APOSTOLES Y PROFETAS, LA BASE DEL EDIFICIO...

Por cierto Maripaz se podria aplicar lo siguiente dicho por Alfonso referente a las diversas iglesias:

"...Hay una mayor aceptación del ministerio apostólico en varias iglesias, pero creo (no lo he analizado muy bien) que NO HAY NECESARIAMENTE UNA COINCIDENCIA TOTAL EN LOS CONCEPTOS..."

Con lo que escribiste tu?:

" Obviamente, te quedas con lo que te conviene, y no aplicas el resto. "

Tu que estudias mucho acerca de las iglesias y sus doctrinas.. que crees que nuestro amigo Alfonso no lo ha analizado muy bien como el dice? o tiene razón y en realidad no hay coincidencia en los conceptos? .. "se quedan cada cual con lo que les conviene"?
....o que sucede?
 
Hola PINO


Creo que hay DIVERSIDAD DE OPINIONES, las cuales, no impiden que aquellos que ejercen sus dones, en el Nombre de Dios y en el poder del Espíritu Santo, lo hagan, para la Gloria de Dios y para edificación de la Iglesia.


La divergencia en la definición de CONCEPTOS, puede resultar un freno, pero Dios es TODOPODEROSO, y usa hasta burras para hablarle al pueblo :D
 
Hola Maripaz

"Creo que hay DIVERSIDAD DE OPINIONES, las cuales, no impiden que aquellos que ejercen sus dones, en el Nombre de Dios y en el poder del Espíritu Santo, lo hagan, para la Gloria de Dios y para edificación de la Iglesia."


" Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, QUE HABLEIS TODOS UNA MISMA COSA, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que ESTEIS PERFECTAMENTE UNIDOS EN UNA MISMA MENTE Y EN UN MISMO PARECER" ( 1a Corintios 1:10)._
 
Estimada Maripaz,

Pero, ¿quién le dijo que las tres definiciones de la palabra "apóstol" no pueden coexistir...?

La enseñanza bíblica que le estoy tratando de hacer comprender es que bien que existen diferentes definiciones para la palabra "apóstol", estas no se contradicen o se anulan entre sí, y que, así como hubieron personas que llegaron a ser "testigos especiales" de la misión de Jesucristo, el Hijo del Padre, esto no niega la existencia de un grupo especial de 12 hombres llamados por Jesús y dotados con poder y autoridad para actuar en Su nombre, como bien la definición del diccionario lo aclara, y que a demás este Grupo no se disovería con la muerte del Mesías.

Como Ud. puede ver, hay armonía en estas definiciones...

Sin embargo, lo que a mí aún me cuesta comprender es el porqué Ud. continúa creyendo que en la actualidad no hay necesidad de este Grupo especial de 12 hombres, el Grupo de los 12 Apóstoles, para dirigir los asuntos de Dios en la tierra, aclarar doctrina, hablar en el nombre de Jesucristo, etc., existiendo no solamente la enseñanza bíblica apoyando tal necesidad, sino que también las palabras de fuentes externas a este libro, como las del diccionario que Ud. tan gentilmente compartió con todos nosotros...

Me gustaría saber en qué se basa para tal rechazo de las enseñanzas bíblicas...
 
Originalmente enviado por: PINO
Hola Maripaz

"Creo que hay DIVERSIDAD DE OPINIONES, las cuales, no impiden que aquellos que ejercen sus dones, en el Nombre de Dios y en el poder del Espíritu Santo, lo hagan, para la Gloria de Dios y para edificación de la Iglesia."


" Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, QUE HABLEIS TODOS UNA MISMA COSA, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que ESTEIS PERFECTAMENTE UNIDOS EN UNA MISMA MENTE Y EN UN MISMO PARECER" ( 1a Corintios 1:10)._

Hola Pino:

Lo primero que te digo es que Maripaz y yo sí somos de la misma iglesia, "la que Cristo compró con Su sangre (no la que fundó) y que no tiene ni denominaciones ni normas extrabíblicas, tan solo la Palabra de Dios y el Espíritu Santo guiando y por lo tanto a Cristo como unica autoridad, Él es la Cabeza" (Maripaz). La nota en itálica es mía.

Ahora, quiero contestar la pregunta de tu anterior intervención.

Cuantos son?

Aquellos con los que tengo comunión (mas bien me refiero a que mi apóstol y ellos tienen comunión y trabajan de común acuerdo en el Espíritu Santo; cuando dije que tenía comunión quise decir que compartimos la misma doctrina) han formado una comunidad apostólica (así la han llamado, me parece un nombre bastante apropiado) y se dedican a ver la marcha de las congregaciones que han reconocido en ellos un llamado de Dios como apóstoles. Estos serán unos 8 o 9, antes eran 10 o 12, pero algunos se han retirado por su edad y uno o dos de ellos duermen en el Señor. En ningún momento dijeron que tenían que ser 12 como cantidad única. Si mal no recuerdo antes eran más, solo que la comunidad apostólica se formó cuando los ministerios fueron reconocidos (el reconocimiento público del que te hablé) y ya habían pasado unos veinte o veinticinco años de haber iniciado el trabajo y para el tiempo en que fueron reconocidos algunos ya se habían retirado. En ningún momento niegan que Dios levante apóstoles en otras obras (recuerdo haber escuchado a Eliú Castillo, que dirige la misión cristiana El Calvario, y aunque una vez hubo un contacto, no forma parte de la comunidad de la que participan los otros apóstoles.), aunque son celosos en guardar la doctrina de Dios.

Bien, voy a lo que preguntabas en otra intervención


" No se está renovando un aspecto especifico de la verdad, sino la totalidad de la verdad.."

Que significa lo anterior?


Me refería a que antes Dios iba restaurando partes de la verdad como la salvación por fe o el bautismo en el Espíritu Santo y otros temas, ahora Dios está dando una visión más integral de la verdad. La Doctrina de Dios, Pino, no es infinita, Jesús nos dijo que enviaba al Espíritu Santo para enseñar la totalidad de la verdad: JUAN 16:13 "Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.". Perdóname por no ser tan preciso, hay más versículos, pero la biblia dice que el Espíritu de Dios hasta el día de hoy sigue trabajando y ¡por Dios! ¡sí que necesitamos ese trabajo! Toda su iglesia lo necesita.

"Institucionalmente hay muchas iglesias evangélicas, y una gran parte de ellas no tienen apóstoles..."

"Hay una mayor aceptación del ministerio apostólico en varias iglesias, pero creo (no lo he analizado muy bien) que no hay necesariamente una coincidencia total en los conceptos."

Significa que las iglesias evangelicas que no tienen apostoles o que no estan renovando la totalidad de la verdad es porque no estan dispuestas a escuchar la voz del Espiritu Santo?


¿En verdad que sí parece que quise decir eso, no? Bueno, en realidad no quise decir eso, la respuesta a esa pregunta es si y no. Hay muchas iglesias que no oyen la voz del Espíritu Santo, pero no por que no tengan apóstoles, sino por que tienen pecado que no quieren corregir.

Se me acabó el tiempo, luego continúo

Bendiciones.

Alfonso.
 
Estimado Alfonso, en su comentario anterior usted dijo que:

"Dios iba restaurando partes de la verdad como la salvación por fe o el bautismo en el Espíritu Santo y otros temas, ahora Dios está dando una visión más integral de la verdad. La Doctrina de Dios, Pino, no es infinita, Jesús nos dijo que enviaba al Espíritu Santo para enseñar la totalidad de la verdad..."

¿Quiere esto decir que TODA LA VERDAD no se encuentra en la Biblia...?
 
Ya que nefita se duerme, vamos a animarlo :bicho:


Citas Interesantes de Joseph Smith Jr.,
El Fundador Del Mormonismo

Joseph Smith se jactaba de haber logrado más que Jesús al mantener unida su iglesia.
"Dios se halla aún en la suave y pequeña voz. En todas estas declaraciones juradas, citaciones, todo esto es del diablo –todo corrupción. ¡Venid, fiscales! ¡Falsos testigos! ¡Que bulla todo el infierno! ¡Derramad vuestra lava, montañas ardientes! Porque yo quedaré finalmente por encima de todo. Tengo más para jactarme que lo que haya tenido hombre alguno jamás. Soy el único hombre que ha logrado mantener unida una iglesia desde los días de Adán. La gran mayoría del conjunto ha permanecido a mi lado. Ni Pablo, Juan, Pedro, y ni siquiera Jesús lograron esto. Me jacto de que ningún hombre nunca hizo una obra como la mía. Los seguidores de Jesús lo abandonaron; pero hasta ahora, los Santos de los Ultimos Días nunca me han abandonado..." (History of the Church, Vol. 6, p. 408-409).

