Re: “TEOLOGÍA” REMANENTE PARA DESCEREBRADOS
Hace veintidós años escribí “El cuerno que olía a quemado”. Si lo has leído o lo lees, verás que esa es una de las críticas que hice al infame análisis de Shea en AUSS, de modo que nada me revelas. Que tú hayas “completado” su “análisis” no me impresiona en lo más mínimo.
Sí, lo leí hace bastante tiempo. Y, no refutaste nada de las métricas. Ya que, sabes muy bien que las métricas te delatan muy bien respecto a tu creencia preterista de las setenta semanas. Así que, déjate de babosadas y limítate a refutar lo expuesto en el epígrafe de «las 70 semanas».
Y a mí me tienen sin cuidado las deshonestas afirmaciones que haces en este inmundo párrafo. Esdras 4: 12 y su contexto NO dicen que Artajerjes autorizara la construcción de nada, sino que la impidió. Así que los cuentecitos para imbéciles de tu secta te los comes tú. Esdras 6:14 tampoco vale para vuestros turbios intereses, pues, como sabes, Artajerjes autorizó que Nehemías reconstruyese el muro de Jerusalén. Lo que nadie sabe, y vosotros menos que nadie, es que Artajerjes autorizara que Esdras edificase una ciudad. ¿Dónde está esa orden, sectario? Y lo del otoño de 457 a.C., ¿dónde aparece en la Biblia, sectario?
Leamos bien lo que dice Esdras 4:12,
«Sea notorio al rey, que los judíos
que subieron de ti a nosotros vinieron a Jerusalén; y edifican la ciudad rebelde y mala, y levantan los muros y reparan los fundamentos» (énfasis mío).
Nota que no sólo la RV lo entiende así, sino que también la NVI:
«Sepa Su Majestad que los judíos
enviados por usted han llegado a Jerusalén y están reconstruyendo esa ciudad rebelde y mala. Ya están echados los cimientos».
Dime, Eduardo, ¿Quién es éste Artajerjes que envió a los judíos a reconstruir la ciudad?
Por otro lado, qué tanto criticas el año 457 a.C., ¿A caso tú fecha (604/605 sino me equivoco) es mucho más "reveladora"?
Como a mí me traen al fresco vuestras referencias a tan pésimos panfletos. Por cierto, no sé si ya lo habréis notado en toda su extensión, pero los conozco perfectamente.
Me tiene sin cuidado lo que pienses, o lo que "muy bien estudies" la literatura del DARCOM que, echa por tierra tus falsedades preteristas.
Los adventistas sois incoherentes (propio de embusteros) en vuestras “explicaciones” proféticas.
Entonces, tus interpretaciones banas, ¿son más coherentes?
Por ejemplo, Strand reconoce que la primera bestia de Apoc. 13 es algo así como un engendro maligno hecho de “parches” de las cuatro bestias de Dan. 7, que, en conjunto, tienen siete cabezas y diez cuernos. Eso es muy cierto, y coincide con lo que yo creo desde hace mucho tiempo.
¿Así que crees que la bestia juanina tienen una fraseología daniélica? Que bueno que hables algo, aunque sea esto, ja, ja, ja. Y, no te dediques sólo a criticar. Ya basta de eso, quiero que entres en el ámbito exegético, o, ¿No te atreves?
Lamentablemente, Strand (y no es el único) incurre en dos contradicciones después. Por una parte, como hacéis todos los adventistas, y en contradicción con la realidad constatable, pretendéis que esa bestia del Apocalipsis, en realidad, equivale a la cuarta bestia daniélica (lo cual echa por la borda la constatación objetiva de que es como las cuatro, no como la cuarta).
Pues yo no creo eso. Creo que la bestia juanina es nueva para representar el mismo poder del cuerno pequeño de Daniel 7 y 8, pero con la fraseología daniélica de las cuatro bestias del cap. 7. Eso es sumamente claro que, hasta tu mismo lo reconociste.
Por otra parte, Strand mete la pata hasta la coronilla con su necia teoría de que las cabezas=montes representan imperios,
Personalmente no comparto el punto de Strand, comparto más con LaRondelle respecto a las siete cabezas bestiales: Babilonia, Medo-Persia, Grecia, Roma, Roma Papal, Francia y Estados Unidos en su fase escatológica.
¿Crees que por ponerle una etiqueta consigues algo? ¿Qué intentas decir, que soy el hombre del saco?
