Re: Son los evangelicos los que me están haciendo daño
Hno. Usuario Mas.
Respira profundamente y llena tu mente del recuerdo de tu primer llamado conciente que recibiste de parte de Dios. Dios nos ama y nos llama desde siempre, pero hay un momento o situación en que se hace presente en nuestra conciencia en forma sensible. Si has tenido un momento así, traelo a tu mente ahora.
Ahora lee en voz pausada, lenta y profunda la siguiente oración. Si en un momento dado el Espíritu te lleva por otra senda, abandona la lectura y has oración espontánea, hablando a tu Padre celestial con toda libertad.
Padre de bondad, Padre de amor,
Te bendigo, te alabo y te doy gracias
Porque por tu amor nos diste a Jesús.
Gracias Padre porque a la luz del Espíritu Santo
Comprendemos que Él es la luz,
La verdad y el buen pastor
Que ha venido para que tengamos vida
Y la tengamos en abundancia
Hoy, Padre, me quiero presentar
Delante de Ti, como tu hijo
Tu me conoces por mi nombre
Pon tus ojos de Padre amoroso en mi vida.
Tu conoces mi corazón
Y conoces las heridas de mi historia.
Tu conoces todo lo que he querido hacer
Y no he hecho.
Conoces también lo que hice
O me hicieron lastimándome.
Tu conoces mis limitaciones,
Errores y pecado.
Conoces los traumas y
Complejos de mi vida
Hoy Padre,
Te pido por el amor que le tienes a tu hijo Jesucristo,
Derrames tu Santo Espíritu sobre mi,
Para que el calor de tu amor sanador,
Penetre en lo más íntimo de mi corazón.
Tu que sanas los corazones destrozados
Y vendas las heridas
Sáname aquí y ahora de mi alma,
Mi mente, mi memoria y todo mi interior.
Entra en mí, Señor Jesús,
Como entraste en aquella casa
Donde estaban tus discípulos
Llenos de miedo.
Tu te apareciste en medio de ellos y les dijiste:
“Paz a vosotros”
entra en mi corazón y dame tu paz.
Lléname de amor.
Sabemos que el amor hecha fuera el temor.
Pasa por mi vida y sana mi corazón.
Sabemos, Señor Jesús,
Que tu lo haces siempre que te lo pedimos,
Y te lo estoy pidiendo con María, mi Madre,
La que estaba en las bodas de Caná
Cuando no había vino
Y Tu respondiste a su deseo,
Transformando el agua en vino.
Cambia mi corazón y dame un corazón generoso
Un corazón afable, un corazón bondadoso
Dame un corazón nuevo.
Haz brotar de mi
Los frutos de Tu presencia
Dame el fruto de tu Espíritu que es amor,
Paz y alegría
Haz que venga sobre mí
El Espíritu de las bienaventuranzas,
Para que pueda saborear
Y buscar a Dios cada día,
Viviendo sin complejos ni traumas
Junto a los demás,
Junto a mi familia,
Junto a mis hermanos.
Te doy gracias, Padre,
Por lo que estás haciendo hoy en mi vida.
Te doy gracias de todo corazón
Porque Tu me sanas,
Porque Tu me liberas,
Porque Tu rompes las cadenas
Y me das la libertad
Gracias, Señor Jesús,
Porque soy templo de tu Espíritu
Y ese templo no se puede destruir
Porque es la casa de Dios
Te doy gracias Espíritu Santo, por la fe.
Gracias por el amor que has puesto en mi corazón.
¡Que grande eres, Dios Trino y Uno!
Bendito y alabado seas, Señor.
Si quieres copiarla y repetirla hasta que el Espíritu venga en tu ayuda, te será muy liberadora.