Efe-E-Pe
Círculos concéntricos
Mi caso muy particular...
Nacido de cuna católica, a los quince años realicé el ritual de la primera comunión, pasando por el catecismo, vestido de palomo y toda la cosa. Durante estos días, tuve un libro rojo que me hizo cuestionar el catolicismo como lo conocía. Esta es la portada de la publicación:
Poco después, fui invitado a una congregación evangélica. Me convertí a Cristo tiempo después, aunque con muchas dudas y temores. Con el paso del tiempo, comprendí que cambiar de religión no fue lo mejor, sino haber sido salvado por Jesús, comprendiendo que los católicos no son mis enemigos; nunca lo fueron. Lo que más importa, es una vida transformada y rendida a Jesús, dócil y obediente a Él, y con la esperanza de saber que Dios borra mi pasado, llevándome a Su futuro.
Nacido de cuna católica, a los quince años realicé el ritual de la primera comunión, pasando por el catecismo, vestido de palomo y toda la cosa. Durante estos días, tuve un libro rojo que me hizo cuestionar el catolicismo como lo conocía. Esta es la portada de la publicación:
Poco después, fui invitado a una congregación evangélica. Me convertí a Cristo tiempo después, aunque con muchas dudas y temores. Con el paso del tiempo, comprendí que cambiar de religión no fue lo mejor, sino haber sido salvado por Jesús, comprendiendo que los católicos no son mis enemigos; nunca lo fueron. Lo que más importa, es una vida transformada y rendida a Jesús, dócil y obediente a Él, y con la esperanza de saber que Dios borra mi pasado, llevándome a Su futuro.