Re: ¿JESUS DIJO QUE ERA DIOS?
Dices: “Eso es precisamente lo que digo y vengo diciendo”… y es que no tiene vuelta de hoja… y como aceptas que un hijo es de la misma sustancia, de la misma esencia, de la misma naturaleza que su progenitor, por consiguiente el Padre y el Hijo eterno comparten una sola naturaleza divina y no podría ser creación de Dios”. Aquí discúlpame, pero le estás dando “vuelta” a la tortilla y asumes o concluyes que el hecho de contar con la misma “naturaleza” del Padre y siendo de la misma “esencia” que el Padre, entonces el Hijo es “Eterno” igual que el Padre”. Nada más lejos de la realidad. Si bien entendiste la comparación que te expuse y creo que la aceptaste, el hecho que tú seas hijo de un Padre teniendo la misma “naturaleza humana” de tu Padre no te hace a ti el “el Padre”; es decir, el mismo ser que te dio la vida. Tú seguirás siendo el Hijo (que es lo que se colige en todas las Escrituras cuando se refieren al Cristo) y tu Padre seguirá siendo Padre tuyo y mayor que tú porque así debe ser, no otra cosa. Esto está en armonía con lo que nos enseña la Biblia; lo que enseñó Jesús, y lo que nos dice el Padre Jehová. Lo que tú deduces es lo que en boca de los apóstoles pusieron los copistas y traductores de la Biblia al verter de manera incorrecta muchos textos que se han malinterpretado y han dado origen a cuanta doctrina escucho y leo todos los días de las más de 6000 sectas del cristianismo diseminadas por todo el mundo. Lo que tú estás señalando es a una proyección “ectoplasmática” de un ser que sale de otro ser, como cuando se establece la división celular en que una célula se divide para dar origen a otra célula exactamente igual a la original. Esto, aceptando el hecho innegable que, aunque sean semejantes entre sí, idénticas, la célula original que dio origen a su doble, es una célula, y la que salió de ella es otra célula totalmente diferente. Cómo y de qué manera produjo Jehová Dios a su Hijo durante su eternidad es algo que no se sabe. Lo que se sabe es que el Padre estuvo solo antes de “dividirse” (si así lo quieres ver) para dar lugar a su “Palabra o Verbo”. Pero lo que sigue a eso y la manera en que el Hijo es presentado al hombre por parte de Dios denota, desde cualquier ángulo o perspectiva, sumisión y dependencia absoluta a su Dios y Padre.
Ahora bien, que la creación del Verbo de Dios se haya llevado a cabo mediante procesos desconocidos a los humanos es muy probable. En realidad, no tenemos ni pizca de evidencia ni elementos de juicio a considerar para darnos siquiera una mínima idea de lo que estuvo envuelto en el proceso de cuando el “Verbo” de Dios, salió de Dios o, “emanó” de Dios de acuerdo a lo que nos dice Hebreos 1:11 que no puedes desestimar ni brincártelo. Allí se establece, de manera sencilla y clara como el cristal, disipando cualquier nebulosa con respecto a otros textos de difícil entendendimiento o menor claros, para interpretarlos de la manera correcta. La verdad tajante y sin discusión está puesta en el tapete. Pablo aquí no deja espacio para conjeturas antibíblicas ni a enseñanzas contrarias a lo que el Señor quiso transmitirnos, dice: “Porque tanto el que está santificando como los que están siendo santificados, todos [emanan] de uno solo…” De la misma manera que nosotros los humanos “emanamos” o “provenimos” de Dios (queriendo decir más allá de toda duda razonable) que somos “creación” de Dios, (aquí creo no vas a contradecir esta verdad absoluta) de la misma manera, dice el texto citado, el que está “santificando” (JESUS) también emana o proviene de Dios. En otras palabras, también es creación de Dios. Esto es lo que dice la Biblia. No es lo que decimos los TJ.
Discúlpame de nuevo pero deseo, al igual que tú conmigo, ser sincero con respecto a manejar la “Palabra de la Verdad” correctamente. ¡Claro que estás confundido! No digo que estás “indeciso” con respecto a quién crees que es el Hijo. No, eso no. Digo “confundido” por cuanto estás “claro”, precisamente, en quién “no es el Hijo”. Ustedes creen que es Dios mismo y la Biblia no lo insinúa siquiera. ¡A eso me refiero. Para empezar, Cristo mismo dijo (y él mejor que nadie para aclararnos su verdadera naturaleza o identidad) quién era y siempre dijo que era el “enviado”, “representante”, “siervo”, “adorador” de otra identidad a quien llamaba “Padre” y “Dios Verdadero”. ¿Por qué no le creen? ¡Esa es tu confusión! Dices que nosotros “creemos” que Jesús es inferior al Padre como si fuera extraída de nuestra imaginación herética. ¡Por Dios USICA! Tenemos base suficiente para alegar y predicar lo que decimos al mundo. Lo probamos con la Biblia, no con nuestra literatura. La Biblia es nuestro principal libro de texto y lo sabes.
Analicemos lo que dices en este párrafo. Para facilitar su lectura lo destacaré con una numeración. Dices:
1. “Que Cristo no adora a Dios como lo adoramos nosotros”
2. “Que le pedimos su protección constante en momentos oscuros de nuestra vida”.
3. “Le adoramos reconociendo que Él está por encima de toda la creación universal.”
4. “Que dependemos de él”.
Todo esto en el entendido (desde tu perspectiva) que Cristo no tiene necesidad de adorarle de igual manera ¿Es así verdad?
Pues bien, veamos qué nos puede decir la Biblia sobre esto:
1. “Ustedes adoran lo que no conocen; nosotros adoramos lo que conocemos, porque la salvación se origina de los judíos.” (Juan 2:11). (Palabras del Señor a la samaritana junto al pozo). Otro: “Jesús le dijo: “Deja de colgarte de mí. Porque todavía no he ascendido al Padre. Pero ponte en camino a mis hermanos y diles: ‘Asciendo a mi Padre y Padre de ustedes y a mi Dios y Dios de ustedes”. (Juan 20:17). Ambos textos citados armonizan perfectamente. Si Cristo tenía su “Dios”, pues le tenía que adorar como cualquier de nosotros como bien lo indicó a la samaritana. ¿Acaso era un montaje? ¿Nos estaba mintiendo acaso?
2. “Y yendo un poco más adelante, cayó sobre su rostro, orando y diciendo: “Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa. Sin embargo, no como yo quiero, sino como tú quieres”. (Mateo 26:39). Pidió, en un momento “oscuro” de su vida, ayuda a su progenitor y Dios. Otro: “Y a la hora nona Jesús clamó con voz fuerte: “É·li, É·li, ¿lá·ma sa·baj·thá·ni?”, que, traducido, significa: “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?” (Marcos 15:34). ¿Dios hablándose a sí mismo? ¿En realidad estaba actuando?
3. Dices que sólo los humanos le adoramos como el Creador Universal. Veamos qué pensaba Cristo sobre esto: “Jesús habló estas cosas, y, alzando los ojos al cielo, dijo: “Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu hijo, para que tu hijo te glorifique a ti, [SUP]2[/SUP] como le has dado autoridad sobre toda carne, para que, en cuanto a todo [el número de los] que le has dado, les dé vida eterna. [SUP]3[/SUP] Esto significa vida eterna, el que estén adquiriendo conocimiento de ti, el único Dios verdadero, y de aquel a quien tú enviaste, Jesucristo. [SUP]4[/SUP] Yo te he glorificado sobre la tierra, y he terminado la obra que me has dado que hiciera. [SUP]5[/SUP] Así que ahora, Padre, glorifícame al lado de ti mismo con la gloria que tenía al lado de ti antes que el mundo fuera”.
