Pero hombre, no os dejéis engañar por medios anticristianos...
Pero hombre, no os dejéis engañar por medios anticristianos...
Tobi, tú mismo pegas estos fragmentos de un artículo de El País (primer periódico en ventas en España y, tras El Mundo, el más abiertamente anticristiano)... supongo que es porque te crees y aceptas la veracidad de estos hechos y los corroboras con tu apoyo. Bien, pues intentaré explicar -muy brevemente a falta de tiempo- en qué se nos está engañando en este asunto:
El año 325 el Concilio de Nicea tachó de hereje, condenó y excomulgó al obispo Arrio, por mantener que Jesucristo no era Dios. Y el emperador Constantino lo desterró a Iliria. 1678 años después la historia se repite y el Vaticano anatematiza por arriano al teólogo español Juan José Tamayo, secretario de la progresista Asociación de Teólogos Juan XXIII.>>
Primera gran mentira: "el Vaticano anatemiza a Juan José Tamayo"... ¿La verdad? primero que el Vaticano es un país (creo recordar) y por lo tanto no puede hacer esas cosas; segundo que en este asunto en nada ha intervenido "el Vaticano", aparte de porque no puede -como ya he dicho- porque quien se encarga de este asunto es la Comisión Episcopal de la Doctrina de la Fe. Es decir, que es una decisión del obispado español hacia un sacerdote español y un asunto que para nada ha trascendido a esas "altas esferas Vaticanistas de Roma" -como diría El País- pues afecta únicamente a la Iglesia Católica en España (porque Tamayo es un teólogo sin relevancia -ni nacional ni internacional- al que sólo lee una minoría afín a sus ideas y perteneciente a su misma asociación). En fin, que los periódicos tienen mucha imaginación; tercero, a Tamayo no se le ha anatemizado, se le ha pasado una nota como llamada de atención sobre algunas afirmaciones que aparecen en sus últimos escritos (ni se le ha callado, ni expulsado, ni anatemizado, ni censurado, ni denunciado...repito, sólo se le ha dado un breve escrito en que se le avisa de que en su libro hay afirmaciones contrarias a las afirmaciones de la Iglesia Católica... él sabrá lo que tiene que hacer, de momento nada más ha pasado) Pero a El País le mola cantidad hacer de un granito de arena la montaña más morbosa de la historia para así poder desprestigiar a lo único que no se puede desprestigiar: al cristianismo... ¡¡que imaginación el afirmar que "el Vaticano ha anatemizado a Tamayo!! Me quito el sombrero ante la maestría que muestra este periódico en hacer literatura fantástica.
«La diferencia es que a Arrio se le escuchó, se dialogó con él durante muchos años e, incluso después de condenado, volvió a ser readmitido como obispo en la Iglesia. A mí, en cambio, me condenaron en ausencia y sin escucharme para nada. Algo que no había ocurrido hasta ahora. Ni siquiera con Leonardo Boff o con Hans Küng», explica el teólogo represaliado por Roma.
Al sacerdote católico don Juan José Tamayo le falla últimamente la memoria (¿será el estrés que le produce el ser de repente tan famoso?). Primero que a él no se le ha condenado... por cierto, os reto a que me nombréis un sólo medio de comunicación de masas (véase TV y prensa nacional) que haya reproducido el texto (que es de uso público) que la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe ha enviado al señor Tamayo... Ninguno de los medios a los que se ha ofrecido el escrito ha querido reproducirlo (así es, lo han rechazado) ya que si lo hacían quedaban sus montajes en grandísima evidencia. ¡¡Perdónales, Señor!!. En fin, y para qué hablar de estas supuestas opiniones de Tamayo en las que miente más que habla: ¿quién le ha expulsado, le ha ignorado, le ha dicho que se calle, o quién no ha querido hablar con él, o entrevistarse? Vamos, hombre, que con mentiras nada se arregla. Tan sólo se le ha pasado una pequeña nota sobre ciertas líneas de su último escrito para hacerle ver que son claramente contrarias a la fe de la Iglesia Católica y porque se supone que él es un sacerdote de la Iglesia Católica: si perteneces a un "club" que te llama la atención por hacer cosas contrarias al "club" ¿de qué te quejas? Bueno, pues va y lo único que se le ocurre es decir que el Vaticano le ha condenado sin ni siquiera escucharle o pedir que se explique, que le han callado y censurado sin razones para ello y encima ni se lo han preguntado. Pero que ridiculeces que se inventa la gente para hacerse publicidad a sí mismo y a su asociación "Juan XXIII"
Y eso que el estudio de la obra de Juan José Tamayo por parte del
guardián de la ortodoxia romana, cardenal Joseph Ratzinger, duró tres años. Sin que el interesado se enterara. El teólogo proscrito sólo supo que estaba siendo investigado el pasado 30 de diciembre. Ese día, monseñor Romero Pose, presidente de la Comisión Episcopal de la Doctrina de la Fe, le llamó a su despacho y le dijo: «Roma ha hecho una investigación de toda tu obra. La Permanente va a publicar una nota y no me parece de recibo que te enteres por la prensa. El día 7 de enero se te entregará la nota».
