en la catedral de México, donde permanecieron hasta 1926, cuando los mismos fueron trasladados a la columna de la Independencia en el Paseo de la Reforma.

Para muchos historiadores es un abuso la solicitud de la arquidiócesis de México a la Secretaría de Educación Pública para corregir los libros de texto de historia, en los que se menciona que Miguel Hidalgo murió excomulgado, porque al confesarse antes de ser fusilado y haber sido sepultado en lugares sacros dejó de tener efecto dicha excomunión. Pareciera que con el bicentenario, de manera oportunista, busca reivindicar un hecho histórico en que intervino contra uno de los fundadores de nuestra nación y exige participar en las celebraciones del aniversario de la Independencia para promover una visión de la historia afín a sus intereses. Sin embargo, en una sociedad plural, abierta y democrática se le debe dar cabida a la postura de la Iglesia católica. A pesar de que muchos intelectuales vean en ella obstinación por higienizar su pasado, invocando argumentos jurídicos burocráticos, descalificando la excomunión decretada por Abad y Queipo, sea porque éste aún no había tomado posesión como obispo de Michoacán o incluso porque era hijo natural y no podría ejercer el ministerio episcopal. La historia es un entramado complejo, ella no es sólo lo que pasó, sino un proceso cognoscitivo que incide en nuestro presente. Conversando con Fernando González sobre su último libro, La Iglesia del Silencio, en el cual analiza los casos de los cristeros y los ocultamientos sobre Marcial Maciel, nos advierte cómo la Iglesia en cierta manera manipula la historia, a través del silenciamiento, la encapsulación, la suplantación y transfiguración de lo ocurrido, con la finalidad de la afirmación colectiva e institucional y que por definición es reacia a discutir los hechos porque tiende a descalificar. La memoria reconstruida así como una operación de simulacro histórico que permite ser consoladora y hasta terapéutica.
Por supuesto que el Hidalgo histórico fue excomulgado y degradado por la jerarquía católica de su tiempo. Su movimiento emancipador, que incluía en sus afanes a la propia España invadida por las fuerzas militares napoleónicas, afectaba y trastocaba los intereses económicos y de poder, no sólo de las estructuras administrativas del virreinato, sino de la propia Iglesia. Hidalgo y Morelos pertenecían a una clase sacerdotal criolla, el llamado bajo clero, muchas veces acallado y disciplinado por la jerarquía religiosa imbricada al estilo absolutista de la corona. Los historiadores contemporáneos reconocen la subordinación eclesiástica a la corona española; ésta se empeñaba en mantener el control de la actuación sobre todo de los obispos: sus nominaciones y nombramientos se aprobaban por su adhesión y juramentos de fidelidad hacia el rey. El orden colonial no pasaba sólo por el sometimiento administrativo ni militar, sino el religioso. Cuando el cura Hidalgo, ya generalísimo de América, expide su decreto contra la esclavitud el 6 de diciembre de 1810, el movimiento emancipador se convierte en revolucionario porque atenta contra el orden colonial establecido. No podemos pasar por alto otro hecho histórico que muestra qué tan dividida estaba la Iglesia bajo la última etapa de dominio colonial: nos referimos a la expulsión y el destierro de los jesuitas en 1767. De tal suerte que muchas excomuniones y represiones a otros religiosos del clero local, de México y otras colonias americanas, siguen ahí sin recibir el beneficio de la historia. Miguel Hidalgo representaba una gran corriente del clero criollo que se opuso, como tal, a la excomunión del cura de Dolores y pocos años después acogió con entusiasmo su rehabilitación eclesiástica y como héroe patriótico.

La jerarquía católica ha realizado en los últimos 70 años por lo menos tres revisiones de los documentos y hechos de la excomunión de Miguel Hidalgo y no ha encontrado nada nuevo. La primera investigación se realizó en tiempo del arzobispo Luis María Martínez, primado de México; la segunda, más reciente, por el cardenal Norberto Rivera Carrera, ante la provocación de los cultos diputados que en torno al bicentenario sugirieron a la Iglesia en 2007 “levantar” la excomunión al Padre de la Patria. Y la tercera es la anunciada por la Conferencia del Episcopado Mexicano, en mayo del presente año, en la que Alberto Suárez Inda, arzobispo de Morelia, dijo que en se tendría una investigación para analizar aspectos jurídicos y canónicos, pero aclaró que antes de morir Morelos e Hidalgo fueron absueltos e incluso recibieron honores en su sepultura. Sin duda, la historia debe ser retrabajada sin exclusiones ni restricciones; el bicentenario es una magnifica oportunidad para analizar la Independencia y la Revolución, para revalorar procesos en que la Iglesia católica ha participado. El rigor científico debe predominar sobre los afanes justificatorios, deben matizarse los ánimos anticlericales, así como los sesgos revanchistas.


Saludos
 
Re: México Independencia y excomunión

Es un hecho conocido que el cura Miguel Hidalgo y Costilla, de profesión sacerdote católico es considerado pilar de la Independencia de México, es sabido tambien que fue excomulgado con todo tipo de maldiciones (sin exagerar); la ICR lo excomulgó sin embargo algunos católicos del foro explicarn que "jamás fue excomulgado", argumento que hitoriadores no comparten con ellos.

La idea de excomunión jamás fue maldecir a nadie, ni anatemizar a nadie. pablo entrega al creyente al diablo apra que destruya su cuerpo, pero jamás para que sea hechado al infierno ni sea maldecido.

El maldecir y anatemizar, al duro estilo Trento no es una práctica cristiana sino signo de rencor, odio, y animadversión contra quien no piensa como ellos.

