El Milagro Eucarístico de Lanciano avalado por la ciencia moderna

ricardo perales

Lo importante es la salvación de las almas.
23 Abril 2020
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El Milagro Eucarístico de Lanciano avalado por la ciencia moderna​

Milagro-de-Lanciano

La presente información se encuentra en la monografía del Prof. Linoli, docente de anatomía e histología patológica y citogenética, publicata después de la última investigación científica de la Carne e Sangre milagrosa del 1970 y revisada en el 1991.
Información aportada por la Cardióloga Italiana Marina De Cesare, quien participó en la investigación del milagro
En el siglo VIII, un monje de la Orden Basiliana, mientras celebraba la Santa Misa en la Iglesia de los Santos Legonziano e Domiziano en Lanciano, dudando de la consagración, asistió con gran asombro junto a los feligreses presentes, a la trasformación de la hostia en Carne y del vino en Sangre. Ver la página principal sobre este milagro
Después de varias investigaciones hoy el Milagro Eucarístico se conserva en la Iglesia de San Francesco, en un precioso relicario de plata.
En particular, la Carne tiene una forma redondeada, con un diámetro de entre 55 y 60 mm., de un color entre amarillo oscuro y marrón. La lámina de tejido se presenta sutilizada y ampliamente lacerada en la parte central, debido a su retiro hacia el borde externo, donde se encuentra levantada en pliegues. Es evidente que se trata de un órgano con cavidad, visto en sección trasversal, histológicamente reconocido como corazón. La parte inferior, más espesa, puede ser identificada como ventrículo izquierdo; la parte superior, más delgada como es habitual, puede ser identificada como el ventrículo derecho. A lo largo de los siglos, la Carne milagrosa ha sido objeto de manipulaciones reiteradas que han llevado a la pérdida de partes centrales como la pared interventricular, de la cual sólo han quedado rastros en la base, entre los dos ventrículos. Además, la única cavidad actual fue perdiendo agua, con la consiguiente momificación y reducción de dimensiones.
La Sangre del Milagro Eucarístico, contenida dentro de un antiguo cáliz de vidrio, se presenta bajo el aspecto de 5 fragmentos del peso total de 15.18 gramos, de color amarillo-marrón y de consistencia uniformemente dura.
El estudio realizado en los años 1970-1971 fue dirigido a:
1) averiguar la estructura histológica del tejido considerado Carne;
2) definir si la sustancia considerada Carne responde a las características de ésta;
3) establecer a qué especie histológica pertenecen la Carne y la Sangre;
4) precisar en los dos tejidos el grupo sanguíneo;
5) indagar sobre los compuestos proteicos y minerales de la Sangre.

1) Estudio Histológico de la antigua Carne de Lanciano

Los pequeños fragmentos extraídos del tejido momificado han sido sometidos a estudios histológicos según métodos clásicos de investigación: coloraciones sobre secciones miotómicas (Mallory, Van Gieson, método de Ignesti, impregnación con plata según Gomori, entre otros) y sucesivo examen en el microscopio electrónico.
El tejido aparece compuesto de fibrocélulas ( = células que componen el tejido muscular) orientadas en sentido longitudinal, oblicuo y trasversal. Las mismas fibrocélulas ponen en evidencia, con mayores agrandamientos, una estructura fibrilar longitudinal, que lleva al reconocimiento de tejido muscular estriado. Las fibras aparecen organizadas en uniones sincítícas, o sea a través de bifurcaciones y recíprocas uniones en los extremos.
Las características antes descriptas conllevan al diagnóstico de tejido miocárdico. De hecho, la orientación de las fibrocélulas y la agregación sincitíca se encuentran sólo en el músculo cardíaco : el corazón, durante la contracción, realiza movimientos complejos de torción, contracciones desde abajo hacia arriba y desde el exterior hacia el interior de la cavidad ventricular. El trabajo resultante tiene como finalidad la expulsión de la sangre desde la cavidad ventricular hacia las grandes arterias. Los músculos esqueléticos no necesitan de tan compleja organización, ya que están constituídos de fibrocélulas dispuestas según la misma orientación. En los fragmentos histológicos se han evidenciado también otras estructuras, típicas del corazón: un lóbulo de tejido adiposo, ramificaciones nerviosas que pertecen a un nervio vago (que regula la frequencia de la pulsación cardíaca) y finalmente estructuras endocardíacas (tejido que reviste internamente el corazón y sus válvulas), ausentes en otros tejidos musculares. Finalmente se evidenciaron estructuras vasculares de tipo arterioso y venoso normales, que no presentan alteraciones estructurales, que más bien pertenecen a un individuo sano y joven.
Es necesario también precisar que no se relevaron sustancias momificantes, las cuales eran empleadas para conservar los tejidos.
Conclusión: el tejido de la antigua Carne de Lanciano pertenece a un Corazón. Un Corazón sano.