Joseph Smith hizo varias falsas profecías. He aquí una:
". . .Yo profetizo en el nombre del Dios de Israel que, a menos que los Estados Unidos enmienden los abusos cometidos contra los Santos en el estado de Missouri y castiguen los crímenes cometidos por sus oficiales, que en unos pocos años el gobierno será absolutamente derrocado y despojado, sin que sea dejada ni una vasija ... " (History of the Church, Vol. 2, p. 182. Esto fue dicho en febrero de 1835).

Joseph Smith dijo que en la eternidad, las madres tienen bebés y que algunos de ellos están en tronos.
"Puede preguntarse: «¿Tendrán niños las madres en la eternidad?» ¡Sí! ¡Sí! Madres, tendréis vuestros hijos." (Journal of Discourses, Vol. 6, p. 10).
"La eternidad está llena de tronos, sobre los cuales moran miles de niños reinando en tronos de gloria, sin que se le añada ni un codo a su estatura." (Journal of Discourses, Vol. 6, p. 10).

Joseph Smith dijo que había muchos dioses:
"Por tanto, la doctrina de la pluralidad de Dioses es tan prominente en la Biblia como cualquier otra doctrina. Se halla en toda la Biblia ... Pablo dice que hay muchos Dioses y muchos Señores ... pero para nosotros aquí no hay sino un Dios –esto es con respecto a nosotros, y él está en todo y a través de todo" (History of the Church, Vol. 6, p. 474).
"En el principio, la cabeza de los Dioses convocó un concilio de Dioses, y se reunieron y pergeñaron un plan para crear al mundo y la gente en él." (Journal of Discourses, Vol. 6, p. 5).

Joseph Smith dijo que la Trinidad está formada por tres Dioses.
"Siempre he declarado que Dios es un personaje distinto, Jesucristo un personaje distinto y separado de Dios el Padre, y el Espíritu Santo un personaje distinto y un espíritu; y estos tres constituyen tres personajes distintos y tres Dioses." (Teachings of Prophet Joseph Smith p. 370).

Joseph Smith dijo que Dios fue antes un hombre.
"Dios mismo fue una vez como nosotros somos ahora, y es un Hombre exaltado, y se sienta entronizado en los distantes cielos" (Journal of Discourses, Vol. 6, p. 3).
Joseph Smith dijo que nuestra mayor responsabilidad es la de investigar nuestros difuntos (es decir, estudiar las genealogías para luego bautizarse por los muertos).
"La mayor responsabilidad que Dios nos ha dado en este mundo es la de investigar acerca de nuestros [antepasados] difuntos" (Journal of Discourses, Vol. 6, page 7).


http://www.maic.net/mormonismo/citas_smith.htm




Nefita, ¿está usted de acuerdo con todas esas afirmaciones?

¿nos las puede demostrar con las Escrituras?


Gracias



Puede ir de dos en dos si lo desea , yo le espero e irá a su ritmo:D
 
Originalmente enviado por: nefitalamanita
Estimado Alfonso, en su comentario anterior usted dijo que:

"Dios iba restaurando partes de la verdad como la salvación por fe o el bautismo en el Espíritu Santo y otros temas, ahora Dios está dando una visión más integral de la verdad. La Doctrina de Dios, Pino, no es infinita, Jesús nos dijo que enviaba al Espíritu Santo para enseñar la totalidad de la verdad..."

¿Quiere esto decir que TODA LA VERDAD no se encuentra en la Biblia...?
 
Disculpa la demora Nefita

Disculpa la demora Nefita

Originalmente enviado por: nefitalamanita
:dormido: :dormido2:

¡¡¡¡¡HOLA NEFITA!!!!! ;):

Disculpa que no haya contestado tus intervenciones, lo que pasa es que no tengo acceso a Internet en casa y además tengo que pagar por el tiempo de conexión. Los que me han visto intervenir se dan cuenta de que no entro mucho en las discusiones largas. Ello es justo por esta razón.

Bien, iré a tu pregunta:

"Estimado Alfonso, en su comentario anterior usted dijo que:

"Dios iba restaurando partes de la verdad como la salvación por fe o el bautismo en el Espíritu Santo y otros temas, ahora Dios está dando una visión más integral de la verdad. La Doctrina de Dios, Pino, no es infinita, Jesús nos dijo que enviaba al Espíritu Santo para enseñar la totalidad de la verdad..."


¿Quiere esto decir que TODA LA VERDAD no se encuentra en la Biblia...?

La respuesta está en el versículo que iba junto al texto que escribiste y que, supongo involuntariamente, has olvidado pegar: JUAN 16:13 "Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.".

¿Viste ahora el nuevo subrayado? Como verás, Esta palabra se la dió Jesús a sus discípulos antes de que recibieran al Espíritu Santo. Jesús le había enseñado a los discípulos verdades muy importantes acerca del Reino de Dios (el Reino de los Cielos que se había acercado), pero todavía faltaban más cosas por aprender, y enseñar estas cosas iba a ser parte de la labor del Espíritu Santo. ¿En qué momento mencioné la biblia (no digo cité), para que supongas que me refería a que toda la verdad no estaba en ella? Todo lo contrario, si tu revisas el tono de las cartas apostólicas, verás que las últimas cartas escritas por los apóstoless no son sino repeticiones de anteriores mensajes o fueron escritas para corregir desviaciones que se habían presentado en algunas iglesias locales. En ningún momento enseña que haya que esperar nuevas revelaciones o a atender a la voz del Espíritu Santo en ese sentido.

Nefita, no vas a enterder lo que quiero decir hasta que leas con claridad lo siguiente: "Dios iba restaurando partes de la verdad como..." ¿entiendes? Digo "restaurando", no "añadiendo". Si alguien restaura algo, se refiere a que ese algo ya existía, no que ha sido recién enseñado y cuando hablo de la salvación por fe y el bautismo en el Espíritu Santo no me refiero a que "mi iglesia" tenga todas esas revelaciones, sino a la labor que otros hermanos míos en Cristo (por favor no temas poner a Lutero y a Moody en el mismo plato por un momento) realizaron por que pusieron sus vidas en las manos de Dios a pesar de sus imperfecciones (llámalo bautismo de niños o tender a gritar en los cultos o exagerar el cultivo de las manifestaciones del Espíritu Santo o como quieras). No fue por sus cualidades que estas personas llegaron a agradar el corazón de Papá, sino porque escucharon el evangelio de Cristo sin cambiarlo ni adulterarlo.

Espero haber respondido tu pregunta.

Que Dios te bendiga. Alfonso.
 
Ahora, quiero continuar mi respuesta a Pino

Ahora, quiero continuar mi respuesta a Pino

Hola Pino:

Mi intención al escribirte este mensaje es terminar de responder tus preguntas, si no he visto mal me quedé en...:

"No se produce en un grupo específico de personas o de alguna iglesia en especial, sino que esta restauración se está produciendo en personas y congregaciones dispuestas a oir la voz del Espíritu Santo."

... ,,A que congregación perteneces?


He transcrito un artículo en que el apóstol de mi congregación (se llama Cristian Romo, y le decimos Cristian :)) narra como llegó a entender el llamado de Dios para su vida, en una próxima intervención pego esas notas. En Chile, que es donde el reside, La iglesia recibe el nombre formal de Servicio para el Desarrollo Cristiano y la congregación de cada ciudad recibe el nombre de Comunidad Cristiana de... Concepción, Antofagasta, Temuco, Iquique o el lugar que sea. En el Perú, el nombre formal es otro, pero guardamos la costumbre de nombrarnos Comunidad Cristiana de... según el lugar en que nos encontremos

El énfasis no está en el apostolado, despues de todo el apóstol es un siervo, al igual que un pastor, un maestro o un evangelista. El énfasis está en el Reino de Dios. Fíjate que la primera prédica de Jesucristo fue: "Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado." (Mateo 4:17). También: "Después que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el evangelio del reino de Dios, diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio." (Marcos 1:14-15).

Durante los tres años que Jesús estuvo en la tierra, se dedicó a enseñar a los discípulos los principios del Reino de Dios y dijo que el Espíritu Santo completaría dicha instrucción. En las cartas apostólicas se afirma que se brindó toda la enseñanza en las escrituras, bajo la dirección del Espíritu Santo:.

1RA_DE_JUAN 2:27 Pero la unción que vosotros habéis recibido de él, mora en vosotros, y no tenéis necesidad que ninguno os enseñe; mas como la unción misma os enseña de todas cosas, y es verdadera, y no es mentira, así como os ha enseñado, perseveraréis en él.

