El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

12 Noviembre 2010
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El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

Paz y bien a todos mis hermanos.

Antes y a manera de introducción les presente a <A HREF="http://forocristiano.iglesia.net/showthread.php/49725-La-Santa-Iglesia-Católica-Apostólica-Romana">La Santa Iglesia Católica Apostólica Romana</A>, y ahora lo que pretendo abordar, —no es diferente, pero que amerita un tema aparte—, el siguiente que presento es: «El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica. »

Gracia de parte de Dios

Tenemos en comunión el «creer en Dios» indiferente del modo en que lo manifestemos.
Los cristianos de la <A HREF="http://forocristiano.iglesia.net/showthread.php/49725-La-Santa-Iglesia-Católica-Apostólica-Romana">La Santa Iglesia Católica Apostólica Romana</A> afirmamos lo siguiente:

Creemos en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y la tierra.

Creemos en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre Todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.

Creemos en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna.

Este es nuestro «Amén»

Aquellos que en concepto de carne se apartaron de nosotros y los que son en sucesión, toman nuestro «Amén» por falsía. No se detienen a contemplar la comunión de la fe, que ellos mismos manifiestan, ¿Y a qué se debe? -No aceptan la sucesión Apostólica.

Nosotros sabemos que es obra de Dios: «porque fue el Señor quién hizo esto, y es maravilloso a nuestros ojos» (Mc 12, 11), y en ninguna parte es contrario a esto.

Pero como dice la Escritura y por tal que sea la transmisión Apostólica y en esto también la función de Pedro: «Y tú, cuando hayas vuelto, confirma a tus hermanos.»(Lc 22, 32). Si fuera Pedro quien dice esto, en esto que no valdría: «Tú das testimonio de ti mismo: tu testimonio no vale.» (Jn 8, 13)

Pero a Pedro su confirmación la testifica Cristo: «Bienaventurado eres Simón, hijo de Jonás, porque no te ha revelado esto la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en los cielos. Y yo a mi vez te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. A ti te daré las llaves del Reino de los Cielos; y lo que ates en la tierra quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra quedará desatado en los cielos.» (Mt 16, 17-19) y es por esto que vale: «Jesús les respondió: «Aunque yo dé testimonio de mí mismo, mi testimonio vale, porque sé de dónde he venido y a dónde voy; pero vosotros no sabéis de dónde vengo ni a dónde voy. Vosotros juzgáis según la carne; yo no juzgo a nadie; y si juzgo, mi juicio es verdadero, porque no estoy yo solo, sino yo y el que me ha enviado. Y en vuestra Ley está escrito que el testimonio de dos personas es válido. Yo soy el que doy testimonio de mí mismo y también el que me ha enviado, el Padre, da testimonio de mí.» (Jn 8, 14-18).

Si ustedes dicen haber recibido el Espíritu Santo, ¿Quién lo testifica?

Si nosotros decimos que hemos recibido el Espíritu Santo, ¿Quién lo confirma?

Si, a Pedro lo confirma Cristo Jesús y manda a Pedro: «Y tú, cuando hayas vuelto, confirma a tus hermanos.»(Lc 22, 32).

Pero dirán en su entendimiento de carne: «Eso fue cuando Cristo, han pasado casi dos mil años y no hay garantías de que sea con así con ustedes.»

Nosotros tenemos una garantía, que no es arbitraría, pues Pablo mismo, para ser confirmado en la «fe», también se sometió.

Si acaso conocen la Escritura, saben quién es Pablo, por los que no sepan: Pablo era un judío de la tribu de Benjamín, nacido en Tarso de Cilicia era también ciudadano Romano, y desde su juventud recibió en Jerusalén una profunda formación religiosa de Gamaliel según las doctrinas fariseas, (hecho que orgullecía a Pablo), al inicio fue un encarnizado perseguidor de la Iglesia, y aprobó la muerte de Esteban, cuando él se dirigía a Damasco fue trancado bruscamente por la aparición de nuestro Señor resucitado, que le manifestó la verdad de la fe cristiana. Nuestro Señor le dijo: «Yo soy Jesús al que tú persigues. Pero levántate, entra a la ciudad y se te dirá lo que tienes que hacer.» (Hch 9, 6), Pablo aunque tenía los ojos abiertos, no veía nada, los que le acompañaban le llevaban de la mano e hicieron entrar en Damasco. Paralelamente Nuestro Señor en visón dijo a un discípulo llamado Ananías: «Levántate y vete a la calle Recta y pregunta en casa de Judas por uno de Tarso llamado Saulo; mira que está en oración y ha visto que un hombre llamado Ananías entraba y le imponía las manos para devolverle la vista.» (Hch 9, 11-12), «Fue Ananías, entró en la casa, le impuso las manos y le dijo a Pablo: «Saúl, hermano, me ha enviado Jesús, el que se te apareció en camino a por donde venías, para que recobres la vista y seas lleno de Espíritu Santo.» Al instante cayeron de su ojos unas como escamas, y recobro la vista: se levantó y fue bautizado.» (Hch 9, 17-18). Y así es, Pablo se puso a predicar a Jesús en las sinagogas, y así estuvo por tiempo, aprendiendo y en compañía de los discípulos, y de Bernabé, más el Señor al tiempo dijo: «separadme ya a Bernabé y a Saulo para la obra a la que los he llamado.» (Hch 13, 2). «Entonces después de haber ayunado y orado, les impusieron las manos y les enviaron.» (Hch 13, 3).

Es, que sea por imposición de manos, garantía que viene de aquellos que lo recibieron a su vez de Cristo, pues con eso, —la imposición de manos—, que necesariamente que haya una verdadera transmisión y contacto real, y esto por: «Al enterarse los apóstoles que estaban en Jerusalén de que Samaria había aceptado la Palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan. Estos bajaron y oraron por ellos para que recibieran el Espíritu Santo; pues todavía no había descendido sobre ninguno de ellos; únicamente habían sido bautizados en el nombre del Señor Jesús. Entonces les imponían las manos y recibían el Espíritu Santo. Al ver Simón que mediante la imposición de las manos de los apóstoles se daba el Espíritu» (Hch 8, 14-18); «Por eso, dejando aparte la enseñanza elemental acerca de Cristo, elevémonos a lo perfecto, sin reiterar los temas fundamentales del arrepentimiento de las obras muertas y de la fe en Dios; de la instrucción sobre los bautismos y de la imposición de las manos; de la resurrección de los muertos y del juicio eterno. Y así procederemos con el favor de Dios.» (Hb 6, 1-3); «No descuides el carisma que hay en ti, que se te comunicó por intervención profética mediante la imposición de las manos del colegio de presbíteros.» (1Tm 4, 14), y siendo total designio de Dios en lo mismo: «Por esto te recomiendo que reavives el carisma de Dios que está en ti por la imposición de mis manos. Porque no nos dio el Señor a nosotros un espíritu de timidez, sino de fortaleza, de caridad y de templanza. No te avergüences, pues, ni del testimonio que has de dar de nuestro Señor, ni de mí, su prisionero; sino, al contrario, soporta conmigo los sufrimientos por el Evangelio, ayudado por la fuerza de Dios, que nos ha salvado y nos ha llamado con una vocación santa, no por nuestras obras, sino por su propia determinación y por su gracia que nos dio desde toda la eternidad en Cristo Jesús» (2 Tm 1, 6-9).

Precisamente la Iglesia, que es la congregación de los llamados a ser santos, es por Institución de Dios y fundamentada en la Roca de nuestra Fe que es Cristo Jesús. Custodiada por sus Apóstoles y tenemos garantías no arbitrarias que realmente hay una sucesión real, pues hay un contacto real.

Sea la paz con ustedes.
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

Aquellos que en concepto de carne se apartaron de nosotros y los que son en sucesión, toman nuestro «Amén» por falsía. No se detienen a contemplar la comunión de la fe, que ellos mismos manifiestan, ¿Y a qué se debe? -No aceptan la sucesión Apostólica.

Aqui Ian langle tienes que deterte un momento y hacerte una pregunta:

¿La comunion en la fe es la sucesion apostolica, esto enseña la biblia ?.


Hago mi comentario:
La comunión en la fe va mas allá de sucesión apostólica y muchísimo mas allá.

La comunión en la fe comienza recibiendo a cristo:

Col.2.6. Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él;

La comunión empieza recibiendo al Señor Jesús, porque es necesario que en algún momento y de alguna forma comience la relación con Dios. En el Evangelio de Juan (14:6-7) leemos que hablando con Tomás, "Jesús le dice: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida: nadie viene al Padre, sino por mí. Si me conocieseis, también á mi Padre conocierais: y desde ahora le conocéis, y le habéis visto."

Jesús es el único camino al Padre, no es un camino más, sino que es el camino. Entonces, para relacionarnos con Dios debemos comenzar por la única manera posible: "recibiendo al Señor Jesús". No hay otra manera. Eso no es algo que diga yo, sino que es lo que dice la Biblia, la Palabra de Dios. Son las palabras del propio Señor Jesús y es la única manera que Dios preparó para que podamos tener comunión con él.

Pero como dice la Escritura y por tal que sea la transmisión Apostólica y en esto también la función de Pedro: «Y tú, cuando hayas vuelto, confirma a tus hermanos.»(Lc 22, 32). Si fuera Pedro quien dice esto, en esto que no valdría: «Tú das testimonio de ti mismo: tu testimonio no vale.» (Jn 8, 13)

Al leer el comentario del hermano Ian, la pregunta lógica que viene a la mente de cualquier persona que conozca de la biblia es :

¿Lucas 22:32 me esta hablando de la sucesion apostolica representada por el Papa?