2) Examen microscópico y microquímico de la antigua Sangre de Lanciano.

Sobre secciones en el micrótomo no aparecen elementos celulares. Los estudios microquímicos han arrojado resultados contrastantes comparando la muestra en examen y sangre humana disecada.

3) Búsqueda cromotográfica de la hemoglobina en la antigua Sangre.

La prueba realizada tanto en la muestra en cuestión como en otras muestras de referencia, demostró la real naturaleza hematosa de la antigua Sangre de Lanciano.
Dicha prueba tiene plena validez para el reconocimiento de la sangre aún en el caso de materiales daňados a lo largo del tiempo, que pueden presentar resultados contrastantes con respecto a los exámenes anteriormente mencionados.

4) Definición inmunológica de la especie a la que pertenecen la antigua Sangre y la antigua Carne de Lanciano.

Los tejidos en examen han sido analizados con sueros antiproteína humana, sueros de conejo y sueros de buey.
Conclusión: las pruebas de precipitación han demostrado que la Sangre y la Carne del Milagro Eucarístico de Lanciano pertenecen a la especie humana.

5) Determinación del grupo sanguíneo en la antigua Sangre y en la antigua Carne de Lanciano.

Las pruebas empleadas para la determinación del grupo sanguíneo (ABO) han manifestado que tanto la Sangre como la Carne de Lanciano pertenecen al grupo AB.

6) Análisis electroforético de las proteinas de la antigua Sangre de Lanciano.

La composición porcentual de las proteínas en el líquido en examen repite los valores conocidos para el suero de sangre humana normal:
albúmina = 61% ;
globulinas alfa-1 = 2,38% ;
globulinas alfa-2 = 7,14% ;
globulinas beta = 7,14% ;
gamma = 21,42%.
La relación albúmina-globulina resulta ser del 1,62% siendo el valor normal de entre 1,13 y 1,73.
Las proteínas fraccionadas de la muestra en examen presentan entonces una curva electroforética parecida a la sangre fresca normal (un suero de sangre no se puede utilizar con fines electroforéticos después de los 2-4 días de refrigerado).

7) Determinación de los minerales (calcio, cloruros, fósforo, magnesio, potasio, sodio) en la antigua Sangre de Lanciano.

Con respecto a las muestras de sangre humana normal disecada, el porcentaje de minerales resultaron alteradas por el contacto con la pared de vidrio del contenedor y por la exposición al polvo de mampostería rico en sales de calcio.

Consideraciones finales

Los resultados de la investigación efectuada sobre fragmentos de la Antigua Sangre y de la antigua Carne que se conoce tradicionalmente con el nombre de Milagro Eucarístico de Lanciano (siglo VIII), se resumen en los siguientes puntos:
– La Sangre es efectivamente tal;
– La Carne pertenece al miocardio;
– La Carne y la Sangre pertenecen a la especie humana;
– El grupo sanguíneo identificado tanto en la Sangre como en la Carne es de tipo AB,
– El examen electroforético de las proteínas de la Sangre se acerca al examen en el suero fresco.
El diagnóstico histológico de miocardio hace que sea poco aceptable la hipótesis de un “falso”. De hecho sólo una mano experta en disección anatómica hubiese podido obtener del corazón (órgano cavo) de cadáver una rebanada uniforme y continua, considerando que las primeras disecciones anatómicas sobre el hombre fueron posteriores al 1300.
Además las perforaciones por clavos presentes en el contorno, llevan a deducir que el fragmento de corazón aparecido en el altar de la iglesia de Lanciano estuviese en estado vivo y entonces tendiese, por “rigor mortis” , a retraerse concéntricamente cuestión a la que se opusieron los monjes basilianos, clavando en una tablilla de madera la sección de corazón. En tal modo, el hecho de retraerse centrífugamente ha lacerado el tejido en su parte central, como ya se ha dicho.
Un fragmento de miocardio y de coágulos hemáticos, dejados en el estado natural durante siglos y además expuestos a la acción de los agentes físicos atmosféricos, ambientales y parasitosos, llegaron a nosotros así inexplicablemente inalterados aún después de más de un milenio, para someterse a las investigaciones científicas de las que sólo hoy, después de siglos de historia, disponemos.
(*) La presente información se encuentra en la monografía del Prof. Linoli, docente de anatomía e istologia patológica y citogénetica, publicata después de la última investigación científica de la Carne e Sangre milagrosa del 1970 y rivisada en el 1991.
Fuente: Corazones.org
 

