No es un feliz término.
El hombre no puede cumplir con la ley.
No necesariamente el hombre es "depravado totalmente".
A lo mejor sólo lo es parcialmente.
A lo mejor no roba ni mata ni blasfema... pero no honra perfectamente a sus padres.
No es quizás un "hombre totalmente depravado".
Pero fallar en un sólo punto de la ley te hace transgresor de toda la ley.
Ergo, aunque no seas un "depravado total", no puedes justificarte ante Dios.
Cristo sí puede justificar porque te hace y te llama justo aparte de las obras de la ley.
Y una vez te hace justo, te libera para cumplir las obras de la ley, pero escritas en el corazón, no en un pergamino.
Es decir, escritas en la conciencia. Por eso Cristo nos "da una buena conciencia", que es la prueba de nuestra resurrección (espiritual) en Cristo (Ver 1ª Pedro 3:21).
Tener una buena conciencia ante Dios y los hombres es la prueba práctica de que Cristo vive en nosotros.
Amor,
Ibero