4. ¿Sólo los humanos dependemos de él? Observa: “Jesús les dijo: “Mi alimento es hacer la voluntad del que me envió y terminar su obra.” El “alimento del Señor era su Padre y hacer su voluntad a fin de mantenerse con “vida”. Quizás te suene un poco fuerte, pero fueron sus palabras, no las nuestras. ¡Asimílalas”
El resto de lo que citas de Heb 4.14-16 en vez de servirte como argumento a favor, más bien se te viene encima por cuanto todo lo que allí detalla es con respecto a su misión “Redentora” con respecto a la humanidad y reconciliarnos con Dios (su Padre), tal y como fue la Voluntad de Aquél a quien tendremos que dar cuenta.
Tranquilo mi querido forista. No te preocupes que estamos compartiendo conocimientos, aunque totalmente contrarios, pero en el mayor de los respetos y eso para mí tiene mucho valor. Observa aquí cómo lo que para ti es “adecuado” (como el añadir un “oh” antes de Dios, no lo es para nosotros cuando le añadimos “un” antes de “Dios” en Juan 1:1,2). ¿Curioso no te parece? Haber, haber, entonces el punto medular no está en que no se “pueda” añadir para “mejor proveer”, sino el “por qué” se debe o no se debe añadir ¿Es así? Bueno, si es así estoy de acuerdo contigo. Ahora bien, el meollo del asunto está entonces en aclarar por qué en uno “no es viable” y en el otro “sí es viable”. Dices que del contexto de Hebreos 1 se extrae que de una manera “ontológica” se llega al entendimiento de lo que Pablo nos transmite con respecto al Hijo de Dios. Tengo entendido que la “ontología”, para todos aquellos que no sepan qué significa, proviene del griego οντος, genitivo del participio del verbo εἰμί, ser, estar; y λóγος, ciencia, estudio, teoría. Es una rama de la metafísica que estudia lo que se encuentra en algún texto no muy claro o bien, “muy maquillado” dando lugar a interpretaciones ambiguas o muy poco definidas de manera clara y entendible tal y como fueron escritos.
Observa que la “ontología” que mencionas es una “corriente filosófica” sin ningún asidero bíblico ni es tampoco alguna “inspiración” del Todopoderoso; ingrediente fundamental para que se lo apliquemos, en todos los casos, a cuanto texto queramos cambiarle la “cara” para que “calce como anillo al dedo” con nuestras suposiciones doctrinales. Hagamos un breve repaso por Hebreos 1 y veamos cuántos “puntos” están a nuestro favor y cuántos a tu favor para identificar quién realmente es el Cristo dentro del propósito de Jehová su Padre y un también breve análisis sobre el famoso “oh” antes de “Dios” que tú justificas, al parecer, su derecho a estar allí para identificar y echar por la borda, todos los demás textos que claramente definen al Señor como el Hijo de Dios, no como su IGUAL en Divinidad. Veamos:
1. “Dios, que hace mucho habló en muchas ocasiones y de muchas maneras a nuestros antepasados por medio de los profetas, [SUP]2[/SUP] al fin de estos días nos ha hablado por medio de un Hijo, a quien nombró heredero de todas las cosas, y mediante el cual hizo los sistemas de cosas.”
2. “y después de haber hecho una purificación por nuestros pecados se sentó a la diestra de la Majestad en lugares encumbrados. [SUP]4[/SUP] De modo que ha llegado a ser mejor que los ángeles, al grado que ha heredado un nombre más admirable que el de ellos.”
3. “Pero cuando introduce de nuevo a su Primogénito en la tierra habitada, dice: “Y que todos los ángeles de Dios le rindan homenaje”.
4. “Pero respecto al Hijo: “Dios es tu trono para siempre jamás, y [el] cetro de tu reino es el cetro de rectitud. [SUP]9[/SUP] Amaste la justicia, y odiaste el desafuero.”
5. “Por eso Dios, tu Dios, te ungió con [el] aceite de alborozo más que a tus socios”.
6. “Por eso es necesario que prestemos más de la acostumbrada atención a las cosas oídas por nosotros, para que nunca se nos lleve a la deriva… ¿cómo escaparemos nosotros si hemos descuidado una salvación de tal grandeza, puesto que empezó a ser hablada mediante [nuestro] Señor y nos fue verificada por los que le oyeron, [SUP]4[/SUP] mientras Dios tomó parte en dar testimonio tanto con señales como con portentos presagiosos y con diversas obras poderosas y con distribuciones de espíritu santo según su voluntad?”
7. “Lo hiciste un poco inferior a los ángeles; con gloria y honra lo coronaste, y lo nombraste sobre las obras de tus manos. [SUP]8[/SUP] Todas las cosas las sujetaste debajo de sus pies”. Porque al sujetar todas las cosas a él, no dejó [Dios] nada que no esté sujeto a él.”
8. “[SUP]10[/SUP] Porque le fue propio a aquel por cuya causa todas las cosas son y mediante el cual todas las cosas son, al llevar a la gloria a muchos hijos, perfeccionar mediante sufrimientos al Agente Principal de su salvación”
9. “Por consiguiente, le era preciso llegar a ser semejante a sus “hermanos” en todo respecto, para llegar a ser un sumo sacerdote misericordioso y fiel en cosas que tienen que ver con Dios, a fin de ofrecer sacrificio propiciatorio por los pecados de la gente. [SUP]18[/SUP] Pues por cuanto él mismo ha sufrido al ser puesto a prueba, puede ir en socorro de los que están siendo puestos a prueba”.
10. “Por consiguiente, hermanos santos, participantes del llamamiento celestial, consideren al apóstol y sumo sacerdote que nosotros confesamos: a Jesús. [SUP]2[/SUP] Él fue fiel a Aquel que lo hizo tal, así como Moisés también lo fue en toda la casa de Aquel. [SUP]3[/SUP] Porque a este se le considera digno de más gloria que a Moisés, puesto que tiene más honra que la casa el que la construye. [SUP]4[/SUP] Por supuesto, toda casa es construida por alguien, pero el que ha construido todas las cosas es Dios. [SUP]5[/SUP] Y Moisés como servidor fue fiel en toda la casa de Aquel como testimonio de las cosas que habían de hablarse después, [SUP]6[/SUP] pero Cristo [fue fiel] como Hijo sobre la casa de Aquel. (JEHOVA). Nosotros somos la casa de Aquel (JEHOVA), si mantenemos fuertemente asida nuestra franqueza de expresión y nuestra jactancia respecto a la esperanza con firmeza hasta el fin.”
Podría seguir citando el texto de Hebreos pero se haría muy larga mi exposición y creo que con estas 10 razones de peso únicamente, inspiradas por el Apóstol Pablo, son suficientes para llamar a la cordura e interpretar los Santos Escritos de la manera correcta y no sujetar a un solo texto como el de Hebreos 1:8 (de por sí mal traducido) para desbaratar todas estas 10 evidencias irrefutables acerca de la verdadera naturaleza del señor Jesús. Si tú estás aceptando que el “oh” en verdad no está en el griego pero “fue necesario” intercalarlo para hacer la diferencia de que Cristo es Dios brincándose todos los demás, mi estimado USICA, eso no es correcto. Ese “oh” que le insertaron a propósito es una clara “burla” a la Palabra de la Verdad de parte de Jehová nuestro Dios. Todo el contexto de la carta a los Hebreos denota otra identidad; otra naturaleza de Jesús como HIJO de Dios, no como DIOS y, por lo tanto, no hacía falta el “oh Dios” porque eso es decir que si Jesús era Dios, entonces ¿Cuál era el otro Dios que menciona Pablo que estaba por encima del “DIOS JESÚS” mencionado en el verso 9?
Hablemos algo sobre esta interjección “oh Dios” a ver qué nos dice el estudio griego sobre el mismo. Veamos.
En los días de Pablo y de los otros escritores neotestamentarios (y, de hecho, durante los siguientes siglos), la gente escribía de una forma llamada scriptio continua, o sea, no existía ningún tipo de separación entre palabras, frases o párrafos, y no había ningún signo de puntuación. Los textos fluían en continuas corrientes de letras, dejando a los copistas y traductores modernos con la necesidad de tomar decisiones importantes respecto de cada frase, de cada cláusula y, de hecho, de cada palabra del manuscrito.