Mi comentario:
Lucas 22:32 no habla de una sucesion apostolica y menos prefigura el Papado, pero cuando Jesus le dice a pedro "Confirmas a tus hermanos" estas palabras indicaban la obra extensa y eficaz que este apóstol debía hacer en lo futuro en favor de aquellos que aceptaban la fe. Su experiencia personal con el pecado, el sufrimiento y el arrepentimiento, lo habían preparado para esa obra. Mientras no reconoció sus debilidades, no pudo conocer la necesidad que tenían los creyentes de depender de Cristo. En medio de la tormenta de la tentación había llegado a comprender que el hombre solamente puede caminar seguro cuando pierde toda confianza en sí mismo y la deposita en el Salvador.


Pero a Pedro su confirmación la testifica Cristo: «Bienaventurado eres Simón, hijo de Jonás, porque no te ha revelado esto la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en los cielos. Y yo a mi vez te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. A ti te daré las llaves del Reino de los Cielos; y lo que ates en la tierra quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra quedará desatado en los cielos.» (Mt 16, 17-19)

Dejemos que la riqueza del comentario biblico adventista nos explique estos versiculos

16.

Respondiendo Simón Pedro.

Según Elena de White, Pedro expresó no sólo su convicción, sino también la de sus compañeros (DTG 380, 383). En parte por su impulsividad, en parte por sus dotes de liderazgo, Pedro fue el primero en contestar ahora, como en otras ocasiones (ver Juan 6: 68-69; com. Mat. 14: 28; com. Mar. 3: 16).

Tú eres el Cristo.

En cuanto al significado del título "Cristo", ver com. cap. 1:1. Aunque muchos ya habían rechazado la idea de que Jesús pudiera ser el Mesías de la profecía (ver com. cap. 16: 13-14), los discípulos le seguían siendo leales, aunque entendían en forma imperfecta lo que esta creencia implicaba. Por supuesto, más tarde la comprendieron (cf. Luc. 24: 25-34). Si no comprendían por fe esta verdad fundamental y se aferraban a ella, también ellos fracasarían del todo en comprender que el Mesías debía sufrir. Así y todo, cuando llegó la hora extrema, "todos los discípulos, dejándole, huyeron" (Mat. 26: 56). Aún así, Jesús basaba las esperanzas futuras de la iglesia en este grupito de testigos, y si ellos no creían que él era el Cristo, ¿qué esperanza habría de que otros creyeran alguna vez en esta verdad sublime? (ver com. Juan 1: 11-12).

La idea de que Jesús era meramente un hombre bueno, un gran hombre, quizá el mejor que alguna vez vivió, pero nada más que eso, es tan absurda como increíble. El mismo dijo que era el Hijo de Dios y esperaba que sus seguidores aceptaran también esta posición. O fue lo que afirmó ser, o fue autor u objeto del mayor engaño, del mayor fraude de toda la historia. Uno que pretendiera ser Hijo de Dios y animara a otros a considerarle como Salvador del mundo, cuando no lo era, difícilmente podía ser digno de admiración, mucho menos de adoración. Jesús de Nazaret fue el Cristo, el Hijo del Dios 420 vivo, o fue el más colosal impostor de todos los tiempos.

Hijo del Dios viviente.

Ver com. Luc. 1: 35. Aunque Jesús aceptó que se le aplicara este título, parece haberlo usado pocas veces para referirse a sí mismo. Jesús comúnmente se denominaba Hijo del Hombre (ver com. Mat. 1: 1; Mar. 2: 10), título que había empleado al dirigirse a sus discípulos en esta ocasión (Mat. 16: 13). Cuando Jesús preguntó quién decían ellos que era el Hijo del Hombre, los discípulos respondieron: "El Hijo del Dios viviente" (ver com. Juan 1:1-3, 14; Nota Adicional de Juan 1).

17.

Bienaventurado.

Ver com. cap. 5: 3. Jesús, con toda solemnidad, aceptó la confesión de fe de Pedro. En la medida en que Pedro era el portavoz de todos (ver com. vers. 16), la bendición que se pronunció sobre él les pertenecía a ellos también, siempre que la fe de ellos alcanzara a la medida de la fe de Pedro.

Simón, hijo de Jonás.

Ver Juan 21: 15. Según la usanza judía, éste era el nombre completo de Pedro.

Se describe a Pedro en com. Mar. 3: 16.

Carne ni sangre.

Es decir, seres humanos. Con esta frase idiomática los judíos designaban a la humanidad en su totalidad o a algún sector de la humanidad (cf. Gál. 1: 16-17).

Mi Padre.

Ver Juan 6: 45; 1 Cor. 2: 10. Con referencia a la forma en que Jesús empleó el nombre "Padre" para referirse a Dios, ver com. Mat. 6: 9.

18.

Yo también te digo.

El Padre ya había revelado una verdad (vers. 17); Jesús le añade aquí otra.

Tú eres Pedro.

Llamando Pedro a Simón, hijo de Jonás (vers. 17), Jesús empleó el nombre que le había puesto cuando por primera vez lo conoció (ver Juan 1: 40-42; com. Mat. 4: 18).

Sobre esta roca.

Estas palabras se han interpretado de diversas maneras: (1) que Pedro era "esta roca", (2) que la fe de Pedro en Jesús como el Cristo era "esta roca", (3) que Cristo mismo era "esta roca". Se han presentado persuasivos argumentos en favor de cada una de las tres explicaciones. La mejor forma de determinar qué fue lo que Cristo quiso decir con estas palabras difíciles de entender, es preguntar a las Escrituras mismas qué era lo que esta figura de dicción significaba para los oidores judíos, especialmente para aquellos que se la oyeron a Jesús en esta ocasión (DMJ 7). El testimonio de los escritos de los mismos discípulos es evidentemente superior a las ideas de los hombres que después de ese tiempo han escrito u opinado acerca del supuesto sentido de las palabras de Jesús. Felizmente, algunos de los que fueron testigos oculares en esta ocasión (2 Ped. 1: 16; 1 Juan 1: 1-3) han dejado un registro claro e inequívoco.

Por su parte, Pedro, a quien fueron dirigidas estas palabras, rechaza enfáticamente, mediante sus enseñanzas, que la roca de la cual habló Cristo se refería al apóstol mismo (Hech. 4: 8-12; 1 Ped. 2: 4-8). Mateo registra el hecho de que Jesús empleó otra vez la misma figura, en circunstancias que indican claramente que él mismo era la roca (ver com. Mat. 21: 42; cf. Luc. 20: 17-18). Desde tiempos antiguos, el pueblo hebreo había empleado la figura de la roca para referirse específicamente a Dios (ver com. Deut. 32: 4; Sal. 18: 2; etc.). El profeta Isaías se refirió a Cristo como "gran peñasco en tierra calurosa" (Isa. 32: 2), y como "piedra probada, angular, preciosa" (ver com. cap. 28: 16). Pablo afirma que Cristo era la Roca que había acompañado a su pueblo por el desierto en la antigüedad (1 Cor. 10: 4; cf. Deut. 32: 4; 2 Sam. 22: 32; Sal. 18: 31). En un sentido secundario, las verdades que Jesús habló son también una roca en la cual los hombres pueden construir con toda seguridad (ver com. Mat. 7: 24-25). Por otra parte, Cristo mismo es el "Verbo" hecho "carne" (Juan 1: 1, 14; cf. Mar. 8: 38; Juan 3: 34; 6: 63, 68; 17: 8).

Jesucristo es "la roca de nuestra salvación" (DTG 381 ; cf. Sal. 95: 1; Deut. 32: 4, 15, 18). El es el único fundamento de la iglesia, porque "nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo" (1 Cor. 3: 11), ni "en ningún otro hay salvación" (Hech. 4: 12). En estrecha relación con Jesucristo "la principal piedra del ángulo" en el fundamento de la iglesia, se encuentran los apóstoles y los profetas (Efe. 2: 20). Todos los cristianos han de ser edificados como "piedras vivas" (Gr. líthos) para formar una casa espiritual (1 Ped. 2: 5), un edificio cuya piedra angular es Cristo (Efe. 2: 20-21). El es la única "Roca" sobre la cual se afirma todo el edificio, porque sin él no habría ninguna iglesia. Cuando creemos en él como Hijo de Dios, nosotros también podemos llegar a ser hijos de Dios (Juan 1: 12; 1 Juan 3: 1-2). La comprensión de que Jesucristo es realmente el Hijo de Dios, tal como Pedro lo afirmó en 421 esta ocasión (Mat. 16: 16), es la llave de la puerta de la salvación (DTG 380-381). Es incidental y no fundamental el que Pedro fuera el primero en reconocer este hecho y declarar públicamente su fe, la cual era compartida también por sus compañeros (ver com. vers. 16).

San Agustín (c. 400 d. C.), el mayor de los teólogos católicos de los primeros siglos de la era cristiana, de a que sus lectores decidan si Cristo dice que él mismo es la roca o si dice que Pedro es la roca (Retracciones 1. 21. 1). Juan Crisóstomo, patriarca de Constantinopla, célebre por su elocuencia (m. 407 d. C.), dijo que Jesús había prometido poner el fundamento de la iglesia sobre la confesión de Pedro, y no sobre Pedro, pero también dice que Cristo mismo es verdaderamente nuestro fundamento (Comentario sobre Gálatas, cap. 1: 1-3; Homilías sobre 1 Timoteo xviii. 6. 21). Eusebio, historiador de la iglesia primitiva (m. 340 d. C.), afirma que Clemente de Alejandría escribió que Pedro, Santiago y Juan no lucharon por la supremacía en la iglesia en Jerusalén, sino que escogieron a Santiago el justo como dirigente (Historia eclesiástica ii. 1). Otros padres de la iglesia enseñaron lo mismo; tal fue el caso de Hilario de Poitiers.