Es nuestro deber cristiano amar a amigos y enemigos y no hacer ascepción de personas, pongo a su consideación estos lamentables hechos con la idea de que no traten de encubrir algunos éstos lamentables hechos por un lado y por otro que no me vuelvan a llamar mentiroso por denunciarlos.

http://usuarios.lycos.es/aime/excomunion.html


DECRETO DE EXCOMUNIÓN CONTRA EL CURA MIGUEL HIDALGO




Decreto lanzado por el obispo Manuel Abad y Queipo. Obispo de Michoacán de 1810 a 1815.


"Por autoridad del Dios Omnipotente, El Padre, El Hijo y El Espíritu Santo y de los santos cánones, y de las virtudes celestiales, ángeles, arcángeles, tronos, dominaciones, papas, querubines y serafines: de todos los santos inocentes, quienes a la vista del santo cordero se encuentran dignos de cantar la nueva canción, y de los santos mártires y santos confesores, y de las santas vírgenes, y de los santos, juntamente con todos los santos y electos de Dios:

Sea condenado Miguel Hidalgo y Costilla, excura del pueblo de Dolores.

Lo excomulgamos y anatemizamos, y de los umbrales de la iglesia del todo poderoso Dios, lo secuestramos para que pueda ser atormentado eternamente por indecibles sufrimientos, justamente con Dathán y Habirán y todos aquellos que le dicen al señor Dios: ¡Vete de nosotros, porque no queremos ninguno de tus caminos! Y así como el fuego es extinguido por el agua, que se aparte de él la luz por siempre jamáz. Que el Hijo, quien sufrió por nosotros, lo maldiga. Que el Espíritu Santo, que nos fue dado a nosotros en el bautismo, lo maldiga. Que la Santa Cruz a la cual Cristo, por nuestra salvación, ascendió victorioso sobre sus enemigos, lo maldiga. Que la santa y eterna madre de Dios, lo maldiga. Que San Miguel, el abogado de los santos, lo maldiga. Que todos los ángeles, los principados y arcángeles, los principados y las potestades y todos los ejércitos celestiales, lo maldigan. Que sea San Juan el precursor, San Pablo y San Juan Evangelista, y San Andrés y todos los demás apóstoles de Cristo juntos, lo maldigan.

Y que el resto de sus discípulos y los cuatro evangelistas, quienes por su predicación convirtieron al mundo universal, y la santa y admirable compañía de mártires y confesores, quienes por su santa obra se encuentran aceptables al Dios omnipotente, lo maldigan. Que el Cristo de la santa Vírgen lo condene. Que todos los santos, desde el principio del mundo y todas las edades, que se encuentran ser amados de Dios, lo condenen. Y que el cielo y la tierra y todo lo que hay en ellos, lo condenen.

Sea condenado Miguel Hidalgo y Costilla, en dondequiera que esté, en la casa o en el campo, en el camino o en las veredas, en los bosques o en el agua, y aún en la iglesia. Que sea maldito en la vida o en la muerte, en el comer o en el beber; en el ayuno o en la sed, en el dormir, en la vigilia y andando, estando de pie o sentado; estando acostado o andando, mintiendo o cantando, y en toda sangría. Que sea maldito en su pelo, que sea maldito en su cerebro, que sea maldito en la corona de su cabeza y en sus sienes; en su frente y en sus oídos, en sus cejas y en sus mejillas, en sus quijadas y en sus narices, en sus dientes anteriores y en sus molares, en sus labios y en su garganta, en sus hombros y en sus muñecas, en sus brazos, en sus manos y en sus dedos.

Que sea condenado en su boca, en su pecho y en su corazón y en todas las vísceras de su cuerpo. Que sea condenado en sus venas y en sus muslos, en sus caderas, en sus rodillas, en sus piernas, pies y en las uñas de sus pies. Que sea maldito en todas las junturas y articulaciones de su cuerpo, desde arriba de su cabeza hasta la planta de su pie; que no haya nada bueno en él. Que el hijo del Dios viviente, con toda la gloria de su majestad, lo maldiga. Y que el cielo, con todos los poderes que en él se mueven, se levanten contra él.

Que lo maldigan y condenen. ¡Amén! Así sea. ¡Amén!






El proceso degradatorio se llevó a cabo el 29 de julio de 1811 en una de las salas del Hospital Real de Chihuahua, y consistió en rasparle la piel de la cabeza, que había sido consagrada, como cristiano y sacerdote, con el santo crisma.

También le arrancaron la yema de los pulgares e índices de las manos que habían sido consagradas el día de la ordenación.

Después lo entregaron al gobierno español para que lo fusilaran, sin ninguna de las prerrogativas y beneficios eclesiásticos, en que antes se amparaba cualquier reo.


Obispo Manuel Abad y Queipo, fue nombrado obispo por la regencia, y nunca fue presentado por el Papa; además, por ser hijo natural no podía ser sacerdote ni obispo, según las leyes eclesiásticas de aquella época. Sin embargo, bien aceptaron la excomunión dictada por él. Manuel Abad y Queipo era obispo de Michoacán, y permaneció en su cargo hasta 1815, en que salió para España.



http://www.jornada.unam.mx/2003/09/15/005n1pol.php?origen=politica.php&fly=1
La Jornada
La verdadera historia de México no se ha escrito, dijo en 1985 la jerarquía religiosa

Se cumplieron 18 años del intento de la Iglesia católica de rehabilitar a Hidalgo

Buscó aclarar los verdaderos motivos de su excomunión ''Que sea maldito en el vivir y en el morir'', reza una parte del edicto emitido en contra del cura de Dolores

JOSE ANTONIO ROMAN

El pasado día 12 se cumplieron 18 años de que la Iglesia católica, por primera vez en forma oficial mediante una misa, pretendiera ''rehabilitar'' la memoria del cura Miguel Hidalgo, aclarar los verdaderos motivos de su excomunión, al inicio del movimiento de Independencia, y precisar algunos pasajes de la historia nacional en los que han pesado más los prejuicios que los hechos objetivos.