Las traducciones modernas del Nuevo Testamento se basan, por lo general, en un texto crítico griego ampliamente aceptado, como The Greek New Testament, de Sociedades Bíblicas Unidas, o el Novum Testamentun Graece, de Nestle-Aland. Pero los editores de estas ediciones no siempre están de acuerdo respecto de dónde deben hacerse divisiones o dónde deben colocarse los signos de puntuación.
Ocasionalmente, algunos traductores, basados en su propia forma de entender los escritos del Nuevo Testamento, no concuerdan con la segmentación y puntuación que se encuentran en esas ediciones críticas. Sus decisiones pueden crear verdaderas diferencias en el significado, como puede comprobarse si se comparan algunas traducciones modernas.
“Así se escribieron los manuscritos del Nuevo Testamento”, un artículo de Roger L. Omanson en la revista Traducción de la Biblia, vol. 9 [1999], nº 1, páginas 11 y 12; publicada por las Sociedades Bíblicas Unidas).
Como vemos, es un hecho que los manuscritos del Nuevo Testamento (NT) más antiguos no tenían puntuación. Por lo tanto, ningún erudito bíblico puede asegurar hoy en día cual es la “verdadera puntuación” de estos escritos. Los editores y traductores deciden, a la luz de su propia interpretación del texto bíblico, la que les parece más adecuada.
Una traducción literal al español de ese versículo, tal como está en griego bíblico, en mayúsculas y sin separaciones entre palabras ni signos de puntuación, se lee como sigue:
MASRESPECTOALHIJOELTRONODETIELDIOSHASTAELSIGLODELSIGLO
MAS-RESPECTO-AL-HIJO-EL-TRONO-DE-TI-EL-DIOS-HASTA-EL-SIGLO-DEL-SIGLO
Este puede ser el dilema para un traductor: Dónde colocar los signos de puntuación y cómo estructurar la oración de una forma gramaticalmente correcta en español. Por ejemplo, una opción sería:
“MAS RESPECTO AL HIJO, TU TRONO EL DIOS HASTA EL SIGLO DEL SIGLO”
Esta es la puntuación que ofrecen, entre otros, The Greek New Testament (SBU, 4ª edición, 1993); el texto maestro griego de J. J. Griesbach (1806); y la Vulgata Latina (del siglo V E.C.) Según esta puntuación, la traducción más exacta sería la que ofrece la TNM.
Es interesante que, en este punto, examinemos la variación que se ha producido en la traducción de Heb 1:8 en la última revisión de la versión Reina-Valera publicada por las Sociedades Bíblicas Unidas (SBU), la de 1995, y la diferencia de significado que esta provoca. La Reina-Valera revisada en 1995 (RV95) traduce este versículo de la siguiente manera:
“Pero del Hijo dice: Tu trono, Dios, por los siglos de los siglos”.
Si te detienes a apreciarlo, notarás que la RV95 ha eliminado la interjección sintomática “oh” (interjección que no existe en el texto griego) antes de la palabra “Dios” en Heb 1:8. Esta interjección era la que convertía a la palabra “Dios” en un vocativo referido a Cristo o, lo que es lo mismo, la que hacía posible que la única forma de interpretar este versículo fuera aquella en la que a Jesús se le llama “Dios”. El pequeño cambio introducido por los editores de la RV95 permite entender este versículo de dos formas distintas, a saber: 1. Tomando la palabra “Dios” como vocativo referido a Cristo (como en RV60). 2. Entendiendo que la palabra “Dios” es un nominativo, (predicado en este caso) que acompaña al sujeto, trono. De este trono, sobre el que se apoya Cristo, se dice o predica que es Dios.
Se puede afirmar, entonces, que la segunda interpretación posible en RV95 es la misma que ofrece la TNM. Ahora bien: ¿Es gramaticalmente correcta esta interpretación? Respecto a esta cuestión, A. T. Robertson (un erudito en gramática griega y protestante conservador) hizo el siguiente comentario sobre esta frase en su libro Robertson`s NT Word Pictures en CD-Rom: {Oh Dios} (ho theos). Esta cita (la quinta) está tomada del Sal 45.7. Una oda nupcial hebrea (epitalamio), dedicada a un rey que aquí se considera mesiánico. No es seguro si ho theos es, en este texto, un vocativo (con la forma del nominativo, como en Jn 20.28, donde se dirige al Mesías como theos, lo que es posible, Jn 1.18), o si ho theos es un nominativo (sujeto o predicado) que tiene el verbo estin (es) sobreentendido: “Dios es tu trono” o “Tu Trono es Dios”. Cualquiera de estos sentidos es correcto.
Robertson afirma que es posible que ho theos [lit.:“el Dios”] sea un vocativo o un nominativo; ambas opciones son posibles. O, lo que es lo mismo, que sólo por la gramática, nadie podría asegurar cuál de las dos interpretaciones es la correcta. Ambas traducciones serían aceptables.
También, Robert Young (un erudito presbiteriano, autor de la versión de la Biblia conocida como A Literal Translation of The Bible, y de la concordancia bíblica Analitycal Concordance to The Bible) escribió en su comentario de la Biblia Concise Critical Comments on The Holy Bible lo siguiente respecto a Hebreos 1:8: [OH DIOS.] Este es un caso claro en el que Cristo es llamado “Dios”, pero como el v. 9 habla de Dios como su “Dios”, no podemos recalcar que aquí se prueba la suprema divinidad del Salvador; además puede ser perfectamente traducido por “Dios es tu trono —por los siglos de los siglos”; en cualquier caso, se aplica solo al trono mediador.
Como vemos, Young explica en este comentario que es correcto traducir Hebreos 1:8 de las dos maneras mencionadas al principio y que no se puede usar este texto para probar la “divinidad suprema del Salvador”.
¿Cómo traducen Hebreos 1:8 otras versiones? Veamos algunas:
Traducción en lenguaje actual: “Su reinado, como el de Dios, durará para siempre”
Biblia de Jerusalén: “Tu trono es eterno, como el de Dios”.
El Libro del Pueblo de Dios. La Biblia: “Tu trono, como el de Dios, permanece para siempre”.
Nueva Biblia Española: “Tu trono, como el de un dios, permanece para siempre”.
Biblia del Peregrino: “Tu trono, como el de un Dios, permanece para siempre”.
La Biblia. Serafín de Ausejo y equipo interconfesional: “Tu trono, cual de Dios, es eterno, para siempre”.
La Biblia. Editorial La Casa de la Biblia: “Tu trono, como el de Dios, es eterno”.
The New English Bible. Oxford/Cambridge: “Your throne is like God’s throne, eternal” (Español: “Tu trono es como el trono eterno de Dios”).
Revised Standard Version , 1952: “Your divine throne endures for ever and ever” (Español: “Tu trono divino dura siempre y para siempre”).
A New Translation of The Bible. James Moffatt, 1950: “Your throne shall stand for evermore” (Español: “Su trono permanece para siempre”).
The Holy Scriptures According to the Masoretic Text: “Thy throne given of God is for ever and ever” (Español: “El trono que Dios le ha dado existe para siempre”).
La Biblia traducida por Moses Katznelson: “El trono que te dio Dios es por siempre y para siempre”.
Sagrada Biblia, Nácar-Colunga: “Tu trono subsistirá por siempre jamás”.
La Sagrada Escritura por profesores de la Compañía de Jesús: “Tu trono, ¡oh Poderoso!, será por siempre jamás”.