No, sólo digo lo que infiero por tu arrogancia y tu sarcasmo, típico, de alguien que tiene delirio de superior.
Otrora fui tan historicista como puedas serlo tú
¿Cómo yo? Lo dudo: principalmente no tengo delirio de dios, ni, complejo de superioridad.
A partir de 1986 empezaron a entrarme dudas. En 1988 sabía que el historicismo era falso en cada uno de sus aspectos. Desde entonces, cada vez soy más preterista y siento mayor aversión por el historicismo, al que considero profundamente contrario a la Biblia.
¡Vaya! Hasta ahora, pensaba que eras más joven, aunque no tanto como yo.
En el llamado “ámbito teológico” (sic) del adventismo, por supuesto que no, pero ese “ámbito” es falaz y no cuenta con ninguna simpatía en el mundo erudito.
Evidencias aún más, que lo que tu buscas es fama y apreciación. ¿Acaso uno busca eso cuando realmente estudia las Escrituras de todo corazón?
En el ámbito teológico de las iglesias cristianas, el preterismo ya ganó la carrera hace muchas décadas, de forma que el que yo sea preterista no me hace acreedor de ninguna “reputación” especial.
Me tiene sin cuidado lo que haga o deje de hacer el preterismo. Además, yo no me refería a eso, sabes muy bien a lo que en verdad me refería.
Muchísimos colegas muy estimados comparten mis puntos de vista (o, si quieres, al revés, yo llegué a las mismas conclusiones a las que ellos ya habían llegado).
¡Felicidades!
Te deslizas por la pendiente peligrosa de atribuir intenciones perversas a tu contrincante. Yo no tengo ningún delirio de dios, ni tengo ningún complejo de superioridad (ni de inferioridad, por supuesto), ni tampoco la fama. Eso sí, tampoco estoy dispuesto a meterme debajo de una mesa. Aprovecho la teología que sé (porque algo es evidente que sí sé) para aguaros la “fiesta”.
Por el poco tiempo que te he conocido (en realidad leído), puedo inferir varias cosas de ti. Una de ellas es que eres totalmente critico del adventismo, aún, ofendiendo groseramente y tenazmente a quienes se oponen a tus ideas.
Confirmas que SÍ te has confundido, y encima quieres pasarte de “listo”. En griego, el versículo 12:18 contiene únicamente las palabras “kai estate epi ten ammon tes thalasses” (no puedo escribir signos diacríticos y demás en este programa), o sea, “Y se plantó a la orilla del mar”. Lo que sigue, donde se describe a una bestia que surge del mar, pertenece al versículo 13:1 en griego, de modo que SÍ te equivocaste.
Pues claro que no, te dije que desde 12:18 hasta 13:8 se habla de la bestia, y ese es el punto que estamos discutiendo. Así que, no me he equivocado, Eduardo. Limítate a responder exegéticamente lo planteado y no entrar en el ámbito personal.
Je, je, je. Yo no niego ningún “paralelismo” que establezca Juan. Lo que niego es mérito alguno a vuestros quiasmos (porque lo que, en su caso, puedan comportar es vuestro, no de Juan).
Entonces, ¿Por qué niegas el patrón que te presente anteriormente?
Que uno de vosotros, se llame Shea o Gajardo diga: “Aquí hay un quiasmo, luego la estructura da la razón a mis creencias previas, ‘establecidas’ por los pioneros” es un argumento profundamente idiota.
Entiendo tu punto. He tratado de despojarme de la "tradición" pionera y adventista y estudiar las Escrituras sin preconceptos. Resultó, que llegué a las mismas conclusiones básicas que llegaron ellos. ¿Coincidencias? Pues yo no creo en ellas.
La existencia o la inexistencia de un quiasmo no puede, por sí misma, demostrar una cuestión exegética de la índole que a vosotros os convendría.
Entonces, ¿Se debe pasar por alto los quiasmos, paralelos, etc.? Si es así, sólo acomodamos las interpretaciones a nuestros gustos, y, no con una «
Sola Escriptura».
El versículo 1 habla de una bestia surgida del mar (mucho antes del 8), y en el 2 y el 3 Juan la describe según sale del mar. Desgraciadamente para vuestra tesis boba, Juan ya la ve herida de muerte y curada cuando sale del mar. No podrás arreglar ese entuerto con ningún quiasmo.