En ese entonces (1985) se conmemoró el 175 aniversario del inicio de la Independencia, y la jerarquía católica decidió no quedar al margen. En aquella ocasión, en forma sorpresiva, los obispos elaboraron un documento titulado Independencia, proceso, tarea y meta, donde pedían a los mexicanos una relectura de la historia ''para poder tomar conciencia de nuestra integración nacional, superar viejos prejuicios y lograr la reconciliación''.

Con este documento, la jerarquía eclesiástica pretendía expresar una posición ''nacionalista'', que contrastaba con sus posturas y actitudes asumidas en otras épocas de la historia. Pero también, ese 12 de septiembre realizaron una misa en el mismo atrio de la iglesia de Dolores.

A esa liturgia asistieron 31 obispos y 122 sacerdotes de todo el país. En esa misma fecha se dio a conocer un dictamen sobre la excomunión del cura Hidalgo, el cual asienta que no se le aplicó por haber iniciado la lucha independentista, sino por los ataques a la libertad y vida de clérigos y religiosos, y que como se confesó y fue absuelto, con su muerte cristiana cesaron todos los efectos. Habían transcurrido 174 años de haber sido excomulgado.

Misa de rehabilitación

Tanto el documento como la misa de rehabilitación del cura Hidalgo se planearon meses antes en Guadalajara, durante la 36 Asamblea Plenaria del Episcopado Mexicano. La propuesta de festejar la Independencia fue planteada por la región pastoral del Bajío, e incluía la celebración de un ciclo de conferencias y simposios ''para iluminar con la verdad ese acontecimiento'' de la historia nacional. En la idea original se sugería realizar el acto el día 20 de septiembre.

La intención de la jerarquía se sintetiza en las siguientes líneas, que incluyen parte del diálogo que sobre el tema sostuvieron los obispos durante una plenaria de su asamblea, de acuerdo con el acta que se elabora en cada una de las sesiones, con la aclaración de que no se mencionan los nombres de los participantes:

-Parece muy laudable la propuesta, pero Ƒtambién se va a celebrar el aniversario de la Revolución? ƑSi no, qué parecería?

-El programa debe tener en cuenta que el 15 de septiembre es la celebración de la juventud en la Basílica y en todas las parroquias. Se pide que haya participantes como representantes en la celebración de la Basílica.

-Ante esto, yo mejor propongo que sea el 12 en lugar del 20, además de que (ese día) tiene relación con la Virgen de Guadalupe. (Propuesta que finalmente ganaría en la votación de los obispos).

-La verdadera historia de México no se ha escrito. La Independencia fue posterior. Se celebra la iniciación, no la consumación.

-Mucho se tiene que aclarar en la historia; mucho se tiene que admitir en la realidad. Por otra parte, tenemos ejemplo del Papa (Juan Pablo II) rehabilitando a Galileo. Algo parecido puede hacerse con Hidalgo. Es una ocasión laudable y en ella se puede manifestar el auténtico patriotismo de los obispos.

-La región del Bajío puede coordinar con la secretaría general y el Consejo de Presidencia ese evento. Valdría la pena sacar ya un documento de pastoral social. Es mejor adelantarse.

-Además, se debe tratar que en el simposio de conferencias se puedan tratar esos asuntos de la historia de México que no se han escrito. También nosotros debemos dar nuestra versión y rescribir la historia.

''Malas interpretaciones''

En la homilía, leída por el entonces arzobispo primado de México, cardenal Ernesto Corripio Ahumada, ante unos 3 mil fieles, se afirmaba que ''los obispos de la Iglesia de México hemos querido venir con nuestro pueblo a este lugar para encontrarnos con nuestras raíces, con nuestros orígenes como pueblo, como sociedad, como patria, como nación libre soberana e independiente''.

Más adelante, el cardenal se adelantó a lo que él llamó ''malas interpretaciones''. Y dijo: ''Nuestra presencia aquí, pues, no responde a un sentimiento nacionalista pasajero; tampoco se trata de un oportunismo que quisiera aprovechar las circunstancias actuales para hacer acto de presencia en el panorama nacional. Menos aún se trata de una justificación histórica, ya que es bien sabido de todos que cada quien interpreta la historia según su punto de vista y al final resultan inútiles las explicaciones y casi imposibles las coincidencias... Hemos venido a recordar los logros y los fracasos de nuestros ancestros''.

Al referirse a las autoridades y la Independencia de México, Corripio dijo que el pueblo se estaba cansando de sus dirigentes religiosos y civiles, y que a eso se debían la indiferencia, la corrupción y la violencia presentes en la sociedad.

Durante la misa al aire libre hizo una apretada síntesis de la historia de México, hasta llegar a la época en que Hidalgo hizo tañer las campanas para convocar al pueblo a la lucha por una patria libre e independiente. Al recordar la ejecución del cura, Corripio se preguntó: ''ƑCuál sería el juicio de los hombres de hoy si en este momento comenzara una gesta semejante a la que estamos conmemorando?''

''Que sea condenado en su pecho y en su corazón...''