Ahora bien, si partimos del hecho innegable de lo que el mismo Jesús declaró en Mateo 11:25, de “alabar al Padre públicamente” por esconder estas cosas (las interpretaciones sencillas y claras de la Biblia) de los sabios e intelectuales pero sí reveladas a los “pequeñuelos” (personas humildes y sencillas sin complicaciones filosóficas requeridas para entender los Santos Escritos), nos ayudará a interpretar, a la manera de Dios, la sencilla fluidez de la mayor parte de su Palabra. Y fíjate que para ustedes la sencillez manifiesta en la expresión “Hijo de Dios” no la entienden como tal, sino que significa “Dios” ¿Cómo vamos a ponernos de acuerdo en algo tan evidente, sencilla y cristalina forma de enseñarnos quién en realidad era Él si aún así ustedes no le creen? ¿Dónde está el problema entonces?
Creo que esta información despejará tus dudas respecto a cómo debe ser traducido Hebreos 1:8 y espero que cumpla su cometido. Es difícil aceptar la verdad cuando nos la muestran, lo comprendo, pero peor sería persistir en el error de manera volitiva y por el simple hecho de llevar la contraria a la organización que siempre han creído es la “peor de toda la comunidad religiosa del mundo”.
¿Cómo que a qué viene el texto citado? ¿Acaso no comprendes lo que el mismo Jesús allí sentencia al decirnos: “entonces sabrán que yo soy ese”… “y que no hago NADA DE MI PROPIA INICIATIVA, sino que hablo estas cosas así como el PADRE ME HA ENSEÑADO”? “Y el que me ha enviado está conmigo”, y que no lo “me ha dejado solo porque yo siempre hago las cosas que le agrado”. Que yo te explicara que Jesús no era ni es ninguna “marioneta” fue por lo que dijiste que él se “valía por sí solo” y yo te he demostrado que eso no es cierto, claro, si estás dispuesto a creerle a Jesús, no a los TJ. Jesús, tal como dijo, “no hacía ni una sola cosa de su propia iniciativa” ¿Esto qué significa? ¿Acaso no era muy cerca forma de ser una “marioneta”? Nosotros entendemos el significado exacto, pero no sé tú cómo lo interpretas. Eso es “dependencia”; eso es “sujeción”, eso es ser uno, LITERALMENTE, HIJO de alguien, no una PROYECCIÓN ECTOPLASMÁTICA del MISMO SER DE DIOS, SIENDO AL MISMO TIEMPO DIOS, sin ninguna diferencia. Y si así fuera, pues entonces no importa. Toda la enseñanza del A.T. y del N.T. y la conclusión a que llegaron los evangelistas es que JESUS ES EL HIJO DE DIOS. Punto. No hay de otra. Y esta “verdad” revelada, así de sencilla, es la que tenemos que aceptar para ¿Qué? Pues para heredar la VIDA ETERNA, tal y como nos lo especifica el apóstol JUAN en su evangelio en el capítulo 20, verso 30 y 31. Si Cristo era en realidad Dios, entonces Dios tuvo motivos que sólo serán de él para decirnos otra cosa. Algún día lo sabremos pero será después de aceptar lo que hasta hoy se nos ha transmitido en las Escrituras: QUE JESÚS ES EL CRISTO, EL HIJO DE DIOS Y POR CREER, OBTENDREMOS LA VIDA ETERNA. ¡Así de fácil! ¡Así de contundente! ¿Por qué ir más allá de las cosas que están escritas?
Aquí esgrimes tu criterio personal pero no derrumbas los argumentos de la Palabra de Dios ni explicas el verdadero significado. Lo que puedo ver es que dices que a “Dios le convenía” ¿Convenía qué? ¿Hacer la actuación al mejor estilo de Hollywood? ¿Engañarnos? ¿Transmitirnos una enseñanza falsa? ¿Qué necesidad tenía de falsear la verdad? ¿Por qué el Señor cuando le preguntó a Pedro que quién era el “Hijo del Hombre” y Pedro le respondió diciendo: “Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios Vivo” le dijo que “Feliz eres, Simón hijo de Jonás, porque carne y sangre no te [lo] reveló, sino mi Padre que está en los cielos”? ¿También estaba mintiendo o falseando la verdad de quién era Él? ¿O será más bien que el Señor “le guiñó” un ojo para que Pedro le siguiera la corriente? ¡Por Dios USICA, el razonamiento es sencillo y cristalino!
Bueno pues, si aceptas todo eso que dices aceptar del Señor Jesús, ¿Por qué razón, motivo o circunstancias te empecinas en creer que es Dios (JEHOVA), el Todopoderoso si lo contrario es lo que dijo que era, EL HIJO DE DIOS, SU PADRE Y DADOR DE VIDA?
Gracias de nuevo por tu deferencia para conmigo. Reconozco el valor en responder con verdadero respeto.
Que Jehová Dios guíe tus pasos.
Eso es precisamente lo que digo y vengo diciendo estimado Melvitón, y no en lo que a mi me convenga. En efecto, si tú eres hijo de alguien y ese alguien es un humano, pues tú serás tan humano como ese alguien, y como bien dices en este respecto (su naturaleza humana) son “iguales” en naturaleza, no en personalidad (idénticos o la misma persona) sino estaríamos hablando de algo despropió en cuanto a Dios. De la misa manera el Padre para con el Hijo nuestro Señor, son idénticos según la naturaleza divina, pero distintos en cuanto a Personas, y es que no tiene vuelta de hoja, y como aceptas; un hijo es de la misma sustancia, de la misma escancia, de la misma naturaleza que su progenitor por consiguiente el Padre y el Hijo eterno comparte una sola naturaleza divina y no podría ser creación de Dios. Es por eso que en el credo recitamos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero. Respecto a Hebreos 7:3 es difícil sin dudas explicar en términos humanos sin duda si se podría apoyar su deidad en cuanto se deduce del texto que Cristo no tiene principio, como dice el texto: “figura sin padre ni madre, sin genealogía, sin principio ni fin de vida”, es pues eterno igual que el Padre.
Dices: “Eso es precisamente lo que digo y vengo diciendo”… y es que no tiene vuelta de hoja… y como aceptas que un hijo es de la misma sustancia, de la misma esencia, de la misma naturaleza que su progenitor, por consiguiente el Padre y el Hijo eterno comparten una sola naturaleza divina y no podría ser creación de Dios”. Aquí discúlpame, pero le estás dando “vuelta” a la tortilla y asumes o concluyes que el hecho de contar con la misma “naturaleza” del Padre y siendo de la misma “esencia” que el Padre, entonces el Hijo es “Eterno” igual que el Padre”. Nada más lejos de la realidad. Si bien entendiste la comparación que te expuse y creo que la aceptaste, el hecho que tú seas hijo de un Padre teniendo la misma “naturaleza humana” de tu Padre no te hace a ti el “el Padre”; es decir, el mismo ser que te dio la vida. Tú seguirás siendo el Hijo (que es lo que se colige en todas las Escrituras cuando se refieren al Cristo) y tu Padre seguirá siendo Padre tuyo y mayor que tú porque así debe ser, no otra cosa. Esto está en armonía con lo que nos enseña la Biblia; lo que enseñó Jesús, y lo que nos dice el Padre Jehová. Lo que tú deduces es lo que en boca de los apóstoles pusieron los copistas y traductores de la Biblia al verter de manera incorrecta muchos textos que se han malinterpretado y han dado origen a cuanta doctrina escucho y leo todos los días de las más de 6000 sectas del cristianismo diseminadas por todo el mundo. Lo que tú estás señalando es a una proyección “ectoplasmática” de un ser que sale de otro ser, como cuando se establece la división celular en que una célula se divide para dar origen a otra célula exactamente igual a la original. Esto, aceptando el hecho innegable que, aunque sean semejantes entre sí, idénticas, la célula original que dio origen a su doble, es una célula, y la que salió de ella es otra célula totalmente diferente. Cómo y de qué manera produjo Jehová Dios a su Hijo durante su eternidad es algo que no se sabe. Lo que se sabe es que el Padre estuvo solo antes de “dividirse” (si así lo quieres ver) para dar lugar a su “Palabra o Verbo”. Pero lo que sigue a eso y la manera en que el Hijo es presentado al hombre por parte de Dios denota, desde cualquier ángulo o perspectiva, sumisión y dependencia absoluta a su Dios y Padre.
