Re: ¿De verdad la confesion lo absuelve todo?
Ya – y tu eres mejor y mayor que el apóstol Juan –eso es lo que nos falta ahora en este foro… AY DIOS!!!!!!!!!!!!!!!
blasfemar no es lo que ha hecho el hombre que escribió la Verdad sobre nuestra fe – sino el que acusa a la Biblia blasfemar con su VERDAD.
En Cristo
Hermanita, no estoy seguro si Imanu te esta diciendo blasfema, de lo unico que si estoy seguro es que el texto de marcos citado asi es.
Ahora hermana citaste lo siguiente:
Originalmente enviado por Kungens Ester
La Iglesia esta construida encima los apostoles y por tanto esto es valido:
Juan
Y los discípulos se regocijaron viendo al Señor.
20:21 Entonces Jesús les dijo otra vez: Paz a vosotros. Como me envió el Padre, así también yo os envío.
20:22 Y habiendo dicho esto, sopló, y les dijo: Recibid el Espíritu Santo.
20:23 A quienes remitiereis los pecados, les son remitidos; y a quienes se los retuviereis, les son retenidos.
Por tanto justamente SE REFIERE JUAN A LOS SACERDOTES... dado el mismo era uno de ellos... los sacerdotes...y apostol...
En Cristo
Desafortunadamente tu interpretación que le das a estos pasajes de Juan no tienen apoyo doctrinal de ninguno de los varones de Dios que escribieron lo que denominamos el nuevo testamento.
Ademas enfrentas otro tremendo problema, siempre he manifestado que la teología católica choca siempre con la congruencia doctrinal biblica, con la armonia en enseñanza doctrinal del libro sagrado, es muy facil para la ICAR y sus creyentes armar análisis bíblicos olvidando que todos lo temas doctrinales estan entrelazados.
Cuando tu interpretas que Juan dice que los sacerdotes pueden perdonar pecado chocas contra un enseñanza doctrina biblica que viene desde el antiguo testamento, el sistema de sacrificios y el sacerdocio implementado por Dios para con Israel no enseña que el único capaz de perdonar es Dios y no el hombre , el cumplimiento de ese sistema fue Jesus que segun al enseñanza es nuestro abogado para con el padre y amplio en perdonar.
Chequemos:
A través del Antiguo Testamento vemos que tanto David (Sal 32:5), como Nehemías (Neh. 1:4-11), Daniel (Dn. 9:3-19) y Esdras (Esd. 9:3-19) confesaron su pecado directamente a Dios. No hubo un sacerdote, ni un ritual ni un sacramento de por medio. Sólo hubo hombres quebrantados confesando frente a su Creador. Cuando llegamos al Nuevo Testamento vemos que los cristianos también podemos venir directamente a Dios a confesar nuestros pecados (He. 4:16; 1 Jn. 1:9; 2:1,2).
Los apóstoles nunca pretendieron poseer el poder del cual se vanagloria el clero; en el Nuevo Testamento nunca los vemos perdonar pecados a nadie, o dicho de otra manera, no existe ningún registro en la Palabra de Dios sobre el relato de algún apóstol absolviendo la pena del pecado a ningún cristiano. Ellos (los apóstoles) mandan al pecador directamente a Dios para que por los méritos de Su Hijo reciban el perdón.
¿Cuál es entonces la doctrina apostólica sobre este particular? Véase Hechos 10:42-43: “Y nos mandó que predicásemos al pueblo y testificásemos que Él es el que Dios ha puesto por Juez de vivos y muertos. De este dan testimonio todos los profetas, de que todos los que en Él creyeren, recibirán perdón de pecados por Su nombre.” He aquí la doctrina de san Pedro sobre la absolución; y esta es también la de los cristianos evangélicos, a saber, que sólo Cristo perdona, y el cristiano puede solamente declarar al pecador arrepentido que si cree en Cristo, es perdonado. Muy distinta es la doctrina de los pretendidos sucesores de san Pedro; para ellos, Cristo abdicó en las manos de los sacerdotes. Por supuesto, preferimos la doctrina de san Pedro.