Re: Elena G. de White, mensajera del Señor
Estimado Manuel5. Saludos cordiales.
Te agradezco tu escrito sobre la Ciencia Cristiana y su fundadora,
vemos que a pesar de tus claras intenciones de hacerla parecer similar a Ellen White (
para desprestigiarla), ¡no tiene nada de parecido esa
“voz quieta y delicada” con el papel que desempeñó
“la pluma inspirada”!
Tu dices:
Ahora nos comentas: “No se olviden de estudiar a diario NUESTRO LIBROPuede que sea "una luz menor"
.....
(Hasta aquí llegó cuanto leí y subrayé)
...
...No me pregunten nada más sobre la "Ciencia cristiana" que más...no se.
...
...Saludos a todos.” (Manuel5)
Respondo: Ese
“no se” revela claramente tu “saber”
(¿ignorancia?), ¡
y es el darle una nueva interpretación a la “profecía bíblica” como son tus oscuras pretenciones!
Manuel5 dice:
“Este tema ya se ha tratado en estos Foros varias veces y...ya sabes la respuesta: No existe razón ninguna para decir que el 538 pasó lo que quieren los adventistas que pasara. De ello no te puedes basar en Apocalipsis para determinar la fecha 538 a.C
Respondo: ¡Te equivocas nuevamente Manuel5!, lee por favor:
Justiniano deseaba reconquistar la parte occidental del antiguo imperio. Su deseo era que
Roma recuperase el terreno perdido. Por lo tanto,
un punto importante en su agenda era recuperar la ciudad de Roma, entonces bajo el dominio de los ostrogodos. Por ello se unió con el papa romano y lo constituyó cabeza de todas las iglesias cristianas. Finalmente, en el 538 los ostrogodos fueron expulsados, pero ello a la postre significó una victoria para las pretensiones de la curia romana. Roma Imperial nunca volvió a existir.
Tú sabes que el Imperio Romano estaba desintegrado, pero el emperador Justiniano aún controlaba la parte oriental del imperio (Constantinopla), al mando de la tribu de los lombardos. Su poder era evidentemente político, pero tenía nexos evidentes con la curia romana.
Esto se corrobora porque en el año 533,
el obispo de Roma fue constituido cabeza de todas las iglesias cristianas mediante un decreto del emperador Justiniano (Codex Justinianus). Sin embargo, el cumplimiento de dicho decreto tuvo algunas complicaciones.
En primer lugar,
los hérulos, los vándalos y los ostrogodos se opusieron a las pretensiones del papado y, por lo mismo, a este decreto.
Justiniano aliado con el Papa de Roma, decidieron destruir a sus opositores,
con la excusa de que rehusaban a convertirse en "cristianos". La alianza de Justiniano con el papado dio origen a un nuevo poder, que era DIFERENTE de los otros 9 reinos. Era diferente en su naturaleza político-religiosa. Este estilo de poder fue denominado "cesaropapista".
De esta manera, el ejército del emperador Justiniano, en cooperación con el papa, fue venciendo sucesivamente a estos tres reyes:
* A los Hérulos, en 439 DC
* A los Vándalos, en 533-534 DC, y finalmente
* A los Ostrogodos, en 538 DC.
Ahora
¿por qué Justiniano se alió con el papa romano? Tal vez sería bueno ir un poco más atrás en la historia.
Constantino, el primer emperador cristiano, desocupó la ciudad de Roma haciendo pasar la sede del imperio a Constantinopla, la nueva capital que él estableció en la zona que hoy corresponde a Turquía. Se decía al principio que el imperio tendría dos capitales (Roma y Constantinopla), pero en realidad nunca fue así.
El occidente quedó con un tremendo vacío de autoridad, y el resultado se vio muchas veces en el desorden y la anarquía.
Por eso fue que el emperador Justiniano promulgó el decreto mediante el cual se nombraba jefe de la iglesia al obispo de Roma.
Sin embargo, como esa ciudad estaba en manos de los ostrogodos y no era posible poner en práctica inmediatamente ese decreto, el emperador envió a dos de sus mejores generales: Belisario y Narsés, para librar a Roma de los ostrogodos. No fue fácil, pero al fin,
en el año 538, el obispo de Roma pudo ascender a su trono con el respaldo del general Belisario. En realidad, el papa Virgilio compró el trono pontificio a Belisario.
Justiniano se alió con el papado (unión de la iglesia con el estado); en segundo lugar, que el objetivo de dicha unión fue establecer al papa de Roma como la cabeza de todas las iglesias cristianas; y en tercer lugar, que ello se hizo efectivo en el año 538 cuando los ostrogodos fueron expulsados de la ciudad de Roma.