Cuando se buscó apoyo bíblico para las pretensiones del obispo de Roma a su primacía en la iglesia (ver t. IV, p. 863), las palabras pronunciadas por Cristo en esta ocasión fueron sacadas de su contexto original e interpretadas en el sentido de que Pedro era "esta roca". León 1 fue el primer pontífice romano en pretender que había recibido su autoridad de Cristo por medio de Pedro. Esto sucedió por el año 445 d. C. Acerca de esta pretensión, Kenneth Scott Latourette, conocido historiador de la iglesia, dice: "Insistió que por decreto de Cristo, Pedro era la roca, el fundamento, el guardián de la puerta del reino de los cielos, puesto para atar y para desatar, cuyos juicios retenían su validez en el cielo, y que por medio del papa como su sucesor, Pedro seguía realizando la tarea que le había sido encomendada" (A History of Christianity, 1953, p.186). Resulta extraño que si esto es realmente lo que Cristo quiso decir, ninguno de los otros discípulos hubiera descubierto ese hecho, ni tampoco ningún otro cristiano durante cuatro siglos después de que Cristo pronunciara esas palabras. Además, resulta extraordinario que ningún obispo de Roma descubriera este significado en las palabras de Cristo hasta que un obispo del siglo V pensó que era necesario hallar apoyo bíblico para la primacía papal. La interpretación de las palabras de Cristo, que concede supremacía a los así llamados sucesores de Pedro, los obispos de Roma, no armoniza en absoluto con lo que Cristo enseñó a sus seguidores (ver cap. 23: 8, 10).

La mejor evidencia de que Cristo no designó a Pedro como la "roca" sobre la cual habría de construir su iglesia, es quizá el hecho de que ninguno de los que oyeron a Cristo en esta ocasión -ni siquiera Pedro- así lo entendió, mientras Jesús estuvo con ellos, ni después. Si Cristo hubiera establecido a Pedro como principal entre los discípulos, éstos no habrían disputado repetidas veces el primer puesto (Luc. 22: 24; ver Mat. 18: 1; Mar. 9: 33-35; etc.; DTG 755-756; com. Mat. 16: 19).

El nombre Pedro proviene del Gr. pétros, "piedra" o "canto rodado". "Roca" es la raducción de la palabra griega pétra, que suele emplearse para designar una peña, o un macizo de piedra. Una pétra es una roca grande, fija, inamovible; en cambio potros es una piedra pequeña o un canto rodado. No puede saberse hasta qué punto Cristo tuvo en cuenta esta distinción, ni cómo pudo haberla explicado mientras hablaba, porque Cristo ciertamente habló en arameo, la lengua vernácula en Palestina en ese tiempo, y no empleó las palabras griegas.

La palabra griega pétros, sin duda, equivale a la palabra aramea kefa" (Cefas; ver com. cap. 4: 18). Por otra parte, es muy posible que pétra también equivalga a kefa", aunque existe la posibilidad de que Cristo hubiera empleado algún otro sinónimo u otra expresión en arameo que haría notar la distinción entre pétra y pétros que se advierte en el relato evangélico en griego. Sin embargo, parece probable que Cristo debe haber tenido el propósito de hacer una diferencia; de lo contrario, Mateo, escribiendo en griego y guiado por el Espíritu Santo, no la hubiera hecho.

Evidentemente pétros, una piedra pequeña, no podría servir de fundamento para ningún edificio. Jesús aquí afirma que únicamente una pétra, o "roca", sería suficiente. Lo que Cristo dijo aquí queda más claro con sus palabras registradas en Mat. 7:24: "Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca [Gr. pétra]". 422 Cualquier edificio construido sobre Pedro, pétros, un débil y falible ser humano, tal como lo presenta claramente el relato evangélico, tiene un fundamento muy poco mejor que las arenas movedizas (ver com. cap. 7: 26-27).

Iglesia.

Gr. ekkl"sía. Ver com. cap. 18: 17.

Puertas.

En las antiguas ciudades la puerta era el lugar de reunión de los ancianos de la localidad y el lugar clave en la defensa de la ciudad contra un ejército atacante (ver com. Gén. 19: 1; Jos. 8: 29). Por esto, el tomar la puerta de la ciudad hacía posible la toma de toda la ciudad.

El triunfo de Cristo sobre la muerte y sobre el sepulcro es la verdad central del cristianismo. Satanás no pudo mantener atado a Cristo con las cuerdas de la muerte (Hech. 2: 24), ni tampoco será posible que retenga a cualquiera de los que creen en Cristo (Juan 3: 16; Rom. 6: 23). En forma figurada, Satanás retiene las "puertas del Hades", pero Cristo, con su muerte, entró en la fortaleza de Satanás y ató al adversario (ver com. Mat. 12: 29). En este sublime hecho descansa la esperanza del cristiano de que será rescatado de los ardides de Satanás en esta vida, de su poder sobre la tumba, y de su presencia en la vida venidera. "El postrer enemigo que será destruido es la muerte" (1 Cor. 15: 26). La muerte y el sepulcro finalmente serán echados en el lago de fuego (Apoc. 20: 14).

La interpretación de que las palabras de Cristo significaban que las "puertas del Hades" no habrían de prevalecer contra Pedro, contradice la insinuación de Mat. 16:21 (cuya introducción son los vers. 13-20), de que sería Cristo y no Pedro el que habría de desafiar las puertas del Hades al someterse al sufrimiento y a la muerte. Además, si Pedro hubiera entendido que era él y no Jesús quien iba a enfrentar la muerte, no sería lógica su reacción (vers. 22).

Hades.

Ver com. cap. 11: 23.

No prevalecerán.

Según Elena de White, las puertas del infierno prevalecieron contra Pedro cuando negó tres veces a su Señor (DTG 381). Literalmente, prevalecieron cuando la muerte lo retuvo (Juan 21: 18-19).

El significado pleno de lo que Cristo quiso decir cuando afirmó que las "puertas del Hades" no prevalecerían, puede entenderse por el hecho de que inmediatamente comenzó a hablar de cómo iba a padecer "y ser muerto y resucitar al tercer día" (ver com. Mat. 12: 40; cf. DTG 386). Cristo triunfó gloriosamente sobre todo el poder de Satanás, y por ese triunfo aseguró la victoria de su iglesia en la tierra.

19.

Las llaves.

Elena de White afirma que las llaves del reino son las palabras de Cristo (DTG 381). Es importante señalar que Cristo mismo dice que la "llave" que da acceso al reino es la "llave de la ciencia" o del conocimiento (Luc. 11: 52). Las palabras de Jesús son espíritu y son vida para todos los que las reciben (Juan 6: 63); ellas son las que dan vida eterna (Juan 6: 68). La palabra de Dios es la llave de la experiencia del nuevo nacimiento (1 Ped. 1: 23).

Así como las palabras pronunciadas por Jesús convencieron a los discípulos de la divinidad de su Maestro, así también ellos, como embajadores de Jesús, debían repetir sus palabras a otros hombres, a fin de reconciliarlos con Dios (2 Cor. 5: 18-20). El poder salvífico del Evangelio es lo único que puede permitir la entrada de los seres humanos en el reino de los cielos. Cristo sencillamente confió a Pedro y a todos los otros discípulos (ver com. Mat. 18: 18; Juan 20: 23) la autoridad y el poder de llevar a los hombres al reino.

Cuando Pedro percibió la verdad de que Jesús era el Cristo, fueron colocadas en sus manos las llaves del reino y le fue abierta la puerta del reino. Lo mismo puede decirse de todos los seguidores de Cristo hasta el mismo fin del siglo.

La afirmación de que Cristo concedió a Pedro mayor autoridad que a los otros discípulos, o que le otorgó una autoridad diferente de la que ellos tenían, carece de base bíblica (ver com. Mat. 16: 18 ). En verdad, entre los apóstoles, fue Jacobo, y no Pedro, el que desempeñó funciones administrativas en la iglesia primitiva de Jerusalén (Hech. 15: 13, 19; cf. caps. 1: 13; 12: 17; 21: 18; 1 Cor. 15: 7; Gál. 2: 9, 12). Por lo menos en una ocasión Pablo resistió públicamente a Pedro, por lo que el primero consideraba como un proceder erróneo del segundo (Gál. 2: 11-14), lo que indudablemente no habría hecho si hubiera estado enterado de que Pedro poseía los derechos y los privilegios que algunos ahora le atribuyen basándose en Mat. 16: 18-19.

Reino de los cielos.

Así como ocurre frecuentemente en el registro del ministerio de la vida de Cristo, el reino de los cielos se refiere en este pasaje al reino de la gracia divina en el corazón de aquellos que son sus ciudadanos, aquí y ahora (ver com. cap. 4: 17; 5: 3). Nadie puede esperar entrar en el futuro reino de la gloria (ver com. cap. 25: 31, 34) 423 si no ha pasado primeramente por el reino presente de la gracia divina.

Lo que atares.

Este pasaje dice literalmente: "Y lo que atares sobre la tierra habrá sido atado en los cielos, y lo que desataras en la tierra habrá sido desatado en los cielos". Evidentemente debe entenderse que la iglesia en la tierra sólo requerirá lo que el cielo requiere y prohibirá sólo lo que el cielo prohíbe. Esta parecería ser la clara enseñanza bíblica (ver com. Mat. 7: 21-27; Mar. 7: 6-13). Cuando los apóstoles salieron a proclamar el Evangelio, de acuerdo con la misión que les había sido dada (Mat. 28: 19-20), debían enseñar a los conversos que guardaran "todas las cosas" que Jesús había mandado: ni más ni menos.