Sin duda es una muy buena pregunta para todos, para el gobierno, pero sobre todo para la Iglesia. Más aún si recordamos la parte del edicto de excomunión en contra de Hidalgo donde dice: ''Que sea condenado donde quiera que esté, en la casa o en el campo: en los caminos o en las veredas; en las selvas y en el agua, o aun en la Iglesia: que sea maldito en el vivir y en el morir. Que sea maldito en el interior y exteriormente. Que sea maldito en su pelo. Que sea maldito en el cerebro. Que sea maldito en la corona de su cabeza y en sus sienes, en su frente y en sus oídos. Que sea condenado en su pecho, en su corazón, en sus manos, en sus dedos, en sus venas, en sus músculos, en sus piernas, pies y uñas de los pies. Ojalá que el Cristo de la Santa Virgen lo condene''.



http://www.jornada.unam.mx/2009/09/02/index.php?section=opinion&article=020a1pol
La excomunión de Hidalgo como simulación histórica
Bernardo Barranco V.
¿Usted se imagina que la Iglesia católica, dos siglos después de la Independencia, refrende el edicto de excomunión sobre el cura Miguel Hidalgo? Imagine las consecuencias políticas que portaría el hecho de que la jerarquía confirmara, en este bicentenario, la excomunión al Padre de la Patria: impensable. Sería no sólo una postura políticamente incorrecta, sino que se alejaría de la posición que asumió una década después de haber degradado su investidura sacerdotal. En efecto, la propia Iglesia, poco después de haberse consumado prácticamente la Independencia, avaló un decreto del 19 de julio de 1823 que declaró como beneméritos de la patria en Heroico Grado a Miguel Hidalgo, Ignacio Allende, Juan Aldama, Mariano Abasolo y José María Morelos, entre otros, ordenando que sus restos fueran exhumados “y que éstos fueran trasladados a una caja, que se conduciría a la capital”. Esa caja fue llevada a la catedral el 17 de septiembre de ese mismo año. Entonces, la Iglesia organizó una procesión solemne por toda la ciudad en honor a los caudillos y sus restos fueron depositados en una bóveda en la catedral de México, donde permanecieron hasta 1926, cuando los mismos fueron trasladados a la columna de la Independencia en el Paseo de la Reforma.

Para muchos historiadores es un abuso la solicitud de la arquidiócesis de México a la Secretaría de Educación Pública para corregir los libros de texto de historia, en los que se menciona que Miguel Hidalgo murió excomulgado, porque al confesarse antes de ser fusilado y haber sido sepultado en lugares sacros dejó de tener efecto dicha excomunión. Pareciera que con el bicentenario, de manera oportunista, busca reivindicar un hecho histórico en que intervino contra uno de los fundadores de nuestra nación y exige participar en las celebraciones del aniversario de la Independencia para promover una visión de la historia afín a sus intereses. Sin embargo, en una sociedad plural, abierta y democrática se le debe dar cabida a la postura de la Iglesia católica. A pesar de que muchos intelectuales vean en ella obstinación por higienizar su pasado, invocando argumentos jurídicos burocráticos, descalificando la excomunión decretada por Abad y Queipo, sea porque éste aún no había tomado posesión como obispo de Michoacán o incluso porque era hijo natural y no podría ejercer el ministerio episcopal. La historia es un entramado complejo, ella no es sólo lo que pasó, sino un proceso cognoscitivo que incide en nuestro presente. Conversando con Fernando González sobre su último libro, La Iglesia del Silencio, en el cual analiza los casos de los cristeros y los ocultamientos sobre Marcial Maciel, nos advierte cómo la Iglesia en cierta manera manipula la historia, a través del silenciamiento, la encapsulación, la suplantación y transfiguración de lo ocurrido, con la finalidad de la afirmación colectiva e institucional y que por definición es reacia a discutir los hechos porque tiende a descalificar. La memoria reconstruida así como una operación de simulacro histórico que permite ser consoladora y hasta terapéutica.
Por supuesto que el Hidalgo histórico fue excomulgado y degradado por la jerarquía católica de su tiempo. Su movimiento emancipador, que incluía en sus afanes a la propia España invadida por las fuerzas militares napoleónicas, afectaba y trastocaba los intereses económicos y de poder, no sólo de las estructuras administrativas del virreinato, sino de la propia Iglesia. Hidalgo y Morelos pertenecían a una clase sacerdotal criolla, el llamado bajo clero, muchas veces acallado y disciplinado por la jerarquía religiosa imbricada al estilo absolutista de la corona. Los historiadores contemporáneos reconocen la subordinación eclesiástica a la corona española; ésta se empeñaba en mantener el control de la actuación sobre todo de los obispos: sus nominaciones y nombramientos se aprobaban por su adhesión y juramentos de fidelidad hacia el rey. El orden colonial no pasaba sólo por el sometimiento administrativo ni militar, sino el religioso. Cuando el cura Hidalgo, ya generalísimo de América, expide su decreto contra la esclavitud el 6 de diciembre de 1810, el movimiento emancipador se convierte en revolucionario porque atenta contra el orden colonial establecido. No podemos pasar por alto otro hecho histórico que muestra qué tan dividida estaba la Iglesia bajo la última etapa de dominio colonial: nos referimos a la expulsión y el destierro de los jesuitas en 1767. De tal suerte que muchas excomuniones y represiones a otros religiosos del clero local, de México y otras colonias americanas, siguen ahí sin recibir el beneficio de la historia. Miguel Hidalgo representaba una gran corriente del clero criollo que se opuso, como tal, a la excomunión del cura de Dolores y pocos años después acogió con entusiasmo su rehabilitación eclesiástica y como héroe patriótico.

