Y yo diario le doy gracias a Dios nuestro señor por haberme sacado de las sectillas protestantesEntonces, creo que podemos concluir que, efectivamente, el catolicismo romano es un camino hacia el Infierno. No hay vida en esa religión.
Y si nos podemos a ver la cantidad de almas que se han perdido por esa religión, realmente es para ponerse a llorar.
Yo a diario le doy gracias a Dios por haberme sacado de esa secta.