Si se amplía el significado de los verbos "atar" y "desatar" hasta abarcar la autoridad de dictar lo que los miembros de la iglesia pueden creer y lo que pueden hacer en asuntos de fe y de práctica, se le da un sentido más abarcante del que Cristo quiso darles y que el que los discípulos pudieron entender en esa ocasión. Dios no sanciona esa pretensión. Los representantes de Cristo en la tierra tienen el derecho y la responsabilidad de atar todo lo que ya ha sido atado en el cielo, y de desatar todo lo que ya ha sido desatado en el cielo, es decir, de exigir o de prohibir aquello que la Inspiración revela con claridad.

Ir más allá de esto, es poner la autoridad humana en lugar de la autoridad de Cristo (ver com. Mar. 7: 7-9), tendencia que Dios no puede tolerar en aquellos que han sido designados como supervisores de los ciudadanos del reino de los cielos en la tierra.

20.

A nadie dijesen.

Hasta casi el fin de su ministerio, en ocasión de la entrada triunfal en Jerusalén, Jesús evitó que se tratara en público el hecho de que él era el Mesías. Nunca proclamó públicamente que él era el Mesías. Al parecer, para evitar la publicidad de su mesianismo (ver com. Mar. 1: 24-25), Cristo, en repetidas ocasiones, mandó a los espíritus de demonios que no se dirigieran a él llamándolo "Santo de Dios" (Mar. 1: 24-25, 34; 3: 11-12; Luc. 4: 34-35, 41).

Al recorrer Galilea, los doce no debían entrar en controversias acerca de si Jesús era o no el Mesías (DTG; 316), porque las erróneas ideas populares acerca del Mesías (DTG 22, 382-383; ver com. Luc. 4: 19) tenderían a impedir la proclamación y la recepción del Evangelio. La gente habría entendido tal proclamación en un sentido político, así como lo hicieron en ocasión de la entrada triunfal en Jerusalén (ver com. Mat. 21: 1, 5; Juan 6: 15).

Precisamente la Iglesia, que es la congregación de los llamados a ser santos, es por Institución de Dios y fundamentada en la Roca de nuestra Fe que es Cristo Jesús. Custodiada por sus Apóstoles y tenemos garantías no arbitrarias que realmente hay una sucesión real, pues hay un contacto real.

te complento, una iglesia que debe de conservar las enseñanzas de Jesus por que al final de cuentas los apostoles trasmitieron lo que JESUS les enseño, si esa Iglesia de la que hablas esta llena de practicas ajenas a las enseñanzas de Jesus tales como santo fulano de tal, los dogmas de maria y otras mas y por ende ajenas a la enseñanza apostolica, entonces estamos hablando de un Iglesia que no es la que pretende ser la que Cristo fundo pero no lo es.
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

alfonsomx63

Intresante... pero.... solo una pregunta quien por el amor de Dios es esa Elena de White...?
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

Bien – fui a buscarla en internet … ya… pero si estamos llamados todos a ser Uno con Cristo y una persona que no tienen una ENORME señal en la mano cuando está en Camino o incluso cuando busca la Verdad y para llegar a la Vida – donde pone APOSTOLES/IGLESIA – no me fio un pelo. Bien no niego que pueda haber verdades alli tambien sobre fe - pero NO TODA LA VERDAD que es la meta... para cada uno...que esta en Cristo y Fe.

NADIE está aquí para buscar su propio honor o gloria – sino SOLO EL DE DIOS… al que pertenece todo y todo. E ir detrás de otros humanos es una pérdida de Tiempo – dado que ellos solo son como nosotros hay que fiarse de enseñanzas sanas y verdaderas y no de humanos – pero entender la Biblia en si es ya complejo y hay que fiarse de los que saben eso…. COMO ENTENDERLA porque solo tener la Biblia y leerla es …. Una cosa – pero la correcta es basarse en lo que dijeron y dieron los apóstoles como herencia. Se llama tradición.
Viene de una palabra– que significa – transmitir un mensaje vía oral…

Cuando Dios ha logrado hacer obra en ti como a todos estamos llamados – formas parte de la Iglesia y eres una persona como todo los demás – y solo un ladrillo más de la construcción y la Gloria de ello son y pertenece a Dios mediante Cristo. ¡Y tú a dar gracias por la salvación que te han dado!
Amen…
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

alfonsomx63

Intresante... pero.... solo una pregunta quien por el amor de Dios es esa Elena de White...?

Es una de las pioneras de la Iglesia Adventista

¿hay algo de lo que leiste de la Hermana White que vaya en contra de lo que dice la biblia?
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

NADIE está aquí para buscar su propio honor o gloria – sino SOLO EL DE DIOS… al que pertenece todo y todo. E ir detrás de otros humanos es una pérdida de Tiempo – dado que ellos solo son como nosotros hay que fiarse de enseñanzas sanas y verdaderas y no de humanos – pero entender la Biblia en si es ya complejo y hay que fiarse de los que saben eso…. COMO ENTENDERLA porque solo tener la Biblia y leerla es …. Una cosa – pero la correcta es basarse en lo que dijeron y dieron los apóstoles como herencia. Se llama tradición.
Viene de una palabra– que significa – transmitir un mensaje vía oral…

Error en tu comentario, lo que realmente me quieres decir es lo que pregona la ICAR, la intepretacion solo se puede dar a través de la supuesta tradición apostólica de la ICAR.

Hermanita, si tu hicieras un analisis biblico de las las enseñanzas doctrinales que tiene la biblia y las compara con las enseñanzas de la tradicion de la ICAR te daras cuenta que son dos cosas completamente diferentes, por alli ustedes argumentan es un complemento, nada mas erroneo que esta afirmacion, ya que no pueden complementarse dos enseñanzas totalmente antagonicas.

Ejemplos

1.- Jesus le enseño a sus discípulos a quien orar y como orar, como y a quien elevar nuestras plegarias y nuestras peticiones (Luc.11.1 al 4), y con esto no te estoy que orar es repetir el padre nuestro como se le ocurrio afirmar a uno de tus hermanos catolicos, no , no es asi, ya que Jesu dijo todo lo que pidais al padre en mi nombre.

Que enseña la ICAR hay que hacer nuestras peticiones a un santo:
Santo fulano de tal te pido por esto y por aquelllo.

Jesus no enseño esto, por ende tampoco los apostoles.

¿quieres que esta tradicion valide la intepretacion de la escritura?

no hermanita, eso no puede ser
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

Error en tu comentario, lo que realmente me quieres decir es lo que pregona la ICAR, la intepretacion solo se puede dar a través de la supuesta tradición apostólica de la ICAR.

Hermanita, si tu hicieras un analisis biblico de las las enseñanzas doctrinales que tiene la biblia y las compara con las enseñanzas de la tradicion de la ICAR te daras cuenta que son dos cosas completamente diferentes, por alli ustedes argumentan es un complemento, nada mas erroneo que esta afirmacion, ya que no pueden complementarse dos enseñanzas totalmente antagonicas.

Ejemplos

1.- Jesus le enseño a sus discípulos a quien orar y como orar, como y a quien elevar nuestras plegarias y nuestras peticiones (Luc.11.1 al 4), y con esto no te estoy que orar es repetir el padre nuestro como se le ocurrio afirmar a uno de tus hermanos catolicos, no , no es asi, ya que Jesu dijo todo lo que pidais al padre en mi nombre.

Que enseña la ICAR hay que hacer nuestras peticiones a un santo:
Santo fulano de tal te pido por esto y por aquelllo.

Jesus no enseño esto, por ende tampoco los apostoles.

¿quieres que esta tradicion valide la intepretacion de la escritura?

no hermanita, eso no puede ser

Yo entiendo tu postura – ahora también hay que entender que no cambia la Verdad pero nuestra forma de poder ahondarla – ¿por qué? Porque este Camino con Cristo (cartas de Pablo y los Hermanos) es un peregrinaje común – el Cuerpo de Cristo lo hace en tiempo y espacio y en común hasta que hemos llegado a la meta todos… entonces no hay nuevas verdades de fe sino nueva forma de entender cómo vivir la Fe y incluso entender más hondo las Sagradas Escrituras – EN RELACION CON ESE NUESTRO COMUN ANDAR EN CRISTO…

Tu prefieres creer lo que dice una mujer que ha vivido su fe… y sus escritos hechos hace solo unos cien años – pues yo prefiero el Magisterio de los apóstoles de más de 2000 años de peso.
Testimonios privados con vivencia en Cristo por personas que han Ido con El mientras que vivían aquí hay pero solo para esclarecer algún punto ya esclarecido por las Escrituras y interpretadas = catecismo. ¿Por qué hace la Iglesia eso? Porque nosotros somos fruto del tiempo del cual pertenecemos y Ella defiende una Palabra Eterna y como entender esa Palabra a la larga de la historia sin perder nada.

Estudia y veras – mucho que se dice aquí no está basado en reales estudios – de parte de los protestantes – aunque hay algunos que si también he encontrado que SI LAS TIENEN y los que las tienen también saben entender mejor…

A cuanto tu pregunta sobre sus escritos
– cariño – no he podido leerlos sino solo resumen y comentario sobre ella… en algún pagina oficial que había… pero te digo ni los santos he leído durante los 8 años que llevo de católica - porque he de hacerlo cuando puedo dedicar TODO MI TIEMPO en una convivencia viva en Cristo y Seguirle a Él en vivo – El para mí no es un proyecto de estudio sino Esta Vivo y yo En El.