Ahora bien, que la creación del Verbo de Dios se haya llevado a cabo mediante procesos desconocidos a los humanos es muy probable. En realidad, no tenemos ni pizca de evidencia ni elementos de juicio a considerar para darnos siquiera una mínima idea de lo que estuvo envuelto en el proceso de cuando el “Verbo” de Dios, salió de Dios o, “emanó” de Dios de acuerdo a lo que nos dice Hebreos 1:11 que no puedes desestimar ni brincártelo. Allí se establece, de manera sencilla y clara como el cristal, disipando cualquier nebulosa con respecto a otros textos de difícil entendendimiento o menor claros, para interpretarlos de la manera correcta. La verdad tajante y sin discusión está puesta en el tapete. Pablo aquí no deja espacio para conjeturas antibíblicas ni a enseñanzas contrarias a lo que el Señor quiso transmitirnos, dice: “Porque tanto el que está santificando como los que están siendo santificados, todos [emanan] de uno solo…” De la misma manera que nosotros los humanos “emanamos” o “provenimos” de Dios (queriendo decir más allá de toda duda razonable) que somos “creación” de Dios, (aquí creo no vas a contradecir esta verdad absoluta) de la misma manera, dice el texto citado, el que está “santificando” (JESUS) también emana o proviene de Dios. En otras palabras, también es creación de Dios. Esto es lo que dice la Biblia. No es lo que decimos los TJ.
No, no confundo, no empiezo diciendo que si para luego negar después, y no tenemos ninguna nebulosa con respecto a Cristo. Es correcto, acepto que Cristo esta sujeto al Padre en sujeción total, mas no acepto que por esto implique que el viene a ser menos que el Padre como lo cree ustedes los testigos de Jehová. A lo que me refería con eso de que es diferente a como nosotros adoramos a Dios, nosotros alabamos a Dios de diferentes modos, le pedimos su protección en momentos oscuros de nuestra vida, le adoramos reconociendo que el esta por encima de todo lo creado y que dependemos de El, en este sentido Cristo no adora a el Padre. Lo que creo respecto al Hijo ahorita en el Cielo es que esta fungiendo como nuestro abogado ante el Padre, como nuestro Sumo Sacerdote quien presenta al Padre de parte nuestra nuestras oblaciones personales y comunitarias: “Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión. Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.” (Heb 4.14-16)
Discúlpame de nuevo pero deseo, al igual que tú conmigo, ser sincero con respecto a manejar la “Palabra de la Verdad” correctamente. ¡Claro que estás confundido! No digo que estás “indeciso” con respecto a quién crees que es el Hijo. No, eso no. Digo “confundido” por cuanto estás “claro”, precisamente, en quién “no es el Hijo”. Ustedes creen que es Dios mismo y la Biblia no lo insinúa siquiera. ¡A eso me refiero. Para empezar, Cristo mismo dijo (y él mejor que nadie para aclararnos su verdadera naturaleza o identidad) quién era y siempre dijo que era el “enviado”, “representante”, “siervo”, “adorador” de otra identidad a quien llamaba “Padre” y “Dios Verdadero”. ¿Por qué no le creen? ¡Esa es tu confusión! Dices que nosotros “creemos” que Jesús es inferior al Padre como si fuera extraída de nuestra imaginación herética. ¡Por Dios USICA! Tenemos base suficiente para alegar y predicar lo que decimos al mundo. Lo probamos con la Biblia, no con nuestra literatura. La Biblia es nuestro principal libro de texto y lo sabes.
Analicemos lo que dices en este párrafo. Para facilitar su lectura lo destacaré con una numeración. Dices:
1. “Que Cristo no adora a Dios como lo adoramos nosotros”
2. “Que le pedimos su protección constante en momentos oscuros de nuestra vida”.
3. “Le adoramos reconociendo que Él está por encima de toda la creación universal.”
4. “Que dependemos de él”.
Todo esto en el entendido (desde tu perspectiva) que Cristo no tiene necesidad de adorarle de igual manera ¿Es así verdad?
Pues bien, veamos qué nos puede decir la Biblia sobre esto:
1. “Ustedes adoran lo que no conocen; nosotros adoramos lo que conocemos, porque la salvación se origina de los judíos.” (Juan 2:11). (Palabras del Señor a la samaritana junto al pozo). Otro: “Jesús le dijo: “Deja de colgarte de mí. Porque todavía no he ascendido al Padre. Pero ponte en camino a mis hermanos y diles: ‘Asciendo a mi Padre y Padre de ustedes y a mi Dios y Dios de ustedes”. (Juan 20:17). Ambos textos citados armonizan perfectamente. Si Cristo tenía su “Dios”, pues le tenía que adorar como cualquier de nosotros como bien lo indicó a la samaritana. ¿Acaso era un montaje? ¿Nos estaba mintiendo acaso?
2. “Y yendo un poco más adelante, cayó sobre su rostro, orando y diciendo: “Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa. Sin embargo, no como yo quiero, sino como tú quieres”. (Mateo 26:39). Pidió, en un momento “oscuro” de su vida, ayuda a su progenitor y Dios. Otro: “Y a la hora nona Jesús clamó con voz fuerte: “É·li, É·li, ¿lá·ma sa·baj·thá·ni?”, que, traducido, significa: “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?” (Marcos 15:34). ¿Dios hablándose a sí mismo? ¿En realidad estaba actuando?
3. Dices que sólo los humanos le adoramos como el Creador Universal. Veamos qué pensaba Cristo sobre esto: “Jesús habló estas cosas, y, alzando los ojos al cielo, dijo: “Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu hijo, para que tu hijo te glorifique a ti, [SUP]2[/SUP] como le has dado autoridad sobre toda carne, para que, en cuanto a todo [el número de los] que le has dado, les dé vida eterna. [SUP]3[/SUP] Esto significa vida eterna, el que estén adquiriendo conocimiento de ti, el único Dios verdadero, y de aquel a quien tú enviaste, Jesucristo. [SUP]4[/SUP] Yo te he glorificado sobre la tierra, y he terminado la obra que me has dado que hiciera. [SUP]5[/SUP] Así que ahora, Padre, glorifícame al lado de ti mismo con la gloria que tenía al lado de ti antes que el mundo fuera”.
4. ¿Sólo los humanos dependemos de él? Observa: “Jesús les dijo: “Mi alimento es hacer la voluntad del que me envió y terminar su obra.” El “alimento del Señor era su Padre y hacer su voluntad a fin de mantenerse con “vida”. Quizás te suene un poco fuerte, pero fueron sus palabras, no las nuestras. ¡Asimílalas”
El resto de lo que citas de Heb 4.14-16 en vez de servirte como argumento a favor, más bien se te viene encima por cuanto todo lo que allí detalla es con respecto a su misión “Redentora” con respecto a la humanidad y reconciliarnos con Dios (su Padre), tal y como fue la Voluntad de Aquél a quien tendremos que dar cuenta.
Estimado Melviton disculpa que yo también sea claro: Ustedes si que han manipulado la Biblia y la han alterado para que calce con sus propias creencias y una de ellas es el de negar la deidad del Hijo. Yo no veo que haya manipulación en el texto de Hebreos 1:8, ni de le texto de Juan 1:1, que ustedes si han manipulado, solo que creo que se sigue la misma regla que siguen ustedes con añadir “un” en el texto antes citado de Juan 1:1. Pero aquí en dicha traducción si es muy posible. Así vemos que el contexto de Hebreos 1 se dirige al Hijo como Dios en un sentido ontológico (cf. Heb 1:3) a diferencia de los ángeles creados. Que el autor de pronto rompa el marco en 1:8: "Tu trono es Dios" o "Dios es tu trono" seria contextualmente inconcebible. Por eso es que muchas versiones optan por traducir así. La TNM traduce en Heb 1:8: Pero respecto al Hijo: “Dios es tu trono para siempre jamás, y [el] cetro de tu* reino es el cetro de rectitud.* ¿Y cómo puede Dios ser "un trono" del Hijo?
