Hermano Luis Alberto:
Los Evangelios no presentan los hechos de Jesús día por día y hora tras hora. Lo que está escrito es suficiente. Cristo era Judío y como tal era leal a la ley que El mismo instituyó.
Pablo sí asistía a las sinagogas judías los sábados como todo buen Judío. Como tenía rango en la nación, le permitían hablar y él aprovechaba para presenatarles a Cristo. Pero hay un pasaje que te conviene analizar. Es Hechos 13. Pablo y sus acompañtes entran en la sinagoga y son invitados a participar del culto. Es obvio por el pasaje que habían Gentiles, y muchos, asistiendo al culto sabático. Es obvio también que era costumbre de estos asistir a las sinagogas. Conocían del sábado y de muchas doctrinas y prácticas judías. Respetaban a los Judíos.
Al finalizar su predicación, un grupo de Gentiles, sí, Gentiles, le piden a Pabloo que les predique a ellos, obviamente no en la sinagoga, el próximo sábado. ¿Por qué Pablo accedió, si el día siguiente era el día del sol, reconocido por los Gentiles romanos ocmo el día de descanso? Siendo que no era en la sinagoga, pudo pedirles que vinieran al día siguiente y no esperar toda una semana.
Puesto en el lugar de Pablo, yo, Luis Cajiga, me sentiría desesperado, angustiado, el pensar que hay un grupo nutrudo de personas que necesitan y quieren escuchar de Jesús y tener que esperar una semana para llevarles el mensaje.
El pasaje sigue diciendo que "el sábado siguiente se juntó casi toda la ciudad a oir la palabra de Dios". Es obvio que esos gentiles hicieron una gran obra misionera al convocar a la ciudad a escuchar a un Judío hablar de Jesús de Nazareth.
Los Gentiles sentían un aprecio inmenso a la religión Judá y participaban de sus cultos. Admiraban el monoteísmo hebreo, pero habían dos cosas que repudiaban: los sacrificios de animales y la circuncisión. Cuando Pablo predicaba un judaísmo sin esos dos elementes, ellos se volcaron al cristianismo. A eso se debió el éxito del apóstol.
Que Dios siga contigo.