Aunque también he estudiado – patrística (los padres de la Iglesia) el exegesis del pentateuco y algunas cosas más y además la Biblia a diario … y como entenderla…
que Dios te bendiga hermano... y te lleve a la vida eterna

En Cristo
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

Yo entiendo tu postura – ahora también hay que entender que no cambia la Verdad pero nuestra forma de poder ahondarla – ¿por qué? Porque este Camino con Cristo (cartas de Pablo y los Hermanos) es un peregrinaje común – el Cuerpo de Cristo lo hace en tiempo y espacio y en común hasta que hemos llegado a la meta todos… entonces no hay nuevas verdades de fe sino nueva forma de entender cómo vivir la Fe y incluso entender más hondo las Sagradas Escrituras – EN RELACION CON ESE NUESTRO COMUN ANDAR EN CRISTO…

Hermana, yo no sabia que la escritura me hablara de una nueva forma de como vivir la fe.

La enseñanza de Jesus no cambia con los tiempos, su verdad no cambia con los tiempos, esa enseñanza y esa verdad es la misma que el enseño cuando estuvo en esta tierra, es la misma que dio instrucciones de tramitir a los nuevos y es la misma que todo creyente deberia de abrazar y vivir sin cambio doctrinal alguno.

Yo te entiendo, la nueva forma de vivir la fe es lo que te ha enseñado la ICAR, por que es la unica forma de introducir todas es practicas ajenas al evangelio.


Tu prefieres creer lo que dice una mujer que ha vivido su fe… y sus escritos hechos hace solo unos cien años – pues yo prefiero el Magisterio de los apóstoles de más de 2000 años de peso.

1.- Quien ha dicho que mi creencia es en esa Mujer, ¿lo he dicho yo?, los adventistas creemos en Jesus como nuestro salvador personal, como el unico camino que nos lleva al padre y no hay otro por mas que le busque, el dijo yo soy el camino la verdad y la vida y nadien viene al padre si no es por mi, si estas tan faciles y sencillas de entender no las quieres asimilar por tus concepto preconcebidos, yo te recomiendo que empieces a meditar seriamente en lo que crees y replantees muchas cosas.

2.- Has leido a la Hermana White como para poderme decir que de lo te cite va en contra de la biblia?

3.- si realmente tu corazon abriga seguir el Magisterio de los apostoles no fueras catolica, estas en el lugar equivocado, el magisterio de los apostoles son las enseñanzas de Jesus y el Buen Maestro no enseño los dogmas de Maria,no enseño elevar plegarias a los santos.

Testimonios privados con vivencia en Cristo por personas que han Ido con El mientras que vivían aquí hay pero solo para esclarecer algún punto ya esclarecido por las Escrituras y interpretadas = catecismo. ¿Por qué hace la Iglesia eso? Porque nosotros somos fruto del tiempo del cual pertenecemos y Ella defiende una Palabra Eterna y como entender esa Palabra a la larga de la historia sin perder nada.

Equivocada nuevamente, una Iglesia que defienda practicas ajenas al evangelio como los dogmas de Maria, como Santo fulano de tal te pido por esto y por aquello y otros mas, no es una Iglesia que defienda la verdad.

La verdad es la enseñada por Jesus a sus apostoles y esa verdad a quedado escrita, toda aquella practica que no guarde congruencia con ella es falsa, hermanita entiende, los apostoles no pudieron haber dejado escrita un enseñanza y haber trasmitido oralmente otra totalmente incongruente a lo que escribieron; y precisamente ese es el resultado que arroja el comparativo de la enseñanzas escrita con tus practicas o tradicion.


Estudia y veras – mucho que se dice aquí no está basado en reales estudios – de parte de los protestantes – aunque hay algunos que si también he encontrado que SI LAS TIENEN y los que las tienen también saben entender mejor…

Hermana, por que conosco de la biblia te hago estas aclaraciones.

A cuanto tu pregunta sobre sus escritos
– cariño – no he podido leerlos sino solo resumen y comentario sobre ella… en algún pagina oficial que había… pero te digo ni los santos he leído durante los 8 años que llevo de católica - porque he de hacerlo cuando puedo dedicar TODO MI TIEMPO en una convivencia viva en Cristo y Seguirle a Él en vivo – El para mí no es un proyecto de estudio sino Esta Vivo y yo En El.

es una lastima que emitas comentarios sin conocer


Bendiciones hermanita
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

Hermana, yo no sabia que la escritura me hablara de una nueva forma de como vivir la fe.

La enseñanza de Jesus no cambia con los tiempos, su verdad no cambia con los tiempos, esa enseñanza y esa verdad es la misma que el enseño cuando estuvo en esta tierra, es la misma que dio instrucciones de tramitir a los nuevos y es la misma que todo creyente deberia de abrazar y vivir sin cambio doctrinal alguno.

Yo te entiendo, la nueva forma de vivir la fe es lo que te ha enseñado la ICAR, por que es la unica forma de introducir todas es practicas ajenas al evangelio.


Interesante que dices - dado que sabes que tienes la verdad basada en la Biblia y yo no por la Iglesia.... ahora entonces a luz de lo que aqui afirmas dame una exgesis sobre este texto - en conexion:

Rom
8:18 Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse.
8:19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios.
8:20 Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza;
8:21 porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.
8:22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora;
8:23 y no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo.
8:24 Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo?
8:25 Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos.
8:26 Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.
8:27 Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos.
8:28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
8:29 Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
8:30 Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.
8:31 ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?
8:32 El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?
8:33 ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica.
8:34 ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.
8:35 ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?
8:36 Como está escrito:
Por causa de ti somos muertos todo el tiempo;
Somos contados como ovejas de matadero.
8:37 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
8:38 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
8:39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

En Cristo


Te marque en negro lo interesante - y fijate que habla en FUTURO pero si segun tu no hay futuro porque todo ya era enconces como ahora - no hay nada... que esperar o conocer o saber mas sobre fe....
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.


Interesante que dices - dado que sabes que tienes la verdad basada en la Biblia y yo no por la Iglesia.... ahora entonces a luz de lo que aqui afirmas dame una exgesis sobre este texto - en conexion:

Rom
8:18 Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse.
8:19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios.
8:20 Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza;
8:21 porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.
8:22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora;
8:23 y no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo.
8:24 Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo?
8:25 Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos.
8:26 Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.
8:27 Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos.
8:28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
8:29 Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
8:30 Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.
8:31 ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?
8:32 El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?
8:33 ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica.
8:34 ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.
8:35 ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?
8:36 Como está escrito:
Por causa de ti somos muertos todo el tiempo;
Somos contados como ovejas de matadero.
8:37 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
8:38 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
8:39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

En Cristo


Te marque en negro lo interesante - y fijate que habla en FUTURO pero si segun tu no hay futuro porque todo ya era enconces como ahora - no hay nada... que esperar o conocer o saber mas sobre fe....

Hermana voy a darte una respuesta, pero voy a hacerte una pregunta:

La nueva forma de vivir la fe de la que me hablas la sustentas con estos textos?
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

Hermana voy a darte una respuesta, pero voy a hacerte una pregunta:

La nueva forma de vivir la fe de la que me hablas la sustentas con estos textos?

No cambies mis palabras.....
Mira te las pongo y tu ponlos en el contexto de lo que te he citado de la Biblia vale++:

Yo entiendo tu postura – ahora también hay que entender que no cambia la Verdad pero nuestra forma de poder ahondarla – ¿por qué? Porque este Camino con Cristo (cartas de Pablo y los Hermanos) es un peregrinaje común – el Cuerpo de Cristo lo hace en tiempo y espacio y en común hasta que hemos llegado a la meta todos… entonces no hay nuevas verdades de fe sino nueva forma de entender cómo vivir la Fe y incluso entender más hondo las Sagradas Escrituras – EN RELACION CON ESE NUESTRO COMUN ANDAR EN CRISTO…

En Cristo
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

Que enseña la ICAR hay que hacer nuestras peticiones a un santo:
Santo fulano de tal te pido por esto y por aquelllo.

Jesus no enseño esto, por ende tampoco los apostoles.

¿quieres que esta tradicion valide la intepretacion de la escritura?

Segun tu, que enseña la Iglesia Catolica de los Santos,, y de donde lo leiste?

Hermanito, yo creo que debes cuidar la forma de conducirte en estos foros, de tal manera que no quede evidencia de que eres una persona sin criterio, y que solo quieres entrar a tomarle el pelo a las personas, esas formas se cuidan conservando la uniformidad de nuestras aseveraciones, y no haciendo comentarios como estos,

Te pregunto esta practica de la ICAR no ya aceptastes que existe y que se da? espero que respondas si no respondes te cito el tema el numero de mensaje y la pagina en la cual esta tu aseveracion.
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

No cambies mis palabras.....
Mira te las pongo y tu ponlos en el contexto de lo que te he citado de la Biblia vale++:

Yo entiendo tu postura – ahora también hay que entender que no cambia la Verdad pero nuestra forma de poder ahondarla – ¿por qué? Porque este Camino con Cristo (cartas de Pablo y los Hermanos) es un peregrinaje común – el Cuerpo de Cristo lo hace en tiempo y espacio y en común hasta que hemos llegado a la meta todos… entonces no hay nuevas verdades de fe sino nueva forma de entender cómo vivir la Fe y incluso entender más hondo las Sagradas Escrituras – EN RELACION CON ESE NUESTRO COMUN ANDAR EN CRISTO…

En Cristo


yo no cambio tus palabras lo que voy a citar es textualmente lo que escribistes:

entonces no hay nuevas verdades de fe sino nueva forma de entender cómo vivir la Fe
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.


