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Desde hace algunos años en la iglesia cristiana se habla de la Visión Celular, G12, Modelo de Jesús, etc, para referirse a un movimiento que propone una serie de pasos, comenzando por un ENCUENTRO, luego un Pos-encuentro, una Escuela de Liderazgo y un trabajo celular.
Este modelo a pesar de algunos inconvenientes, como pretender ser para todas las iglesias y presentarse como la absoluta voluntad de Dios, pese a eso, tiene muchos aspectos valiosos.
He leido, sobre todo, por medio de internet, furiosos ataques contra este sistema que realmente son sorprendentes, hasta dónde la fobia, el fanatismo y la intolerancia pueden llegar, al punto de calificar a esta modalidad de sistema como satánico.
Satanizamos tanto que nos volvemos crueles, terroristas religiosos y hasta rabiosos cruzados en contra de todo aquello que nos sorprende, nos asusta y hasta cuestionamos porque no representa nuestro punto de vista.
Hasta donde vamos a llegar. Cuando nos daremos cuenta que vivimos en un planeta de pluralidad de pensamientos, y aún quedándonos en el centro del pensamiento bíblico, en la Biblia misma, hay diversas formas de enteder demasiados temas y por eso existe una diversidad teológica, litúrgica y eclesiástica que lejos de dañar, enriquece y da belleza a nuestro ser de cristianos.
Desde hace algunos años en la iglesia cristiana se habla de la Visión Celular, G12, Modelo de Jesús, etc, para referirse a un movimiento que propone una serie de pasos, comenzando por un ENCUENTRO, luego un Pos-encuentro, una Escuela de Liderazgo y un trabajo celular.
Este modelo a pesar de algunos inconvenientes, como pretender ser para todas las iglesias y presentarse como la absoluta voluntad de Dios, pese a eso, tiene muchos aspectos valiosos.
He leido, sobre todo, por medio de internet, furiosos ataques contra este sistema que realmente son sorprendentes, hasta dónde la fobia, el fanatismo y la intolerancia pueden llegar, al punto de calificar a esta modalidad de sistema como satánico.
Satanizamos tanto que nos volvemos crueles, terroristas religiosos y hasta rabiosos cruzados en contra de todo aquello que nos sorprende, nos asusta y hasta cuestionamos porque no representa nuestro punto de vista.
Hasta donde vamos a llegar. Cuando nos daremos cuenta que vivimos en un planeta de pluralidad de pensamientos, y aún quedándonos en el centro del pensamiento bíblico, en la Biblia misma, hay diversas formas de enteder demasiados temas y por eso existe una diversidad teológica, litúrgica y eclesiástica que lejos de dañar, enriquece y da belleza a nuestro ser de cristianos.