(El pasado miércoles) Tras culminar la ceremonia privada con sus familiares, los restos del Presidente de la República, Hugo Chávez, fueron trasladados al Patio de Honor de la Academia Militar para realizar una oración ecuménica por su descanso eterno.
Este acto religioso estuvo a cargo del monseñor José Hernández Sánchez Porras, obispo castrense; el monseñor Mario Moronta, obispo de San Cristóbal; y por el pastor (evangélico) de la Guardia de Honor, Alexis Romero.
"A todos nos une la misma pena y el mismo dolor, debemos unirnos también en una misma suplica a nuestro buen Padre Dios, que ha llamado en su gloria a nuestro hermano Hugo Rafael Chávez Frías, que nos ha precedido en el sendero que todos tenemos recorrer", expresó Moronta.
Destacó que "la fe responde con toda seguridad frente al destino seguro del hombre, esa fe nos ofrece la posibilidad de una comunión espiritual con nuestro hermano, Hugo Rafael Chávez Frías".
Por último manifestó que se debe mantener la esperanza para que "nuestro hermano Hugo Rafael Chávez Frías, que ya ha compartido con Jesucristo la muerte, comparta también con él y con todos los que han muerto la gloria de la resurrección".
El recorrido del féretro con los restos del Presidente hasta la Academia Militar, que duró más de 7 horas, fue escoltado por una gran marea de pueblo que se unió al vicepresidente Nicolás Maduro; el presidente de Bolivia, Evo Morales; el ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez; el canciller, Elías Jaua; el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Diosdado Cabello; el titular del despacho de Deporte, Héctor Rodríguez; y la vicepresidenta del Parlamento, Blanca Eekhout, entre otros.
(AVN)
“El presidente nunca sufrió del síndrome del estatus, aunque sabía que era el presidente de la República, un líder internacional, un líder mundial y nunca se vio que miraba por encima de su hombro a las demás personas, sino que abrazaba al niño, besaba a la anciana, al aborigen, no importando el color de su piel”, señaló el pastor evangélico Alexis Romero.
En ese sentido, destacó que el jefe de Estado siempre fue un hombre de ética. “Siempre repetía (las palabras de Jesús de Nazaret): ‘más fácil es entrar un camello por el ojo de una aguja que un rico llegue al cielo’. Él entendió, como decía Moisés, no améis el dinero porque el dinero ciega los ojos de los que ven y pervierten las palabras de los rectos”.
El pastor Resaltó que, en lo social, el jefe de Estado venezolano ejecutó la regla de oro predicada por Jesús, citada en Mateo 7:12 (de la Santa Biblia): “Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos”.
Denominó al Gobierno de Hugo Chávez como la reivindicación de los discriminados. “Él reivindicó a los niños, a las mujeres, a los aborígenes, y hoy que un pastor esté llevando un mensaje a la República, sencillamente es porque él entendió que también somos hijos de esta Patria. Dios bendiga al comandante para siempre”.