Tranquilo mi querido forista. No te preocupes que estamos compartiendo conocimientos, aunque totalmente contrarios, pero en el mayor de los respetos y eso para mí tiene mucho valor. Observa aquí cómo lo que para ti es “adecuado” (como el añadir un “oh” antes de Dios, no lo es para nosotros cuando le añadimos “un” antes de “Dios” en Juan 1:1,2). ¿Curioso no te parece? Haber, haber, entonces el punto medular no está en que no se “pueda” añadir para “mejor proveer”, sino el “por qué” se debe o no se debe añadir ¿Es así? Bueno, si es así estoy de acuerdo contigo. Ahora bien, el meollo del asunto está entonces en aclarar por qué en uno “no es viable” y en el otro “sí es viable”. Dices que del contexto de Hebreos 1 se extrae que de una manera “ontológica” se llega al entendimiento de lo que Pablo nos transmite con respecto al Hijo de Dios. Tengo entendido que la “ontología”, para todos aquellos que no sepan qué significa, proviene del griego οντος, genitivo del participio del verbo εἰμί, ser, estar; y λóγος, ciencia, estudio, teoría. Es una rama de la metafísica que estudia lo que se encuentra en algún texto no muy claro o bien, “muy maquillado” dando lugar a interpretaciones ambiguas o muy poco definidas de manera clara y entendible tal y como fueron escritos.
Observa que la “ontología” que mencionas es una “corriente filosófica” sin ningún asidero bíblico ni es tampoco alguna “inspiración” del Todopoderoso; ingrediente fundamental para que se lo apliquemos, en todos los casos, a cuanto texto queramos cambiarle la “cara” para que “calce como anillo al dedo” con nuestras suposiciones doctrinales. Hagamos un breve repaso por Hebreos 1 y veamos cuántos “puntos” están a nuestro favor y cuántos a tu favor para identificar quién realmente es el Cristo dentro del propósito de Jehová su Padre y un también breve análisis sobre el famoso “oh” antes de “Dios” que tú justificas, al parecer, su derecho a estar allí para identificar y echar por la borda, todos los demás textos que claramente definen al Señor como el Hijo de Dios, no como su IGUAL en Divinidad. Veamos:
1. “Dios, que hace mucho habló en muchas ocasiones y de muchas maneras a nuestros antepasados por medio de los profetas, [SUP]2[/SUP] al fin de estos días nos ha hablado por medio de un Hijo, a quien nombró heredero de todas las cosas, y mediante el cual hizo los sistemas de cosas.”
2. “y después de haber hecho una purificación por nuestros pecados se sentó a la diestra de la Majestad en lugares encumbrados. [SUP]4[/SUP] De modo que ha llegado a ser mejor que los ángeles, al grado que ha heredado un nombre más admirable que el de ellos.”
3. “Pero cuando introduce de nuevo a su Primogénito en la tierra habitada, dice: “Y que todos los ángeles de Dios le rindan homenaje”.
4. “Pero respecto al Hijo: “Dios es tu trono para siempre jamás, y [el] cetro de tu reino es el cetro de rectitud. [SUP]9[/SUP] Amaste la justicia, y odiaste el desafuero.”
5. “Por eso Dios, tu Dios, te ungió con [el] aceite de alborozo más que a tus socios”.
6. “Por eso es necesario que prestemos más de la acostumbrada atención a las cosas oídas por nosotros, para que nunca se nos lleve a la deriva… ¿cómo escaparemos nosotros si hemos descuidado una salvación de tal grandeza, puesto que empezó a ser hablada mediante [nuestro] Señor y nos fue verificada por los que le oyeron, [SUP]4[/SUP] mientras Dios tomó parte en dar testimonio tanto con señales como con portentos presagiosos y con diversas obras poderosas y con distribuciones de espíritu santo según su voluntad?”
7. “Lo hiciste un poco inferior a los ángeles; con gloria y honra lo coronaste, y lo nombraste sobre las obras de tus manos. [SUP]8[/SUP] Todas las cosas las sujetaste debajo de sus pies”. Porque al sujetar todas las cosas a él, no dejó [Dios] nada que no esté sujeto a él.”
8. “[SUP]10[/SUP] Porque le fue propio a aquel por cuya causa todas las cosas son y mediante el cual todas las cosas son, al llevar a la gloria a muchos hijos, perfeccionar mediante sufrimientos al Agente Principal de su salvación”
9. “Por consiguiente, le era preciso llegar a ser semejante a sus “hermanos” en todo respecto, para llegar a ser un sumo sacerdote misericordioso y fiel en cosas que tienen que ver con Dios, a fin de ofrecer sacrificio propiciatorio por los pecados de la gente. [SUP]18[/SUP] Pues por cuanto él mismo ha sufrido al ser puesto a prueba, puede ir en socorro de los que están siendo puestos a prueba”.
10. “Por consiguiente, hermanos santos, participantes del llamamiento celestial, consideren al apóstol y sumo sacerdote que nosotros confesamos: a Jesús. [SUP]2[/SUP] Él fue fiel a Aquel que lo hizo tal, así como Moisés también lo fue en toda la casa de Aquel. [SUP]3[/SUP] Porque a este se le considera digno de más gloria que a Moisés, puesto que tiene más honra que la casa el que la construye. [SUP]4[/SUP] Por supuesto, toda casa es construida por alguien, pero el que ha construido todas las cosas es Dios. [SUP]5[/SUP] Y Moisés como servidor fue fiel en toda la casa de Aquel como testimonio de las cosas que habían de hablarse después, [SUP]6[/SUP] pero Cristo [fue fiel] como Hijo sobre la casa de Aquel. (JEHOVA). Nosotros somos la casa de Aquel (JEHOVA), si mantenemos fuertemente asida nuestra franqueza de expresión y nuestra jactancia respecto a la esperanza con firmeza hasta el fin.”
Podría seguir citando el texto de Hebreos pero se haría muy larga mi exposición y creo que con estas 10 razones de peso únicamente, inspiradas por el Apóstol Pablo, son suficientes para llamar a la cordura e interpretar los Santos Escritos de la manera correcta y no sujetar a un solo texto como el de Hebreos 1:8 (de por sí mal traducido) para desbaratar todas estas 10 evidencias irrefutables acerca de la verdadera naturaleza del señor Jesús. Si tú estás aceptando que el “oh” en verdad no está en el griego pero “fue necesario” intercalarlo para hacer la diferencia de que Cristo es Dios brincándose todos los demás, mi estimado USICA, eso no es correcto. Ese “oh” que le insertaron a propósito es una clara “burla” a la Palabra de la Verdad de parte de Jehová nuestro Dios. Todo el contexto de la carta a los Hebreos denota otra identidad; otra naturaleza de Jesús como HIJO de Dios, no como DIOS y, por lo tanto, no hacía falta el “oh Dios” porque eso es decir que si Jesús era Dios, entonces ¿Cuál era el otro Dios que menciona Pablo que estaba por encima del “DIOS JESÚS” mencionado en el verso 9?
Ya se que podrías decir, como los que niegan la divinidad del Hijo que dicen: El profesor de Oxford y el famoso traductor de la Biblia trinitaria, el Dr. James Moffatt, ha sido descrito como "probablemente el mayor estudioso de la Biblia de nuestros días." Su traducción respetada Biblia hace Heb. 1:8 como: "Dios es tu trono para siempre jamás." Otro profesor de la universidad de Cambridge señaló en el Nuevo Testamento lenguaje académico, el Dr. CFD Moule escribe que Heb. 1:8 puede ser "interpretada para significar “Tu trono es Dios" - p. 32, Un libro Idiom del griego del Nuevo Testamento, Cambridge University Press, 1990 impresión. Etc, etc.
