Estimados amigos,
He estado pensando acerca de que cada cosa material tiene y/o ocupa un lugar determinado en el universo. Unas “cosas” registran movimiento armónico, conjunto y no sé si estaría correcto decir “aleatorio” con las otras, cumpliendo un papel específico en la naturaleza, menos el hombre, quien estando enmarcado dentro de tal engranaje, pues difiere.
La pregunta es: ¿Qué es lo que marca tan profunda diferencia?. Y después, es claro que Dios haciendo parte y/o estando presente dentro de tal contexto, pues no está excluído, ni sujeto y mucho menos limitado a él… Cuanto menos a las limitaciones del hombre:
”¿Acaso soy yo Dios sólo de cerca, dice Jehová, y no Dios desde muy lejos? Jer 23:23
"Empero ¿es verdad que Dios haya de morar sobre la tierra? He aquí que los cielos, los cielos de los cielos, no te pueden contener: ¿cuánto menos esta casa que yo he edificado?" 1 Reyes 8:27
"¿Adónde me iré de tu espíritu? ¿Y adónde huiré de tu presencia?" Salmo 139:7
Cada cosa material está en algún lugar en el universo. El sol, la tierra, los países… Cada granito de arena, y cada gota de agua: Las gotas de agua cambian continuamente de lugar e incluso de estado, pero una gota puesta en un momento específico y en un sitio determinado registra exclusión con respecto de toda otra materia puesta en cualquier otro lugar del universo… No ocurre igual con los seres humanos.
Si bien, en nuestras concepciones de la mente humana también le asignamos su propio lugar a ella, aunque en una manera diferente: No le atribuímos longitud, anchura, ni espesor como a un trozo de queso, pero la concebimos como presente en el cuerpo humano, con el cual está conectada y a la vez ausente de otro con el cuál no está conectado sistemáticamente hablando. y concebimos el cambiar el lugar de la mente, mientras continúa su conexión con el cuerpo, solo por un cambio de lugar del cuerpo… Pienso que, en dicho sentido, la memoria del hombre y sus emociones más profundas, son una muestra de liberación unas veces; de cautividad las otras; e incluso, algunas de fe. pero es una indiscutible acción de trascendencia al tiempo, al espacio y aún a las limitaciones de la propia mente.
En el caso de la materia, la atmósfera está presente en cada parte de la superficie de la tierra; pero esto no es estrictamente verdad: No es el entero, es una parte pequeña de la atmósfera la que está presente en cada lugar. Pero Dios es indivisible. No podemos decir que una parte de su esencia está aquí, y otra parte allí. Si así fuera el modo de la omnipresencia de Dios, Él sería dividido infinitamente y solo una parte infinitamente pequeña de Él estaría presente en cada lugar. No sería toda la deidad en conocimiento de nuestras acciones y en escucha nuestras peticiones. Esta noción es opuesta al sentido verdadero de la Escrituras: "Los ojos del Señor están en todo lugar, mirando á los malos y á los buenos" (Es decir: A todos) Prov 15:3. "Los ojos del Señor están sobre los justos, Y sus oídos atentos á sus oraciones".1 Pedro 3:12.
Hay pasajes que hablan de Dios removiendo de un lugar á otro; de su acercarse y de su apartarse; de Él morando en el cielo, y de Él acercandose á su pueblo, y haciendo morada con ellos. La pregunta es: ¿Como comprender la omnipresencia de Dios?.
He estado pensando acerca de que cada cosa material tiene y/o ocupa un lugar determinado en el universo. Unas “cosas” registran movimiento armónico, conjunto y no sé si estaría correcto decir “aleatorio” con las otras, cumpliendo un papel específico en la naturaleza, menos el hombre, quien estando enmarcado dentro de tal engranaje, pues difiere.
La pregunta es: ¿Qué es lo que marca tan profunda diferencia?. Y después, es claro que Dios haciendo parte y/o estando presente dentro de tal contexto, pues no está excluído, ni sujeto y mucho menos limitado a él… Cuanto menos a las limitaciones del hombre:
”¿Acaso soy yo Dios sólo de cerca, dice Jehová, y no Dios desde muy lejos? Jer 23:23
"Empero ¿es verdad que Dios haya de morar sobre la tierra? He aquí que los cielos, los cielos de los cielos, no te pueden contener: ¿cuánto menos esta casa que yo he edificado?" 1 Reyes 8:27
"¿Adónde me iré de tu espíritu? ¿Y adónde huiré de tu presencia?" Salmo 139:7
Cada cosa material está en algún lugar en el universo. El sol, la tierra, los países… Cada granito de arena, y cada gota de agua: Las gotas de agua cambian continuamente de lugar e incluso de estado, pero una gota puesta en un momento específico y en un sitio determinado registra exclusión con respecto de toda otra materia puesta en cualquier otro lugar del universo… No ocurre igual con los seres humanos.
Si bien, en nuestras concepciones de la mente humana también le asignamos su propio lugar a ella, aunque en una manera diferente: No le atribuímos longitud, anchura, ni espesor como a un trozo de queso, pero la concebimos como presente en el cuerpo humano, con el cual está conectada y a la vez ausente de otro con el cuál no está conectado sistemáticamente hablando. y concebimos el cambiar el lugar de la mente, mientras continúa su conexión con el cuerpo, solo por un cambio de lugar del cuerpo… Pienso que, en dicho sentido, la memoria del hombre y sus emociones más profundas, son una muestra de liberación unas veces; de cautividad las otras; e incluso, algunas de fe. pero es una indiscutible acción de trascendencia al tiempo, al espacio y aún a las limitaciones de la propia mente.
En el caso de la materia, la atmósfera está presente en cada parte de la superficie de la tierra; pero esto no es estrictamente verdad: No es el entero, es una parte pequeña de la atmósfera la que está presente en cada lugar. Pero Dios es indivisible. No podemos decir que una parte de su esencia está aquí, y otra parte allí. Si así fuera el modo de la omnipresencia de Dios, Él sería dividido infinitamente y solo una parte infinitamente pequeña de Él estaría presente en cada lugar. No sería toda la deidad en conocimiento de nuestras acciones y en escucha nuestras peticiones. Esta noción es opuesta al sentido verdadero de la Escrituras: "Los ojos del Señor están en todo lugar, mirando á los malos y á los buenos" (Es decir: A todos) Prov 15:3. "Los ojos del Señor están sobre los justos, Y sus oídos atentos á sus oraciones".1 Pedro 3:12.
Hay pasajes que hablan de Dios removiendo de un lugar á otro; de su acercarse y de su apartarse; de Él morando en el cielo, y de Él acercandose á su pueblo, y haciendo morada con ellos. La pregunta es: ¿Como comprender la omnipresencia de Dios?.