Heb_1:6 Y otra vez, cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice:
Adórenle todos los ángeles de Dios.
Entendimiento Biblico sobre los terminós relacionados con la adoración:
Primeramente debemos tener en cuenta que en los tiempos bíblicos y la cultura judía no existía una palabra tan específica para adoración, tal y como tenemos hoy en día la palabra "adoración" para expresar la máxima devoción a Dios. Debemos entender esto, los escritores bíblicos nunca conocieron nuestro término "adoración" sino que usaron otros términos más importantes pues fueron inspirados por Dios, y dichos términos deben ser definidos correctamente según su sentido original, la cultura y el contexto general, dónde fueron usados. Así es cómo se debe interpretar correctamente los términos bíblicos, viene lo que en verdad significaba para aquellos que recibieron la Palabra de Dios, si imponer al término definiciones posteriores o sin tratar de verlo con un lente empañado por la tradición. Ahora veamos los dos principales términos usados en las Escrituras:
1- Latreuo: hace referencia al tipo de adoración que solo se ofrece a Dios, más específicamente. Es el servicio o culto sagrado reservado únicamente para Dios. Hay dos textos principales donde no se usa con respecto al Dios verdadero, estos son, Hechos 7:42 y Romanos 1:25, sin embargo estos dos textos son importantes para demostrar que "latría" era más usada con referencia a la devoción especial que se le daba a la Deidad, los paganos le daban "latría" a sus deidades falsas, en cambio los verdaderos creyentes solo le daban latría al único Dios verdadero. Por tanto, es curioso notar que dicho término nunca se usa con referencia a Jesús, ni en las Escrituras ni en los escritos cristianos bien primitivos. Lo cuál demuestra que Jesús en las Escrituras nunca recibió el mismo tipo de culto o adoración que Dios. De hecho, Dios prohibió fuertemente dar "latria" a alguien que no sea él (de ahí, se desprende el término idolatría). Hay un pasaje en Ro 14:18 en el cual se habla de servir a Cristo sin embargo el término usado aquí no es "latria" sino el término que comúnmente se usaba para describir el servicio de un esclavo a un amo. Por ejemplo, Hechos 7:7 dice: Pero yo juzgaré, dijo Dios, a la nación a la cual servirán (douleuo) como esclavos, y después de estas cosas, saldrán y me servirán (latreuo) en este lugar. Observe como el término douleuo, con el que MacArthur intenta convencernos de la posibilidad de adorar al Hijo, es usado en referencia al servicio que un hombre le da a otro hombre, en contraste con la palabra latreuo que se usa para el servicio/adoración reservado solo para Dios. Esto por si solo debería ser suficiente. En el evangelio de Mateo, Jesús exige que ese tipo de adoración (latreuo) se dirija solamente al Padre < y a él solo servirás (latreuseis)>. Y también en Juan 4:23,24 Jesús reclama está adoración para el Padre, pues solo el Padre es Dios y solo el merece la "latria" que es él término que mejor se corresponde con nuestro término "adoración". Entonces tenemos que Jesús reconoce que la "latria" es solo para Dios el Padre, el mismo adoró a Dios y siempre enseñó que esta devoción piadosa era solamente para el único Dios el Padre. Y como si fuera poco este término nunca se relaciona con Jesús cómo receptor, y Jesús nunca recibe o exige que le den "latría". Todo esto habla por si solo con respecto a quién debe ser adorado verdadera y únicamente, Dios el Padre.