Lo que yo creo y tengo entendido es que La construcción Griega de Hebreos 1:8 como dicen varios autores tambien permite que el texto sea traducido de dos formas legítimas:
“Dios es tu trono por los siglos de los siglos…”
y
“Tu trono Oh Dios, es por los siglos de los siglos…”
Hablemos algo sobre esta interjección “oh Dios” a ver qué nos dice el estudio griego sobre el mismo. Veamos.
En los días de Pablo y de los otros escritores neotestamentarios (y, de hecho, durante los siguientes siglos), la gente escribía de una forma llamada scriptio continua, o sea, no existía ningún tipo de separación entre palabras, frases o párrafos, y no había ningún signo de puntuación. Los textos fluían en continuas corrientes de letras, dejando a los copistas y traductores modernos con la necesidad de tomar decisiones importantes respecto de cada frase, de cada cláusula y, de hecho, de cada palabra del manuscrito.
Las traducciones modernas del Nuevo Testamento se basan, por lo general, en un texto crítico griego ampliamente aceptado, como The Greek New Testament, de Sociedades Bíblicas Unidas, o el Novum Testamentun Graece, de Nestle-Aland. Pero los editores de estas ediciones no siempre están de acuerdo respecto de dónde deben hacerse divisiones o dónde deben colocarse los signos de puntuación.
Ocasionalmente, algunos traductores, basados en su propia forma de entender los escritos del Nuevo Testamento, no concuerdan con la segmentación y puntuación que se encuentran en esas ediciones críticas. Sus decisiones pueden crear verdaderas diferencias en el significado, como puede comprobarse si se comparan algunas traducciones modernas.
“Así se escribieron los manuscritos del Nuevo Testamento”, un artículo de Roger L. Omanson en la revista Traducción de la Biblia, vol. 9 [1999], nº 1, páginas 11 y 12; publicada por las Sociedades Bíblicas Unidas).
Como vemos, es un hecho que los manuscritos del Nuevo Testamento (NT) más antiguos no tenían puntuación. Por lo tanto, ningún erudito bíblico puede asegurar hoy en día cual es la “verdadera puntuación” de estos escritos. Los editores y traductores deciden, a la luz de su propia interpretación del texto bíblico, la que les parece más adecuada.
Una traducción literal al español de ese versículo, tal como está en griego bíblico, en mayúsculas y sin separaciones entre palabras ni signos de puntuación, se lee como sigue:
MASRESPECTOALHIJOELTRONODETIELDIOSHASTAELSIGLODELSIGLO
MAS-RESPECTO-AL-HIJO-EL-TRONO-DE-TI-EL-DIOS-HASTA-EL-SIGLO-DEL-SIGLO
Este puede ser el dilema para un traductor: Dónde colocar los signos de puntuación y cómo estructurar la oración de una forma gramaticalmente correcta en español. Por ejemplo, una opción sería:
“MAS RESPECTO AL HIJO, TU TRONO EL DIOS HASTA EL SIGLO DEL SIGLO”
Esta es la puntuación que ofrecen, entre otros, The Greek New Testament (SBU, 4ª edición, 1993); el texto maestro griego de J. J. Griesbach (1806); y la Vulgata Latina (del siglo V E.C.) Según esta puntuación, la traducción más exacta sería la que ofrece la TNM.
Es interesante que, en este punto, examinemos la variación que se ha producido en la traducción de Heb 1:8 en la última revisión de la versión Reina-Valera publicada por las Sociedades Bíblicas Unidas (SBU), la de 1995, y la diferencia de significado que esta provoca. La Reina-Valera revisada en 1995 (RV95) traduce este versículo de la siguiente manera:
“Pero del Hijo dice: Tu trono, Dios, por los siglos de los siglos”.
Si te detienes a apreciarlo, notarás que la RV95 ha eliminado la interjección sintomática “oh” (interjección que no existe en el texto griego) antes de la palabra “Dios” en Heb 1:8. Esta interjección era la que convertía a la palabra “Dios” en un vocativo referido a Cristo o, lo que es lo mismo, la que hacía posible que la única forma de interpretar este versículo fuera aquella en la que a Jesús se le llama “Dios”. El pequeño cambio introducido por los editores de la RV95 permite entender este versículo de dos formas distintas, a saber: 1. Tomando la palabra “Dios” como vocativo referido a Cristo (como en RV60). 2. Entendiendo que la palabra “Dios” es un nominativo, (predicado en este caso) que acompaña al sujeto, trono. De este trono, sobre el que se apoya Cristo, se dice o predica que es Dios.
Se puede afirmar, entonces, que la segunda interpretación posible en RV95 es la misma que ofrece la TNM. Ahora bien: ¿Es gramaticalmente correcta esta interpretación? Respecto a esta cuestión, A. T. Robertson (un erudito en gramática griega y protestante conservador) hizo el siguiente comentario sobre esta frase en su libro Robertson`s NT Word Pictures en CD-Rom: {Oh Dios} (ho theos). Esta cita (la quinta) está tomada del Sal 45.7. Una oda nupcial hebrea (epitalamio), dedicada a un rey que aquí se considera mesiánico. No es seguro si ho theos es, en este texto, un vocativo (con la forma del nominativo, como en Jn 20.28, donde se dirige al Mesías como theos, lo que es posible, Jn 1.18), o si ho theos es un nominativo (sujeto o predicado) que tiene el verbo estin (es) sobreentendido: “Dios es tu trono” o “Tu Trono es Dios”. Cualquiera de estos sentidos es correcto.
Robertson afirma que es posible que ho theos [lit.:“el Dios”] sea un vocativo o un nominativo; ambas opciones son posibles. O, lo que es lo mismo, que sólo por la gramática, nadie podría asegurar cuál de las dos interpretaciones es la correcta. Ambas traducciones serían aceptables.
También, Robert Young (un erudito presbiteriano, autor de la versión de la Biblia conocida como A Literal Translation of The Bible, y de la concordancia bíblica Analitycal Concordance to The Bible) escribió en su comentario de la Biblia Concise Critical Comments on The Holy Bible lo siguiente respecto a Hebreos 1:8: [OH DIOS.] Este es un caso claro en el que Cristo es llamado “Dios”, pero como el v. 9 habla de Dios como su “Dios”, no podemos recalcar que aquí se prueba la suprema divinidad del Salvador; además puede ser perfectamente traducido por “Dios es tu trono —por los siglos de los siglos”; en cualquier caso, se aplica solo al trono mediador.
Como vemos, Young explica en este comentario que es correcto traducir Hebreos 1:8 de las dos maneras mencionadas al principio y que no se puede usar este texto para probar la “divinidad suprema del Salvador”.
¿Cómo traducen Hebreos 1:8 otras versiones? Veamos algunas:
Traducción en lenguaje actual: “Su reinado, como el de Dios, durará para siempre”
Biblia de Jerusalén: “Tu trono es eterno, como el de Dios”.
El Libro del Pueblo de Dios. La Biblia: “Tu trono, como el de Dios, permanece para siempre”.
Nueva Biblia Española: “Tu trono, como el de un dios, permanece para siempre”.
Biblia del Peregrino: “Tu trono, como el de un Dios, permanece para siempre”.
La Biblia. Serafín de Ausejo y equipo interconfesional: “Tu trono, cual de Dios, es eterno, para siempre”.
La Biblia. Editorial La Casa de la Biblia: “Tu trono, como el de Dios, es eterno”.
The New English Bible. Oxford/Cambridge: “Your throne is like God’s throne, eternal” (Español: “Tu trono es como el trono eterno de Dios”).
Revised Standard Version , 1952: “Your divine throne endures for ever and ever” (Español: “Tu trono divino dura siempre y para siempre”).
A New Translation of The Bible. James Moffatt, 1950: “Your throne shall stand for evermore” (Español: “Su trono permanece para siempre”).
