Lo peor es que estos profetas pseudos comienzan paulatinamente a descreer la Palabra de Dios...negando los evangelios y otras cartas universales
aduciendo que no fueron escritas para nosotros la Iglesia, sino que los evangelios y Apocalipsis fueron escritas para Israel incrédulo a Cristo.
Una mentirota grave
Y muy grave también es que son presa del vino de la gran babilonia.