2- Proskuneo: Algunos se apresuran a declarar que el aspecto más importante de este término es que se aplica tanto a Jesús cómo a Dios. Sin embargo este término por si solo no habla de adoración exclusiva a Dios. El término proskuneo en la cultura judía significaba postrarse, dar honor, etcétera, nunca fue un término específico de adoración a Dios, esto dependía del contexto. La Septuaginta (LXX) usa este vocablo en referencia a la honra (no necesariamente adoración) que los hombres le dan a los ángeles (Ge 18:2; 19:1), a otros hombres (Ge 23:7,12), a reyes o gobernantes (1 Samuel 24:8,9), a profetas (2 Reyes 2:15), etcétera. También en el griego extra bíblico se usa este término no solo para la adoración a los dioses, sino también para significar una simple muestra de aprecio. Esto muestra claramente la diferencia entre latreuo y proskuneo. Y es en este sentido de honra y reconocimiento que debemos entender el uso de este término con respecto a Jesús, pues las personas que le dieron proskuneo a Jesús jamás se imaginaron que fuera Dios encarnado, por tanto le dieron proskuneo porque sabían que era enviado por Dios y por los milagros que hacía, de esa misma forma Eliseo recibió proskuneo en el Antiguo Testamento, y a nadie se le ocurriría pensar que por ello Eliseo era Dios hecho carne. En el ministerio terrenal de Jesús las personas que le rindieron proskuneo lo hicieron en reconocimiento a la autoridad que tenía como hombre que venía de parte de Dios, y actuaba con la autoridad que Dios le dió, por eso en varias ocasiones lo llamaron profeta. Más importante aún es entender que los más íntimos amigos de Jesús jamás percibieron su divinidad, jamás les pasó por la mente que fuera Dios, esa verdad la vemos con una simple lectura de los evangelios. Pero, imagínese que solo una persona se hubiera dado cuenta de Jesús era su Jehová, realmente no se lo puede imaginar, eso hubiera sido un gran escándalo sin paralelos en la historia de la humanidad, sin embargo, obviamente nada pasó. Cómo sí fuera poco, durante su ministerio terrenal Jesús se encargó de enseñar que el proskuneo en su sentido más sublime solo le correspondía al Padre (Lc 4:8, 4:21). Cabe señalar que el libro de Revelación, la palabra proskuneo casi siempre se dirige a Dios, y las pocas veces que se dirige al Cordero, se hace junto a Dios, no solo; lo cual demuestra que el Cordero recibe honra porque Dios en su soberanía quiso exaltarlo y sentarlo a su diestra, y lo ha hecho digno de proskuneo, por ser su Hijo amado, el mediador y su más fiel y perfecto representante, no porque Jesús sea Dios. Y en última instancia, el proskuneo que recibe Jesús es con el objetivo final de que el Padre reciba toda la gloria, por eso la gloria de Dios no será dada a nadie más, de una forma y otra siempre va dirigida al único Dios verdadero por medio de él Mesías. Cómo lo expresa el erudito Wainwright, el término proskuneo es muy ambiguo, puede expresar diversidad de significados, desde la reverencia tipica oriental hasta la adoración tal y como la enienden los occidentales modernos, muy distinto a los tiempos bíblicos, de ahi la dificultad en la comprensión con respecto a este tema, pero un estudio cuidadoso del idioma original en su real contexto les permitirá ver esto más detallamente. En la cultura bíblica, el acto de dar proskuneo (adorar) no se dirigía solamente a Dios. Era muy común adorar (es decir, rendir homenaje) a hombres de un estatus superior. El problema de las personas indoctas para aceptar esto radica en el desconocimiento cultural y los prejuicios que existen en nuestra cultura"cristiana" con respecto a la palabra adoració, reitero, el verdadero significado de los términos se estable según el uso bíblico y su contexto, no por definiciones posteriores y que solo causan confusión. Esto es difícil de ver en traducciones castellanas de la Biblia. Los traductores usualmente traducen la misma palabra hebrea o griega como “adorar” cuando involucra a Dios, pero como alguna otra palabra, como “postrarse ante,” o “rendir homenaje a”, cuando involucra a los hombres. Sin embargo, si proskuneo significa adoración siempre, entonces hay que aceptar que la adoración está claramente en los textos hebreos y griegos. Por ejemplo:
Lot “adoró” a los dos extraños que llegaron a Sodoma (Gen. 19:1).
Abraham “adoró” a los líderes paganos de la tierra en que vivía (Gen. 23:7).
Jacob “adoró” a su hermano mayor cuando se encontraron después de estar separados por años (Gen. 33:3).
José tuvo un suelo en el que sus padres y sus hermanos “lo adoraban” (Gen. 37:10).
Los hermanos de José lo “adoraron” (Gen. 43:26).
Josué se postró y adoró a un ángel (Josué 5:14).
Rut “adoró” a Bóaz (Rut 2:10).