La jerarquía católica ha realizado en los últimos 70 años por lo menos tres revisiones de los documentos y hechos de la excomunión de Miguel Hidalgo y no ha encontrado nada nuevo. La primera investigación se realizó en tiempo del arzobispo Luis María Martínez, primado de México; la segunda, más reciente, por el cardenal Norberto Rivera Carrera, ante la provocación de los cultos diputados que en torno al bicentenario sugirieron a la Iglesia en 2007 “levantar” la excomunión al Padre de la Patria. Y la tercera es la anunciada por la Conferencia del Episcopado Mexicano, en mayo del presente año, en la que Alberto Suárez Inda, arzobispo de Morelia, dijo que en se tendría una investigación para analizar aspectos jurídicos y canónicos, pero aclaró que antes de morir Morelos e Hidalgo fueron absueltos e incluso recibieron honores en su sepultura. Sin duda, la historia debe ser retrabajada sin exclusiones ni restricciones; el bicentenario es una magnifica oportunidad para analizar la Independencia y la Revolución, para revalorar procesos en que la Iglesia católica ha participado. El rigor científico debe predominar sobre los afanes justificatorios, deben matizarse los ánimos anticlericales, así como los sesgos revanchistas.


Saludos

En el epigrafe "Mexico,grandes cosas por venir" yo fui el primero que dije sobre Miguel Hidalgo siendo sacerdote catolico,yo ya sabia que fue excomulgado yo nunca dije que no lo fue,pero mi punto era que de no ser por que Miguel Hidalgo fue sacerdote,Mexico no seria independiente,si no hubiera sido sacerdote,se hubiera casado y tal vez nunca hubiera iniciado el movimiento de independencia.
Mi punto era que algunos evangelicos anticatolicos a veces tambien celebran mucho la independencia sin pensar que la independencia fue empezada por un sacerdote catolico y pues...se me hace algo ironico.
 
Re: México Independencia y excomunión

En el epigrafe "Mexico,grandes cosas por venir" yo fui el primero que dije sobre Miguel Hidalgo siendo sacerdote catolico,yo ya sabia que fue excomulgado yo nunca dije que no lo fue,pero mi punto era que de no ser por que Miguel Hidalgo fue sacerdote,Mexico no seria independiente,si no hubiera sido sacerdote,se hubiera casado y tal vez nunca hubiera iniciado el movimiento de independencia.
Mi punto era que algunos evangelicos anticatolicos a veces tambien celebran mucho la independencia sin pensar que la independencia fue empezada por un sacerdote catolico y pues...se me hace algo ironico.

El cura Hidalgo, como persona hizo y mucho por México, pero el clero como institución se opuso a la Independencia y a la Reforma, pues el clero en México suele estar con la derecha, con los conservadores, con los poderosos o con los tres.

Las anatemizaciones contra la sola persona de Hidalgo de parte de la iglesia católico.romana en voz de uno de sus obispos fueron tremendas, las herejias que contiene tan infame escrito son igualmente tremendas, sin que a la fecha la ICR haya resarcido realmente el oprovio.

La ICR estuvo en contra de la Independencia de México por convenir asi a sus intereses, por lo que la patria, una vez emancipada no recibe de buen modo que la ICR pretenda ser parte de un nacionalismo que jamás mostró.

Un saludo.
 
Re: México Independencia y excomunión

El cura Hidalgo, como persona hizo y mucho por México, pero el clero como institución se opuso a la Independencia y a la Reforma, pues el clero en México suele estar con la derecha, con los conservadores, con los poderosos o con los tres.

Las anatemizaciones contra la sola persona de Hidalgo de parte de la iglesia católico.romana en voz de uno de sus obispos fueron tremendas, las herejias que contiene tan infame escrito son igualmente tremendas, sin que a la fecha la ICR haya resarcido realmente el oprovio.

La ICR estuvo en contra de la Independencia de México por convenir asi a sus intereses, por lo que la patria, una vez emancipada no recibe de buen modo que la ICR pretenda ser parte de un nacionalismo que jamás mostró.

Un saludo.

Escritos y anatemas que una vez el libertado Pio VII de la prision de Napoleon, derogo en 1814.
 
Re: México Independencia y excomunión

Mi punto era que algunos evangelicos anticatolicos a veces tambien celebran mucho la independencia sin pensar que la independencia fue empezada por un sacerdote catolico y pues...se me hace algo ironico.

Cierto, he asistido a fiestas o festejos de la independencia organizada por evangélicos...pero se trata mas que nada de fiestas de convivio y disfrute de antojitos mexicanos.

y no veo nada de lo "irónico" que comentas...

El Cura Hidalgo tenia que decidir entre ser parte del movimiento armado independentista o seguir siendo cura y trabajar para su iglesia.

Ya sabemos qué eligió, asi que yo lo considero más un caudillo que un cura, por ese punto presisamente él sabía y estaba conciente de las consecuencias que esto le iba acarrear, Hidalgo era una persona muy inteligente y culta, sabía a lo que iba, y decidió apostarle al movimiento armado que a la iglesia.

Abajo, la imagen polémica que especialistas concuerdan es la mas fiel representación de Don Miguel Hidalgo y Costilla, y dista mucho de la imagen que se nos enseñó en los libros de texto y estampitas.

01hidalgo.jpg
 
Re: México Independencia y excomunión

En el epigrafe "Mexico,grandes cosas por venir" yo fui el primero que dije sobre Miguel Hidalgo siendo sacerdote catolico,yo ya sabia que fue excomulgado yo nunca dije que no lo fue,pero mi punto era que de no ser por que Miguel Hidalgo fue sacerdote,Mexico no seria independiente,si no hubiera sido sacerdote,se hubiera casado y tal vez nunca hubiera iniciado el movimiento de independencia.
Mi punto era que algunos evangelicos anticatolicos a veces tambien celebran mucho la independencia sin pensar que la independencia fue empezada por un sacerdote catolico y pues...se me hace algo ironico.

