A LAS LECTORAS
Cuando se habla del matrimonio, dentro de este campo, encontramos esta sabia instrucción:
Hebreos 13:4 Honroso sea en todos el matrimonio, y el lecho
SIN MANCILLA; pero a los fornicarios y a los adúlteros los juzgará Dios.
Los ojos, las trenzas, el cabello, la sonrisa, las mejillas, el cuello, los senos, toda ella queda plasmada en este expresión:
Toda tú eres hermosa, amiga mía,
Y en ti no hay mancha.
La Esposa es a la vez Hermana en Cristo, leemos:
9. Prendiste mi corazón, hermana, esposa mía;
Has apresado mi corazón con uno de tus ojos,
Con una gargantilla de tu cuello.
10. ¡Cuán hermosos son tus amores, hermana, esposa mía!
¡Cuánto mejores que el vino tus amores,
Y el olor de tus ungüentos que todas las especias aromáticas!
11. Como panal de miel destilan tus labios, oh esposa;
Miel y leche hay debajo de tu lengua;
Y el olor de tus vestidos como el olor del Líbano.
Y aquí encontramos una alusión a a Esposa en su primera intimidad:
12. Huerto cerrado eres, hermana mía, esposa mía;
Fuente cerrada, fuente sellada.
Todo en un lenguaje poético muy puro:
13. Tus renuevos son paraíso de granados, con frutos suaves,
De flores de alheña y nardos;
14. Nardo y azafrán, caña aromática y canela,
Con todos los árboles de incienso;
Mirra y áloes, con todas las principales especias aromáticas.
15. Fuente de huertos,
Pozo de aguas vivas,
Que corren del Líbano.
16. Levántate, Aquilón, y ven, Austro;
Soplad en mi huerto, despréndanse sus aromas.
Venga mi amado a su huerto,
Y coma de su dulce fruta.
Nada de lascivia, morbosidad, o pasión de concupiscencia, como está escrito:
1 Tesalonicenses 4:4 que cada uno de vosotros sepa tener
SU PROPIA ESPOSA EN SANTIDAD Y HONOR;
1 Tesalonicenses 4:5 no en
PASIÓN DE CONCUPISCENCIA, como los gentiles que no conocen a Dios;
La vestimenta es un adorno perfumado adecuado a este momento de intimidad.
NOTA: Solo para Cristianas maduras.