Abro este hilo para que discutamos 1) Qué es apostasía 2) Si es o no un estado irreversible y 3) Cómo deberíamos interactuar con una persona apóstata.
La palabra apostasía (ἀποστασία) se compone de απο (apo), que significa “fuera de”, y στασις (stasis), que significa “colocarse”.
Es decir, salir, retirarse de un lugar, abandonar. En la Biblia la palabra se menciona una sola vez, en 2 Tes 2:3, en referencia a lo que parece ser una deserción generalizada de creyentes antes de la Venida de Cristo. Sin embargo, tradicionalmente, entre los cristianos se ha venido usando esta palabra para referirse a los que abandonan la iglesia a la que se pertenece.
De manera curiosa, no he visto que se aplique el término los que se "enfrían" y dejan de asistir a la iglesia, o participar de actividades devocionales, individuales o colectivas, asociadas a la religión. Tampoco la he visto aplicada para quienes han cometido una falta moral grave (digamos, fraude, adulterio). Corríjanme ustedes, pero más bien se aplica a quienes de alguna manera han hecho público que ya no creen en las doctrinas que son fundamentales para el grupo religioso, o que creen otras que se consideran incompatibles (por ejemplo, un hermano bautista que comience a ejercer el rol de médium espiritista).
Ante los apóstatas, los feligreses tienen diversas actitudes. Algunos siguen socializando con ellos de la misma manera, o incluso más intensa, con al esperanza de que regresen el redil. Otros evitan el contacto con ellos (como los testigos de Jehová, por ejemplo). La mayoría quizá adopta una posición intermedia, reduciendo pero no eliminando la socialización.
Es también interesante que cuando la apostasía se produce por cambio de religión, la persona en la nueva religión no ve como apóstatas a sus ex-compañeros, aunque estos sí lo vean como apóstata. Por lo tanto, la interacción a veces se vuelve muy asimétrica. El apóstata puede querer seguir tratando con soltura a sus ex-compañeros, feliz de la vida en su nueva religión, cuando ellos se sienten algo incómodos y tristes.
Para sostener la creencia de que la apostasía es un estado irreversible, se ha recurrido al siguiente pasaje de la Epístola a los Hebreos 6:4-6
"Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero, y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento, crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios y exponiéndole a vituperio."
Abro el hilo para preguntarnos:
¿Cómo definimos apostasía?
¿Pueden arrepentirse los apóstatas?
¿Cómo deberías interactuar con una persona apóstata?
Para contestarnos la primera pregunta, les pongo aquí siete casos para que opinen si constituyen o no apostasía, y por qué.
La palabra apostasía (ἀποστασία) se compone de απο (apo), que significa “fuera de”, y στασις (stasis), que significa “colocarse”.
Es decir, salir, retirarse de un lugar, abandonar. En la Biblia la palabra se menciona una sola vez, en 2 Tes 2:3, en referencia a lo que parece ser una deserción generalizada de creyentes antes de la Venida de Cristo. Sin embargo, tradicionalmente, entre los cristianos se ha venido usando esta palabra para referirse a los que abandonan la iglesia a la que se pertenece.
De manera curiosa, no he visto que se aplique el término los que se "enfrían" y dejan de asistir a la iglesia, o participar de actividades devocionales, individuales o colectivas, asociadas a la religión. Tampoco la he visto aplicada para quienes han cometido una falta moral grave (digamos, fraude, adulterio). Corríjanme ustedes, pero más bien se aplica a quienes de alguna manera han hecho público que ya no creen en las doctrinas que son fundamentales para el grupo religioso, o que creen otras que se consideran incompatibles (por ejemplo, un hermano bautista que comience a ejercer el rol de médium espiritista).
Ante los apóstatas, los feligreses tienen diversas actitudes. Algunos siguen socializando con ellos de la misma manera, o incluso más intensa, con al esperanza de que regresen el redil. Otros evitan el contacto con ellos (como los testigos de Jehová, por ejemplo). La mayoría quizá adopta una posición intermedia, reduciendo pero no eliminando la socialización.
Es también interesante que cuando la apostasía se produce por cambio de religión, la persona en la nueva religión no ve como apóstatas a sus ex-compañeros, aunque estos sí lo vean como apóstata. Por lo tanto, la interacción a veces se vuelve muy asimétrica. El apóstata puede querer seguir tratando con soltura a sus ex-compañeros, feliz de la vida en su nueva religión, cuando ellos se sienten algo incómodos y tristes.
Para sostener la creencia de que la apostasía es un estado irreversible, se ha recurrido al siguiente pasaje de la Epístola a los Hebreos 6:4-6
"Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero, y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento, crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios y exponiéndole a vituperio."
Abro el hilo para preguntarnos:
¿Cómo definimos apostasía?
¿Pueden arrepentirse los apóstatas?
¿Cómo deberías interactuar con una persona apóstata?
Para contestarnos la primera pregunta, les pongo aquí siete casos para que opinen si constituyen o no apostasía, y por qué.
- Un católico que vive en el temor de Dios se convierte en un mormón que vive en el temor de Dios. Solo han cambiado sus doctrinas.
- Un evangélico que vive en el temor de Dios se convierte en testigo de Jehová, sin ningún cambio en su conducta.
- Un mormón comete un fraude bancario y es encarcelado, pero afirma seguir creyendo en las doctrinas de su iglesia.
- Un evangélico comete un fraude bancario y es encarcelado, pero afirma seguir creyendo las doctrinas de su iglesia.
- Un testigo de Jehová que vive en el temor de Dios se vuelve ateo, sin ningún cambio visible en su conducta.
- Un testigo de Jehová que vive en el temor de Dios se vuelve ateo, y se entrega a una vida de placeres y egoísmo.
- Un adventista del séptimo día deja de acudir a la iglesia, deja de guardar el séptimo día, pero afirma seguir siendo adventista.