El Milagro Eucarístico de Lanciano avalado por la ciencia moderna​

Milagro-de-Lanciano

La presente información se encuentra en la monografía del Prof. Linoli, docente de anatomía e histología patológica y citogenética, publicata después de la última investigación científica de la Carne e Sangre milagrosa del 1970 y revisada en el 1991.
Información aportada por la Cardióloga Italiana Marina De Cesare, quien participó en la investigación del milagro
En el siglo VIII, un monje de la Orden Basiliana, mientras celebraba la Santa Misa en la Iglesia de los Santos Legonziano e Domiziano en Lanciano, dudando de la consagración, asistió con gran asombro junto a los feligreses presentes, a la trasformación de la hostia en Carne y del vino en Sangre. Ver la página principal sobre este milagro
Después de varias investigaciones hoy el Milagro Eucarístico se conserva en la Iglesia de San Francesco, en un precioso relicario de plata.
En particular, la Carne tiene una forma redondeada, con un diámetro de entre 55 y 60 mm., de un color entre amarillo oscuro y marrón. La lámina de tejido se presenta sutilizada y ampliamente lacerada en la parte central, debido a su retiro hacia el borde externo, donde se encuentra levantada en pliegues. Es evidente que se trata de un órgano con cavidad, visto en sección trasversal, histológicamente reconocido como corazón. La parte inferior, más espesa, puede ser identificada como ventrículo izquierdo; la parte superior, más delgada como es habitual, puede ser identificada como el ventrículo derecho. A lo largo de los siglos, la Carne milagrosa ha sido objeto de manipulaciones reiteradas que han llevado a la pérdida de partes centrales como la pared interventricular, de la cual sólo han quedado rastros en la base, entre los dos ventrículos. Además, la única cavidad actual fue perdiendo agua, con la consiguiente momificación y reducción de dimensiones.
La Sangre del Milagro Eucarístico, contenida dentro de un antiguo cáliz de vidrio, se presenta bajo el aspecto de 5 fragmentos del peso total de 15.18 gramos, de color amarillo-marrón y de consistencia uniformemente dura.
El estudio realizado en los años 1970-1971 fue dirigido a:
1) averiguar la estructura histológica del tejido considerado Carne;
2) definir si la sustancia considerada Carne responde a las características de ésta;
3) establecer a qué especie histológica pertenecen la Carne y la Sangre;
4) precisar en los dos tejidos el grupo sanguíneo;
5) indagar sobre los compuestos proteicos y minerales de la Sangre.

