Mira, acusar a Natanal de no creer en su propia Biblia, acusarme a mi de no creer que mi Biblia es totalmente inspirada por Dios, tiene sus asegunes.
No es bueno mentir ni acusar pues ese es oficio del padre de la mentira y el acusador de todos.
Dime ¿tu crees que son inspiradas estas palabras que vienen en la Biblia?
"Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan"
¿O estas otras?:
"Y ellos volvieron a dar voces: ¡Crucifícale!"
No, claro!, y la lista es larga...
Entonces, un asunto es que Su Palabra sea verdad y otra que toda palabra contenida en la Biblia, sea necesariamente Palabra de Dios o algo dicho por Dios. No es lo mismo.
Pues escrito está: "así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié." pero desde luego que Dios no envió las palabras "cruficícale, crucifícale" ¿cierto?.
Pues bien,
Cuando los cristianos decimos que Toda la Biblia esta inspirada nos referimos a su conjunto, pero no aislando textos ni entretejiendo cosas, Nos referimos más bien a que lo dicho por los santos varones de Dios, esto es, lo que ellos escribieron de Dios y que escribieron lo hicieron divinamente inspirados. Entre estos siervos divinamente inspirados, estan precisamente sus profetas del AT, los apóstoles del NT; y así se cumple la escritura en la que somos "edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo Cristo Jesús mismo la piedra angular" (Ef 2:20)
Por cierto, las palabras "no mentiras", "no levantaras falso testimonio contra tu prójimo", son Palabra de Dios.
Por esto no es bueno acusar ni de mentir contra nuestro prójimo.
Que hacer esto no viene de Dios ni es conforme a la Palabra de Dios, sino conforme a nuestra propia carne.
Recordemos siempre todos que aunque al hombre religioso parecieran lo mismo, no es lo mismo el celo por las cosas y la Palabra de Dios, que el celo religioso, la fe religiosa y ciega y el fanatismo.
Mientras el celo por la Palabra de Dios nos lleva a la Verdad, el celo nos lleva a la acusación.
Mientras el celo pos al Palabra de Dios nos lleva a la verdad, el celo nos lleva a mentir contra quien no esta de acuerdo con nosotros.
Por bien de tu alma te pido que no mientas ni levantes falsos contra mi, ni contra Natanael ni contra nadie.