Interesante que dices - dado que sabes que tienes la verdad basada en la Biblia y yo no por la Iglesia.... ahora entonces a luz de lo que aqui afirmas dame una exgesis sobre este texto - en conexion:

Rom
8:18 Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse.
8:19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios.
8:20 Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza;
8:21 porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.
8:22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora;
8:23 y no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo.
8:24 Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo?
8:25 Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos.
8:26 Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.
8:27 Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos.
8:28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
8:29 Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
8:30 Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.
8:31 ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?
8:32 El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?
8:33 ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica.
8:34 ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.
8:35 ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?
8:36 Como está escrito:
Por causa de ti somos muertos todo el tiempo;
Somos contados como ovejas de matadero.
8:37 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
8:38 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
8:39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

En Cristo


Te marque en negro lo interesante - y fijate que habla en FUTURO pero si segun tu no hay futuro porque todo ya era enconces como ahora - no hay nada... que esperar o conocer o saber mas sobre fe....

Para comenzar voy a citarte una introducción a la libro tomada del comentario bíblico adventista, por ciertos realizado por hombres de gran preparación teológica, si de algo no carece la Iglesia Adventista es de gente preparada en todos los ámbitos o vertientes que pueda tener la teología, solo espero que lo leas y cuando lo hayas leido dime para te suba la explicacion de lo que quieres.

De lo unico que estoy seguro es que leyendo las introducción vas comprender mejor lo que quiere decir Pablo en su Epistola a los Romanos:

La Epístola del Apóstol San Pablo a los ROMANOS

INTRODUCCIÓN

1. Título.

Cuando Pablo escribió esta epístola probablemente no le puso ningún título. Sencillamente era una carta que escribía a los creyentes de Roma; pero posteriormente la epístola llegó a ser conocida como "A los Romanos", Gr. pros romáious, que es el título que se le da en los manuscritos más antiguos. En manuscritos Posteriores este título fue ampliado a "La Epístola de Pablo el apóstol a los Romanos", título que con algunas ligeras diferencias es el que se usa en las versiones castellanas.

2. Paternidad literaria.

Nunca se ha puesto seriamente en duda que el apóstol Pablo sea el autor de esta epístola. Algunos eruditos han sugerido que el cap. 16 quizá no formaba parte de la epístola original enviada a Roma, sino que fue una carta separada enviada a Efeso, donde Pablo había trabajado durante algún tiempo (Hech. 19). Esta teoría se basa principalmente en la extensa lista de nombres que hay en dicho capítulo, y en la suposición de que difícilmente Pablo podría haber conocido a tantos amigos en una ciudad que aún no había visitado. Sin embargo, como la gente afluía a Roma desde todas partes del imperio, es muy posible que el apóstol hubiera tenido muchos amigos en la ciudad capital. Además, todos los manuscritos más antiguos incluyen el cap. 16 como una parte de la epístola. Por lo tanto, los eruditos conservadores modernos dejan la epístola tal como se encuentra ahora.

3. Marco histórico.

Parece evidente que la Epístola a los Romanos fue escrita desde Corinto, en su tercer viaje misionero, durante la permanencia de Pablo de tres meses en esta ciudad (Hech. 20: 1-3). Muchos eruditos ubican esta visita a fines del año 57 y comienzos del 58; pero algunos prefieren una fecha más antigua.

Que la epístola fue escrita desde Corinto es claro por sus referencias a Gayo (Rom. 16: 23; cf. 1 Cor. 1: 14) y a Erasto (Rom. 16: 23; cf. 2 Tim. 4: 20), y por su encomio a Febe, a quien Pablo describe como una creyente que había prestado servicios especiales a la iglesia de Cencrea, el puerto marítimo oriental de Corinto (Rom. 16: 1). 464 Cuando Pablo escribió la epístola estaba por regresar a Palestina, pues llevaba una contribución de las iglesias de Macedonia y Acaya para los pobres que había entre los cristianos de Jerusalén (Rom. 15: 25-26; cf. Hech. 19: 21; 20: 3; 24: 17; 1 Cor. 16: 1-5; 2 Cor. 8: 1-4; 9: 1-2). Después de terminar esa misión, se proponía visitar a Roma, y desde allí continuar con su viaje a España (Hech. 19: 21; Rom. 15: 24, 28). Hasta ese momento no había podido visitar a la iglesia cristiana de la ciudad capital del Imperio Romano, aunque con frecuencia había deseado hacerlo (Rom. 1: 13; 15: 22). Pero ahora creía que había completado sus labores misioneras en Asia y Grecia (cap. 15: 19, 23), y anhelaba proseguir rumbo al oeste para fortalecer la obra en Italia e introducir el cristianismo en España (ver HAp 299-300). Para poder llevar a cabo este último propósito, Pablo deseaba estar seguro del apoyo y la cooperación de los creyentes de Roma; por lo tanto, antes de su visita les escribió esta epístola en la que bosqueja con términos vigorosos y claros los grandes principios de su Evangelio (cap. 1: 15; 2: 16). Ver pp. 107-108.

4. Tema.

El tema de la epístola es la pecaminosidad universal de los hombres y la gracia universal de Dios, la cual proporciona un camino por el cual los pecadores pueden ser perdonados y también restaurados a la perfección y la santidad. Este "camino" es la fe en Jesucristo, el Hijo de Dios, que murió, resucitó y vive eternamente para reconciliarnos y restaurarnos.

Cuando Pablo escribe esta epístola, su mente está llena de los problemas que han surgido en sus conflictos con los judaizantes. Se ocupa de las cuestiones básicas, y les da respuesta mediante una presentación amplia de todo el problema del pecado y del plan de Dios para hacer frente a esa emergencia. Pablo muestra en primer lugar que todos los hombres -judíos y gentiles- han pecado y continúan alejados del glorioso ideal de Dios (cap. 3: 23). No hay excusa para este alejamiento, pues todos -judíos y gentiles, sin excepción- han recibido algún grado de revelación de la voluntad de Dios (cap. 1: 20). Por lo tanto, todos están, con justicia, bajo condenación. Además, los pecadores son completamente impotentes para liberarse por sí mismos de esa situación, pues en su condición depravada les es absolutamente imposible obedecer la voluntad de Dios (cap. 8: 7). Los intentos legalistas de obedecer la ley divina no sólo están condenados al fracaso, sino que también pueden ser evidencia externa de un arrogante rechazo generado por ajusticia propia de no reconocer la debilidad del hombre y su necesidad de un Salvador. Sólo Dios mismo puede proporcionar remedio, y esto lo ha hecho mediante el sacrificio de su Hijo. Todo lo que se pide del hombre caído es que ejerza fe: fe para aceptar las condiciones necesarias para perdonar su pasado pecaminoso, y fe para aceptar el poder que se ofrece para llevarlo a una vida de rectitud.

Este es el Evangelio de Pablo tal como se desarrolla en la primera parte de la epístola. Los capítulos restantes se ocupan de la aplicación práctica del El evangelio ante ciertos problemas que tienen que ver con el pueblo escogido y con los miembros de la iglesia cristiana.
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.


Interesante que dices - dado que sabes que tienes la verdad basada en la Biblia y yo no por la Iglesia.... ahora entonces a luz de lo que aqui afirmas dame una exgesis sobre este texto - en conexion:

Rom
8:18 Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse.
8:19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios.
8:20 Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza;
8:21 porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.
8:22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora;
8:23 y no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo.
8:24 Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo?
8:25 Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos.
8:26 Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.
8:27 Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos.
8:28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
8:29 Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
8:30 Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.
8:31 ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?
8:32 El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?
8:33 ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica.
8:34 ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.
8:35 ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?
8:36 Como está escrito:
Por causa de ti somos muertos todo el tiempo;
Somos contados como ovejas de matadero.
8:37 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
8:38 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
8:39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

En Cristo


Te marque en negro lo interesante - y fijate que habla en FUTURO pero si segun tu no hay futuro porque todo ya era enconces como ahora - no hay nada... que esperar o conocer o saber mas sobre fe....

Para comenzar voy a citarte una introducción a la libro tomada del comentario bíblico adventista, por ciertos realizado por hombres de gran preparación teológica, si de algo no carece la Iglesia Adventista es de gente preparada en todos los ámbitos o vertientes que pueda tener la teología, tenemos grandes exegetas, solo espero que lo leas y cuando lo hayas hecho dime para te suba la explicacion de lo que quieres, o si no quieres darle lectura tan solo dilo, de todas maneras te subire lo que pides.

De lo unico que estoy seguro es que leyendo las introducción vas comprender mejor lo que quiere decir Pablo en su Epistola a los Romanos:

La Epístola del Apóstol San Pablo a los ROMANOS

INTRODUCCIÓN

1. Título.

Cuando Pablo escribió esta epístola probablemente no le puso ningún título. Sencillamente era una carta que escribía a los creyentes de Roma; pero posteriormente la epístola llegó a ser conocida como "A los Romanos", Gr. pros romáious, que es el título que se le da en los manuscritos más antiguos. En manuscritos Posteriores este título fue ampliado a "La Epístola de Pablo el apóstol a los Romanos", título que con algunas ligeras diferencias es el que se usa en las versiones castellanas.

2. Paternidad literaria.

Nunca se ha puesto seriamente en duda que el apóstol Pablo sea el autor de esta epístola. Algunos eruditos han sugerido que el cap. 16 quizá no formaba parte de la epístola original enviada a Roma, sino que fue una carta separada enviada a Efeso, donde Pablo había trabajado durante algún tiempo (Hech. 19). Esta teoría se basa principalmente en la extensa lista de nombres que hay en dicho capítulo, y en la suposición de que difícilmente Pablo podría haber conocido a tantos amigos en una ciudad que aún no había visitado. Sin embargo, como la gente afluía a Roma desde todas partes del imperio, es muy posible que el apóstol hubiera tenido muchos amigos en la ciudad capital. Además, todos los manuscritos más antiguos incluyen el cap. 16 como una parte de la epístola. Por lo tanto, los eruditos conservadores modernos dejan la epístola tal como se encuentra ahora.