1) Estudio Histológico de la antigua Carne de Lanciano

Los pequeños fragmentos extraídos del tejido momificado han sido sometidos a estudios histológicos según métodos clásicos de investigación: coloraciones sobre secciones miotómicas (Mallory, Van Gieson, método de Ignesti, impregnación con plata según Gomori, entre otros) y sucesivo examen en el microscopio electrónico.
El tejido aparece compuesto de fibrocélulas ( = células que componen el tejido muscular) orientadas en sentido longitudinal, oblicuo y trasversal. Las mismas fibrocélulas ponen en evidencia, con mayores agrandamientos, una estructura fibrilar longitudinal, que lleva al reconocimiento de tejido muscular estriado. Las fibras aparecen organizadas en uniones sincítícas, o sea a través de bifurcaciones y recíprocas uniones en los extremos.
Las características antes descriptas conllevan al diagnóstico de tejido miocárdico. De hecho, la orientación de las fibrocélulas y la agregación sincitíca se encuentran sólo en el músculo cardíaco : el corazón, durante la contracción, realiza movimientos complejos de torción, contracciones desde abajo hacia arriba y desde el exterior hacia el interior de la cavidad ventricular. El trabajo resultante tiene como finalidad la expulsión de la sangre desde la cavidad ventricular hacia las grandes arterias. Los músculos esqueléticos no necesitan de tan compleja organización, ya que están constituídos de fibrocélulas dispuestas según la misma orientación. En los fragmentos histológicos se han evidenciado también otras estructuras, típicas del corazón: un lóbulo de tejido adiposo, ramificaciones nerviosas que pertecen a un nervio vago (que regula la frequencia de la pulsación cardíaca) y finalmente estructuras endocardíacas (tejido que reviste internamente el corazón y sus válvulas), ausentes en otros tejidos musculares. Finalmente se evidenciaron estructuras vasculares de tipo arterioso y venoso normales, que no presentan alteraciones estructurales, que más bien pertenecen a un individuo sano y joven.
Es necesario también precisar que no se relevaron sustancias momificantes, las cuales eran empleadas para conservar los tejidos.
Conclusión: el tejido de la antigua Carne de Lanciano pertenece a un Corazón. Un Corazón sano.

2) Examen microscópico y microquímico de la antigua Sangre de Lanciano.

Sobre secciones en el micrótomo no aparecen elementos celulares. Los estudios microquímicos han arrojado resultados contrastantes comparando la muestra en examen y sangre humana disecada.

3) Búsqueda cromotográfica de la hemoglobina en la antigua Sangre.

La prueba realizada tanto en la muestra en cuestión como en otras muestras de referencia, demostró la real naturaleza hematosa de la antigua Sangre de Lanciano.
Dicha prueba tiene plena validez para el reconocimiento de la sangre aún en el caso de materiales daňados a lo largo del tiempo, que pueden presentar resultados contrastantes con respecto a los exámenes anteriormente mencionados.

4) Definición inmunológica de la especie a la que pertenecen la antigua Sangre y la antigua Carne de Lanciano.

Los tejidos en examen han sido analizados con sueros antiproteína humana, sueros de conejo y sueros de buey.
Conclusión: las pruebas de precipitación han demostrado que la Sangre y la Carne del Milagro Eucarístico de Lanciano pertenecen a la especie humana.

5) Determinación del grupo sanguíneo en la antigua Sangre y en la antigua Carne de Lanciano.

Las pruebas empleadas para la determinación del grupo sanguíneo (ABO) han manifestado que tanto la Sangre como la Carne de Lanciano pertenecen al grupo AB.

6) Análisis electroforético de las proteinas de la antigua Sangre de Lanciano.

La composición porcentual de las proteínas en el líquido en examen repite los valores conocidos para el suero de sangre humana normal:
albúmina = 61% ;
globulinas alfa-1 = 2,38% ;
globulinas alfa-2 = 7,14% ;
globulinas beta = 7,14% ;
gamma = 21,42%.
La relación albúmina-globulina resulta ser del 1,62% siendo el valor normal de entre 1,13 y 1,73.
Las proteínas fraccionadas de la muestra en examen presentan entonces una curva electroforética parecida a la sangre fresca normal (un suero de sangre no se puede utilizar con fines electroforéticos después de los 2-4 días de refrigerado).

7) Determinación de los minerales (calcio, cloruros, fósforo, magnesio, potasio, sodio) en la antigua Sangre de Lanciano.

Con respecto a las muestras de sangre humana normal disecada, el porcentaje de minerales resultaron alteradas por el contacto con la pared de vidrio del contenedor y por la exposición al polvo de mampostería rico en sales de calcio.

