Re: BENNY HINN EN MÉXICO!!! 2010
Creo haberlo comentado antes, así que lo hago de nuevo para que vean que no desco9nozco el tema.
En 1989 se organizó un evento de evangelismo mundial con el ilustre predicador evangelista Morris Cerullo. Tal evento se llevó a cabo en la Arena México. Fue un acontecimiento muy promovido en las congregaciones evangélicas de aquel tiempo.
Se llevaron a cabo conferencias sobre formas de evangelismo, de vida cristiana y demás. Yo estuve presente en una buena parte de esos eventos.
La culminación de este ciclo de conferencias desembocó en una "noche de milagros", la cual fue seguida por algu7nos medios de comunicación de la ciudad de México.
En esta noche de milagros, hubo gente que llegó con distintas enfermedades y dolencias, y casi toda esa gente fue sanada.
Hasta este punto, alguien diría Dios es grande y bueno...
Pero, en lo que a mi toca -y no es que yo sea alguien importante o que merezca algo, porque me considero un gusano que ha sido reconciliado por puro amor de Dios- yo estuve también esperando ser sanado de la deficiencia visual que padezco desde que nací.
Muchos recibieron su sanidad, pero también muchos se quedaron a la expectativa... y no recibimos nada.
¿Qué fue lo que falló aquí? ¿Falta de fe? ¿Faltó oración o ayuno?
Dios sabe porqué hace las cosas. Mucho tiempo después de esto, me hallo más bendecido que antes, pues una noche conemencé a hacer las cuentas, y descubrí que había algo en mi que era necesario sanar en mi alma: el rechazo y la falta de cariño. Un espíritu de muerte me oriiló por mucho tiempo, y viví como un fantasma.
Por esto, decidí hacer una confesión sincera de mi vida y mis actos ante el Señor. Tras esta confesión, tampoco recibí la sanidad en mi vista, pero recibí un regalo más grandioso, y ese regañlo fue la liberación y la tan ansiada paz que me fue negada desde que nací. Fui rechazado desde mi nacimiento, y así viví hasta hace apenas algunos años atrás.
Dios me ha permitido tener cosas que antes no tuve por haber sido tratado como un subnormal, condenado a la oscuridad y a la soledad. Al recibir mi milagro de reconciliación y paz, puedo decir satisfecho que no me importa tener esta deficiencia visual, por cuanto he recibido algo mucho más valioso: el perdón y la paz. Así, el espíritu de muerte que me tenía sujeto por el cuello fue ahuyentado, y nunca más ha vuelto a molestarme.
Ahora que me entero de este advenimiento del míster benny hinn, me pregunto seriamente: ¿Cuantos de mis hermanos tendrán que pasar por lo mismo que yo pasé? ¿Cuantos de mis hermanos dejarán de afanarse por tratar de recibir la sanidad en su cuerpo, cuando la sanidad del alma es más importante, y es lo que deberían procurar ANTES que otra cosa? Y Dios sabe que es mejor decir "Hijito, tus pecados te son perdonados" a decir "Levántate y anda".
Quedo de ustedes en Cristo.
