Estos que se levantan en favor de los pobres .. ¿lo hacen en verdad por amor, o solo es política, hablando y diciendo lo que no entienden ???
El comunismo es el sistema político que impone por la fuerza el anhelo humano de establecer
justicia en la tierra. Lo impone a través de algo que ellos denominan
igualdad.
Sus premisas de acción política son:
1) Imposición mediante la continua propaganda.
2) Derrocamiento del resto de ideas mediante el uso indiscriminado de la violencia.
Al imponerse forzosamente, no hay lugar para el
amor y la
libertad de acción del hombre. Por su propia naturaleza
bestial, sólo se puede imponer destruyendo el resto de ideas y sistemas de gobierno. Por extensión, se opone también a la idea de
Dios, (por cuanto Dios tiene su
propia forma de gobierno), que es una idea basada en la libertad de acción y elección, desde la que se dice al hombre que debe
transformarse interiormente
sometiéndose a la propia acción de Dios a través de Su Espíritu derramado (es decir, que Dios te exije algo y a continuación se ofrece Él Mismo para hacerlo en ti y para ti.)
El
comunismo (o su versión moderna más
light: el
socialismo), se convierte así en una
potestad demoniaca de primer orden. La diferencia entre ambos es sólo externa, pues en las regiones celestes son principados que se dan la mano y se saludan de cerca. De hecho, tienen similares cimientos ideológicos:
- El hombre es bueno independientemente de Dios.
- El hombre puede traer justicia al mundo mediante la igualdad forzosa. Si todos son iguales, dicen, ningún hombre podrá aprovecharse ni medrar a costa de sus semejantes. Por supuesto, los hombres que ejercen el poder se encargan de que los demás sean iguales. Mas, ¿quién les impone a ellos la igualdad?
El peligro real de estos principados son su barniz de
aparente bondad (pues... ¿quién no desea ser
igual al vecino?), y muchos que dicen profesar la "fe cristiana" se dejan enredar como "cochinillos camino del matadero". De hecho, cuando uno intenta liberarles de sus opresores, chillan desesperadamente creyendo que les vas a hacer daño, ignorantes de la carnicería a la que les conducen sus
igualitarios benefactores.
Naturalmente, todo lo aplicado al comunismo es aplicable a otros sistemas como el nazismo. Aunque el
barniz tenga un color diferente, es exactamente lo mismo: una
justicia humana aplicada por la naturaleza
bestial no redimida a través de promesas cortoplacistas ante una audiencia con ansias de "justicia social". A nivel interno, lo que consiguen levantar estas potestades en el hombre para hacerle esclavo de sus promesas, es la más pura envidia y lujuria de control y poder sobre sus semejantes. El éxito de estos sistemas es su capacidad para mover estos resortes
interiores.
Lo que estas potestades mueven y promueven en el hombre es algo que el hombre ya tiene dentro: la envidia y la lujuria. Si rascamos más aún, esa envidia y borrachera de poder sobre los semejantes se levantan para intentar suplir la necesidad más básica del ser humano, que es EL AMOR. Amar y ser amado derrocan la envidia y la lujuria, pues el AMOR lo solventa todo.
De ahí que la
solución integral del ser humano sea Dios, pues
Dios es Amor.
Ibero 2011