1RA_DE_JUAN 2:20 Mas vosotros tenéis la unción del Santo, y conocéis todas las cosas.

2DA_DE_PEDRO 1:3 Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia,
1:4 por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia;
1:5 vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento;
1:6 al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad;
1:7 a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor.
1:8 Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo.

Como evidencia que apoya a los versículos que te he mostrado, están las afirmaciones que hize en la anterior afirmación, las últimas cartas de los apóstoles son confirmaciones o repeticiones de lo ya enseñado o correciones de desviaciones de la verdad por parte de los discípulos de las distintas iglesias.

Espero haber contestado tus preguntas de modo satisfactorio.

Que Dios te bendiga y gracias por tus saludos.

Alfonso Chíncaro.
 
Re: Disculpa la demora Nefita

Re: Disculpa la demora Nefita

Originalmente enviado por: Alfonso
¡¡¡¡¡HOLA NEFITA!!!!! ;):

Disculpa que no haya contestado tus intervenciones, lo que pasa es que no tengo acceso a Internet en casa y además tengo que pagar por el tiempo de conexión. Los que me han visto intervenir se dan cuenta de que no entro mucho en las discusiones largas. Ello es justo por esta razón.


No te preocupes, comprendo perfectamente tu situación y más o menos pensaba que esa podría ser tu razón. Gracias por tu tiempo, se que es precioso para ti así como lo es para mí y para muchos de los foristas.



En cuato al porqué de mi pregunta: "¿Quiere esto decir que TODA LA VERDAD no se encuentra en la Biblia...?", pues bien, la deduje de tus comentarios en los que afirmabas que "...Dios iba restaurando partes de la verdad como la salvación por fe o el bautismo en el Espíritu Santo y otros temas...", en conjuto con la escritura mencionada: JUAN 16:13 "Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir."

Comentarios, que sugún yo, contradicen las creencias de muchos autodenominados "cristianos" modernos, que sostienen la Biblia como la única fuente de sus creencias doctrinales, sin necesidad de revelación "suplementaria".

No sé si tal es tu caso...?


Concuerdo plenamente con tu conclusión de que: "...Jesús le había enseñado a los discípulos verdades muy importantes acerca del Reino de Dios (el Reino de los Cielos que se había acercado), pero todavía faltaban más cosas por aprender, y enseñar...", y de ahí es que veo la debilidad en el argumento de aquellos que "opinan", pues sin fundamento bíblico o mandato o sanción divina, es solamente eso, una opinión, que la Biblia lo es y contiene todo, aún aquellos que se relaciona a necesidades específicas de nuestros tiempos actuales, sin yo querer menospreciar o negar su aplicación por inferencia, a nuestro tiempo.



También dices:
"Nefita, no vas a enterder lo que quiero decir hasta que leas con claridad lo siguiente: "Dios iba restaurando partes de la verdad como..." ¿entiendes? Digo "restaurando", no "añadiendo". Si alguien restaura algo, se refiere a que ese algo ya existía..."

Y, aunque te parezca extraño, nosotros, los miembros de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Ultimos Días estamos muy bien familiarizados con la palabra "restauración", pues creemos que Dios, a través del profeta Joseph Smith, restauró Su Iglesia en estos los últimos días, es decir, y como tu bien lo dices, se volvió a poner sobre la tierra la Iglesia que una vez formó Jesucristo, al igual que Su evangelio. Lo que explica el hecho de que muchas de "nuestras" doctrinas tengan sonido a nuevo en las orejas de muchos no familiarizados con las verdaderas enseñanzas del Mesías y Su evangelio, pero que puestas a la luz de las Escrituras y del Espíritu, junto con la revelación moderna, forman un complemento en unidad.

Alonso, podrías explicarnos un poco más en detalles el significado de estas tus palabras,creo que te refieres a la Biblia? y podrías de igual manera procurar citas bíblicas al apoyo...?
"...en ningún momento enseña que haya que esperar nuevas
revelaciones..."


Saludos
 
Originalmente enviado por: emiliojorge
Estimado Hermano en Cristo Morrisson:

La Biblia enseña más bien que la base de las iglesias de Cristo (nótese en plural) son los mensajes de los apóstoles de Jesús y los profetas.

Aun cuando el hermano autor de este tema se refiere más bien al apostolado como don espiritual.

"edificados sobre EL FUNDAMENTO DE LOS APÓSTOLES Y PROFETAS, siendo la PRINCIPAL PIEDRA DEL ÁNGULO Jesucristo mismo," (Efesios 2:20)

"porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es CABEZA DE LA IGLESIA, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador" (Efesios 5:23)

QUE EL SEÑOR LE SIGA BENDICIENDO.

Bueno, pero ¿a que apóstoles y profetas te refieres?. Pablo hablaba de los apóstoles de su epoca es decir los 12, los cuales ya murieron.
 
Jesucristo es cabeza de la Iglesia

Jesucristo es cabeza de la Iglesia

Originalmente enviado por: MORRISON
Bueno, pero ¿a que apóstoles y profetas te refieres?. Pablo hablaba de los apóstoles de su epoca es decir los 12, los cuales ya murieron.

Estimado Hermano en Cristo Morrisson:

Me refiero obviamente a los apóstoles de Jesús, el Cristo, el Mesías, el Ungido de Dios.

Por medio del cual serían benditas todas las naciones de la Tierra según Génesis.

Y según el Pacto Abrahámico que hace Dios con Abraham y toda su descendencia

O promesa del Nuevo Pacto.

Me refiero a los profetas del Antiguo o primer Pacto que anunciaron al Mesías y las profecías que Él iba a cumplir.

El centro del mensaje de todos ellos fue el Mesías por medio del cual serían benditas (redimidas) todas las naciones de la Tierra según la promesa de Dios, el Creador.

SON ESOS MENSAJES LOS QUE CONSTITUYEN LA BASE DE LA IGLESIA Y SEGUN EPIGRAFE LA BASE DEL EDIFICIO.

JESUCRISTO ES LA CABEZA MÁS BIEN DE LA IGLESIA.

Yo diría iglesias (en plural) y la Biblia también lo dice.

Otra cosa es debatir si contienen o no errores, muchos pocos o ninguno.

Recordemos que fueron copiados A MANO (antes de la imprenta) numerosas veces y traducidos a varios idiomas por seres humanos falibles.

QUE EL SEÑOR LE SIGA BENDICIENDO.
 
Re: Re: Disculpa la demora Nefita

Re: Re: Disculpa la demora Nefita

Hola Nefita:

Esta vez si pude responderte algo más rápido, pero la respuesta me parece más complicada, estaré tratando de responder a la pregunta de una repregunta. Me parece que ya la respondí al escribir mi última respuesta a Pino. Espero que no te moleste si te repito algunas de las respuestas. Aquí va:

En cuanto a tu primera explicación (que no es una pregunta que hayas hecho en realidad) de todas maneras quiero hacer un comentario: En primer lugar te diré que lo mío no era una pregunta propiamente dicha, sino que más era un reclamo por que nada en mis afirmaciones indicaba que cuestionara la suficiencia de la biblia y no lo he hecho. Ahora me has explicado que fue propiamente una deducción tuya. Te agradezco que te hayas explicado y por supuesto que puedes hacer cualquier pregunta respecto de mis palabras. Solo que me sentí contrariado cuando leí tu pregunta (me dije algo como: ¿cuándo insinué algo así? :confused:).

Tu primera pregunta está asociada a esta explicación (coloco la introducción a tu pregunta para que se entienda):

"Comentarios, que sugún yo, contradicen las creencias de muchos autodenominados "cristianos" modernos, que sostienen la Biblia como la única fuente de sus creencias doctrinales, sin necesidad de revelación "suplementaria".

No sé si tal es tu caso...?"

Mi respuesta es no. Debo decir que considero a la biblia como única fuente de verdad doctrinal. No hay otro libro como él y nunca habrá. Se le ha pasado por innumerables pruebas, calumnias y cuestionamientos y de todas estas situaciones ha salido airosa. No así otro libro. No sé mucho de exégesis bíblica (ese es el nombre, ¿no?), pero sí se que la biblia ha tenido muchísimos enemigos y a todos los ha vencido. Y no hay otro libro con su autoridad, ni con su fuerza, ni su validez.