Consideraciones finales

Los resultados de la investigación efectuada sobre fragmentos de la Antigua Sangre y de la antigua Carne que se conoce tradicionalmente con el nombre de Milagro Eucarístico de Lanciano (siglo VIII), se resumen en los siguientes puntos:
– La Sangre es efectivamente tal;
– La Carne pertenece al miocardio;
– La Carne y la Sangre pertenecen a la especie humana;
– El grupo sanguíneo identificado tanto en la Sangre como en la Carne es de tipo AB,
– El examen electroforético de las proteínas de la Sangre se acerca al examen en el suero fresco.
El diagnóstico histológico de miocardio hace que sea poco aceptable la hipótesis de un “falso”. De hecho sólo una mano experta en disección anatómica hubiese podido obtener del corazón (órgano cavo) de cadáver una rebanada uniforme y continua, considerando que las primeras disecciones anatómicas sobre el hombre fueron posteriores al 1300.
Además las perforaciones por clavos presentes en el contorno, llevan a deducir que el fragmento de corazón aparecido en el altar de la iglesia de Lanciano estuviese en estado vivo y entonces tendiese, por “rigor mortis” , a retraerse concéntricamente cuestión a la que se opusieron los monjes basilianos, clavando en una tablilla de madera la sección de corazón. En tal modo, el hecho de retraerse centrífugamente ha lacerado el tejido en su parte central, como ya se ha dicho.
Un fragmento de miocardio y de coágulos hemáticos, dejados en el estado natural durante siglos y además expuestos a la acción de los agentes físicos atmosféricos, ambientales y parasitosos, llegaron a nosotros así inexplicablemente inalterados aún después de más de un milenio, para someterse a las investigaciones científicas de las que sólo hoy, después de siglos de historia, disponemos.
(*) La presente información se encuentra en la monografía del Prof. Linoli, docente de anatomía e istologia patológica y citogénetica, publicata después de la última investigación científica de la Carne e Sangre milagrosa del 1970 y rivisada en el 1991.
Fuente: Corazones.org
Mas propaganda catolica. Ya dejen de pontificar en el foro. Por favor, dediquence a ptra cosa.

Comienza contando la historia del Milagro de Lanciano, donde un monje basiliano dubitativo en el año 700 d. C. convirtió el pan y el vino en carne y sangre reales durante una misa.

Eso es interesante y todo... pero esta historia proviene de una fuente anónima del siglo XVII, casi 1.000 años después de que se suponía que había sucedido el supuesto evento. En otras palabras, es otra historia fantástica más sin pruebas.

Desde 1574 se llevaron a cabo varias investigaciones eclesiásticas [sic] (“Reconocimientos”). Luego, con el permiso de Roma en 1970-71 y retomada parcialmente en 1981, tuvo lugar una investigación científica a cargo del “científico más ilustre”, el profesor Odoardo Linoli, eminente profesor de Anatomía e Histología Patológica y de Química y Microscopía Clínica, con la asistencia del profesor Ruggero Bertelli de la Universidad de Siena.

El Dr. Linoli, un supuesto cínico en lo que respecta al Milagro, habría enviado un telegrama a los Frailes Franciscanos que atienden la iglesia donde se había guardado el Milagro en 1970, reiterando el Evangelio de Juan: “En el principio era el Verbo y el Verbo se hizo carne”. Pero, el Dr. Linoli rápidamente se convenció de que el misterio ante él era de naturaleza milagrosa.

Por cierto, ¿quién es este “científico ilustre, el Prof. Odoardo Linoli”? Nadie ha podido encontrar nada sobre él en Google o en los registros de los galenos egresados de las facultades de medicina en Argentina, aparte de los católicos que elogian este estudio. ¿Qué ha aportado exactamente a la ciencia para convertirlo en un “científico ilustre”? Parece que están construyendo un argumento de autoridad, pero esta persona ciertamente no parece eminente en su campo; nadie ha oído hablar de él.

También es sospechoso que haya sido objeto de “diversas investigaciones eclesiásticas” desde 1574 hasta 1970. ¿Qué hicieron exactamente? ¿Cómo podemos estar seguros de que nadie manipuló las pruebas, si es que las hubo? Con lo corruptas que eran las cosas en aquel entonces, ¡me sorprendería que nadie lo hiciera!

¿Cómo sabemos que lo que los científicos estaban estudiando tenía algo que ver con este supuesto milagro?

