-Los participantes de la segunda resurrección no lo hacen para vivir para siempre sino para morir eternamente, es decir, constante y perpetuamente.-Las hermanas nuestras son tan dignas del cielo como los hermanos varones ¿quién sería tan loco como para condenar a aquellas en razón de su sexo?
-Los participantes de la segunda resurrección no lo hacen para vivir para siempre sino para morir eternamente, es decir, constante y perpetuamente.
-Salvación y condenación son dos condiciones opuestas y eternas, que no discrimina sexos, aunque los de la colectividad LGTB probablemente lleven la peor parte.
Esto es propio de una secta, no pertenece al Evangelio de Jesús.
Las mujeres que se salven muy bien y las que no se salven, a sufrir como si tuviera un marido machista para siempre.
¿Condeno Jesús a la mujer adúltera?