Luego, sigue un comentario de tu parte, no una pregunta. Tomas mi conclusión así:

"...Jesús le había enseñado a los discípulos verdades muy importantes acerca del Reino de Dios (el Reino de los Cielos que se había acercado), pero todavía faltaban más cosas por aprender, y enseñar...", y de ahí es que veo la debilidad en el argumento de aquellos que "opinan", pues sin fundamento bíblico o mandato o sanción divina, es solamente eso, una opinión, que la Biblia lo es y contiene todo, aún aquellos que se relaciona a necesidades específicas de nuestros tiempos actuales, sin yo querer menospreciar o negar su aplicación por inferencia, a nuestro tiempo.

No me parece correcto lo que hiciste. Has tomado mi opinión de manera incompleta. Dije que faltaban más cosas por aprender y enseñar cuando Cristo se fue de la tierra y dije bien claro que el Espírtu Santo era el encargado de dar esa instrucción y más adelante en la misma respuesta te explico que las últimas cartas apostólicas no enseñaban cosas nuevas, sino que se repetían aquellas que los apostóles consideraban necesarias y además se corregían desviaciones que se presentaban en dichas iglesias.

Luego haces otro comentario:

[/B
También dices (te refieres a mí, Alfonso):
"Nefita, no vas a enterder lo que quiero decir hasta que leas con claridad lo siguiente: "Dios iba restaurando partes de la verdad como..." ¿entiendes? Digo "restaurando", no "añadiendo". Si alguien restaura algo, se refiere a que ese algo ya existía..."

Y, aunque te parezca extraño, nosotros, los miembros de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Ultimos Días estamos muy bien familiarizados con la palabra "restauración", pues creemos que Dios, a través del profeta Joseph Smith, restauró Su Iglesia en estos los últimos días, es decir, y como tu bien lo dices, se volvió a poner sobre la tierra la Iglesia que una vez formó Jesucristo, al igual que Su evangelio. Lo que explica el hecho de que muchas de "nuestras" doctrinas tengan sonido a nuevo en las orejas de muchos no familiarizados con las verdaderas enseñanzas del Mesías y Su evangelio, pero que puestas a la luz de las Escrituras y del Espíritu, junto con la revelación moderna, forman un complemento en unidad.

Definitivamente no tenemos la misma fe, Nefita. No es cierto que haya afirmado que Dios haya vuelto a poner sobre la tierra la Iglesia que una vez formó (...y como tu bien lo dices,...). Es falso que Dios tenga una "revelación moderna". Ni la salvación por fe ni el bautismo en el Espíritu Santo (algunas de las verdades que yo he presentado como restauradas por Dios) son revelaciones nuevas. Los que llegaron a entenderlas del modo en que Dios lo enseña fueron personas que se aferraron a la Biblia. y cada vez que Dios ha tenido la oportunidad de alcanzar a su pueblo ha sido a través de personas que se han aferrado a la biblia.

Finalmente me haces una pregunta:

Alonso, podrías explicarnos un poco más en detalles el significado de estas tus palabras,creo que te refieres a la Biblia? y podrías de igual manera procurar citas bíblicas al apoyo...?
"...en ningún momento enseña que haya que esperar nuevas
revelaciones..."

Dios no va a enseñar lo que no va a hacer de su parte. Así que te presentaré los textos en que los apóstoles enseñan que el Espíritu Santo guía a toda la verdad (estos versículos son parte de la respuesta que dí a Pino):

1RA_DE_JUAN 2:27 Pero la unción que vosotros habéis recibido de él, mora en vosotros, y no tenéis necesidad que ninguno os enseñe; mas como la unción misma os enseña de todas cosas, y es verdadera, y no es mentira, así como os ha enseñado, perseveraréis en él.

1RA_DE_JUAN 2:20 Mas vosotros tenéis la unción del Santo, y conocéis todas las cosas.

2DA_DE_PEDRO 1:3 Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia,
1:4 por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia;
1:5 vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento;
1:6 al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad;
1:7 a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor.
1:8 Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo.

Además, queda el mensaje que Pablo da a los ancianos de la iglesia en Mileto, fíjate como hace énfasis en haber cumplido su responsabilidad y cual es ésta:

HECHOS 20:17 Enviando, pues, desde Mileto a Efeso, hizo llamar a los ancianos de la iglesia.
20:18 Cuando vinieron a él, les dijo: Vosotros sabéis cómo me he comportado entre vosotros todo el tiempo, desde el primer día que entré en Asia,
20:19 sirviendo al Señor con toda humildad, y con muchas lágrimas, y pruebas que me han venido por las asechanzas de los judíos;
20:20 y cómo nada que fuese útil he rehuido de anunciaros y enseñaros, públicamente y por las casas,
20:21 testificando a judíos y a gentiles acerca del arrepentimiento para con Dios, y de la fe en nuestro Señor Jesucristo.
20:22 Ahora, he aquí, ligado yo en espíritu, voy a Jerusalén, sin saber lo que allá me ha de acontecer;
20:23 salvo que el Espíritu Santo por todas las ciudades me da testimonio, diciendo que me esperan prisiones y tribulaciones.
20:24 Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios.
20:25 Y ahora, he aquí, yo sé que ninguno de todos vosotros, entre quienes he pasado predicando el reino de Dios, verá más mi rostro.
20:26 Por tanto, yo os protesto en el día de hoy, que estoy limpio de la sangre de todos;
20:27 porque no he rehuido anunciaros TODO el consejo de Dios.
20:28 Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre.
20:29 Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño.
20:30 Y de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los discípulos.
20:31 Por tanto, velad, acordándoos que por tres años, de noche y de día, no he cesado de amonestar con lágrimas a cada uno.
20:32 Y ahora, hermanos, os encomiendo a Dios, y a la palabra de su gracia, que tiene poder para sobreedificaros y daros herencia con todos los santificados.
20:33 Ni plata ni oro ni vestido de nadie he codiciado.
20:34 Antes vosotros sabéis que para lo que me ha sido necesario a mí y a los que están conmigo, estas manos me han servido.
20:35 En todo os he enseñado que, trabajando así, se debe ayudar a los necesitados, y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que recibir.

Impresionantes las palabras de Pablo. ¿Crees tú que habría de dejar sin TODO el consejo de Dios a sus hijos en la fe a los cuales dio a luz con dolor?

Repito la última parte de mi respuesta a Pino:

"Como evidencia que apoya a los versículos que te he mostrado, están las afirmaciones que hize en la anterior afirmación, las últimas cartas de los apóstoles son confirmaciones o repeticiones de lo ya enseñado o correciones de desviaciones de la verdad por parte de los discípulos de las distintas iglesias."

Que Dios te bendiga.

Alfonso.

Originalmente enviado por: nefitalamanita
Originalmente enviado por: Alfonso
¡¡¡¡¡HOLA NEFITA!!!!! ;):

Disculpa que no haya contestado tus intervenciones, lo que pasa es que no tengo acceso a Internet en casa y además tengo que pagar por el tiempo de conexión. Los que me han visto intervenir se dan cuenta de que no entro mucho en las discusiones largas. Ello es justo por esta razón.


No te preocupes, comprendo perfectamente tu situación y más o menos pensaba que esa podría ser tu razón. Gracias por tu tiempo, se que es precioso para ti así como lo es para mí y para muchos de los foristas.



En cuato al porqué de mi pregunta: "¿Quiere esto decir que TODA LA VERDAD no se encuentra en la Biblia...?", pues bien, la deduje de tus comentarios en los que afirmabas que "...Dios iba restaurando partes de la verdad como la salvación por fe o el bautismo en el Espíritu Santo y otros temas...", en conjuto con la escritura mencionada: JUAN 16:13 "Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir."

Comentarios, que sugún yo, contradicen las creencias de muchos autodenominados "cristianos" modernos, que sostienen la Biblia como la única fuente de sus creencias doctrinales, sin necesidad de revelación "suplementaria".

No sé si tal es tu caso...?


Concuerdo plenamente con tu conclusión de que: "...Jesús le había enseñado a los discípulos verdades muy importantes acerca del Reino de Dios (el Reino de los Cielos que se había acercado), pero todavía faltaban más cosas por aprender, y enseñar...", y de ahí es que veo la debilidad en el argumento de aquellos que "opinan", pues sin fundamento bíblico o mandato o sanción divina, es solamente eso, una opinión, que la Biblia lo es y contiene todo, aún aquellos que se relaciona a necesidades específicas de nuestros tiempos actuales, sin yo querer menospreciar o negar su aplicación por inferencia, a nuestro tiempo.



También dices:
"Nefita, no vas a enterder lo que quiero decir hasta que leas con claridad lo siguiente: "Dios iba restaurando partes de la verdad como..." ¿entiendes? Digo "restaurando", no "añadiendo". Si alguien restaura algo, se refiere a que ese algo ya existía..."

