Buenos días foreros, el número 153 es el resultado de multiplicar el número 17 por el 9.
Aqui el significado biblico que tienen ambos números. :
El significado bíblico y profético del número 17
Todas las personas que estudian la Biblia deben saber que muy a menudo Dios se representa con números. Hay muchos significados diferentes que el número 17 puede tener en la Biblia y proféticamente.
En primer lugar hay que decir que este número se suele utilizar como símbolo de victoria y significa que Dios consiguió vencer a sus enemigos. En realidad, se sabe que Dios pudo vencer los pecados de los humanos cuando decidió destruir la tierra inundándola. Fue conocido como el Gran Diluvio que comenzó el 17 del 2º mes del calendario hebreo que se utilizaba en aquella época. También se sabe que el arca de Noé y los 8 pasajeros que iban con él hicieron un descanso en los montes Ararat exactamente el día 17 del 7º mes.
Según el calendario religioso, este día era en realidad el mismo día que el 17 de Nisan. Nisan se consideraba el primer mes del calendario religioso. Este día era también el de la resurrección de Jesucristo, que venció así a la muerte.
En realidad, el 17 de Nisan se levantó de su tumba y fue un gran día de su resurrección. Antes de eso, Jesús estuvo en la tumba durante 3 días y noches. Como puedes ver, el número 17 está presente en todas partes, lo que significa que Dios eligió esta fecha para su resurrección y también para muchas otras cosas. Puede ser un recordatorio para ti de que nada ocurre por casualidad, sino que hay una buena razón y un propósito para todo.
Sabiendo todo esto, también podemos decir que el número 17 es un número de restauración en el sentido bíblico. En realidad, el día 17 Dios restauró la tierra y la devolvió a la perfección.
Según el Libro de Daniel, sus bestias tenían 7 cabezas y 10 cuernos, por lo que tenemos que 7 + 10 da 17. También se dice en la Biblia que el sistema del diablo de los últimos tiempos tendrá 7 cabezas y 10 cuernos, por lo que podemos ver que el 17 también tiene una connotación negativa en este libro.
En el Apocalipsis se dice que los humanos estarán bajo el dominio de la bestia o demonio y que lucharán contra las personas que aún creen en Dios. Sin embargo, se cree que los verdaderos cristianos obtendrán una victoria sobre todos aquellos que están en contra de Dios.
También hay muchos otros hechos bíblicos relacionados con el número 17. Hay que mencionar que Roboam, que fue el primer rey de Judá e hijo de Salomón, estuvo en el trono durante 17 años. El Libro de Santiago contiene material de 17 libros del Antiguo Testamento. En el Libro de los Salmos se mencionan 17 enemigos de Israel.
También hay que mencionar que José fue apartado de su padre Jacob, pero se reunieron después de 17 años. Esto trajo paz y alegría a Jacob y toda la tristeza fue sustituida por la felicidad. Otro hecho interesante es que los hermanos de José lo vendieron como esclavo cuando sólo tenía 17 años.
Ahora, cuando has visto la mayoría de los lugares en los que aparece el número 17 en la Biblia, no es difícil darse cuenta de lo que este número puede significar proféticamente.
Según la Biblia, el número 17 es un símbolo de victoria y perfección. Se refiere a la perfección espiritual en primer lugar.
Debemos tener en cuenta que el 17 es en realidad la combinación de los números 10 y 7. El número 10 es un símbolo de un orden perfecto, mientras que el número 7 suele utilizarse como símbolo de la perfección.
También está escrito en la Biblia que el próximo profeta que vendrá a la Tierra será Elías y será en realidad la representación de Jesús. Restaurará todas las cosas del planeta y hará una victoria.
Es muy importante que el número que seguirá este profeta en todas sus victorias será el número 17. Normalmente se considera que Elías es el profeta del final de los tiempos.
Has visto que hay muchos datos sobre el número 17 en la Biblia, así que está claro que este número es muy importante en sentido bíblico.
El número 9
1 mayo, 2005 by
Christian Chen
Este número es usado 49 veces en la Biblia. Nueve es el cuadrado de tres, y tres es el número de la perfección divina, así como el número peculiar del Espíritu Santo. No es sorpresa, por lo tanto, descubrir que este número indica: «finalidad» en los asuntos divinos. Existen nueve elementos en el «fruto del Espíritu»: (1) amor, (2) gozo, (3) paz, (4) paciencia, (5) benignidad, (6) bondad, (7) fe, (8) mansedumbre, (9) templanza. (Gl. 5:22-23). El 9 viene después del 8, que representa el nuevo nacimiento. Cuando se tiene un árbol bueno, lo que se espera en seguida de él es un buen fruto. De la misma manera que el 9 sigue al 8, así también el buen fruto, el fruto del Espíritu se presenta como resultado del nuevo nacimiento. En 1 Co. 12:8-10 vemos 9 dones del Espíritu. El Señor dio inicio al sermón del monte con nueve «bienaventuranzas», en relación al carácter de los discípulos en el reino celestial.
El número 9 se encuentra ligado al 6, 7 y 8 en Levítico 25, donde fue dada una ley relativa al año sabático: «Seis años sembrarás tu tierra… pero el séptimo año la tierra tendrá descanso, reposo para Jehová» (Lv. 24:3-4). ¿Qué comería el pueblo el séptimo año? «…os enviaré mi bendición el sexto año, y ella hará que haya fruto por tres años… hasta el año noveno, hasta que venga su fruto, comeréis del añejo» (Lv. 25:20-22). He aquí un bellísimo principio espiritual: Entrar en el descanso de Dios es descansar de nuestras obras y esperar vivir por la bendición del Señor. Como resultado, entramos así en la superabundancia de Dios que nos permite comer de lo que tenemos en el depósito hasta el año noveno.
El «7» significa que fuimos llevados al fin de nuestro antiguo «yo» y nos deshacemos de nuestras propias obras. Permitimos entonces que la vida resurrecta penetre en nosotros, la cual es representada por el 8, y nos domine. El resultado es que la bendición sobre nuestra completa debilidad, tipificada por el sexto día, trae consigo suministro abundante hasta el «año noveno». El 9 aquí representa lo que Dios puede hacer mediante el poder de la resurrección cuando nosotros no conseguimos nada. Este principio de «9» es equivalente a los «doce cestos llenos» o los «siete cestos llenos» en los milagros de la alimentación de los 5.000 y los 4.000. Debe ser el fruto de los cielos.
Es también importante recordar que fue en la hora novena que el Señor murió en la cruz. «Jehová quiso … (poner) su vida en expiación por el pecado … Verá el fruto de la aflicción de su alma, y quedará satisfecho» (Is. 53:10-11).
Muchos de los primeros escritos cristianos o cartas terminaban con el número 99, porque la gematría de la palabra «amén» o el «verdaderamente» de nuestro Señor es el 99. Esto nos recuerda nuevamente que el número 9, siendo 3 x 3, es un símbolo reforzado de la perfección divina.
