Sobra decir, aunque realmente nunca "sobra", que la Iglesia es UNA. Las denominaciones son para muchos cristianos corrientes o concrecciones de la vida congregada de la Iglesia de Cristo. Usando dos terminologías jurídicas, podríamos decir que sólo existe una sociedad cristiana, una socciestas christiana y varias agrupaciones o comunidades cristianas. Esta al menos, suele ser la visión protestante de este fenómenos, aunque para mantener una necesaria objetividad en lo que quiero que sea un esfuerzo por aclarar a todos el denominacionalismo, también voy a incluir la doctrina católica de la Iglesia.
De este modo podemos decir que la multiplicidad de denominaciones se puede describir (no explicar) del siguiente modo:
a) La Iglesia es Una, y las distintas denominaciones con mayor o menor suerte de conformidad al evangelio, son distintas parecelas o congregaciones de cristianos entorno a una serie de vivencias o experiencias comunes de la fe cristiana, creencias o formas de organizarse. Esto no implica que muchas comunidades ya no sean cristianas pese a llamarse así, pues no se predica o enseña el evangelio en ellas.
b) La Iglesia Una, y la mía es la que es la titular de esa unidad, es decir, es mi denominación la Iglesia, los demás grupos cristianos son corrientes eclesiales que no retienen la plenitud de los medios de salvación, la plenitud de la doctrina verdadera, el sacerdocio, etc... pero son cristianos por el bautismo y pueden ser salvos y santos por la misericordia de Dios. Son hermanos separados. Esto no implica que muchas comunidades ya no sean cristianas pese a llamarse así, pues no se predica o enseña el evangelio en ellas.
Aclarado ésto presento un árbol denominacional para poder simplificar lo que muchos ven como un caos en el cristianismo. Realmente se puede organizar este caos, y es lo que intento defender en este tema que he abierto.
De este modo podemos decir que la multiplicidad de denominaciones se puede describir (no explicar) del siguiente modo:
a) La Iglesia es Una, y las distintas denominaciones con mayor o menor suerte de conformidad al evangelio, son distintas parecelas o congregaciones de cristianos entorno a una serie de vivencias o experiencias comunes de la fe cristiana, creencias o formas de organizarse. Esto no implica que muchas comunidades ya no sean cristianas pese a llamarse así, pues no se predica o enseña el evangelio en ellas.
b) La Iglesia Una, y la mía es la que es la titular de esa unidad, es decir, es mi denominación la Iglesia, los demás grupos cristianos son corrientes eclesiales que no retienen la plenitud de los medios de salvación, la plenitud de la doctrina verdadera, el sacerdocio, etc... pero son cristianos por el bautismo y pueden ser salvos y santos por la misericordia de Dios. Son hermanos separados. Esto no implica que muchas comunidades ya no sean cristianas pese a llamarse así, pues no se predica o enseña el evangelio en ellas.
Aclarado ésto presento un árbol denominacional para poder simplificar lo que muchos ven como un caos en el cristianismo. Realmente se puede organizar este caos, y es lo que intento defender en este tema que he abierto.