3. Marco histórico.

Parece evidente que la Epístola a los Romanos fue escrita desde Corinto, en su tercer viaje misionero, durante la permanencia de Pablo de tres meses en esta ciudad (Hech. 20: 1-3). Muchos eruditos ubican esta visita a fines del año 57 y comienzos del 58; pero algunos prefieren una fecha más antigua.

Que la epístola fue escrita desde Corinto es claro por sus referencias a Gayo (Rom. 16: 23; cf. 1 Cor. 1: 14) y a Erasto (Rom. 16: 23; cf. 2 Tim. 4: 20), y por su encomio a Febe, a quien Pablo describe como una creyente que había prestado servicios especiales a la iglesia de Cencrea, el puerto marítimo oriental de Corinto (Rom. 16: 1). 464 Cuando Pablo escribió la epístola estaba por regresar a Palestina, pues llevaba una contribución de las iglesias de Macedonia y Acaya para los pobres que había entre los cristianos de Jerusalén (Rom. 15: 25-26; cf. Hech. 19: 21; 20: 3; 24: 17; 1 Cor. 16: 1-5; 2 Cor. 8: 1-4; 9: 1-2). Después de terminar esa misión, se proponía visitar a Roma, y desde allí continuar con su viaje a España (Hech. 19: 21; Rom. 15: 24, 28). Hasta ese momento no había podido visitar a la iglesia cristiana de la ciudad capital del Imperio Romano, aunque con frecuencia había deseado hacerlo (Rom. 1: 13; 15: 22). Pero ahora creía que había completado sus labores misioneras en Asia y Grecia (cap. 15: 19, 23), y anhelaba proseguir rumbo al oeste para fortalecer la obra en Italia e introducir el cristianismo en España (ver HAp 299-300). Para poder llevar a cabo este último propósito, Pablo deseaba estar seguro del apoyo y la cooperación de los creyentes de Roma; por lo tanto, antes de su visita les escribió esta epístola en la que bosqueja con términos vigorosos y claros los grandes principios de su Evangelio (cap. 1: 15; 2: 16). Ver pp. 107-108.

4. Tema.

El tema de la epístola es la pecaminosidad universal de los hombres y la gracia universal de Dios, la cual proporciona un camino por el cual los pecadores pueden ser perdonados y también restaurados a la perfección y la santidad. Este "camino" es la fe en Jesucristo, el Hijo de Dios, que murió, resucitó y vive eternamente para reconciliarnos y restaurarnos.

Cuando Pablo escribe esta epístola, su mente está llena de los problemas que han surgido en sus conflictos con los judaizantes. Se ocupa de las cuestiones básicas, y les da respuesta mediante una presentación amplia de todo el problema del pecado y del plan de Dios para hacer frente a esa emergencia. Pablo muestra en primer lugar que todos los hombres -judíos y gentiles- han pecado y continúan alejados del glorioso ideal de Dios (cap. 3: 23). No hay excusa para este alejamiento, pues todos -judíos y gentiles, sin excepción- han recibido algún grado de revelación de la voluntad de Dios (cap. 1: 20). Por lo tanto, todos están, con justicia, bajo condenación. Además, los pecadores son completamente impotentes para liberarse por sí mismos de esa situación, pues en su condición depravada les es absolutamente imposible obedecer la voluntad de Dios (cap. 8: 7). Los intentos legalistas de obedecer la ley divina no sólo están condenados al fracaso, sino que también pueden ser evidencia externa de un arrogante rechazo generado por ajusticia propia de no reconocer la debilidad del hombre y su necesidad de un Salvador. Sólo Dios mismo puede proporcionar remedio, y esto lo ha hecho mediante el sacrificio de su Hijo. Todo lo que se pide del hombre caído es que ejerza fe: fe para aceptar las condiciones necesarias para perdonar su pasado pecaminoso, y fe para aceptar el poder que se ofrece para llevarlo a una vida de rectitud.

Este es el Evangelio de Pablo tal como se desarrolla en la primera parte de la epístola. Los capítulos restantes se ocupan de la aplicación práctica del El evangelio ante ciertos problemas que tienen que ver con el pueblo escogido y con los miembros de la iglesia cristiana.
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

Complemento del mensaje 18


5. Bosquejo.

I. Introducción, 1: 1-15.

A. Saludo, 1: 1-7.

B. Explicaciones personales, 1: 8-15.

II. Exposición doctrinal, l: 16 a 11: 36.

A. La doctrina de la justificación por la fe, 1: 16 a 5: 21.

1. Justificación alcanzada por la fe, 1: 16-17.

2. La necesidad universal de justificación, 1: 18 a 3: 20. 465

a. El fracaso de los gentiles, 1: 18-32.

b. El fracaso de los judíos, 2: 1 a 3: 20.

3. La justificación otorgada en Cristo, 3: 21-31.

4. La justificación por la fe: doctrina del Antiguo Testamento, 4: 1-25.

5. Los benditos efectos de la justificación, 5: 1-11.

6. Los efectos de la justificación en contraste con los resultados de la

caída de Adán, 5: 12-21.

B. La doctrina de la santificación por la fe, 6: 1 a 8: 39.

1. La muerte al pecado y resurrección a una nueva

2. La liberación del yugo de la ley y del pecado, 6: 12-23.

3. La relación de la ley con el pecado, 7: 1-13.

4. El conflicto entre la carne y el espíritu, 7: 14-25.

5. La vida llena del Espíritu, 8: 1-39.

C. La elección de Israel, 9: 1 a 11: 36.

1. El pesar de Pablo por el rechazo de Israel, 9: 1-5.

2. La justicia del rechazo, 9: 6-13.

3. La voluntad de Dios no debe ser puesta en duda, 9: 14-29.

4. La causa del rechazo fue la falta de fe de Israel, 9: 30 a 10: 21.

5. La restauración final de Israel, 11: 1-36.

III. Aplicación práctica de la doctrina de la justificación por la fe, 12: 1 a 15: 13.

A. El sacrificio que hace el cristiano de sí mismo, 12: 1-2.

B. El cristiano como miembro de la iglesia, 12: 3-8.

C. La relación del cristiano con otros, 12: 9-21.

D. La relación del cristiano con el Estado, 13: 1-7.

E. La única deuda que tiene el cristiano: amor, 13: 8-10.

F. La proximidad de la segunda venida, 13: 11-14.

G. La necesidad de tolerancia mutua entre los cristianos, 14: 1 a 15: 13.

IV. Conclusión, 15: 14 a 16: 27.

A. Explicaciones personales, 15: 14-33.

B. Saludos a varias personas, 16: 1-16.

C. Advertencia contra los falsos maestros, 16: 17-20.

D. Saludos de parte de los compañeros de Pablo y de su amanuense, 16: 21-23.

E. Bendición final y doxología, 16: 24-27.
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

Santo cielo hermano…
¿no sabes verdad?
No sabes entender ese texto de por ti mismo – pero decir a lo que digo yo que no es correcto si puedes – pero hermano en que te basas para decir que algo no es correcto cuando ni sabes la interpretación de por ti mismo…
¿porque pegas aquí un montón de textos que otros han fabricado?

Tu ni sabes que es un CAMINAR con Cristo que es personal y común para todo el Cuerpo = la Iglesia. Y como ni sabes eso niegas lo que digo… y en ese Caminar hay también una evolución dado que cuando tu conviertes y empiezas conocer a Cristo no sabes todo a la vez sino aprendes lentamente y eso también va por toda la Iglesia – tu solo te limitas a decir que no es correcto porque soy católica no porque tú tienes la respuesta…

Mira – dejemos esto… y pídele a Dios que te de luz para entender el texto que te puse y ora – que creo que sería mejor para tu Caminar con Cristo…me junto a ti en oracion.
En Cristo
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

Santo cielo hermano…
¿no sabes verdad?
No sabes entender ese texto de por ti mismo – pero decir a lo que digo yo que no es correcto si puedes – pero hermano en que te basas para decir que algo no es correcto cuando ni sabes la interpretación de por ti mismo…
¿porque pegas aquí un montón de textos que otros han fabricado?

Que esta pasando contigo hermana, es como si yo te dijiera que no sabes entender la biblia por ti misma, mas que a traves de la luz que te da la ICAR, me veria un total ignorante, por tu respuesta seria tajante, Hermano soy catolica me dirias y mi comentarios giran en torno a la formacion catolica.


Hermanita es lo mismo conmigo, Soy adventista del septimo dia y creo en su doctrina por que considero que es la verdad, no te puedo hablar de otra forma mas que de la forma de pensar adventista.

Lo que te cite es la introduccion al libro de Romanos hecho por teologos e investigadores adventistas, acaso quieres que ponga a escribir lo que esta escrito, ¿por que no cuestionas a Ian a tu hermano en la fe?.

que el lo haga es correcto, que otro lo haga es incorrecto, que forma tan imparcial de pensar,evaluar y medir las cosas.

No sabes entender ese texto de por ti mismo – pero decir a lo que digo yo que no es correcto si puedes – pero hermano en que te basas para decir que algo no es correcto cuando ni sabes la interpretación de por ti mismo…

Por supuesto que los entiendo, y el propósito de citarte el cometario adventista es para disfrutes de la riqueza explicativa de los Telogos adventistas.