Y, aunque te parezca extraño, nosotros, los miembros de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Ultimos Días estamos muy bien familiarizados con la palabra "restauración", pues creemos que Dios, a través del profeta Joseph Smith, restauró Su Iglesia en estos los últimos días, es decir, y como tu bien lo dices, se volvió a poner sobre la tierra la Iglesia que una vez formó Jesucristo, al igual que Su evangelio. Lo que explica el hecho de que muchas de "nuestras" doctrinas tengan sonido a nuevo en las orejas de muchos no familiarizados con las verdaderas enseñanzas del Mesías y Su evangelio, pero que puestas a la luz de las Escrituras y del Espíritu, junto con la revelación moderna, forman un complemento en unidad.

Alonso, podrías explicarnos un poco más en detalles el significado de estas tus palabras,creo que te refieres a la Biblia? y podrías de igual manera procurar citas bíblicas al apoyo...?
"...en ningún momento enseña que haya que esperar nuevas
revelaciones..."


Saludos
 
Re: Ahora, quiero continuar mi respuesta a Pino

Re: Ahora, quiero continuar mi respuesta a Pino

Originalmente enviado por: Alfonso
Hola Pino:...

...He transcrito un artículo en que el apóstol de mi congregación (se llama Cristian Romo, y le decimos Cristian :)) narra como llegó a entender el llamado de Dios para su vida, en una próxima intervención pego esas notas. En Chile, que es donde el reside, La iglesia recibe el nombre formal de Servicio para el Desarrollo Cristiano y la congregación de cada ciudad recibe el nombre de Comunidad Cristiana de... Concepción, Antofagasta, Temuco, Iquique o el lugar que sea. En el Perú, el nombre formal es otro, pero guardamos la costumbre de nombrarnos Comunidad Cristiana de... según el lugar en que nos encontremos...

Aquí está el artículo que transcribí:

DESPUES DE 20 AÑOS
Por Cristian Romo Jiménez
Era el otoño de 1971 cuando se convocó a un retiro de pastores en Valparaíso. Había mucha expectativa en todos los asistentes al encuentro, puesto que los siervos de Dios invitados a ministrar la Palabra eran hombres reconocidos y ungidos. Yo vibraba con todo lo que allí estaba aconteciendo. Una de las materias a tratar era un trabajo de Evangelismo que se realizaría a nivel nacional y con todas las denominaciones que estuvieran dispuestas. Después de ver las proyecciones y revisar rodas las implicancias del programa se decidió realizarlo en una primera etapa desde Ñuble a Magallanes y para la coordinación general de este trabajo fui designado en esa oportunidad.
Me sentí muy complacido por esa nueva responsabilidad sin saber lo que se desarrollaría en el tiempo. Se dio inicio a los primeros trabajos de información y capacitación y hasta ahí todo era muy interesante. Cuando llegó el momento de poner manos a la obra, muchos pastores tertocedieron y se encerraron en sus propios planes. Todo eso me fue decepcionando al punto de provocar una crisis en mi vida ministerial. Fue entonces que le pregunté al Señor: ¿Qué pasa con la Iglesia?. Después hice una afirmación nacida de la frustración: "Señor, con esta Ilesia no llegas a ninguna parte". Hasta ese momento yo no podía entender bien que el Señor me estaba tratando personalmente.
Pasó el tiempo y la crisis se acentuó en mí hasta el punto de pedir al Señor que me diera una respuesta a todo lo que estaba enfrentando. Para abreviar la historia, tengo que decir que el Señor se tomó su tiempo y un día estando en una semana de reuniones supuestamente de evangelización fui sorprendido por el Señor al darme la palabra sólo para la Iglesia, cosa que para mí era algo nuevo. Pero ya había decidido empezar a oir al Señor.
Así que al finalizar esa semana, el día Domingo, otra sorpresa, el Señor se me adelantó, y sin que yo tuviera que orar por los enfermos El los sanó y antes que terminara de ministrar la Palabra la gente se entragaba a Jesús. Todo esto me resultaba muy sorprendente, así que esa noche cuando la reunión formal había sido cerrada por el pastor que presidía, de pronto me doy cuenta que nadie se mueve y al contrario algunos empezaban a llorar, otros a abrazarse,otros a hablar en lenguas, etc. Esto es algo extraordinario, pero yo no entendía lo que estaba pasando, así que empecé a orar al Señor y a preguntar lo que estaba sucediendo, mientras se acerca el pastor principal de ese lugar y me dice: hermano estoy muy contento; -a lo que yo pregunto- ¿porqué?, -el me dice- sabe, la congregación estaba a punto de dividirse, pero ahora se están reconciliando. Me dijo esto y se fue a otro lado, yo continué orando; fue entonces cuando el Señor me comienza a hablar y decir: "Asi está la Iglesia, dividida, llena de tinieblas y pretenden evangelizar al mundo que está en tinieblas". Esa palabra me quebró, y ante tal situación le pregunté: Señor ¿qué debo hacer en este caso?. La respuesta fue: "Hay que evangelizar de nuevo a la Iglesia". Todo eso me costó entenderlo; durante varias semanas, oré, lloré, ayuné y busqué dirección del Señor, pero la próxima palabra suya fue: "comienza de nuevo". Tampoco entendí lo que significaba, así que seguí orando hasta que llegó otra palabra: "renuncia a todo". Eso lo hice literalmente, pero aún no encontraba el camino cierto, hasta que finalmente vino otra palabra que decía: "Haz discípulos". En ese punto decidí pedirle al Señor que me diera una nueva claridad de las Escrituras. Fue sorprendente como al poco tiempo esto empezó a suceder. Así que para fines de Agosto de 1972, estaba listo para iniciar una nueva etapa en mi vida.
Al venir la década de los ochenta empezamos a notar que el Espíritu Santo estaba ampliando el horizonte de su obra, de tal manera que la extensión de la visión nueva que el Espíritu Santo traía con relación a Cristo y a su Iglesia, comenzó a ser una realidad, al ir abriéndose en distintos lugares del país focos de recepción de esta visión. Varios siervos de Dios empezaron a abrirse y a ser protagonistas importantes en este obrar del Señor. Uno de ellos, Bolterio Vera, hombre de corazón noble con disposición absoluta de obedecer a Dios. Este siervo de Dios fue uno de los hombres usados por el Señor para extender el Reino de Dios en el norte chileno y sin duda ha dejado un legado muy importante. También en el centro y sur del país estamos viendo cómo el Señor se está moviendo en esta misma dirección.
En estos días que realmente experimentamos vientos refrescantes del Espíritu, vemos un cuadro totalmente distinto a las décadas pasadas. Por un lado vemos el crecimiento numérico y de madurez del pueblo de Dios que está bajo la guía del pastorado que el Señor ha ido levantando tanto en Concepción como en otras ciudades del país; por el otro, experimentamos una nueva perspectiva en cuanto a la unidad de la Iglesia. Es evidente hoy que en casi todas partes el Espíritu Santo está obrando en dirección a una restauración de la Iglesia y en esta ciudad de Concepción vemos con alegría que varios hombres de Dios abren sus corazones al Señor para que él gobierne de una manera diferente a su Iglesia, es decir, como fue diseñada por Dios.
También a partir de fines de la década de los setenta, el Señor nos fue llevando a otras latitudes, como Perú, en donde hoy están surgiendo algunas expresiones del Reino de Dios. Lo mismo en Brasil, donde pude visitar varias ciudades y en algunas de ellas hoy está encendida esta luz del Reino de Dios y el Señorío de Jesucristo en su Iglesia.
Pero no todo era fácil, al volver a Concepción después de que el Señor me convenciera que aquí sería el comienzo de esta nueva experiencia, parecía que los líderes y la congregación a la que el Señor me mandaba volver, no captaron lo que les dije que yo había cambiado y que ahora mi visión de la Iglesia era diferente. Según los líderes y la congregación todo estaba bien. Pero al comenzar a enseñar de nuevo lo que era el Reino de Dios y el Señorío de Cristo la mayoría no soportó y después de oponerse a la palabra de diferentes maneras, se fue el 80% de la congregación alegando que ellos no permitirían que el Reino llegara a sus hogares.
En medio de oposición semejante, el Señor fue forjando mi vida y la de los que empezaron a abrir su vida para que el Gobierno de Dios tomara su lugar. Sin embargo las contrariedades aumentaron en diferentes sectores de la Iglesia, tanto en la ciudad como en el país. Pero el Espíritu Santo ya había afirmado su convicción en mi esposa y en mí, de tal manera que la escuela del Señor se hizo manifiesta, primero en nuestra familia y después en los discípulos que comenzamos a formar.
Mientras el Espíritu Santo obraba entre nosotros cosas trascendentes, también estaba trabajando en otros siervos de Dios; cosa que empezamos a percibir luego. Uno de los pocos hombres que soportó el embate de la oposición almover de Dios, fue Eliacim Verdugo, con quien más tarde nos unimos en una sola comunidad. En esta unión obraba solo el poder de Dios, pues siendo de escuelas teológicas totalmente opuestas, el Espíritu Santo nos llevó a la unidad en la cual caminamos hasta hoy.
La década de los setenta fue difícil pero gloriosa, fue tiempo de definición, no exenta de sufrimiento. Pero sabemos que el camino de la formación es a veces motivo de algunos padecimientos que nuestra carne necesita.