La evidencia parece ser la conclusión de este estudio. Así lo resume:

Los análisis de las muestras extraídas de la hostia milagrosa se realizaron con absoluta e incuestionable precisión científica y se documentaron con una serie de fotografías microscópicas…

La Carne es carne real y la Sangre es sangre real.
Tanto la Carne como la Sangre pertenecen a la especie humana…
La conservación de la Carne y la Sangre, que se dejaron en su estado natural durante doce siglos y se expusieron a la acción de agentes atmosféricos y biológicos, sigue siendo un fenómeno extraordinario.


Así que las pruebas afirman que hay carne y sangre reales en un museo católico. Puedo hacer pruebas y mostrarte que algo también es carne y sangre reales. ¿Significa eso que me creerías si te digo que proviene de un gansito y jugo de naranja?

Es decir, que solo porque tengan carne y sangre encerradas en algún lugar no significa que un sacerdote escéptico las haya transformado mágicamente en el año 700 d. C. a partir de una galleta y vino.

Cuando alguien afirma que algo se hace con “precisión científica absoluta e incuestionable”, me pregunto si está operando en el mismo universo que yo. ¿Es posible hacer algo con “precisión científica absoluta e incuestionable”, especialmente un estudio sobre un supuesto milagro? Me genera sospechas.

Otra "afirmación" es que la Organización Mundial de la Salud realizó un estudio científico de 15 meses que confirmó este milagro:

"En 1973, la Organización Mundial de la Salud (OMS) designó su propia comisión científica para examinar los hallazgos del Dr. Linoli. Durante un período de 15 meses, se realizaron más de 500 pruebas, todas las cuales respaldaron las conclusiones enumeradas anteriormente. La investigación científica de la OMS se publicó en Nueva York y Ginebra en 1976, confirmando "el fracaso de la ciencia para explicar el Milagro".

Pero, ¿alguien puede confirmar esto? Nadie ha podido encontrar nada oficial al respecto, y dudo que la OMS diga "el fracaso de la ciencia para explicar el Milagro"; solo un católico escribiría así (¿realmente puede imaginarse a la OMS diciendo "el Milagro", como un monje adulador?).

En el extracto que resume las investigaciones científicas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y las Naciones Unidas (ONU), publicado en diciembre de 1976 en Nueva York y Ginebra, se afirma que “la ciencia, consciente de sus limitaciones, se ve obligada a admitir la imposibilidad de dar una explicación”. (fuente)

Eso suena más plausible, pero si esa cita es correcta (que es diferente a la de Perales), me pregunto cuál era el contexto. ¿Cuál es la fuente de su cita y dónde podemos verla?

En fin, el epigrafe no es mas que propaganda de la iglesia de roma al igual que todas las demas apariciones, stigmatas, virgenes y angeles.

Guillermo Schulenburg fue el último abad de la Basílica de Guadalupe. Sus cuestionamientos sobre la existencia de Juan Diego provocaron su caída y renuncia. Ellos todos saben que son fabulas e historias antiguas pero mantienen a los feligreses embutidos y entretenidos de esa forma.

Saludos.
 
Mas propaganda catolica. Ya dejen de pontificar en el foro. Por favor, dediquence a ptra cosa.

Comienza contando la historia del Milagro de Lanciano, donde un monje basiliano dubitativo en el año 700 d. C. convirtió el pan y el vino en carne y sangre reales durante una misa.

Eso es interesante y todo... pero esta historia proviene de una fuente anónima del siglo XVII, casi 1.000 años después de que se suponía que había sucedido el supuesto evento. En otras palabras, es otra historia fantástica más sin pruebas.

Desde 1574 se llevaron a cabo varias investigaciones eclesiásticas [sic] (“Reconocimientos”). Luego, con el permiso de Roma en 1970-71 y retomada parcialmente en 1981, tuvo lugar una investigación científica a cargo del “científico más ilustre”, el profesor Odoardo Linoli, eminente profesor de Anatomía e Histología Patológica y de Química y Microscopía Clínica, con la asistencia del profesor Ruggero Bertelli de la Universidad de Siena.

El Dr. Linoli, un supuesto cínico en lo que respecta al Milagro, habría enviado un telegrama a los Frailes Franciscanos que atienden la iglesia donde se había guardado el Milagro en 1970, reiterando el Evangelio de Juan: “En el principio era el Verbo y el Verbo se hizo carne”. Pero, el Dr. Linoli rápidamente se convenció de que el misterio ante él era de naturaleza milagrosa.

