Re: Me presento.
Cierto es lo que dices, a final de cuentas es desición personal. Si estoy de acuerdo en analizarlo, no estoy cerrado a ningun dialogo... Así que tu propon el tema del que quieres hablar, para hacer esto mas facil y entrando en las reglas de un debate biblico, desempolvare mi biblia y pondre las sitas tal cual.
Bueno, en vista de que también deseas entrar en una charla o debate conmigo al igual que yo, me gustaría proponer lo siguiente:
- Veremos el Nuevo Testamento (desde Mateo hasta Apocalipsis) como un registro histórico SIMPLEMENTE en el estudio. Es decir, la teología, filosofía, etc están fuera. No deseo por ahora afirmar la "Inspiración Divina" del NT, sino su veracidad y confiabilidad como un registro histórico.
- Cuando haga una referencia a algo o alguien, citaré no solo el dicho, sino también la fuente para hacer disponible la información a los que leen. Si es posible citaré fuentes en la web (internet) de uso público.
- Tendremos varios días para inverstigar y contestar las questiones si es que no tenemos los materiales a la mano. Yo personalmente lo haré en uno o dos días a más tardar.
- El tema del debate es este (puedes opinar lo contrario): La Confiabilidad del Nuevo Testamento como Registro Histórico (de un 99-99.5%)
Te presentaré tres evidencias para verificar su confiabilidad (cosa que al parecer tú dudas):
a. Evidencia Bibliográfica
b. Evidencia de origen interno (NT).
c. Evidencia de origen externo (otras fuentes tempranas del siglo I).
De antemano declaro que haré varias traducciones del inglés cuando haga referencias. También que la exposición será mia (no haré COPY/PASTE), pero he de acudir a otras fuentes profesionales para reafirmar lo que digo.
Si alguien interviene, contestaré la cuestión como refiriendome a tí mismo.
Si me puedes afirmar que la evidencia existente muestra exactamente lo que afirmo, entonces podemos ir a otro tema, siempre que esté relacionado con cosas que tanto tú y yo podamos estudiar sin envolver argumentos teológicos o filosóficos. Estos dos últimos son muy relativos para poderlos estudiar abiertamente.
Saludos
No sé si estás de acuerdo, pero ahora mismo presento corrabaración para la primer Prueba (a):
Entre los argumentos más presentados entre los escépticos sobre la veracidad e historicidad de la Escritura, están:
- El gran periodo de tiempo existente entre la copia más temprana y el original del Nuevo Testamento.
- La supuesta ausencia de corroboración arqueológica
- La ausencia de corroboración a través de fuentes externas.
Entre algunos de los ejemplos están:
a. El crítico alemán F.C. Baur, quien en 1844 argumentaba que el Evangelio de Juan era una síntesis del cristianismo de Pedro y Pablo, y que este Evangelio debía ser fechado a después del 160 D.C.
b. Richard Dawkins, quien afirma en su libro The God Delusion (pág. 92-93) que los libros canónicos fueron escritos mucho después de la muerte de Jesús.
Esto es absurdo, ya que la copia más temprana es de alrededor del año 98 D.C. y para ello hemos de probar el documento basado en tres cosas: Las evidencias bibliográficas, las internas y las externas.
C. Sanders, historiador militar, enumera los tres principios básicos de la historiografía: La prueba bibliográfica, la prueba de las evidencias internas y la prueba de las evidencias externas. (C. Sanders, Introduction to Research in English Literary History, New York: Macmillan Company 1952, pág 143)
Me gustaría primeramente analizar esta prueba. Contestaré cualquier duda siempre y cuando esté a mi dispisición.
La pregunta con la que se debe analizar esta prueba es:
¿Se puede confiar que el texto existente es lo más cercano al original?
