VAMOS HACIA UN CONTROL ABSOLUTO
Mario E. Fumero
No puedo afirmar, como lo hacen algunos pastores que la vacuna del Covide19 sea el sello de la bestia porque no hay base bíblica para ello. Tampoco puedo afirmar que dicha llamada vacuna sea, en todo el sentido estricto de la palabra y según su definición una vacuna, porque no inmuniza el 100%. Sin embargo, en algunos casos si puede redecir la gravedad de la enfermedad ya que funciona como un atenuante que ayuda a disminuir la mortandad, y aunque hay algunas objeciones, hasta el momento el virus del Covid19 sigue mutando y causando estragos.
Sin embargo esta pandemia ha servido como un experimento o punto de partida para crear las condiciones futuras a fin de poder entender cómo será el futuro inmediato cuando se imponga el verdadero sello de la bestia, el cual tiene que ver con una crisis económica mundial, y una hambruna generalizada según indica la Biblia en Apocalipsis 6:6 donde se habla de una inflación y un alto costo de la vida que lleva a un racionamiento y escases de alimentos, lo cual da píe al llamado “Sello de la Bestia” de Apocalipsis 13:17 en donde es establece que nadie puede comprar ni vender a menos que tenga la marca de la bestia, que según el verso 18 tiene que ver con un sistema numérico de control. En Apocalipsis 6:8 se habla de un caballo amarillo que representa tres graves crisis que causaran la mortandad del 25% de la población mundial, y la causa esta explicita, afirmando que será por espada (igual armas o guerras) por mortandad (igual a epidemias) y por hambre.
Pero analicemos por parte este enfoque. No cabe duda que la pandemia ha servido para que todos los gobiernos del mundo desarrollen una metodología de control absoluto de las personas, invadiendo su intimidad y sus derechos personales los cuales por motivo de seguridad y para frenar la expansión del virus han sido anulados en algunos aspectos, por lo cual hemos quedado a expensas de una imposición que por razones de salud anula muchos derechos fundamentales en las personas. Esto hace evidente la posibilidad de que el relato de apocalipsis 13:16-18 sea posible en un futuro inmediato, y aunque antiguamente parecía imposible que todos los seres humanos fueran controlados en lo que compran y venden, esta utopía hoy se ha vuelto una realidad palpable.
Por otro lado, me llama la atención que la bestia descrita por el profeta Daniel, y tal como aparecen en los diseños antiguos, hoy este colocada como un monumento frente a las Naciones Unidas en la ciudad de Nueva York, de manera que aunque para alguno será casualidad, la Palabra de Dios se cumple al pie de la letra y vamos aceleradamente hacia los acontecimientos apocalípticos relacionado con la Venida de un Mesías que tanto esperan los judíos, como los islámicos, pero nosotros los cristianos que ya recibimos a Jesús como el Ungido sabemos que todos estos acontecimientos ya señalados nos anuncian que pronto el Amado vendrá por su Iglesia y la tierra entrara en la debacle anunciada en la biblia como el tiempo de la ira del Señor.
Si analizamos muy bien los noticieros y los fenómenos que están ocurriendo en el mundo en relación a la amenaza de guerra, los fenómenos naturales, la crisis económica y la pandemia, podemos pronosticar que nos enfrentamos a un futuro incierto, y como dijo el apóstol San Pablo vivimos tiempos muy peligrosos (2 Timoteo 3:1).
¿Qué sigue después de esta pandemia? Indudablemente viene una gran hambruna acompañada por fenómenos geológicos que van desde alteración climática, hasta amenazas de meteoritos cayendo en la tierra, y cabe la posibilidad de considerar un terrorismo nuclear.
Algunos dirán que soy pájaro de mal agüero con todo esto pronósticos, pero es bueno ser conscientes de los tiempos que vivimos y apercibirnos para poder enfrentar las crisis que vendrán buscando en las Sagradas Escrituras la respuesta para librarnos de los terribles acontecimientos que se avecinan, porque siempre he creído que es mejor prepararse para lo peor aunque ocurra lo mejor, que vivir confiando en que todo va a estar bien, cuando en realidad el panorama mundial es sombrío e indica todo lo contrario. Seamos sabio y entendido cómo debemos actuar en estos tiempos tan difíciles que nos han tocado vivir.