Por cierto, ¿quién es este “científico ilustre, el Prof. Odoardo Linoli”? Nadie ha podido encontrar nada sobre él en Google o en los registros de los galenos egresados de las facultades de medicina en Argentina, aparte de los católicos que elogian este estudio. ¿Qué ha aportado exactamente a la ciencia para convertirlo en un “científico ilustre”? Parece que están construyendo un argumento de autoridad, pero esta persona ciertamente no parece eminente en su campo; nadie ha oído hablar de él.

También es sospechoso que haya sido objeto de “diversas investigaciones eclesiásticas” desde 1574 hasta 1970. ¿Qué hicieron exactamente? ¿Cómo podemos estar seguros de que nadie manipuló las pruebas, si es que las hubo? Con lo corruptas que eran las cosas en aquel entonces, ¡me sorprendería que nadie lo hiciera!

¿Cómo sabemos que lo que los científicos estaban estudiando tenía algo que ver con este supuesto milagro?

La evidencia parece ser la conclusión de este estudio. Así lo resume:

Los análisis de las muestras extraídas de la hostia milagrosa se realizaron con absoluta e incuestionable precisión científica y se documentaron con una serie de fotografías microscópicas…

La Carne es carne real y la Sangre es sangre real.
Tanto la Carne como la Sangre pertenecen a la especie humana…
La conservación de la Carne y la Sangre, que se dejaron en su estado natural durante doce siglos y se expusieron a la acción de agentes atmosféricos y biológicos, sigue siendo un fenómeno extraordinario.


Así que las pruebas afirman que hay carne y sangre reales en un museo católico. Puedo hacer pruebas y mostrarte que algo también es carne y sangre reales. ¿Significa eso que me creerías si te digo que proviene de un gansito y jugo de naranja?

Es decir, que solo porque tengan carne y sangre encerradas en algún lugar no significa que un sacerdote escéptico las haya transformado mágicamente en el año 700 d. C. a partir de una galleta y vino.

Cuando alguien afirma que algo se hace con “precisión científica absoluta e incuestionable”, me pregunto si está operando en el mismo universo que yo. ¿Es posible hacer algo con “precisión científica absoluta e incuestionable”, especialmente un estudio sobre un supuesto milagro? Me genera sospechas.

Otra "afirmación" es que la Organización Mundial de la Salud realizó un estudio científico de 15 meses que confirmó este milagro:

"En 1973, la Organización Mundial de la Salud (OMS) designó su propia comisión científica para examinar los hallazgos del Dr. Linoli. Durante un período de 15 meses, se realizaron más de 500 pruebas, todas las cuales respaldaron las conclusiones enumeradas anteriormente. La investigación científica de la OMS se publicó en Nueva York y Ginebra en 1976, confirmando "el fracaso de la ciencia para explicar el Milagro".

Pero, ¿alguien puede confirmar esto? Nadie ha podido encontrar nada oficial al respecto, y dudo que la OMS diga "el fracaso de la ciencia para explicar el Milagro"; solo un católico escribiría así (¿realmente puede imaginarse a la OMS diciendo "el Milagro", como un monje adulador?).

En el extracto que resume las investigaciones científicas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y las Naciones Unidas (ONU), publicado en diciembre de 1976 en Nueva York y Ginebra, se afirma que “la ciencia, consciente de sus limitaciones, se ve obligada a admitir la imposibilidad de dar una explicación”. (fuente)

Eso suena más plausible, pero si esa cita es correcta (que es diferente a la de Perales), me pregunto cuál era el contexto. ¿Cuál es la fuente de su cita y dónde podemos verla?

En fin, el epigrafe no es mas que propaganda de la iglesia de roma al igual que todas las demas apariciones, stigmatas, virgenes y angeles.

Guillermo Schulenburg fue el último abad de la Basílica de Guadalupe. Sus cuestionamientos sobre la existencia de Juan Diego provocaron su caída y renuncia. Ellos todos saben que son fabulas e historias antiguas pero mantienen a los feligreses embutidos y entretenidos de esa forma.

Saludos.
Se puede salir el corazón del relicario frente a ti y dirías que es un truco

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