Yo, claramente, leo en griego que todo el capítulo está construido en el pasado. De hecho, revisé todo el capítulo en griego y resulta que todos los verbos (no estoy seguro ya que lo leí sólo una vez) están en tiempo imperfecto. Así que, ese es un punto a favor nuestro y no tuyo, ya que todo fue construido en tiempo pasado. Por ende, Juan tuvo que ver su herida de muerte ya sanado, porque, además, el capítulo se centra mucho más en la escatología, más que en la historia medieval.
Je, je, je. Para eso estáis vosotros, ¿verdad? Porque alguien os habrá dado “la clave” de cómo ordenar “debidamente” los versículos para que “salga el invento”, ¿eh, pillín? Mala suerte, Gajardo. No cuela.
Nadie ha inventado nada. Yo, por mi parte, no me trago todo sin antes saber qué me estoy comiendo. Todas las posturas, primero, las analizo profundamente y si encuentro evidencia escritural, adopto esa posición.
Si vosotros decís que hay dos fases, vuestra afirmación será sospechosa de mentira mientras no mostréis esas “fases” en las propias palabras de Juan. Necesitamos urgentemente que señaléis qué versículo específico señale las actividades de la bestia ANTES de su herida. Si no podéis es que lo de las fases es un cuento, y ningún quiasmo te va a ayudar.
Pues quedó demostrado en los paralelos que te expuse anteriormente, cosa que no has podido refutar exegéticamente. Sólo te has dedicado a hablar y a hablar, y nada más que eso haces, Eduardo.
No soy yo el que lo dice. Sois vosotros. Naturalmente, a falta de prueba bíblica, lo de los cuernos “blanditos” es una de las vomitivas (amén de idiotas) “explicaciones” de tu secta. Los cuernos de los corderos no son blanditos.
Explicaciones fundadas en las evidencias Escriturarias.
Suelo echarle una pizca de buen humor a mis refutaciones de las locuras adventistas, pero no bromeo.
Pues tu humor, me hace reír. Pero no de lo gracioso, sino de pena.
Me gusta presentar de forma gráfica lo grotesco de las herejías y bobas explicaciones de tu secta, y supone una satisfacción contribuir a vuestra confusión cuando veis argumentaciones para las que vuestros panfletos no os han preparado. Os han dado a comer la bazofia de DARCOM y os habéis imaginado que ahí teníais “algo”. De ilusión también se vive.
Ya dije que, no me trago facilmente un argumento. Suelo analizarlo muy bien antes de adoptarlo.
Alguna neurona se te ha cruzado.
Y sólo esa neurona puede destruir tu vano argumento.
Yo no he puesto en duda que exista una relación entre la segunda bestia de Apoc. 13 y la primera. Lo que SÍ he puesto en duda es la existencia de “fases” en ambas.
Pues, demuéstrame (por enésima vez lo vuelvo a repetir) exegéticamente lo que crees, para poder analizar tus posturas, o, ¿No te atreves?
No hay ninguna razón para hacerlo. Y no todas apuntan a Cristo, como la cuestión del número de los cuernos que comenté.
Entonces, si todas apuntan a Cristo, ¿Por qué esa bestia tiene cuernos como de cordero, pero después habla como dragón, semejante a la primera bestia? ¿A quién representa?
Je, je, je. ¿Me quieres examinar de griego?
Responde sin rodeos. ¿Qué implica el imperfecto?
Jamás lo he puesto en duda. Simplemente señalé que tu correligionario Joelice (que cree que están a punto de llamarlo para el BRI) dice que eso hay que traducirlo “habló”.
Mi amigo personal Joelice, sabe muy bien lo que es imperfecto. Pero es claro que el texto no se traduce así. Si así fuera, estaría en aoristo, y, tu bien lo sabes, o, ¿No?
Ni hablar. Que una bestia tuviera cuernos y que hablara no implica que tuviera cuernos en una fase y que hablara en otra. Aquí mongoladas de ese calibre no se te tolerará ninguna.
¿Entonces, a qué se refiere esa antítesis de cordero/dragón?
Como solo un imbécil podría pensar que “En el ejército hacíamos instrucción y sudábamos mucho” significa que el servicio militar consistió en dos fases: en la primera, hicimos instrucción; en la segunda, ya al final de la estancia en el ejército, sudamos mucho. Lo dicho, para imbéciles, sectario. ¡JA, JA, JA! ¡Y JA!
Tu ejemplo nuevamente resulta refutable. Ya que una cosa lleva a la otra. Siendo una bestia que es "como" cordero, es como Cristo, pero luego, cuando habla, habla como dragón. Y esa antítesis, corresponde a dos fases de esa bestia.