Aunque no se conservan los textos originales, a través de las copias existentes se puede verificar lo cercano que estamos de éste. El Nuevo Testamento cuenta con el número más considerable de copias existentes que cualquier otro escrito antiguo. Tan sólo en griego se cuentan con unas 5,700 copias (5,664 según Bruce M. Metzger) existentes, y juntas con otras copias como las de latín (miles tan solo de la Vulgata Latina [366-384 D.C.]) dan el impresionante total de más de 20,000 (Bruce M. Metzger, citado por Lee Strobel en “The Case for Christ”, Gran Rapids: Zondervan 1998, pág. 63, hace un cálculo de 24,000).
De las referencias que hacen algunos Padres de la Iglesia a las Sagradas Escrituras de entre principios del siglo II y a principios del siglo IV obtenemos un total aproximado de 36,359.
La copia griega más temprana existente data tan solo a unas décadas después del original. Un clarísimo ejemplo es el papiro P52.
- Papiro P52 : Mide 3.5 pulgadas de largo y 2.5 de ancho, con 7 lineas en cada lado. Contiene porciones de Juan 18:31-33 en un lado, y de Juan 18:37-38 en el otro. Es un papiro que data entre el 100–150 D.C. y fue encontrado en Egipto en 1920 por Bernard P. Grenfell (aunque fue hasta 1934 que Colin H. Roberts lo redescubrió entre archivos e hizo público).
Paleógrafos como Adolph Deissman, Sir Harold Bell, Ulrich Wilcken, W.H.P. Hatch lo datan entre el 117-138 D.C. o incluso entre el 98-117 D.C.
Sobre esta temprana evidencia, Sir Frederic Kenyon, director del museo Británico comenta:
El intervalo entre las fechas de la composición original y la más primitiva evidencia existente es tan pequeño que, verdaderamente, es insignificante. De modo que, el último bastión para dudar en cualquier forma de que las Escrituras nos han llegado tal como fueron escritas, ha sido destruido. Tanto la autenticidad como la integridad general de los libros del NT pueden considerarse como definitivamente establecidas. (Frederic Kenyon, The Bible and Archaeology, New York: Harper and Row 1940, pág. 288-289) Tambiéd dice:
En ningún otro caso el intervalo de tiempo entre la composición del libro y la fecha del manuscrito más temprano es tan corto como el del Nuevo Testamento. (Frederic Kenyon, Handbook to Textual Criticism of the New Testament, New York: Macmillan 1912, pág 33)
Actualmente el papiro se encuentra en John Rylands Library, Manchester, England (Rylands Greek Papyrus 457, P52). Sobre este ejemplo en particular se debe mencionar que ésta es una copia y que fue encontrada en Egipto, cientos de millas de Éfeso donde originalmente fue escrito.
- Papiro Bodmer II: El Papyrus Bodmer II, o también P66, es fechado entre el 150 al 200 D.C. consiste de 75 páginas y 39 fragmentos sin identificar. Estaba probablemente formado originalmente de 39 hojas de papiro, envueltas y organizadas en pliegos que formaban 78 hojas y 156 páginas. Su forma es rectangular y mide 6.4 pulgadas de alto por 5.6 de ancho.
- Papiro 75 o Bodmer XV (P75): Este papiro con 51 hojas sobrevivientes, contiene a Lucas y Juan casi en su totalidad. Las páginas eran originalmente de aproximadamente10.2 pulgadas por 5.1 y están bien preservadas. Cada página está escrita en una sola columna de 38 a 45 lineas y cada linea tiene 25 a 36 letras. Las páginas no están enumeradas. El tipo de escritura es claramente uncial, la cual cuando es comparada con otros papiros data al manuscrito entre mas o menos 175 y 225 D.C.
- El Papiro Magdalen o Gregory-Alan P64: Fue comprado en Luxor, Egipto, en 1901 por el reverendo Charles Bousfield Huleatt (1863-1908), quien identifico los fragmentos griegos como porciones del Evangelio de Mateo (Capítulo 26) y los presento al colegio Magdalen (Magdalen College), Oxford, en donde están catalogados como P. Magdalen Greek 17 (Gregory-Aland P64) y de donde han obtenido su nombre. Fueron finalmente publicados por Colin H. Roberts en 1953, y el concenso general lo data en el 200 D.C (se han hecho intentos en 1994 por fecharlos a finales del siglo I D.C.) Están escritos en ambos lados, lo que prueba conclusivamente que vinieron de un “código o codex” y no de un rollo.