Hay muchas frases de las que originaron tus preguntas anteriores, pero en ningun momento enseñamos que somos la iglesia que debiera ser seguida o la iglesia que reune a los que serán salvos.

Espero que sea interesante

Alfonso
 
Originalmente enviado por: nefitalamanita
Estimada Maripaz,

Pero, ¿quién le dijo que las tres definiciones de la palabra "apóstol" no pueden coexistir...?

La enseñanza bíblica que le estoy tratando de hacer comprender es que bien que existen diferentes definiciones para la palabra "apóstol", estas no se contradicen o se anulan entre sí, y que, así como hubieron personas que llegaron a ser "testigos especiales" de la misión de Jesucristo, el Hijo del Padre, esto no niega la existencia de un grupo especial de 12 hombres llamados por Jesús y dotados con poder y autoridad para actuar en Su nombre, como bien la definición del diccionario lo aclara, y que a demás este Grupo no se disovería con la muerte del Mesías.

Como Ud. puede ver, hay armonía en estas definiciones...

Sin embargo, lo que a mí aún me cuesta comprender es el porqué Ud. continúa creyendo que en la actualidad no hay necesidad de este Grupo especial de 12 hombres, el Grupo de los 12 Apóstoles, para dirigir los asuntos de Dios en la tierra, aclarar doctrina, hablar en el nombre de Jesucristo, etc., existiendo no solamente la enseñanza bíblica apoyando tal necesidad, sino que también las palabras de fuentes externas a este libro, como las del diccionario que Ud. tan gentilmente compartió con todos nosotros...

Me gustaría saber en qué se basa para tal rechazo de las enseñanzas bíblicas...

Si el autodenominado "cristinismo" moderno comprendiese la necesidad bíblica de la existencia del Grupo de 12 Apóstoles, tal como lo instauró Jesucristo con la idea de que permanecira, hoy en día no tendrían el gran problema de ¿Cómo dirigir sus respectivas iglesias o denominaciones?, o ¿a quien acudir para establecer y aclara la doctrina del Reino...? :( :( :(
 
Originalmente enviado por: nefitalamanita
Si el autodenominado "cristinismo" moderno comprendiese la necesidad bíblica de la existencia del Grupo de 12 Apóstoles, tal como lo instauró Jesucristo con la idea de que permanecira, hoy en día no tendrían el gran problema de ¿Cómo dirigir sus respectivas iglesias o denominaciones?, o ¿a quien acudir para establecer y aclara la doctrina del Reino...? :( :( :(



La Iglesia de Cristo es guiada por el Espíritu Santo, que usa los dones que Él mismo ha dado a Su Cuerpo.


¿Por qué hoy no existe un cuerpo de 12 "apóstoles" según el sentido que los mormones desean darle?



El APÓSTOL del N.T. -nos referimos a los Doce y a Pablo-, no pueden tener sucesores por la naturaleza misma de su ministerio.

¿Cuáles son las características que debe reunir un apóstol?

¿Qué credenciales tuvo que presentar Pablo para ser reconocido como tal?

a) Tuvo que probar que había sido llamado por Cristo mismo (Gá. 1:1); Pablo, apóstol (no de hombres ni por hombre, sino por Jesucristo y por Dios el Padre que lo resucitó de los muertos)
b) que no había recibido el Evangelio de otros, sino por revelación directa e inmediata de Cristo mismo (Gá. 1:11-12); Mas os hago saber, hermanos, que el evangelio anunciado por mí, no es según hombre; pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo.
c) que había visto con los ojos físicos al Cristo resucitado (1 Co. 9:1 y 15:8); ¿No soy apóstol? ¿No soy libre? ¿No he visto a Jesús el Señor nuestro?
d) que era inspirado e infalible como maestro (1 Co. 14:37); Si alguno se cree profeta, o espiritual, reconozca que lo que os escribo son mandamientos del Señor.
e) que el Señor garantizaba su misión tan plenamente como la de Pedro o de cualquier otro apóstol (Gá. 2:8, 9), pues el que actuó en Pedro para el apostolado de la circuncisión, actuó también en mí para con los gentiles, y reconociendo la gracia que me había sido dada, Jacobo, Cefas y Juan, que eran considerados como columnas, nos dieron a mí y a Bernabé la diestra en señal de compañerismo, para que nosotros fuésemos a los gentiles, y ellos a la circuncisión.
f) tenía que demostrar con milagros que su llamamiento, su ministerio y su enseñanza eran verdad (2 Co.12:12). Con todo, las señales de apóstol han sido hechas entre vosotros en toda paciencia, por señales, prodigios y milagros.

¿Qué líder religioso es capaz de reunir hoy todos estos requisitos?

¿Quién los ha reunido después de la muerte del último de los apóstoles?

El apóstol es fundamento (Ef.2:20) edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo,
Y el fundamento de una casa se coloca una vez por todas.

La iglesia, edificada sobre este fundamento, es edificio, casa espiritual y piedras vivas (1 P 2:4-10).

Oscar Culíman puntualiza atinadamente: «El apóstol no puede tener sucesores que ocupen su lugar para generaciones futuras, sino que debe continuar él mismo el cumplimiento de su función apostólica en la iglesia de hoy; no por medio de la iglesia misma sino por medio de su palabra (Jn. 17:20), es decir, por medio de sus escritos».
En la perspectiva neotestamentaria, una Iglesia es Apostólica solamente en la medida en que mantiene su fidelidad a los escritos apostólicos del N.T. y no por tener oficiales llamados -impropiamente- «apóstoles».
Todo el testimonio y la enseñanza del N.T. convergen en enseñarnos que los apóstoles no tuvieron sucesores, que el suyo fue un ministerio único, funcional, de fundamento (Efesios 2:20), perpetuo. Este fundamento lo tenemos en las paginas del N.T. La iglesia postapostólica se apoya, debe apoyarse, en este fundamento pero ella no es ya fundamento, sino edificio y casa espiritual.

(Revista Edificación cristiana, autor: José Grau)
 
Es de imaginarse entonces, estimada amiga Maripaz, que las palabras de este señor Grau (?) que Ud. COPIO, para variar..., son el reflejo de su propia forma de pensar y creer en cuanto al tema, y por lo tanto, este es su argumento para decirnos QUE LOS APOSTOLES (EL GRUPO DE LOS 12)"...no pueden tener sucesores...", o sea QUE HOY EN DIA ESTE GRUPO NO PUEDE EXISTIR COMO TAL...

Pues bien aclarada su posición, estimada Maripaz, a través del pensamiento de OTROS, permítaseme analizar y poner al descubierto las debilidades de tal forma de pensar... :D :D
 
Originalmente enviado por: nefitalamanita
Es de imaginarse entonces, estimada amiga Maripaz, que las palabras de este señor Grau (?) que Ud. COPIO, para variar..., son el reflejo de su propia forma de pensar y creer en cuanto al tema, y por lo tanto, este es su argumento para decirnos QUE LOS APOSTOLES (EL GRUPO DE LOS 12)"...no pueden tener sucesores...", o sea QUE HOY EN DIA ESTE GRUPO NO PUEDE EXISTIR COMO TAL...

Pues bien aclarada su posición, estimada Maripaz, a través del pensamiento de OTROS, permítaseme analizar y poner al descubierto las debilidades de tal forma de pensar... :D :D


Las palabras del maestro Jose Grau, ampliamente conocido en todo el mundo evangélico y del que tengo el placer de conocer personalmente y haber recibido clases suyas, me parecen mucho más estudiadas y elaboradas que cualquier argumento que nos traiga aquí de cualquier sectario. No en vano, José Grau es autor de decenas de libros y es muy reconocido.