The Holy Scriptures According to the Masoretic Text: “Thy throne given of God is for ever and ever” (Español: “El trono que Dios le ha dado existe para siempre”).
La Biblia traducida por Moses Katznelson: “El trono que te dio Dios es por siempre y para siempre”.
Sagrada Biblia, Nácar-Colunga: “Tu trono subsistirá por siempre jamás”.
La Sagrada Escritura por profesores de la Compañía de Jesús: “Tu trono, ¡oh Poderoso!, será por siempre jamás”.
Ahora bien, si partimos del hecho innegable de lo que el mismo Jesús declaró en Mateo 11:25, de “alabar al Padre públicamente” por esconder estas cosas (las interpretaciones sencillas y claras de la Biblia) de los sabios e intelectuales pero sí reveladas a los “pequeñuelos” (personas humildes y sencillas sin complicaciones filosóficas requeridas para entender los Santos Escritos), nos ayudará a interpretar, a la manera de Dios, la sencilla fluidez de la mayor parte de su Palabra. Y fíjate que para ustedes la sencillez manifiesta en la expresión “Hijo de Dios” no la entienden como tal, sino que significa “Dios” ¿Cómo vamos a ponernos de acuerdo en algo tan evidente, sencilla y cristalina forma de enseñarnos quién en realidad era Él si aún así ustedes no le creen? ¿Dónde está el problema entonces?
Creo que esta información despejará tus dudas respecto a cómo debe ser traducido Hebreos 1:8 y espero que cumpla su cometido. Es difícil aceptar la verdad cuando nos la muestran, lo comprendo, pero peor sería persistir en el error de manera volitiva y por el simple hecho de llevar la contraria a la organización que siempre han creído es la “peor de toda la comunidad religiosa del mundo”.
No esa si estimado, no hago alusiones superficiales e ilógicas todo tiene sentido, ni estoy confundiendo gordura con hinchazón. Y no se de que viene este texto: “Por lo tanto, dijo Jesús: “Una vez que hayan alzado al Hijo del hombre, entonces sabrán que yo soy [ese], y que no hago nada por mi propia iniciativa; sino que hablo estas cosas así como el Padre me ha enseñado. Y el que me ha enviado está conmigo; no me ha dejado solo, porque yo siempre hago las cosas que le agradan”. Este texto no lo he citado yo. Pero es correcto lo que dices de que Jesús no es ninguna marioneta sin voluntad propia. De acuerdo también en que toda la vida de Jesús giraba en torno y en obediencia a su Padre a quien llamaba su propio Dios, pero no por eso, (porque Jesús a veces se dirigía al Padre como “su Dios”) Jesús haya sido de naturaleza distinta a la del Padre.
¿Cómo que a qué viene el texto citado? ¿Acaso no comprendes lo que el mismo Jesús allí sentencia al decirnos: “entonces sabrán que yo soy ese”… “y que no hago NADA DE MI PROPIA INICIATIVA, sino que hablo estas cosas así como el PADRE ME HA ENSEÑADO”? “Y el que me ha enviado está conmigo”, y que no lo “me ha dejado solo porque yo siempre hago las cosas que le agrado”. Que yo te explicara que Jesús no era ni es ninguna “marioneta” fue por lo que dijiste que él se “valía por sí solo” y yo te he demostrado que eso no es cierto, claro, si estás dispuesto a creerle a Jesús, no a los TJ. Jesús, tal como dijo, “no hacía ni una sola cosa de su propia iniciativa” ¿Esto qué significa? ¿Acaso no era muy cerca forma de ser una “marioneta”? Nosotros entendemos el significado exacto, pero no sé tú cómo lo interpretas. Eso es “dependencia”; eso es “sujeción”, eso es ser uno, LITERALMENTE, HIJO de alguien, no una PROYECCIÓN ECTOPLASMÁTICA del MISMO SER DE DIOS, SIENDO AL MISMO TIEMPO DIOS, sin ninguna diferencia. Y si así fuera, pues entonces no importa. Toda la enseñanza del A.T. y del N.T. y la conclusión a que llegaron los evangelistas es que JESUS ES EL HIJO DE DIOS. Punto. No hay de otra. Y esta “verdad” revelada, así de sencilla, es la que tenemos que aceptar para ¿Qué? Pues para heredar la VIDA ETERNA, tal y como nos lo especifica el apóstol JUAN en su evangelio en el capítulo 20, verso 30 y 31. Si Cristo era en realidad Dios, entonces Dios tuvo motivos que sólo serán de él para decirnos otra cosa. Algún día lo sabremos pero será después de aceptar lo que hasta hoy se nos ha transmitido en las Escrituras: QUE JESÚS ES EL CRISTO, EL HIJO DE DIOS Y POR CREER, OBTENDREMOS LA VIDA ETERNA. ¡Así de fácil! ¡Así de contundente! ¿Por qué ir más allá de las cosas que están escritas?
No , no esta mal interpretado Jesucristo es el autor de la vida como lo dice en John 1:4 aunque la W.T que niega sistemáticamente la divinidad del Hijo traduce: “por medio de él era vida, y la vida era la luz de los hombres.* Pero la traducción correcta es: “En ella estaba la vida” (BNP) en consecuencia Jesús es el autor de la vida, como lo demuestra también este pasaje: “quien beba del agua que yo le daré no tendrá sed jamás, pues el agua que le daré se convertirá dentro de él en manantial que brota dando vida eterna.” John 4:14. Aquí el merito es del Hijo, pues el agua es aquí la vida de la gracia que nos da el propio Hijo.
Me citas el siguiente pasaje:
En efecto, convenía que Dios, por quien y para quien todo existe, queriendo conducir a la gloria a muchos hijos, llevara a la perfección por el sufrimiento al pionero de su salvación.
El que consagra y los consagrados son del mismo linaje, por lo cual no se avergüenza de llamarlos hermanos: Anunciaré tu nombre a mis hermanos, en medio de la asamblea te alabaré, Heb 2:10-13 Aquí el termino “Dios” también pude referirse a la Trinidad.
Aquí esgrimes tu criterio personal pero no derrumbas los argumentos de la Palabra de Dios ni explicas el verdadero significado. Lo que puedo ver es que dices que a “Dios le convenía” ¿Convenía qué? ¿Hacer la actuación al mejor estilo de Hollywood? ¿Engañarnos? ¿Transmitirnos una enseñanza falsa? ¿Qué necesidad tenía de falsear la verdad? ¿Por qué el Señor cuando le preguntó a Pedro que quién era el “Hijo del Hombre” y Pedro le respondió diciendo: “Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios Vivo” le dijo que “Feliz eres, Simón hijo de Jonás, porque carne y sangre no te [lo] reveló, sino mi Padre que está en los cielos”? ¿También estaba mintiendo o falseando la verdad de quién era Él? ¿O será más bien que el Señor “le guiñó” un ojo para que Pedro le siguiera la corriente? ¡Por Dios USICA, el razonamiento es sencillo y cristalino!
Claro que yo capto que Jesucristo es Señor para la gloria de Dios el Padre estimado. También acepto de que el medio de salvación es el Hijo, no se porque dices que no capto. Lo que no acepto es lo que dices respecto a que el Padre le dio vida a ese Medio, es decir a Cristo, como si Este Medio fuera una criatura que depende del Padre.
Deseo lo mismo para ti y que Dios ilumine tu camino, paz y bien.
Bueno pues, si aceptas todo eso que dices aceptar del Señor Jesús, ¿Por qué razón, motivo o circunstancias te empecinas en creer que es Dios (JEHOVA), el Todopoderoso si lo contrario es lo que dijo que era, EL HIJO DE DIOS, SU PADRE Y DADOR DE VIDA?
Gracias de nuevo por tu deferencia para conmigo. Reconozco el valor en responder con verdadero respeto.
Que Jehová Dios guíe tus pasos.