Fue la derrota y expulsión de los Ostrogodos, por el general de Justiniano, Belisario, el evento que selló la preponderancia política de la Roma papal, porque la estableció como el centro del cristianismo, apoyado por el poder político.
Sobre la pregunta de si el papa romano efectivamente controlaba la iglesia en otros lugares distintos y lejanos, veremos que incluso podían imponer sus rituales litúrgicos:
"
El papa Virgilio en el año 538, poco después de ser hecho obispo de Roma escribió al obispo de Braga, Profuturus, describiéndole las ceremonias romanas. Un concilio celebrado en Braga al mismo año decidió adoptar el ritual de Roma para la provincia de Galicia, entonces bajo el poder de los Suevos."
Fuente: Sobre Esta Piedra (libros en línea sobre catolicismo). Los Concilios - Apéndice.
http://www.sobreestapiedra.com/libros/concilios/apendice_02/apendice_02.rtf
Como vemos, la religión trascendía las fronteras políticas.
Sobre la expulsión de los Ostrogodos en el año 538, hay algunas fuentes no adventistas, como por ejemplo, la siguiente página de la iglesia Universal de Jesucristo (en portugués):http://www.iujc.pt/COMPR/3/umbigo.html
Y también, por la iglesia de Dios Israelita:http://www.iglesiadedios-israelita.org/j-a-s-99.html
Manuel5 dice:
“El auténtico golpe al Papa (Papado) se lo dió Garibaldi en el año 1.860, despojándole de todo poder terrenal = Estados Pontificios. NO EN EL 1.798.”
Respondo:
La suplantación temporal del gobierno papal, ocurrida en febrero de 1798, cuando el papa Pío VI fue desterrado de Roma (la entrada del mariscal francés Berthier en Roma fue el día 10, el destronamiento de Pío el día 15, y el anciano papa fue sacado de la ciudad el día 20), fue proclamada por los intérpretes de las profecías, en ambos lados del Atlántico, como la terminación obvia de los 1.260 años.
Varios escritores reconocieron esto y lo proclamaron como otro progreso trascendental en la interpretación.
Ahora pasamos al segundo punto de
“La Ciencia Cristiana”
“
Por que se levantarán falsos Cristos y falsos profetas; y darán señales grandes y prodigios de tal manera que engañarán, si es posible, aun a los escogidos” S. Mateo 24: 24.
“El espiritismo moderno es evidentemente la obra de espíritus seductores y mentirosos. Muchos de los devotos de esta grande delusión han mantenido que las predicciones de la segunda venida de Cristo fueron cumplidas en la diseminación de las doctrinas del espiritismo.
Los espiritistas, casi universalmente, niegan la expiación de Cristo, y enseñan que cada hombre es su propio salvador. Alguno de los apóstoles dice:
“Habrá entre vosotros falsos enseñadores, que introducirán encubiertamente herejías de perdición, y negarán al Señor que los rescató, trayendo sobre sí mismos acelerada perdición.” 2 Pedro 2: 1. Los espiritistas han dicho que ellos mismo eran el Cristo.- que todos los hombres buenos son Cristo.
Nos invitan a sus secretas “seances” pero Cristo nos ha dicho de antemano:
“Si os dijeren: He aquí está en las cámaras; no creáis.”
También
“Christian Science”, la Ciencia Cristiana,
nos está presentada como la segunda venida de Cristo. Un escritor en el “Christian Science Journal” de octubre de 1897, al referirse al hecho de que había la expectación en la mente de muchos que Cristo había de venir en 1866, pregunta:
“¿Era no más una coincidencia en la mente de muchos que Cristo había de venir en 1866?. . .
No hay razón de esperar que el principio de la nueva dispensación sería muy diferente que los años que le preceden, esto es, desde el punto de vista del hombre mortal, ¿No son hechos todas las obras de Dios por medio de [/B]“la voz quieta y delicada?”
Era de esta manera, que en el año 1866, el Rev. Mary Baker Eddy descubrió la Ciencia cristiana, la cual, del testimonio de Jesús y sus apóstoles, estamos seguros que es la segunda venida de Cristo.”
Pero la Ciencia Cristiana no es la segunda venida de Jesucristo. Tal suceso será más que “una voz quieta y delicada,” porque: “El mismo Señor con algazara, y con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo.” 1 Tesalonicenses 1: 7, 8.
Cristo mismo ha declarado que vendrá como se fue al cielo, esto es, en las nubes del cielo; y que “todo ojo lo verá;” que su esplendor y su gloria serán como el relámpago que brilla desde el horizonte oriental hasta el occidental. Si creemos sus palabras, no seremos engañados por los numerosos gritos de “He aquí,” ni “He allí”.
Bendiciones.
Luego todo Israel será salvo