Re: He PEERDIDO LA FE!!
Estimado amigo:
Creo que estas confundido en los efectos de la fe. La fe en Dios o Jesús jamás te dará lo que TU crees que te hará feliz. La felicidad no la encuentras en las cosas materiales o en los sucesos externos que pasan, (aunque algunos así lo digan). Dios no te da lo que tu crees que nos hace felices. Si estás esperando que te de cosas materiales o "sucesos buenos", te vas a quedar esperando en tu depresión.
La felicidad la encuentras en el solo hecho de tener fe, de platicar con Jesús, de tenerlo en tu mente, de creer en Él. Por ende, lo demás no importa, lo que te suceda (malo o bueno), no te afectará, estarás contento, porque estás con él, entonces serás fuerte como un roble, serás de acero, compartirás su misma mesa y nadie ni nada pordrá dañarte; solo si logras aceptar humildemente lo que te manda (bueno o malo), hasta entonces te invadirá un sentimiento de paz contigo y con todo el mundo.
Insisto, hay mucha confusión con respecto a los efectos de la fe. Creemos que por decir que tenemos fe y que vamos a la iglesia, Dios nos debe recompensar materialmente o mandarnos sucesos buenos (que te quiera tu pareja, tu familia, que te respete toda la gente, etcétara). No, esa no es la función de Dios y por eso vemos que a la gente mala le pasan "cosas buenas". El hecho de que a un secuestrador lo respeten, lo estimen, tenga muchas casas, sus hijos estén sanos, etcétera, no significa que Dios lo bendice, mucho menos que sea feliz, aunque lo diga el propio perverso un millón de veces. El, tu y yo seguiremos teniendo miedo y depresión, odio, ira, gula, pereza, conscupiscencia, depresión, mientras no nos acerquemos a Dios, las cosas externas no te dan felicidad.
Solo una comunicación continua con Dios, minuto a minuto, segunda a segundo, podrá darte la sabiduría necesaria para que salgas de tu depresión. Solo platica con él y pídele disculpas por pedirle cosas que tu crees que mereces. Pídele solo sabiduría para poder entender lo que quiere que hagas, pídesela desde el fondo de tu corazón, llora ante Él, humillate a Él, pídele consejo con lágrimas en los ojos y entonces, solo entonces, te tomara en su regazo, luego te levantará y vendrá la paz que tanto anelas. Posteriormente no te despegues ni un segundo de él y verás la fortaleza que te da, dejarás impresionado a los que te rodean
Estimado amigo:
Creo que estas confundido en los efectos de la fe. La fe en Dios o Jesús jamás te dará lo que TU crees que te hará feliz. La felicidad no la encuentras en las cosas materiales o en los sucesos externos que pasan, (aunque algunos así lo digan). Dios no te da lo que tu crees que nos hace felices. Si estás esperando que te de cosas materiales o "sucesos buenos", te vas a quedar esperando en tu depresión.
La felicidad la encuentras en el solo hecho de tener fe, de platicar con Jesús, de tenerlo en tu mente, de creer en Él. Por ende, lo demás no importa, lo que te suceda (malo o bueno), no te afectará, estarás contento, porque estás con él, entonces serás fuerte como un roble, serás de acero, compartirás su misma mesa y nadie ni nada pordrá dañarte; solo si logras aceptar humildemente lo que te manda (bueno o malo), hasta entonces te invadirá un sentimiento de paz contigo y con todo el mundo.
Insisto, hay mucha confusión con respecto a los efectos de la fe. Creemos que por decir que tenemos fe y que vamos a la iglesia, Dios nos debe recompensar materialmente o mandarnos sucesos buenos (que te quiera tu pareja, tu familia, que te respete toda la gente, etcétara). No, esa no es la función de Dios y por eso vemos que a la gente mala le pasan "cosas buenas". El hecho de que a un secuestrador lo respeten, lo estimen, tenga muchas casas, sus hijos estén sanos, etcétera, no significa que Dios lo bendice, mucho menos que sea feliz, aunque lo diga el propio perverso un millón de veces. El, tu y yo seguiremos teniendo miedo y depresión, odio, ira, gula, pereza, conscupiscencia, depresión, mientras no nos acerquemos a Dios, las cosas externas no te dan felicidad.
Solo una comunicación continua con Dios, minuto a minuto, segunda a segundo, podrá darte la sabiduría necesaria para que salgas de tu depresión. Solo platica con él y pídele disculpas por pedirle cosas que tu crees que mereces. Pídele solo sabiduría para poder entender lo que quiere que hagas, pídesela desde el fondo de tu corazón, llora ante Él, humillate a Él, pídele consejo con lágrimas en los ojos y entonces, solo entonces, te tomara en su regazo, luego te levantará y vendrá la paz que tanto anelas. Posteriormente no te despegues ni un segundo de él y verás la fortaleza que te da, dejarás impresionado a los que te rodean