Mi enfoque de la predestinación no está enlatado o encajado (puesto en una caja).
Más bien, me queda claro lo que EL SEÑOR quiere y no quiere para las personas, y no solamente para la nación de Israel.
Basta leer el cap. 18 del profeta ezequiel para darse cuenta de la realidad. Pero bueno... Eso es solo una opinión más en el ciberespacio.
◘: ese comentario me parece bastante acertado a criterio personal, yo me tiré bastante años reventándome la cabeza leyendo, escuchando, sobre el tema del calvinismo, ojalá yo tuviera esa claridad de pensamiento, tengo una mente que al ver demasiadas variables, en muchos temas de la biblia pues lo dejo con interrogantes sin descartar ciertos puntos de vistas interpretativos, si no te importa que te pregunte ¿has leído el contenido del link?
◘: comparto un pequeño fragmento de un libro:
“CRUX THEOLOGORUM—Loc. lat.: Cruz de los teólogos. Se le llama así a una de las más angustiantes preguntas teológicas: ¿Por qué algunas personas heredan la vida eterna, y otras no? El problema se vuelve aun más difícil cuando nos dejamos pernear por el calvinismo radical.
A la luz de las enseñanzas de Calvino, los que fueron destinados por Dios para que disfruten de la vida eterna no tienen de qué preocuparse; los que ya fueron predestinados a la perdición eterna nada podrán hacer. Esta expectativa ha llevado a no pocos teólogos a cargar tan pesada cruz.
Ni siquiera tenemos que sufrir tanto con tal premisa; es falsa: contraría el espíritu de ambos Testamentos. En realidad, la predestinación es universal; y la elección, particular. En otras palabras, todos los seres humanos, sin excepción alguna, fuimos predestinados a la vida eterna. Pero sólo heredaremos la bienaventuranza eterna si aceptamos la elección que se nos ofrece mediante el sacrificio de Jesucristo.
De Andrade, Claudionor Corrêa, Diccionario Teológico: Con un Suplemento Biográfico de los Grandes Teólogos y Pensadores (Miami, FL: Patmos, 2002), p. 107”