Tu ni sabes que es un CAMINAR con Cristo que es personal y común para todo el Cuerpo = la Iglesia. Y como ni sabes eso niegas

hermana permiteme decirte que lo que menos espere de ti son estos comentarios subjetivos que invaden los dominios del altísimo, el único que conoce las intenciones del corazon del hombre es Dios, por lo tu comentario, parece ser que también tu.


y en ese Caminar hay también una evolución dado que cuando tu conviertes y empiezas conocer a Cristo no sabes todo a la vez sino aprendes lentamente y eso también va por toda la Iglesia – tu solo te limitas a decir que no es correcto porque soy católica no porque tú tienes la respuesta…

Hermanita entiendo perfectamente de lo que me hablas, y mi vida es un ejemplo de lo que Jesus logra en el corazon del hombre, el me rescato del mundo del alcholismo y las drogas, cuando todo parecia perdido para mi ahi estaba el, pero sabes siempre estuvo ahi, pero no lo queria ver, mi mejor amigo, mi hermano, por que esa amistad que cultivamos solo la interrumpio la muerte, Bernardino, el Padre Berna como se le conocia, amigos del barrio que crecimos juntos y nos unio una amistad que a lo mejor se derivo del hecho de que eramos los unicos varones de la familia.

A mi la vida, por eleccion propia me hizo caer cuesta abajo casi al final de mi carrera universitaria, fuera de mi Madre y mi Padre que lloraron lagrimas para sacarme de ahi, el unico amigo que me visitaba, llevaba ropa y comida era el, el me conto que me encontro sin sentido en la pocilga donde vivia y me llevo a un hospital, ahi decidi asirme de Jesus y no soltarme nunca mas, Gracias termine mi carrera, no tuve secuelas graves, puso a una hermosa mujer con la que me case y nos ha regalado dos hijo.

Hermana yo te entiedo muy bien, y solo hago una pregunta que esta en la biblia ¿quien ama mas? a quien se le perdona mas.

Reconosco que soy muy directo en mis cometarios, pero si eso ofende pido una disculpa, y solicito compresion, estamos en un foro de debates y es lo que debemos de entender.

Mira – dejemos esto… y pídele a Dios que te de luz para entender el texto que te puse y ora – que creo que sería mejor para

El texto lo entiendo muy bien a lo mejor sientas temor de leer la teologia adventista, lo se lo entiendo.

De todas manera lo voy poner para el quiera disfrutar de los comentarios sobre este capitulo
 
Re: El porqué del Primado Romano: La sucesión Apostólica.

Paz y bien de parte de Dios

Ante todo, perdonen la demora, pero entre los estudios y el trabajo, trato de administrar mi tiempo y darles la atención que ameritan.

Tú citaste ésta fracción de lo que yo había escrito: «Aquellos que en concepto de carne se apartaron de nosotros y los que son en sucesión, toman nuestro «Amén» por falsía. No se detienen a contemplar la comunión de la fe, que ellos mismos manifiestan, ¿Y a qué se debe? -No aceptan la sucesión Apostólica.» (IanLangle)

Aqui Ian langle tienes que deterte un momento y hacerte una pregunta:

¿La comunion en la fe es la sucesion apostolica, esto enseña la biblia ?.

Primero escribí: «Tenemos en comunión el «creer en Dios» indiferente del modo en que lo manifestemos.»

Dios te bendiga mi hermano, resulta en un principio simple, pero demando atención en aquel «Amén» al que refiero, —que no es—: la sucesión Apostólica, sino lo que «creemos». Los cristianos de La Santa Iglesia Católica Apostólica Romana afirmamos lo siguiente:

Creemos en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y la tierra.

Creemos en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre Todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.

Creemos en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna.

¡Este es nuestro «Amén»!

Pero precisamente en un discernimiento que no estima o valora esta comunión de la «fe», (creer en Dios y en su Palabra), sino que la desestima por rechazar la sucesión Apostólica que tiene fundamento y no es arbitraría , que yo abordara el «porqué».
Además no argumentas contra ésta veracidad que creemos, sino que lo tornas en un tema, al que por atención y amor en Cristo contestare sin vacilar.

Hago mi comentario:
La comunión en la fe va mas allá de sucesión apostólica y muchísimo mas allá.

La comunión en la fe comienza recibiendo a cristo:

Col.2.6. Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él;

La comunión empieza recibiendo al Señor Jesús, porque es necesario que en algún momento y de alguna forma comience la relación con Dios. En el Evangelio de Juan (14:6-7) leemos que hablando con Tomás, "Jesús le dice: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida: nadie viene al Padre, sino por mí. Si me conocieseis, también á mi Padre conocierais: y desde ahora le conocéis, y le habéis visto."

Jesús es el único camino al Padre, no es un camino más, sino que es el camino. Entonces, para relacionarnos con Dios debemos comenzar por la única manera posible: "recibiendo al Señor Jesús". No hay otra manera. Eso no es algo que diga yo, sino que es lo que dice la Biblia, la Palabra de Dios. Son las palabras del propio Señor Jesús y es la única manera que Dios preparó para que podamos tener comunión con él.
Manifestar unidad en la «fe», (con obras), como es el caso de nosotros, —los cristianos de la Santa Iglesia Católica Apostólica Romana—, es una cosa, cosa diferente que otros digan: «‘Señor, Señor’» (Mt 7, 21), ¡Hay que cumplir la voluntad del Padre! Porque de cierto podrán decir: « ¡Nosotros tenemos Fe!» Pruébenme su fe sin obras y yo les probaré por las obras mi fe, ¿Tú crees en Dios? Haces bien, también los demonios lo creen y tiemblan.

Por lo que la tibieza de tus comentarios me entristece, ¿Has recibido al Señor Jesús?

«Quien a vosotros recibe, a mí me recibe, y quien me recibe a mí, recibe a Aquel que me ha enviado.» (Mt 10, 40).

Pero ni los recibes y aquello que dices: « Son las palabras del propio Señor Jesús y es la única manera que Dios preparó para que podamos tener comunión con él» (alfonsomx63); más a esto no haces, pues: « Y yo a mi vez te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. A ti te daré las llaves del Reino de los Cielos; y lo que ates en la tierra quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra quedará desatado en los cielos.» (Mt 16, 17-19).

Pablo lo hizo, pues él que había dado la gracia a Pedro se la había dado a él, y Pablo fue con Bernabé a donde Santiago, Pedro y Juan, y dice en Gálatas capítulo 2, versículos del 9 al 10: y reconociendo la gracia que me había sido concedida, Santiago, Cefas y Juan, que eran considerados como columnas, nos tendieron la mano en señal de comunión a mí y a Bernabé: nosotros iríamos a los gentiles y ellos (aquí es necesario lo siguiente: Mientras estaba comiendo con ellos, les mandó a que no se ausentasen de Jerusalén, sino que guardaran la promesa del Padre: «que oíste de mí:»(Hch 1, 4), cumpliendo lo que nuestro Señor), a los circuncisos; sólo que nosotros debíamos tener presentes a los pobres, cosa que he procurado cumplir con todo esmero.

Pero la confirmación en la «fe» es mantenida en Pedro, de modo que para tal, así dijo: « ¿Acaso puede alguno negar el agua del bautismo a éstos que han recibido el Espíritu Santo como nosotros?» (Hch 10, 47); «Bienaventurado eres Simón, hijo de Jonás, porque no te ha revelado esto la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en los cielos.» (Mt 16, 17). Y Pedro mando que fueran bautizados en nombre de Jesucristo (Hch 10, 48).

Al leer el comentario del hermano Ian, la pregunta lógica que viene a la mente de cualquier persona que conozca de la biblia es :

¿Lucas 22:32 me esta hablando de la sucesion apostolica representada por el Papa?


Mi comentario:
Lucas 22:32 no habla de una sucesion apostolica y menos prefigura el Papado, pero cuando Jesus le dice a pedro "Confirmas a tus hermanos" estas palabras indicaban la obra extensa y eficaz que este apóstol debía hacer en lo futuro en favor de aquellos que aceptaban la fe. Su experiencia personal con el pecado, el sufrimiento y el arrepentimiento, lo habían preparado para esa obra. Mientras no reconoció sus debilidades, no pudo conocer la necesidad que tenían los creyentes de depender de Cristo. En medio de la tormenta de la tentación había llegado a comprender que el hombre solamente puede caminar seguro cuando pierde toda confianza en sí mismo y la deposita en el Salvador.
Dices que no prefiguraba, pero Nuestro Señor vino a dar cumplimiento, cumplió con toda Ley y con los Profetas, Él ya antes estaba, lo tratare en un tema aparte, —porque amerita atención propia—, cuando nuestro Señor llama a Simón a seguirle, le anuncia esto mismo que tú dices que no estaba considerado, pues Jesús, fijando su mirada en él, le dijo: «Tú eres Simón, el hijo de Juan; tú te llamarás Cefas» - que quiere decir, "Piedra". (Jn 1, 42); más Simón no recibe el nombre de Pedro, sino hasta aquella confesión: «Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo.» (Mt 16, 16). Por lo que en cumplimiento: «Y yo a mi vez te digo que tú eres Pedro» (Mt 16, 18).

Dejemos que la riqueza del comentario biblico adventista nos explique estos versículos

Me maravillo de que abandonando al que os llamó por la gracia de Cristo, os paséis tan pronto a otro evangelio —no que haya otro, sino que hay algunos que perturban y quieren deformar el Evangelio de Cristo—. Pero aun cuando nosotros mismos o un ángel del cielo os anunciaran un evangelio distinto del que os hemos anunciado, ¡sea anatema! Como lo tenemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os anuncia un evangelio disitinto del que habeis recibido, ¡sea anatema! Porque ¿busco yo ahora el favor de los hombres o el de Dios? ¿O de que intento agradar a los hombres? Si todavía tratara de agradar a los hombres, ya no sería siervo de Cristo (Ga 1, 6 -10).

Dios te bendiga mi hermanito.

La gracia de Dios sea para todos.