¿Pero de dónde sacan estas cosas? Señores lectores, les remito al primer párrafo, donde explico quién tenía, tuvo y tiene la tarea de velar por que no se traicione la fe. Ni el Señor Ratzinger ni esa señora a la que llaman "Roma" han intervenido en el asunto. De todas maneras, en este párrafo se nombra al verdadero artífice: La Comisión Episcopal de la Doctrina de la Fe que, como su propio nombre indica, se encarga de velar por la no traición a la doctrina de la fe (¿hace falta explicarlo o inventarse excusas para alguien que hace su deber?). Por cierto, esa frase que se le atribuye a Romero Pose ya está desde el principio absolutamente manejada... jamás de los jamases a un obispo se le ocurriría decir "Roma ha hecho una investigación de toda tu obra", sobre todo cuando es mentira (escuchado de sus propios labios, nada de lo que escribo me lo invento)
Al final la nota se le entregó el día 9, junto al amplio informe
realizado por Roma, así como una carta del secretario del episcopado,
monseñor Asenjo, en la que se le invitaba a dialogar, «si muestras
conformidad con el contenido del informe vaticano». Algo que, evidentemente, el teólogo no hizo.
Evidentemente el teólogo no pudo aceptar un informe vaticano que no existe... por cierto ¿no habíamos quedado en que nunca se le ha invitado a dialogar? ¡¡hasta las mentiras se las inventan mal!! de todas maneras, todo el párrafo en sí es tal cúmulo de falacias que es imposible hacerle más comentario que el de la falsedad.
La nota de los obispos españoles advierte que su obra es «incompatible con la fe católica», descalifica sus «presupuestos metodológicos insuficientes», dado que, según la jerarquía, rechaza frontalmente la tradición de la Iglesia católica en sus definiciones cristológicas y selecciona arbitrariamente los pasajes del Evangelio que utiliza en sus estudios. Más en concreto, le acusan de negar la divinidad de Cristo, de presentar a Jesús «como un mero hombre» y de negar «el carácter histórico y real de la resurrección». El asegura que no niega nada de eso, sino que pretende explicar los misterios de la fe y hacerlos asequibles a la cultura moderna.
¿Pero no me acaban de decir que la nota es de una tal señora que se llama "Roma"? De todas maneras, ¿de qué se queja Tamayo? ¿de que le llamen la atención? si sólo ha rechazado la tradición, seleccionado parcial y arbitrariamente textos y pasajes, si sólo ha dicho que Jesús sólo es hombre y ha negado que la resurrección sucediera... ¡¡Ah no, perdón!! dice que no ha dicho nada de esto, sino que ha modernizado a Jesucristo... Bendito sea Tamayo que nos quiere modernizar lo que es intemporal y eterno a base de mentiras.
En fin, aunque yo diga estas cosas en tono jocoso, debo dudar también de estas afirmaciones del superperiódico El País, porque -sintiéndolo mucho- no he podido leer las últimas novedades de Tamayo (porque no existen, sólo las pueden leer un círculo muy reducido de gente cercana a él)
En tiempos de Arrio hubiese significado el destierro, la pérdida de todos sus derechos, la colocación de todas sus obras en el Indice de los Libros Prohibidos y el infierno en vida. Hoy, por el contrario, la condena vaticana le da prestigio y fama. Sus libros se venderán como churros y pasará a formar parte de los grandes teólogos rebeldes, estrellas de los medios, como Boff o Küng.
¿La condena vaticana? nunca oí este adjetivo.
En fin, tal vez ésta sea la única verdad que diga nuestro querido periódico El País: Tamayo venderá libros como churros (¿sería su propósito al mentir tan descaradamente y hablar directamente a los medios de comunicación en vez de con aquellos que le pidieron dialogar?), tendrá prestigio y fama (seguramente tendrá fama de "liberador de la Iglesia Católica", de bastión de la verdad progresista frente al conservadurismo católico... en fin, Dios le perdone por hacer creer a la gente tales cosas). Por cierto, eso de "gran teólogo" ¿de dónde se lo han sacado? nadie conocía a Tamayo hasta ahora y, además, todo sacerdote es teólogo (al menos en estos tiempos), pero deben decir que es "grande" por atreverse a llevar la contraria a la superpoderosa señora Roma y al señor Vaticano... ¡que estupidez!
Para Enrique Miret, presidente de la citada Asociación teológica,
«intentan desautorizarnos ante la opinión pública católica más conservadora, porque saben que somos una organización no de la Iglesia, pero sí cristiana y ecuménica. Se trata de tapar las pocas bocas libres que quedan. Pero no lo van a conseguir, porque esta es una asociación muy arraigada, con más de 100 miembros y unos 2.000 simpatizantes en toda España», algunos de ellos protestantes, añadió.
Efectivamente... ¿por qué una asociación que no es católica se queja de que la Iglesia Católica llame la atención a un sacerdote católico? Nunca encontraré respuesta para esto, es como si un niño se queja al vecino de en frente (con el que nada tiene que ver) porque en el colegio le dicen que estudie. ¡que ridiculez!... En fin, que digan lo que quieran, pues su objetivo ya está cumplido: darse a conocer en los grandes medios de comunicación siguiendo la táctica que hace un mes siguieron los Raelianos (que se inventaron lo del bebé clonado para poder salir en todos los medios de comunicación del mundo), pero a una escala menor.
Tobi añade:
¡¡¡Es que no aciertan ni una!!!
¿Quién?:
¿El País? ¿La Iglesia Católica? ¿Tamayo? ¿La comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe? ¿El señor Vaticano? ¿La señora Roma? ¿La ASociación de Teólogos "Juan XXIII"? ¿Tal vez yo, maestro? ¿O tal vez tú?