Con respecto a los apostoles, veamos lo que nos dice uno de los diccionarios bíblicos que poseo:



APÓSTOL


El término gr. apostolos aparece más de ochenta veces en el NT, principalmente en los escritos de Lucas y Pablo. Deriva de un verbo muy común, apostelloµ, enviar, pero en el gr. no cristiano, después de Herodoto en el ss. V a.C., se registran pocos casos de su uso con el significado de “persona enviada” y en general significa “flota” o quizás ocasionalmente “almirante” . El sentido de “enviado, mensajero” puede haber perdurado en el lenguaje popular; por lo menos casos aislados en la LXX y Josefo sugieren que este significado se aceptaba en círculos judíos. Sólo con el advenimiento de la literatura cristiana, sin embargo, adquirió importancia. En el NT se lo aplica a Jesús como el enviado de Dios (He. 3.1), a los enviados por Dios a predicar a Israel (Lc. 11.49), y a los que fueron enviados por las iglesias (2 Co. 8.23; Fil 2.25); pero por encima de todo, se lo aplica en forma absoluta al grupo de hombres que mantuvo la suprema dignidad en la iglesia primitiva. Como apostelloµ parece significar con frecuencia “enviar con un propósito determinado”, a diferencia del neutro pempoµ (excepto en los escritos joaninos, en los que ambos términos son sinónimos), la fuerza de apostolos probablemente sea “alguien que es comisionado” (por Cristo, se entiende).
Se cuestiona el que apostolos represente en el NT un término judío de fuerza técnica similar. Rengstorf, en particular, ha expuesto la teoría de que refleja la voz judía sûaµléÆah\, un representante acreditado con autoridad religiosa, al que se le confiaban mensajes y dinero, y que estaba facultado para actuar en nombre de la autoridad (para esta idea, cf. Hch. 9.2); además, Gregory Dix y otras han aplicado ideas y expresiones relacionadas con el concepto de sûaµléÆah\ (p. ej. “el sûaµliah\ de un hombre es como si fuera él mismo”) al apostolado y, finalmente, al episcopado moderno. Un procedimiento de este tipo está lleno de peligros, especialmente porque no hay claras indicaciones de que se usara el vocablo sûaµléÆah\ en este sentido hasta épocas posapostólicas. En realidad, apostolos bien puede ser más primitivo como término técnico, y sería más seguro buscar su significado en el apostelloµ y tomando como base los contextos en que aparece en el NT.

a. El origen del apostolado
Resulta esencial para la comprensión de todos los evangelios tal como los hemos recibido la elección por Jesús de un grupo de doce hombres tomados de un grupo mayor de sus seguidores, cuyo propósito era el de estar con él, predicar, y tener la autoridad necesaria para curar y exorcizar (Mr. 3.14s). La única ocasión en que Marcos emplea la palabra “apóstol” es en oportunidad del exitoso regreso de los Doce de una misión de curación y predicación (Mr. 6.30; cf. Mt. 10.2ss). Generalmente se lo toma como un uso no técnico (e. d. “los enviados en esta misión determinada”), pero es poco probable que Marcos lo hubiera podido utilizar sin que evocara otras asociaciones. Esta misión preparatoria es una reproducción en miniatura de lo que en el futuro les tocaría en el mundo más amplio. De esta preparación preliminar indudablemente regresan como verdaderos “apóstoles”. No hay nada incongruente, en consecuencia, en que Lucas (que habla de los “apóstoles” en 9.10; 17.5; 22.14; 24.10) declare que Jesús mismo (6.13) les confirió el título (ya en gr. [?]).

b. Las funciones del apostolado
La primera especificación de Marcos en cuanto a la elección de los Doce es que “estuviesen con él” (Mr. 3.14). No es accidental que el punto divisorio del Evangelio de Marcos haya sido la confesión apostólica del mesianismo de Jesús (Mr. 8.29), o que Mateo agregase a esto el dicho de la “Roca” acerca de la confesión apostólica (Mt. 16.18s; * Pedro). La función primaria de los apóstoles era la de testificar de Cristo, y su testimonio estaba basado en años de conocimiento íntimo, experiencias adquiridas duramente, e intensa preparación.
Este es un complemento de su ampliamente reconocida función de testificar sobre la resurrección (cf., p. ej., Hch. 1.22; 2.32; 3.15; 13.31); porque la significación especial de la resurrección está, no en el hecho en sí, sino en su demostración, en el cumplimiento de la profecía, de la identidad del Jesús que fue muerto (cf. Hch. 2.24ss, 36; 3.26; Ro. 1.4). El haber sido testigos de la resurrección de Cristo los convirtió en testigos eficaces de su persona, y él mismo los comisiona para que sean sus testigos en todo el mundo (Hch. 1.8).
Esa misma comisión introduce un factor de profunda importancia para el apostolado: la venida del Espíritu. Es curioso que este hecho haya sido tratado más completamente en Jn. 14–17, evangelio que no utiliza el término “apóstol” para nada. Este es el gran discurso por el que se comisiona a los Doce (apostelloµ y pempoµ se utilizan sin discriminación); la comisión que reciben de Jesús es tan real como la que él recibió de Dios (cf. Jn. 20.21); deben dar testimonio sobre la base de su larga relación con Jesús, mas el Espíritu da testimonio de él (Jn. 15.26–27). Él les recordará las palabras de Jesús (Jn. 14.26), y los guiará a toda la verdad (promesa que a menudo se ha pervertido al extenderse su referencia primaria más allá de los apóstoles) y les hará ver la era que vendrá (de la iglesia) y la gloria de Cristo (Jn. 16.13–15). En el cuarto evangelio tenemos algunos ejemplos de este procedimiento, en los que la significación de las palabras o acciones se recuerda solamente después de la “glorificación” de Cristo (Jn. 2.22; 12.16; cf. 7.39). Vale decir que el testimonio de los apóstoles con respecto a Cristo no quedó librado a sus impresiones o recuerdos, sino a la guía del Espíritu Santo, de quien también es dicho testimonio: hecho de importancia en la valoración del testimonio apostólico que registran los evangelios.
Por ello los apóstoles constituyen la norma en cuanto a doctrina y comunión en la iglesia del NT (Hch. 2.42; cf. 1 Jn. 2.19). En sus propios días se los consideraba “columnas” (Gá. 2.9; cf. C. K. Barrett en Stadia Pualina, 1953, pp. 1ss), que quizás debamos trad. como “postes indicadores”. La iglesia está edificada sobre el fundamento de los apóstoles y profetas (Ef. 2.20; probablemente se refiere al testimonio del AT, pero para el caso vale tamb. si se refiere a los profetas cristianos). Los apóstoles son los asesores en el juicio mesiánico (Mt. 19.28), y sus nombres están grabados en las piedras angulares de la ciudad santa (Ap. 21.14).
La doctrina apostólica, sin embargo, que tiene su origen en el Espíritu Santo, constituye el testimonio compartido de los apóstoles, y no un privilegio de algún individuo en particular. (Para la predicación, tamb. en forma común a todos, cf. C. H. Dodd, The Apostolic Preaching and its Developments, 1936; para el uso del AT en forma común, C. H. Dodd, According to the Scriptures, 1952.) Podía darse el caso, se deduce, de que el principal apóstol traicionase un principio fundamental que él mismo ya hubiera aceptado, y que fuese corregido por un colega (Gá. 2.11ss).
Los autores de los evangelios sinópticos, como ya hemos notado, consideran el episodio de Mr. 6.7ss y par. como una representación en miniatura de la misión apostólica, y se incluían las tareas de curar y exorcizar, tanto como la de predicar. La facultad de curar, y otros dones espectaculares, como la profecía y las lenguas, reciben corroboración abundante en la iglesia apostólica, y están relacionados, como el testimonio apostólico, con la dispensación especial del Espíritu Santo; pero, extrañamente, faltan totalmente en la iglesia del ss. II; los escritores de la época hablan de ellos como cosas del pasado, o sea de la era apostólica, justamente (cf. J. S. McEwan, SJT 7, 1954, pp. 133ss; B. B. Warfield, Miracles Yesterday and Today, 1953). Incluso en el NT no vemos señales de la manifestación de estos dones, excepto en los casos en que intervienen los apóstoles. Aun cuando haya habido previamente una fe genuina, es únicamente en presencia de los apóstoles que se manifiestan estos dones del Espíritu Santo (Hch. 8.14ss; 19.6; los contextos indican que se trata de fenómenos visuales y auditivos).
Por contraste, el NT tiene menos que decir que lo que podríamos esperar en cuanto a los apóstoles como dirigentes de la iglesia. Constituyen el criterio de prueba de la doctrina, son los proveedores de la auténtica *tradición acerca de Cristo: delegados apostólicos visitan las congregaciones que reflejan nuevas orientaciones para la iglesia (Hch. 8.14ss; 11.22ss). Pero los Doce no nombraron a los siete; el concilio de Jerusalén (que fue tan decisivo) estaba formado por un gran número de ancianos, además de los apóstoles (Hch. 15.6; cf. 12, 22); y dos apóstoles colaboraron con los “profetas y maestros” de la iglesia de Antioquía (Hch. 13.1). La administración o gobierno de la iglesia dependía de un don distintivo (1 Co. 12.28), normalmente ejercido por ancianos locales; los apóstoles eran, en virtud de su mandato, elementos móviles. Tampoco ocupaban un lugar prominente en la administración de los sacramentos (cf. 1 Co. 1.14). La identidad de funciones que algunos ven entre el apóstol y el obispo del ss. II (cf. K. E. Kirk en The Apostolic Ministry, pp. 10) de ninguna manera resulta obvia.