David “adoró” a Jonatán (1 Sam. 20:41).
Abigail “adoró” a David (1 Sam. 25:41).
En todos estos casos la palabra es la misma "proskuneo". La lista anterior es solo una pequeña muestra de todos los ejemplos que pueden sacarse de la Escritura. Si se cotejan las referencias en la mayoría de las Biblias se confirmará lo que ya hemos afirmado —que los traductores evadieron la palabra “adorar” cuando unos hombres están adorando a otros hombres, pero la usaron en referencia a adorar a Dios. Estos pasajes son prueba más que suficientes de que “adorar” (realmente proskuneo) era parte de la cultura, y una manera de mostrar respeto o reverencia. A causa de la posición teológica de que solo Dios debe ser adorado, los traductores han evadido la palabra española “adorar,” a pesar del hecho de que está claramente en el texto original. Nosotros afirmamos que no traducir lo que está claramente en el texto crea una falsa impresión en la comunidad cristiana está muy claro que dar proskuneo a otras personas era parte cotidiana de la cultura israelita.
Es entonces aquí donde empieza la trampa cultural-teologica con el término adoración. Pues al escogerse este término, se vínculo más desde un inicio con el término proskuneo que con el término latreuo. Esto debió ser al revés, puesto que latreuo es más específica para la devoción piadosa a Dios, entonces debería ser el equivalente más aceptable para adoración (que en nuestra cultura es la más específica para la devoción piadosa también). Pero, ¿Por qué la iglesia católica evadió esto, y relacionó adoración casi solamente con proskuneo? La respuesta es sencilla, para relacionar a Jesús con Dios; puesto que latreuo nunca se le da a Jesús, entonces está palabra la dejaron como "servicio", y como proskuneo si se relaciona también con Jesús decidieron traducirlo como "adoración" para que la gente pensara que Jesús es Dios, este horror a causado gran confusión y daño durante siglos. Pero es hora de volver a interpretar las Escrituras en su sentido original y contexto verdadero. Este error para favorecer la supuesta divinidad de Jesús, hizo que los traductores de la versión española de la Septuaginta, tuvieran que traducir proskuneo como adoración con respecto a muchos personajes bíblicos del Antiguo Testamento (lo tuvieron que hacer así para ser consistentes), por eso en dicha traducción verá por ejemplo, que Eliseo recibe adoración, literalmente lo dice así.
En fin, latreuo es la verdadera adoración al único Dios verdadero, y a Jesús nunca se le da latreuo. Y proskuneo es un término mas general que en ocasiones se usa para Dios, otras para los gobernates, los angeles, los profetas y también Jesús. Por tanto Jesús nunca recibe adoración en el sentido que solo Dios la recibe. Jesús lo que si recibió fue proskuneo como tantos hombres de Dios en las Escrituras, y cuanto más Jesús que fue el representante perfecto de Dios. Queda claro por los evangelios, que las personas que le rindieron proskuneo a Jesús (honor, homenaje, reverencia) nunca pensaron que este fuera Dios, toda la evidencia apunta a lo contrario, por tanto, siendo ellos judíos y sabiendo que solo al Dios invisible se le da la adoración, jamás hubieran intentado adorar al hombre Jesús, eso es ir abiertamente contra su ley, así que si le dieron proskuneo a Jesús (cómo a los antiguos hombres de Dios) fue porque este venía de parte de Dios y obraba con el poder que Dios le dió, así que merecía justa honra. El problema que muchos tienen para entender esto, es que muchas traducciones castellanas de forma arbitraria, traducen proskuneo como adoración con respecto a Jesús. Cómo ya hemos visto no hay razón para ello, y esto solo fue un invento de la iglesia apostata para defender la supuesta divinidad de Cristo. Así que cuando lea su Biblia estudie cuidadosamente y comprenderá todo esto.
Así que YHWH es único digno de adoración (latreuo y proskuneo) porque es el único Dios verdadero, el Creador, el Señor Todopoderoso y nuestro Padre. Y nuestro Señor Jesucristo es digno también de honor y honra, por cuánto derramó su sangre para redimirnos de todo linaje, pueblo y nación.
Juan 4:23 Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren.