Estimado Rojirigo
Estimado Rojirigo
Respuesta a Mensaje # 14:
Para el cristiano que cree en la plena inefabilidad de las Escrituras le resulta normal no ver contradicción alguna en ellas, salvo las que pudieran ser causadas por errores humanos en la traducción, revisión e impresión.
Para los no cristianos o “cristianos a su manera” que esa inexorable perfección de la Biblia les resulta asaz molesta, es muy natural que den la más calurosa bienvenida a cualquiera aparente contradicción al momento de ser expuesta. Si la Biblia estuviera llena de contradicciones como tantos dicen, entonces quizás puedan todavía escabullirse de sus severas advertencias.
Que la apologética cristiana salga al paso de tantas artificiosas “contradicciones”, explicando y mostrando que no tuvo necesariamente que ser así como ahora se presentan las cosas, es también natural. Todavía en la época apostólica debió comenzarse por aclarar malentendidos, y en los siglos siguientes hubo muchos que debieron especializarse en esto.
Siempre que se malinterprete un texto impugnando la exactitud bíblica, será menester traer las explicaciones o interpretaciones pertinentes para mantener la verdad tal cual es.
Estimado Rojirigo
Respuesta a Mensaje # 14:
Para el cristiano que cree en la plena inefabilidad de las Escrituras le resulta normal no ver contradicción alguna en ellas, salvo las que pudieran ser causadas por errores humanos en la traducción, revisión e impresión.
Para los no cristianos o “cristianos a su manera” que esa inexorable perfección de la Biblia les resulta asaz molesta, es muy natural que den la más calurosa bienvenida a cualquiera aparente contradicción al momento de ser expuesta. Si la Biblia estuviera llena de contradicciones como tantos dicen, entonces quizás puedan todavía escabullirse de sus severas advertencias.
Que la apologética cristiana salga al paso de tantas artificiosas “contradicciones”, explicando y mostrando que no tuvo necesariamente que ser así como ahora se presentan las cosas, es también natural. Todavía en la época apostólica debió comenzarse por aclarar malentendidos, y en los siglos siguientes hubo muchos que debieron especializarse en esto.
Siempre que se malinterprete un texto impugnando la exactitud bíblica, será menester traer las explicaciones o interpretaciones pertinentes para mantener la verdad tal cual es.