c. Requisitos
Resulta evidente que el requisito esencial de un apóstol es el llamamiento divino, la comisión dada por Cristo. En el caso de los Doce, esta les fue encargada durante su ministerio terrenal. Pero no es menos evidente este sentido de la comisión divina en el caso de Matías: Dios ya ha elegido al apóstol (Hch. 1.24), aun cuando todavía no se conoce su elección. No se menciona ningún acto de imposición de manos. Se supone que el apóstol será alguien que haya sido discípulo de Jesús desde la época del bautismo de Juan (el “principio del evangelio”) hasta la ascensión. Sera alguien que tenga conocimiento del curso completo que siguieron el ministerio y la obra de Jesús (Hch. 1.21–22). Y, naturalmente, debe ser específicamente testigo de la resurrección.
Pablo insiste igualmente en que fue comisionado directamente por Cristo (Ro. 1.1; 1 Co. 1.1; Gá. 1.1, 15ss). De ningún modo deriva su autoridad de los otros apóstoles; al igual que Matías, fue aceptado por ellos, no nombrado por ellos. No llenaba las condiciones de Hch. 1.21s, pero la experiencia en el camino a Damasco fue resultado de una de las apariciones vinculadas con la resurrección (cf. 1 Co. 15.8), y por ello podía afirmar que había “visto al Señor (1 Co. 9.1); por lo tanto era testigo de la resurrección. Tenía conciencia de que su pasado –como enemigo y perseguidor más bien que como discípulo– era diferente del de los otros apóstoles, pero se cuenta a sí mismo como uno de ellos y los relaciona con su propio evangelio (1 Co. 15.8–11).

d. El número de apóstoles
“Los Doce” es la designación normal de los apóstoles en los evangelios, y Pablo lo utiliza en 1 Co. 15.5. El acierto del simbolismo es evidente, y reaparece en lugares tales como Ap. 21.14. El episodio de Matías está relacionado con la necesidad de rehacer el número de los Doce. Pero también resulta igualmente clara la seguridad que tiene Pablo en cuanto a su propio apostolado. Además, hay instancias en el NT en las que, prima facie, otros, fuera de los Doce, también parecen haber recibido este título. Jacobo, el hermano del Señor, aparece como tal en Gá. 1.19; 2.9, y, aunque no había sido discípulo (cf. Jn. 7.5), fue objeto de una aparición privada y personal posterior a la resurrección (1 Co. 15.7). A Bernabé se le llama apóstol en Hch. 14.4, 14, y Pablo lo incluye en una discusión que niega diferencia cualitativa alguna entre su propio apostolado y el de los Doce (1 Co. 9.1–6). A *Andrónico y Junias, por otra parte desconocidos, probablemente se les llama apóstoles en Ro. 16.7, y Pablo, siempre cuidadoso con el uso de los pronombres personales, posiblemente llama así a Silas en 1 Ts. 2.6. Evidentemente los enemigos de Pablo en Corinto pretendían ser “apóstoles de Cristo” (2 Co. 11.13).
Por otra parte, algunos argumentan insistentemente que el título debe limitarse a Pablo y los Doce (cf., p. ej., Geldenhuys, pp. 71ss). Esto significaría darle un valor secundario (“mensajeros acreditados de la iglesia”) al término “apóstoles” en Hch. 14.14 y Ro. 16.7, y explicar de otra manera el lenguaje de Pablo con respecto a Jacobo y Bernabé. Algunos han echado mano a recursos aun más desesperados, y sugieren que Jacobo reemplazó a Jacobo hijo de Zebedeo de la misma manera en que Matías reemplazó a Judas, o que, obrando con exceso de premura, Matías fue colocado erróneamente en el lugar que Dios había destinado a Pablo. El NT no ofrece ni la más remota insinuación de tales ideas. Cualquiera sea la explicación, parecería que lo mejor es aceptar que al principio hubo apóstoles fuera de los Doce. El propio apostolado de Pablo contradice cualquier teoría más restrictiva, de modo que habría lugar al lado de él para otros que pueden haber sido llamados por Dios a su servicio. Podríamos ver un indicio de esto en la distinción entre “los Doce” y “todos los apóstoles” en 1 Co. 15.5, 7. Pero todo sugiere que el apóstol debía ser testigo de la resurrección, y la aparición a Pablo después de la resurrección fue evidentemente excepcional. El que, como han sugerido escritores antiguos, algunos de los que posteriormente fueron llamados “apóstoles” hayan pertenecido a los setenta que envió a predicar nuestro Señor (Lc. 10.1ss), es otro asunto. Queda fuera de toda duda la significación especial de los Doce para el establecimiento inicial de la iglesia.

e. Canonicidad y continuidad
Implícito en el apostolado está la comisión de ser testigos, mediante palabras y señales, del Cristo resucitado y de su obra consumada. Este testimonio, basado en la experiencia única del Cristo encarnado, y dirigido por una dispensación especial del Espíritu Santo, proporciona la auténtica interpretación de Cristo, y desde entonces ha sido determinante para la iglesia universal. Por su misma naturaleza dicho ministerio no podía repetirse ni trasmitirse, así como no podrían trasmitirse las experiencias históricas subyacentes a los que nunca habían conocido al Señor encarnado, o no fueran objeto de una aparición posterior a su resurrección. Los orígenes del ministerio cristiano y la cuestión de la sucesión en la iglesia de Jerusalén escapan al cometido de este artículo; pero, si bien el NT nos muestra que los apóstoles se ocupaban de que existiese un ministerio local, no hay indicios de la trasmisión de las funciones característicamente apostólicas a ningún integrante de dicho ministerio.
Tampoco era necesaria tal trasmisión. El testimonio apostólico se mantuvo en la obra perdurable de los apóstoles, y en lo que adquirió carácter nonnativo para las épocas posteriores, o sea su forma escrita en el NT (véase Geldenhuys, pp. 100ss; O. Cullmann, “The Tradition”, en The Early Church, 1956). No se ha hecho sentir la necesidad de una renovación de esta función, ni de sus dones especiales. Se trataba de una función vinculada con la colocación de los fundamentos, y desde entonces la historia de la iglesia constituye a superestructura. (* Obispo; * Tradición )
Bibliografía.K. Rahner, Sacramentum mundi, t(t). I, 1972; H. Fries, Conceptos fundamentales de la teología, t(t). I, 1966; D. Muller, “Apóstol”, °DTNT, t(t). I, pp. 139–146.
K. H. Rengstorf, TDNT 1, pp. 398–447; J. B. Lightfoot, Galatians, pp. 92ss; K. Lake en BC, 5, pp. 37ss; K. E. Kirk (eds.), The Apostolic Ministry², 1957, esp. los ensayos 1 y 3; A. Ehrhardt, The Apostolic Succession, 1953 (véase el cap(s). 1 para una mordaz crítica de Kirk) ; J. N. Geldenhuys, Supreme Authority, 1953; W. Schneemelcher, etc., “Apostle and Apostolic”, en New Testament Apocrypha, eds. E. Hennecke, W. Schneemelcher, R. McL. Wilson, 1, 1965, pp. 25–87; C. K. Barrett, The Signs of an Apostle, 1970; R. Schnackenburg, “Apostles before and during Paul’s time”, en Apostolic History and the Gospel, eds. W. W. Gasque y R. P. Martin, 1970, pp. 287–303; W. Schmithals, The Office of Apostle in the Early Church, 1971; J. A. Kirk, “Apostleship since Rengstorf: Towards a Synthesis”, NTS 21, 1974–5, pp. 249–264; D. Müller, C. Brown, NIDNTT 1, pp. 126–137.
A.F.W.





Douglas, J. D., Nuevo Diccionario Biblico Certeza, (Barcelona, Buenos Aires, La Paz, Quito: Ediciones Certeza) 2000, c1982.