Je, je, je. Tú has debido de creerte que a los adventistas alguien os ha dado alguna titulación de “calibrador de mentes orientales”, titulación que os capacita para decir bobadas y que los demás nos las tengamos que tragar. Mala suerte, Gajardo.
¿No creéis que la mente oriental semítica trabajaba de efecto a causa? ¿No crees en que muchas veces los profétas anunciaban el efecto y después la causa? ¿No lo has notado en el AT?
¿Con quién crees que estás tratando? ¿Con un bobo que se va a tragar tales babosadas sin gurgutar? Aunque este es otro tema, uno de mis profesores adventistas nos contó el cuentecito ese (lo simplifico mucho) de que, para la “mente oriental” el ser humano no está constituido por varias “entidades” (cuerpo, alma), como entendían los griegos, sino por una única entidad (un alma=cuerpo viviente).
Correcto.
Claro está que el bueno de Flavio Josefo, que era oriental, fue tan desconsiderado como para echar por tierra las ensoñaciones condicionalistas y aniquilacionistas adventistas sobre el Hades. Como te he dicho, aquí mongoladas (como apuntarte a la “tesis” de que un quiasmo, la “mentalidad oriental”, la presión atmosférica o los extraterrestres te dan la razón) no se toleran. Aquí las cosas se demuestran presentando los versículos que he pedido.
Pues que ejemplo más pavoroso. Flavio Josefo, no es el mejor ejemplo, y, lo sabes muy bien. En esta discusión, nos estamos sólo limitando a la Biblia, o, ¿No tienes pruebas?
Mmmmmmmmmmm. Se me ocurre que dice eso porque Juan creyó oportuno consignar que esa bestia colaboraría con la primera.
Bien dices.
Naturalmente, ello no implica la existencia de múltiples “fases” en la segunda bestia. Si dices que esa fue, vamos a suponer, la “segunda fase”, ¿cuál fue la primera? ¿Qué tipo de realidades se supone que realizaba esa bestia en esa imaginaria “primera fase”? Por cierto, en la “segunda fase”, ¿qué tipo de cuernos tenía la bestia? ¿O se le cayeron?
Sabes muy bien cuál es su primera frase, no tengo para qué explicarte cuál es, si, dices conocer a la perfección nuestras creencias. Además, en ningún momento se le cayeron los cuernos, los sigue teniendo hasta el final. Ya que su fase "religiosa", pretendiendo ser "como" un cordero (manso y humilde, según lo que se infiere de un cordero en Isaías 53) engaña a la gente con una falsedad de religión, pero a la misma vez, ejerce la autoridad de la primera bestia. Sus dos aspectos, llegan hasta el final.
M
i palabra, obviamente, tiene mucho más peso que la de todos vosotros juntos
Ja, ja, ja, ja. Como tú digas, Eduardo.
pero no pretendo tener la última palabra, pues hay gente que me lleva muchos años de adelanto, y es improbable que los alcance en sus conocimientos.
Felicitaciones por reconocerlo.
Mis simpatías están con los comentarios bíblicos modernos judíos, católicos y protestantes.
Pues, en algo que concordemos.
Uno de los más admirables que conozco, monográfico para Daniel, es el de J. Alberto Soggin, valdense italiano.
También lo admiro, aunque, no comparto ciertas creencias de él, por cosas que tu ya sabes.
Lo que importa de verdad es lo que está escrito en la propia Biblia,
Muy bien.
y es obvio que Juan no enseñó que la segunda bestia de Apoc. 13 tuviese dos “fases”, en la primera de las cuales fuera mansa, amorosa y cantarina y en la segunda de las cuales se le echasen a perder tan dóciles cualidades.
Pues ha quedado más que demostrado que eso, sí fue así.
Eso es lo que hay, y nada puedes hacer para contradecir lo que he denunciado, ni yo necesito rectificar ni un ápice mis aseveraciones en el primer mensaje de este hilo.
Entonces, ¿Estas negando a hacer una exégesis de lo que crees de Apoc. 13? Puesto que yo tenía ciertas preguntas para tí, espero que dignes a responderlas: ¿Quién es el dragón del 12, la bestia que sube del mar de 13:1 y la bestia que sube de 13:11? ¿En qué parte histórica sucedió y se cumplió Apoc. 13?
Y esas sólo son algunas, por ahora.
Saludos Eduardo.
Josué Gajardo.