Pues nada, no se van a condenar, ni se van a perder ni ninguna de esas mentiras.
Muy bien dicho (aunque de todos modos ninguno se perdera porque todos seran salvos).
Me gustaría ver al tiguecito delante del trono blanco...Seguro se le caen los chones de miedo
Originalmente enviado por Ricardo
Si fuésemos a dudar del tormento eterno de los condenados igual razón tendríamos para dudar de la dicha eterna de los salvados. De no haber tal tormento eterno innecesario fuera el sacrificio de Cristo a nuestro favor.
Hola Martamaria. Tú hablas según el espíritu y la misericordia de Dios derramada en tu corazón, pues sigues el camino de la misericordia, y la misericordia y el perdón es lo que Dios quiere. Ricardo, en cambio, es de los que siguen las leyes que dicen "ojo por ojo y diente por diente". Por eso, no entiende tus sentimientos. Jesucristo es misericordia, y toda su obra y creación es misericordiosa. En el Paraíso prometido por Jesucristo no caben infiernos eternos ni sufrimientos enternos. No es misericordioso que mientras unos viven las declicias del Paraíso, otros en el infierno estén sufiendo tormentos eternos. La escritura nos dice que cada uno pagará según sus obras, si Dios no le perdona. Entonces, la vida de un malvado en este mundo es corta y limitada. Entonces, su sufrimiento será corto y limitado. De otra forma, el castigo sería desproporcionado con respecto a la culpa. ¿ES MUERTE ETERNA O ES INFIERNO ETERNO?... El contexto de toda la escritura nos dice claramente que primero habrá una muerte y luego un juicio final donde cada uno pagará por sus obras (sólo por sus obras, si es que Dios no le perdona). El Señor nos dijo: "Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente". (Juan 11:25-26). Aquí se puede interpretar perfectamente que si los que creen en el Señor no morirán eternamente, los malvados sí pueden morir eternamente. Y si mueren por toda la eternidad, ¿cómo van a estar vivos y sufriendo las llamas del infierno? Lo que debemos detallar y tener claro siempre es que en ninguna parte de las escrituras nos dice el texto que Dios haya dicho que los condenados, como personas con sus cuerpos vivos, sufran en su carne eternamente las llamas de infierno. Sin embargo, lo que sí nos dicen las escrituras, es que los malvados irán a la destrucción eterna: "Pues los malvados serán exterminados, más lo que esperan en Yavé heredarán la tierra. Un poco más y ya no existe el malo, buscas su lugar y ya no está" (Salmos 37,9-10) "Los malos, en cambio, se verán perdidos, los enemigos de Yavé; desaparecerán como el verde de los prados, se esfumarán igual que el humo" (Salmos 37,20). "Los malos caen y no existen más, la casa de los buenos permanece en pie". (Proverbios 12,7) "Estos serán castigados con destrucción eterna; serán arrojados lejos de la presencia del Señor, y de su gloria y poder" (2ª Tesalonicenses 1,9). Y el texto griego interlineal, en este versículo, nos dice: "Los cuales (como) pena pagarán una destrucción eterna" (2ª Tesalonicenses 1,9). Esta palabra "destrucción", en griego "oleqron", también significa "muerte". Así, pues, estas palabras del versículo citado también se pueden traducir como "muerte eterna". Entonces, si los que hayan de ser condenados irán a la destrucción eterna o la muerte eterna, ¿cómo van a estar viviendo y sufriendo eternamente en su carne las llamas del infierno?... Apuntamos estos detalles porque los traductores amigos de los infiernos pueden traducir estos versículos por cualquier cosa, menos por "muerte eterna", como hemos visto en algunas Biblias que hemos examinado. La alegría para aquellos que amamos a Jesucristo es que Dios quiere que todos sus hijos se salven y, como Dios lo quiere porque así está escrito, entonces todos los que amamos a Jesucristo somos salvos para siempre. Los malos son los que no quieren la salvación de Jesucristo, por eso nos dice la profecía que morirán y dejarán de existir: "Los malos caen y no existen más, la casa de los buenos permanece en pie". (Proverbios 12,7) Entonces, si los malos dejan de existir, como dice la escritura, es que ya no sufren los tormentos de ningún infierno. Los que amamos a Jesucristo sentimos que ésta es la misericordia de Dios.
Originalmente enviado por Ricardo
Si fuésemos a dudar del tormento eterno de los condenados igual razón tendríamos para dudar de la dicha eterna de los salvados.
De no haber tal tormento eterno innecesario fuera el sacrificio de Cristo a nuestro favor.
Hola Martamaria. Tú hablas según el espíritu y la misericordia de Dios derramada en tu corazón, pues sigues el camino de la misericordia, y la misericordia y el perdón es lo que Dios quiere.
Hola Martamaria. Así es, como tú dices. Pues hay pecadores que tienen buen corazón pero cometen faltas porque todos somos imperfectos. Pero, si tienen buena voluntad, son hijos de Dios y son salvos para siempre. Y Dios los perdonará y los salvará de este mundo.