Más fragmentos, publicados en 1956 por Ramón Roca-Puig (catalogados como P. Barc. Inv. 1 [o Gregory-Aland P67]), han probado ser de la misma fuente que los fragmentos del papiro Magdalen, algo que el concenso general acepta. En total se han encontrado cinco fragmentos, 3 de ellos están en Magdalen College, Oxford, y los otros 2 en Fundación San Lucas Evangelista, Barcelona. Las traducciones correspondientes son Mateo 26:7-8, 10, 14-15, 22-23, 31, 32-33.
- Existen papiros como el Chester Beatty Biblical que fueron descubiertos en 1930 y datan del año 155 D.C (algunos lo ponen entre el siglo II y III). El primero contiene porciones del Libro de Hechos y de los 4 Evangelios (número 1 o P45). El número 2 o P46 tiene porciones de 7 u 8 Cartas de Pablo y de Hebreos. El último (número 3) contiene secciones de Apocalipsis.
Hay muchísimos otros ejemplos de documentos existentes que atestan la exactitud textual entre el Nuevo Testamento existente y el original de ser entre aproximadamente 95 y 99.5%.
El siguiente documento en la lista de “abundantes”, es la Ilíada de Homero con 643 copias (“
menos de 650 manuscritos griegos” reafirma Bruce M. Metzger a Lee Strobel (“The Case for Christ”, Gran Rapids: Zondervan 1998, pág 60) que datan ni mas ni menos 1,000 años depués de él.
Los libros históricos de Tácito no son abundantes. Los primeros 6 existen en tan solo una copia del año 850 D.C. varios siglos después de él. Del 11 al 16 también solo se conserva una copia. Del 7 al 10 están perdidos.
Las copias de los escritos de Josefo son del siglo X, XI y XII, varios siglos más tarde.
Autor---------Fecha------------Copia Más------------Tiempo Aproximado
-------------Escrita------------ Temprana---------- Entre Copia Y Original
Plinio.......... 61-113 D.C............. 850 D.C............. 750 años
Platón..........427-347 A.C...........900 D.C........... 1200 años
Heródoto 480-425 A.C................ 900 D.C........... 1300 años
Josefo.... Entre 37-100 D.C......... 1000 D.C.......... 900 años
Tácito.... Entre 55-120 D.C......... 850 D.C............750 años
Ilíada de Ho...800 A.C................ 100-200 D.C.......1000 años
NT............ 50-90 D.C................98-150 D.C.... Entre 10 y 100 años
Acontinuación hay una lista de las otras versiones bíblicas en otros idiomas:
1. Versiones Siríacas:
- Peshitta Siríaca, traducida entre el 150-250 d.C. Existen más de 350 manuscritos que datan del siglo quinto.
- Siríaca Palestina (400-450 d.C.)
- Philoxenian (508 d.C.)
- Siríaca Harkleian (616 d.C.)
2. Versiones Latinas:
- Latín Antiguo Africano (Codex Babbiensis 400 d.C)
- Codex Corviensis (400-500 d.C)
- Codex Vercellensis (360 d.C)
- Codex Palatinus (500-600 d.C.)
- Vulgata Latina (traducida por Jerónimo [366-384 d.C.])
3. Copto (Versiones Egipcias):
- Sahidic (200-250 d.C)
- Bohairic (Cuarto Siglo)
- Middle-Egyptian (Entre IV-V d.C)
4. Otras Traducciones:
- Armenio (400 d.C.)