Pues entonces preguntate si en Estados Unidos los católicos dejan de festejar sus fiestas o días de descanso solo porque estan dedicadas a eventos inciados por Cristianos Protestantes
 
Re: México Independencia y excomunión

El cura Hidalgo, como persona hizo y mucho por México...

Pues leyendo de reojo algunos datos que todos pueden consultar en internet tenemos que Miguel Hidalgo fué un pésimo estratega:


****


"Por causas no completamente claras, Hidalgo desiste de su intento de apoderarse de la capital,cuando pudo haberlo hecho con cierta facilidad"

"en realidad su movimiento fue efímero y no dio resultados: era un defensor de las causas criollas y sus propuestas se limitaban a reemplazar a una clase por otra en el rango de privilegios sin tocar la estructura colonial, además de ser muy mal estratega militar, defecto que costó la vida de muchos de sus hombres, matanzas innecesarias."

Y la mas desconcertante:

HIDALDO Y ALLENDE TUVIEREON DIFERENCIAS DURANTE EL TIEMPO QUE ESTUVIERON JUNTOS EN LA GUERRA DE INDEPENDENCIA, ALLENDE LLAMABA A HIDALGO “BRIBON DEL CURA” INCLUSO LO QUERIA ENVENENAR.
Fuente:http://www.elobservadorenlinea.com/content/view/146/1/
 
Re: México Independencia y excomunión

Escritos y anatemas que una vez el libertado Pio VII de la prision de Napoleon, derogo en 1814.

¿Puedes traer mostrar dichos escritos?. Mucho se ha dicho, sin que a la fecha se haya derogado nada tal y como se muestra en los enlaces, y no deja de ser emblemático la furia con la que la ICR puede llegar a antemizar a sus detractores, por ejemplo protestantes o a otro cátolico en serivicio solo por sus ideas liberales.

Saludos
 
Re: México Independencia y excomunión

Pues leyendo de reojo algunos datos que todos pueden consultar en internet tenemos que Miguel Hidalgo fué un pésimo estratega:


****


"Por causas no completamente claras, Hidalgo desiste de su intento de apoderarse de la capital,cuando pudo haberlo hecho con cierta facilidad"

Efectivamente no era un gran estratega, y pudo haber tomado la ciudad de México en muy poco tiempo, pero el no deseaba que la embravecida multitud hubiese hecho de ello una carnicería.

Hidalgo no fue un estratega sino un valiente independensista y la mecha que detonó el barril de pólvora a precio de su propia vida. Pero ese no es el punto aqui, sino la manera en que la ICR fue capaz de anatemizarlo con toda suerte de maldiciones, actitid despótica y muy contraria por cierto al cristianismo.

Saludos
 
Re: México Independencia y excomunión

Mi punto era que algunos evangelicos anticatolicos a veces tambien celebran mucho la independencia sin pensar que la independencia fue empezada por un sacerdote catolico y pues...se me hace algo ironico.


Sabe hubiera sido más creible... fue usado por el Señor para...que empezará la Independencia... al parece aquí, como que al Señor nunca se le da crédito de nada.

Saludos!
 
Re: México Independencia y excomunión

Pues leyendo de reojo algunos datos que todos pueden consultar en internet tenemos que Miguel Hidalgo fué un pésimo estratega:


****


"Por causas no completamente claras, Hidalgo desiste de su intento de apoderarse de la capital,cuando pudo haberlo hecho con cierta facilidad"

Efectivamente no era un gran estratega, y pudo haber tomado la ciudad de México en muy poco tiempo, pero el no deseaba que la embravecida multitud hubiese hecho de ello una carnicería.

Hidalgo no fue un estratega sino un valiente independensista y la mecha que detonó el barril de pólvora a precio de su propia vida. Pero ese no es el punto aqui, sino la manera en que la ICR fue capaz de anatemizarlo con toda suerte de maldiciones, actitid despótica y muy contraria por cierto al cristianismo.

Saludos


Quien fue el cura Hidalgo? un gapuchin, que vino a Mexico, que leía y creía en los benefecios de la Revolución francesa (1789) con los principios de ésta: libertad, igualdad y fraternidad.


Saludos!
 
Re: México Independencia y excomunión

Pues leyendo de reojo algunos datos que todos pueden consultar en internet tenemos que Miguel Hidalgo fué un pésimo estratega:


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"Por causas no completamente claras, Hidalgo desiste de su intento de apoderarse de la capital,cuando pudo haberlo hecho con cierta facilidad"




Quien fue el cura Hidalgo? un gapuchin, que vino a Mexico, que leía y creía en los benefecios de la Revolución francesa (1789) con los principios de ésta: libertad, igualdad y fraternidad.


Saludos!


Si asi lo quieres ver, OK; pero si lo quieres anatemizar como lo hizo la iglesia católico.romana, pues eso ya sería otro asunto ¿no lo crees?

Saludos
 
Re: México Independencia y excomunión

Si asi lo quieres ver, OK; pero si lo quieres anatemizar como lo hizo la iglesia católico.romana, pues eso ya sería otro asunto ¿no lo crees?

Saludos

Acaso soy católica?

Y si con Biblia en mano pudiera anatemizar a alguien, de donde sacaría tal autoridad?

