"SOLO A LOS HIJOS DE ISRAEL"
Exo_31:13 Tú hablarás a los hijos de Israel, diciendo: En verdad vosotros guardaréis mis días de reposo;* porque es señal entre mí y vosotros por vuestras generaciones, para que sepáis que yo soy Jehová que os santifico.
Exo 31:16 Guardarán, pues, el día de reposo* los hijos de Israel, celebrándolo por sus generaciones por pacto perpetuo.
Exo 31:17 Señal es para siempre entre mí y los hijos de Israel; porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, y en el séptimo día cesó y reposó.
La Iglesia de Cristo no guarda el día de reposo judío...aquí están las Escrituras:
Heb 3:14 Porque somos hechos participantes de Cristo, con tal que retengamos firme hasta el fin nuestra confianza del principio,
Heb 3:15 entre tanto que se dice:
Si oyereis hoy su voz,
No endurezcáis vuestros corazones, como en la provocación.
Heb 3:16 ¿Quiénes fueron los que, habiendo oído, le provocaron? ¿No fueron todos los que salieron de Egipto por mano de Moisés?
El forista judío Rav Sefaradí no es participante de Cristo...los judíos incrédulos no son participantes de Cristo, el Israel de Benjamín Netanyahu no es participante de Cristo...
Los receptores judíos de esta carta debían comprender que el Cristo de Heb.3:14 no es la historia de un impostor con pretensiones de ser el "Hijo de Dios" ya resucitado como enseña la incredulidad judía. Aquí está la evidencia:
Heb 1:3 el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas,
No se trata de un "Cristo crucificado". No. Es el Hijo de Dios ya glorificado.
El impedimento para aceptar un Cristo ya glorificado conforme a las Escrituras...se basa en dos cosas:
1. El pecado en el corazón del judío.
2. La incredulidad.
No han sido lavados con la sangre del Cordero...sus pecados permanecen.
La incredulidad es una acción del alma en contra del Hijo de Dios...de su Grandeza, de su Preeminencia al ser de la misma Naturaleza y Esencia de su Padre Dios.
Cuando pasamos al capítulo 4 el tema es el reposo de Dios...ya no se trata de un puñado de horas de un fin de semana de acuerdo a las prácticas judías...se trata de Cristo como el reposo de Dios.
Heb 4:2 Porque también a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva como a ellos; pero no les aprovechó el oír la palabra, por no ir acompañada de fe en los que la oyeron.
Heb 4:3 Pero los que hemos creído entramos en el reposo, de la manera que dijo:
Por tanto, juré en mi ira,
No entrarán en mi reposo;
aunque las obras suyas estaban acabadas desde la fundación del mundo.
La exhortación se dirige a un pueblo sacado de la esclavitud de Egipto. Han dejado atrás la sangre del cordero rociada en los postes y dinteles de las puertas de sus casas...ahora, estando ya presente Cristo glorificado en el cielo a la Diestra de la Majestad en las alturas, se dirigen, no a la Canaán terrenal donde contemplamos un Moisés muerto antes de introducir al pueblo de Israel a la Canaán terrenal prometida a Abraham.
Aquí hay una analogía.
Moisés representando la ley Y Josué representando la gracia de Cristo.
Esto significa sencillamente que la ley no puede introducir a quién la practica a la Canaán Celestial, la ciudad cuyo Arquitecto y Constructor es Dios.
La "buena nueva" de Heb.4:2 no es la sangre de Cristo...sino la Gloria de Cristo exaltado y adorado en el mismo Trono de Dios en los cielos, leemos:
Rev 5:11 Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono, y de los seres vivientes, y de los ancianos; y su número era millones de millones,
Rev 5:12 que decían a gran voz: El Cordero que fue inmolado es digno de tomar el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, la honra, la gloria y la alabanza.
Rev 5:13 Y a todo lo creado que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y en el mar, y a todas las cosas que en ellos hay, oí decir: Al que está sentado en el trono, y al Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos.
La gloria de Cristo en el cielo tomó cierta forma en los oídos de los judíos pero a muchos no les fue de provecho por no ir acompañado de fe en los oyeron y hasta el día de hoy han quedado postrados en el desierto de este mundo. Leemos:
Heb 4:4 Porque en cierto lugar dijo así del séptimo día: Y reposó Dios de todas sus obras en el séptimo día.
Heb 4:5 Y otra vez aquí: No entrarán en mi reposo.
Para la mente que tenga Sabiduría de Cristo:
Dios descansó después de la Creación...pero la expresión "no entrarán en mi reposo" indica claramente que se había prometido un descanso luego que hubiese hecho atravesar el desierto a su pueblo Israel.
Adán perturbó su descanso en la Creación y la nación de Israel lo perturbo en Canaán terrenal.
¿Está Dios contrariado con su reposo o con el hombre?
De ninguna manera. Su reposo lo ha hallado en su Hijo...
Este es el secreto revelado a sus redimidos...DIOS SE RETIRA EN CRISTO DESPUÉS NO HABER HALLADO MÁS QUE DECEPCIÓN EN LA DESCENDENCIA DE ADÁN.
EL QUE MANDA AHORA ES CRISTO.
¿Entonces para qué sirve la ley?
Fue un ayo para conducirnos al reposo de Dios que es Cristo en nosotros la esperanza de gloria.
El fin de la ley es Cristo para Justicia a todo aquel que quiera entrar en el reposo de Dios.
Ya no se trata de un puñado de horas cada fin de semana, se trata de Cristo como el reposo de Dios.
Natanael1