4 Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo,c Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la Ley,
5 para redimire a los que estaban bajo la Ley, a fin de que recibiéramos la adopción de hijos.
6 Y por cuanto sois hijos,g Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: «¡Abba, Padre!».
7 Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero de Dios por medio de Cristo.
<ins id="aswift_5_expand" style="margin: 0px; padding: 0px; border: currentColor; width: 160px; height: 90px; display: inline-table; visibility: visible; position: relative; background-color: transparent; border-image: none;"><ins id="aswift_5_anchor" style="margin: 0px; padding: 0px; border: currentColor; width: 160px; height: 90px; display: block; visibility: visible; position: relative; background-color: transparent; border-image: none;"><iframe name="aswift_5" width="160" height="90" id="aswift_5" frameborder="0" marginwidth="0" marginheight="0" scrolling="no" vspace="0" hspace="0" allowfullscreen="true" style="left: 0px; top: 0px; position: absolute;" allowtransparency="true"></iframe></ins></ins>
8 Ciertamente, en otro tiempo, cuando no conocíais a Dios, servíais a los que por naturaleza no son dioses;
9 pero ahora, ya que conocéis a Dios o, más bien, que sois conocidos por Dios, ¿cómo es que os volvéis de nuevo a los débiles y pobres rudimentos,a los cuales os queréis volver a esclavizar?
10 Guardáis los días, los meses, los tiempos y los años.
11 Temo que mi trabajo en vuestro medio haya sido en vano.
