Ya, me imagino que lo dices porque tú estás en el colectivo de los activos, de los que al actuar piensa, aún a costa de sí mismo, en el bien de sus hermanos.
(Punto aparte).
La verdad es que hay que reconocer que los cristianos debemos tener conciencia social, amor y responsabilidad de los unos con los otros, porque somos un cuerpo y no una piedra separada. Otra cosa es que nunca faltan hermanos de esos que les encanta recibir pero que les cuesta detectar lo que pueden aportar a la otra cara de la moneda... Y después los que como a mí nos causa poca gracia cuando nos exigen más de lo, a nuestro juicio, razonable.
Mira que es complicado... No siempre es fácil el ejercicio de la libertad cristiana.
Vamos a ver, decía Pablo algo como "cuando comáis carne, comed sin preguntar si ha sido sacrificada a los ídolos. Pero si alguno os dice que ésta ha sido sacrificada a los ídolos, entonces no comáis, por razones de conciencia de los otros, no de la vuestra, pues los alimentos proceden de Dios y son santos si se toman con acción de gracias".
Es decir, la carne aún cuando era sacrificada a los ídolos, no era un alimento pecaminoso, porque no procede de los ídolos sino de Dios. Y un creyente que sabe ésto, disfruta de la creación de Dios con gratitud, cuidando las formas cuando hace las cosas, sabiéndose en la presencia de Dios y teniéndole presente.
Dicho lo anterior. Caminante te contesté por qué he comprado un bañador, ahora contéstame tú: ¿Lo acertado, a causa de los degenerados es que renuncie a realizar de vez en cuando las actividades acuáticas de mi interés?... Si lo hago así ¿Va a redundar en bien de alguien?. Y, otra cosa ¿usas pantalones?
Gracias.