Pues los presentas mal.
SON HIJOS DEL REINO
El evangelio que se predica en la gran tribulación (Mt.24:14) es el mismo que predicó Cristo en su primera venida y que fue rechazado por su pueblo.
Nada que ver con el mensaje revelado a Pablo (Hch.20:24) sobre la gracia de Dios cimentado en Cristo y este crucificado, como el testimonio de Dios para su Iglesia:
EL TESTIMONIO DE DIOS PARA SU IGLESIA
1Co 2:1
Proclamando a Cristo crucificado
Así que, hermanos, cuando fui a vosotros para anunciaros el testimonio de Dios, no fui con excelencia de palabras o de sabiduría.
1Co 2:2 Pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a éste crucificado.
Este mensaje es una revelación dada a Pablo, nada que ver con las Escrituras proféticas que respaldan el mensaje predicado por Jesús, sobre un Cetro, un Rey, un Trono y un reino.
Así que usted y su compañerito deben usar colirio para que vean la gloria de Cristo rescatando a su Amada antes de la ira venidera.
No es lo mismo esperar al anticristo en la Gran Tribulación, que, puestos los ojos en Jesús, amando su venida, pues no nos puesto Dios para ira, sino para esperar al Señor quien prometió venir otra vez y atraernos hacia sí mismo porque quiere que donde él está ahora, en en este mismo momento, nosotros también estemos (Jn.14:1-3).