- Gótico (Siglo IV)
- Georgian (Siglo V)
- Etíope (Siglo VI)
- Nubiano (Siglo VI)
Algunos académicos reconocidos comentan:
J. Harold Greenlee, erudito en griego del Nuevo Testamento:
Puesto que los eruditos aceptan como generalmente fidedignos los escritos de los antiguos clásicos, aunque sus manuscritos más antiguos fueron escritos muchísimo después que los originales, y el número de manuscritos existentes es en muchos casos mínimo, queda claro que la fidelidad del texto del Nuevo Testamento está igualemente confirmada (J. Harold Greenlee, Introduction to New Testament Textual Criticism, Grand Rapids: William B. Eerdmans Publishing Company 1964, pág 16)
F. F. Bruce, profesor eminente de la universidad de Manchester, England:
Ningún erudito en literatura clásica estaría dispuesto a escuchar el argumento de que la autenticidad de Herodoto o de Tucídides sea puesta en duda por el hecho de que los manuscritos más primitivos de sus obras que podemos leer fueron escritos 1300 años después de escritas las obras originales (F. F. Bruce, The New Testament Documents: Are They Relialble?, Downers Grove, Illinois: InterVarsity Press 1964, pág 16-33) También reafirma:
No hay ningún cuerpo de litaratura antigua en el mundo que disfrute de tanta riqueza de atestación textual como el Nuevo Testamento (F. F. Bruce, The Books and the Parchments, New York: Revell 1963, pág 178)
William F. Albright, historiador destacado mundial:
Solo los críticos modernos, que carecen de método y perspectiva histórica, pueden tejer una red especulativa como aquélla con la que los Críticos de la Forma han rodeado la tradición del Evangelio... un período de 20 a 50 años es tan insignificante que no permite ninguna corrupción apreciable del contenido esencial, ni siquiera de las palabras específicas de las declaraciones de Jesús (William F. Albright, From the Stone Age to Christianity, Segunda Edición, Baltimore: John Hopkins Press 1946, pág 297-298)
Tambien:
Podemos afirmar con absoluta seguridad que ya no hay ninguna base sólida para determinar el tiempo en que se escribió el Nuevo Testamento en fecha posterior al año 80 d C. Esto quiere decir que fue escrito dos generaciones antes de las fechas indicadas por los críticos contemporáneos más radicales del Nuevo Testamento, las cuales son los años 130 y 150. (William F. Albright, Recent Discoveries in Bible Lands, New York: Funk and Wagnalls 1955, pág. 136). Este prominente personaje reitera:
En mi ipinión, cada uno de los libros del Nuevo Testamento fue escrito por un judío bautizado entre el año 40 y 80 del primer siglo D.C. Es muy probable que haya ocurrido entre el año 50 y 75 (Christianity Today, Vol VII, 18 de Enero de 1963, pág 3)
Paul L. Maier, profesor de historia antigua en la Universidad de Occidente dice:
Los argumentos según los cuales el cristianismo creó su mito de la resurrección a lo largo de un periodo de tiempo, o que los documentos originales fueron escritos muchos años después del acontecimiento, simplemente no son objetivos (Paul L. Maier, First Easter: The True and Unfamiliar Story, New York: Harper and Row 1973, pág. 122).
Como había dicho anteriormente, la historia eclesiástica también registra mucho sobre el Nuevo Testamento.
Aún si no existiera NINGÚN manuscrito bíblico de los miles que existen, sería posible construir lo que estos dicen basados simplemente en las tantas referencias que se hacen a ellos a través de los Padres de la Iglesia.
Daniel B. Wallace, autor del libro crítico Reinventing Jesus “contra” Bart D. Ehrman (Misquoting Jesus), miembro de la prestigiosa Studiorum Novi Testamenti Societas comenta:
Los antiguos Padres de la Iglesia citaron tan seguido del Nuevo Testamento que sería posible reconstruir casi todo el Nuevo Testamento por completo de sus escritos. (The Case For The Real Jesus, Lee Strobel, Grand Rapids: Zondervan 2007, pág 83)