Ahora escúchenme ustedes,
los ricos:
lloren y griten de dolor
por todo lo que muy pronto
van a sufrir.
Sus riquezas se pudrirán,
y la polilla les comerá la ropa.
El dinero que han estado juntando
en estos últimos tiempos se oxidará,
y ese óxido será el testigo
que los acusará en el juicio final,
y que los destruirá como un fuego.
Ustedes no les han pagado el sueldo
a sus trabajadores,
y el Señor todopoderoso
ha oído las protestas de ellos.
Ese dinero que no han pagado
también los acusará delante de Dios.
Ustedes los ricos
han vivido con mucho lujo,
y se han dado la gran vida
en esta tierra.
Han engordado tanto
que parecen ganado
listo para el matadero.
Injustamente han acusado
y matado a personas inocentes,
que ni siquiera podían defenderse.
Santiago 5:1-6 TLAI