Amigo Roost
Todo un honor poder responderte con el respeto que mereces, lo que bien intentas descubrir en nosotros. Veremos por partes la respuesta a tu interesante pregunta.
1. TODOS, sin excepción, provenimos de Dios por su Poder y Divinidad como el Padre y Fuente de la Vida de todos en sentido general y a quien “toda familia en el cielo y en la tierra debe su nombre” (Efesios 3:14-15 y Hechos 17:26,27).
2. En sentido espiritual, NO TODOS provenimos de Dios ni somos HIJOS DE DIOS. “Ustedes proceden de su padre el Diablo, y quieren hacer los deseos de su padre (obviamente aquí el “padre” no es Dios). Ese era homicida cuando principió, y no permaneció firme en la verdad, porque la verdad no está en él. Cuando habla la mentira, habla según su propia disposición, porque es mentiroso y el padre de [la mentira]. Porque yo, por otra parte, digo la verdad, ustedes no me creen. ¿Quién de ustedes me prueba culpable de pecado? Si yo hablo la verdad, ¿por qué no me creen ustedes? El que procede de Dios escucha los dichos de Dios. Por esto no escuchan ustedes, porque no proceden de Dios”. (Juan 8:44-47).
3. ¿Notas la diferencia? ¿Puedes explicar los dos textos y diferir con nuestra perspectiva acaso? ¿Tienes una mejor interpretación para discernir quiénes son los “hijos de Dios y los hijos de la “desobediencia” o de “la carne” o del “pecado”?
4. Por lo tanto, hay que analizar varios aspectos para ver si VENIMOS DE DIOS al aceptar los “DICHOS DE DIOS”. Si no escuchamos los “dichos de Dios”, pues es lógico que no somos considerados sus “hijos espirituales” para que, al poner en práctica esos “dichos” tengamos vida y la tengamos en “abundancia”.
Espero haber dado respuesta a tu interrogante.