Tienes mucha razón en cuanto a que, si no existiera un mandato desobedecido, no se necesitaría misericordia.
Ahora bien, has dicho que la misericordia de Dios no anula su ira.
Las Escrituras son claras, siglos antes de la venida de Jesucristo, en que Dios puede “deponer”, “aplacar” o “apartar” su ira para ejercer su misericordia.
Y tú, no debes retener nada de lo destinado a la destrucción, para que el Señor deponga el ardor de su ira y tenga de ti misericordia, y se compadezca de ti. (Dt 13:17)
Al ejercer su misericordia, por definición Dios deja de estar enojado. Y no solo eso, sino que lo hace de buena gana.
¿Qué otro Dios hay como tú, que perdona la maldad y olvida el pecado del remanente de su pueblo? Tú no guardas el enojo todo el tiempo, porque te deleitas en la misericordia. (Miqueas 7:18)
Decime vos si hallas en estos pasajes cualquier indicio de que la ira de Dios no es anulada por su misericordia, sino que necesita ser aplacada con sangre.
Hola Pancho.
Aún bajo sentencia de muerte el hombre debía respetar a su Dios so pena de ser castigado.
Esta misericordia y gracia nada tienen que ver con Jesucristo sino con el vivir largos días bajo el sol.
Hay una razón por la cual Adán y Eva no murieron el día que comieron del árbol prohibido y vivieron unos 900 años más y esa razón es Jesucristo.
Dios no les quitó la vida ipso facto a causa de la esperanza de la salvación que ya había planeado desde antes de haber fundado el mundo porque Dios todo la sabe.
Independientemente de esto, Dios comenzó todo un derrotero que terminó con el nacimiento de Jesús y su muerte en la cruz.
Las misericordias y gracias de las que vos hablás les permitían seguir viviendo sin ser destruidos de manera temprana.
Por ejemplo tenemos el caso de Noé que halló gracia y no fue muerto ahogado pero más tarde murió y fue enterrado.
La gracia que es en Jesucristo nada tiene que ver con alargar la mala vida bajo el sol sino con la resurrección.
Es una GRACIA que vence la muerte.
Yo me porté mal y no me cuidé y me infarté.
Y pude haber muerto pero Dios tuvo misericordia y me dió un tiempo más.
Pero el que me da la resurrección y vida eterna es Jesucristo.
Son cosas diferentes.
Tampoco se si vos creés en la vida eterna.
Nosotros creemos en la resurrección y que después de muertos, un día seremos levantados.
No se trata de reencarnación ni de sobrevivir como el alimento de una plantita.
Nos levantaremos como Lázaro y aunque Lázaro resucitó para más tarde volver a morir, cuando resucitemos a la final trompeta ya la muerte no tendrá poder alguno sobre nosotros.
Saludos.