No Oso, lo que estoy tratando de decir en que los estudios que tuvo el cura Hidalgo, antes de ser cura, fuero netamente Europeos, la revolución francesa ya había tenido grandes adeptos, entre ellos Miguel Hidalgo... por ello la inquietud de que en México se dotara de los beneficios que los principios de aquella revuelta se hicieran realidad en México.

Andar excomulgando... pues ellos que tienen la capacidad de hacerlo, lo hacen... que le hicieron a Lutero... lo excomulgaron... le hicieron un favor o un prejuicio?...

Y pues en otro momento será que pueda poner más al respecto... porque la verdad, ahora tengo que ir por mi niño al colegio.

Saludos!!!
 
Re: México Independencia y excomunión

¿Puedes traer mostrar dichos escritos?. Mucho se ha dicho, sin que a la fecha se haya derogado nada tal y como se muestra en los enlaces, y no deja de ser emblemático la furia con la que la ICR puede llegar a antemizar a sus detractores, por ejemplo protestantes o a otro cátolico en serivicio solo por sus ideas liberales.

Saludos

A ver OSO un ejercicio de logica:

  • Miguel Hidalgo fue revolucionario de la independencia de 1810 a 1811.
  • Pio VII fue capturado por Napoleon Bonaparte de 1809 a 1814.
El edicto segun firmado por Pio VII sobre la excomunion de Hidalgo es del 29 de Julio de 1811, cuando todos saben que Pio VII estaba preso e incomunicado en Savona por ordenes mismas de Napoleon Bonaparte desde 1809 y mas tarde lo llevo deportado a Francia donde quedó reducido a cautiverio en Fontainebleau.

Asi que dime. ¿Es real? ¿Es valido?
 
Re: México Independencia y excomunión

A ver OSO un ejercicio de logica:

  • Miguel Hidalgo fue revolucionario de la independencia de 1810 a 1811.
  • Pio VII fue capturado por Napoleon Bonaparte de 1809 a 1814.
El edicto segun firmado por Pio VII sobre la excomunion de Hidalgo es del 29 de Julio de 1811, cuando todos saben que Pio VII estaba preso e incomunicado en Savona por ordenes mismas de Napoleon Bonaparte desde 1809 y mas tarde lo llevo deportado a Francia donde quedó reducido a cautiverio en Fontainebleau.

Asi que dime. ¿Es real? ¿Es valido?

Si, todo lo dicho en esa carta de anatemizaciones es cierta, yo mismo la vi en la casa de Hidalgo, cuidadosamente enmarcada y bajo cristal en Dolores Gto. Pero dime, ¿en serio crees que es un cuento?.

Ahora bien, si lo que dice un obispo católio.romano no es valido, que bien para Hidalgo, pero me temo que no fue así.

Saludos.
 
Re: México Independencia y excomunión

Si, todo lo dicho en esa carta de anatemizaciones es cierta, yo mismo la vi en la casa de Hidalgo, cuidadosamente enmarcada y bajo cristal en Dolores Gto. Pero dime, ¿en serio crees que es un cuento?.

Ahora bien, si lo que dice un obispo católio.romano no es valido, que bien para Hidalgo, pero me temo que no fue así.

Saludos.

Pero se logico OSO, ¿Como puede ser valido un documento apocrifo cuando el firmante (Pio VII) ni siquiera estaba al tanto, ya que desde 1809 hasta 1814 estuvo preso e incomunicado por ordenes de Napoleon Bonaparte?
 
Re: México Independencia y excomunión

Pero se logico OSO, ¿Como puede ser valido un documento apocrifo cuando el firmante (Pio VII) ni siquiera estaba al tanto, ya que desde 1809 hasta 1814 estuvo preso e incomunicado por ordenes de Napoleon Bonaparte?

Lamantable tanto la rúbrica como el sello señalan la procedencia del Decreto lanzado por el obispo Manuel Abad y Queipo. Obispo de Michoacán.

Creelo Kal_El, dicho decreto es un documento histórico y real, lamentablemente.

Si el documento no puedo llegar a las manos del Papa, si iba a estar el Papa o no de acuerdo consu obismpo y otrs sitaciones no lo sabremos, es otro asunto. Solo sabemos lo que el obispo hizo.

Saludos.
 
Re: México Independencia y excomunión

Lamantable tanto la rúbrica como el sello señalan la procedencia del Decreto lanzado por el obispo Manuel Abad y Queipo. Obispo de Michoacán.

Creelo Kal_El, dicho decreto es un documento histórico y real, lamentablemente.

Si el documento no puedo llegar a las manos del Papa, si iba a estar el Papa o no de acuerdo consu obismpo y otrs sitaciones no lo sabremos, es otro asunto. Solo sabemos lo que el obispo hizo.

Saludos.

De que es un documento historico y real, lo es, pero alegremente para el Cura Hidalgo, es un documento espurio, falso y derogado.

Todo edicto de excomunion, anterior al Concilio Vaticano I y segun su Derecho Canonico, quedaba en manos del Romano Pontifice al tratarse de sacerdote rebeldes. Los tribunales canonico debian enviar el documento a Pio VII y que este revisase el caso, una vez revisado, el Papa debia o rechazarlo o afirmarlo mediante un anatema. Como este procedimiento no ocurrio con el Padre Higaldo, se cosidera pues espurio deacuerdo al Derecho Canonico.

En el Derecho Canonico, Miguel Hidalgo y Costilla murio siendo sacerdote catolico, presa una complot por parte de un clero peninsular entregado a la Corona Española de Bonaparte, en pugna con un clero novohispano que buscaban independizarse de Bonaparte y hacer de Nueva España tierra de Fernando VII. Lo que ocurrio con Hidalgo es que el clero se dividio entre Bopartistas y Borbonistas, entre quienes para asegurar su poder se vendieron a Napoleon Bonaparte y su hermano Jose, y quienes siguieron fieles a Fernando VII de Borbon. Por eso su edicto aunque real, es espurio y fraudulento.
 
Re: México Independencia y excomunión

Gracias KaL_El

Entiendo este puento de vista.

Quieciera creer que Hidalgo no fue maldecido, creer que dicho decreto no tuvo nigún efecto hacia su humana persona, saber por el bien de él y de cualquier mortal que su alma, su moral y su vida misma poseyeron hasta el último momento siempre su dignidad humana, pero sobre todo espero que todo esto sea humo, especialmente para el alma de quien lo anatemizó con tal rencor.

Me dices:

"Lo que ocurrio con Hidalgo es que el clero se dividio entre Bopartistas y Borbonistas".

Eran tiempos compulsos, lo siguen siendo.

Ante la boragine de acontecimientos se dio un muto resentmiento de entre las partes, asi funciona la guerra, y el odio; es finalmente el subproducto de las fricciones y los odios internos los que surgen cual junete apocalíptico trayendo a su paso odio, destrucción y muerte para "los otros".

Saludos.
 
Re: México Independencia y excomunión

Acaso soy católica?

Y si con Biblia en mano pudiera anatemizar a alguien, de donde sacaría tal autoridad?

No Oso, lo que estoy tratando de decir en que los estudios que tuvo el cura Hidalgo, antes de ser cura, fuero netamente Europeos, la revolución francesa ya había tenido grandes adeptos, entre ellos Miguel Hidalgo... por ello la inquietud de que en México se dotara de los beneficios que los principios de aquella revuelta se hicieran realidad en México.

Andar excomulgando... pues ellos que tienen la capacidad de hacerlo, lo hacen... que le hicieron a Lutero... lo excomulgaron... le hicieron un favor o un prejuicio?...

Y pues en otro momento será que pueda poner más al respecto... porque la verdad, ahora tengo que ir por mi niño al colegio.

Saludos!!!


Corrección; ya siendo cura, disculpen... las prisas de ese momento no me ayudaron... : )

Ahora si:

Miguel Hidalgo y Costilla, iniciador de la Independencia nace en la hacienda de Corralejo, cerca de Pénjamo, Guanajuato el 8 de mayo de 1753.

A los 12 años se marcha a Valladolid a estudiar con los jesuitas, pero al ser estos expulsados en 1767 ingresa al Colegio de San Nicolás, en la misma población, donde estudia teología, filosofía y artes. Sus compañeros lo apodan El Zorro por su sagacidad y astucia. Además del latín, francés e italiano aprende el náhuatl, el otomí y el tarasco. Recibe las órdenes sacerdotales a los 25 años.

A los 39 años es nombrado rector del Colegio de San Nicolás y se dedica con ahínco al estudio de las teorías liberales que revolucionan Europa. Por presiones de los altos jerarcas de la Iglesia es removido de su cargo y enviado a los curatos de Colima, San Felipe Torres Mochas y Dolores (ambos en Guanajuato).


Lo dicho por el Sumo Pontífice Pío VII, en el documento de excomunión:

“Que todos los ángeles y arcángeles, principados y potestades, y todos los ejércitos celestiales, lo maldigan. Que San Juan el precursor, y San Pedro y San Pablo y San Andrés y todos los demás apóstoles de Cristo juntamente, lo maldigan. Y ojalá que el resto de sus discípulos y los cuatro evangelistas, quienes por sus predicaciones convirtieron al mundo universal, y ojalá que la santa compañía de mártires, y confesores, quienes por sus santas obras se han encontrado agradables al Dios Todopoderoso, lo maldigan. Ojalá que el Cristo de la Santa Virgen lo condene. Ojalá que todos los santos desde el principio del mundo y todas las edades, quienes se hallan ser los amados de Dios lo condenen; y ojalá que los cielos y la tierra y todas las cosas que hay en ellos, lo condenen. Que sea condenado donde quiera que esté, en la casa o en el campo: en los caminos o en las veredas; en las selvas o en el agua, o aún en la iglesia. Que sea maldito en el vivir y en el morir; en el comer y el beber; en el ayuno o en la sed; en el dormitar o en el dormir; en la vigilia o andando; estando de pie o sentado; acostado o andando; mingiendo o cancando y en todas las sangrías. Que sea maldito interior y exteriormente. Que sea maldito en su pelo. Que sea maldito en su cerebro. Que sea maldito en la corona de su cabeza y en sus sienes, en su frente y en sus oídos; y en sus cejas y en sus mejillas; en sus quijadas y en sus narices; en sus dientes anteriores y en sus molares; en sus labios y en su garganta; en sus hombros y en sus muñecas; en sus brazos, en sus manos y en sus dedos. Que sea condenado en su pecho, en su corazón, y en todas las vísceras de su cuerpo. Que sea condenado en sus venas, en sus músculos, en sus caderas, en sus piernas, pies y uñas de los pies. Que sea maldito en todas las junturas y articulaciones de su cuerpo. Que desde la parte superior de su cabeza hasta la planta de sus pies, no haya nada bueno en él. Que el Hijo del Dios viviente, con toda la gloria de su majestad, lo maldiga, y que el cielo con todos los poderes que hay en él se subleven contra él, lo maldigan y lo condenen.” “Amén. ¡Así sea! Amén”.


Ay, por Dios!!!! tanta herejía en un sólo escrito... valgame!!!

:Sinking: